Les dejo las primeras dos partes de Nuestra historia:
http://www.poringa.net/posts/relatos/3499422/Nuestra-historia---Cap-I.html
http://www.poringa.net/posts/relatos/3499435/Nuestra-historia---Cap-II.html
Empecé por acariciar y besar el culo de Laura, seguí por lamer su concha jugosa junto con la lengua de Mariel y continué por lamerle el ano. Se notaba que tenía experiencia, introduje un dedo, sin problemas, intenté con el segundo, sin problemas. Al querer meter el tercero, me ofreció un poco de resistencia pero con algo de saliva, entró también. Mientras le apoyaba la pija en la concha para que mi novia la chupara también. Alternaba entre mi verga y la concha de Laura. Me pasé para el otro lado y besando a Laura chupé la concha de Mariel. Estaba muy jugosa. Busqué la manera de chuparle el culo pero la posición no me lo permitía. Entonces acerqué la pija y Laura me la chupó de una forma espectacular mientras la pasaba por la concha de mi novia. Como si comiera los jugos de Mariel usando mi verga de cucharita. Tuve que concentrarme para no acabar, lo logré por unos minutos hasta que se incorporaron y me la chuparon juntas. Se besaban, jugaban con mi verga como si estuvieran compartiendo un helado, no aguanté más y acabé. Mientras lo hacía, ellas pasaban rápidamente la lengua por todo el largo y la pajeaban, una vez que salió todo, Laura lamió un poco, que había caído en mi vientre, y besó a Mariel. Ella hizo lo mismo y lo repitieron hasta no dejar nada. Yo me sentía en el cielo con dos ángeles ninfómanas que tenían por motivo de vida satisfacerme, no quería que se terminara nunca.
Siguieron jugando entre ellas hasta que volví al juego, no dejé de tocarlas nunca para poder apurar mi retorno. Procedí a hacer lo que me había faltado, chuparle el culo a Mariel. Me pusé a la tarea introduciendo de a poco un dedo más, hacía lo mismo con Laura, solo que ella estaba en otra posición y usaba los jugos de su vagina para lubricar mis dedos. Luego de unos minutos, Laura se puso encima de Mariel, puso sus manos en las nalgas, las separó bien y me pidió que le penetrara el culo a mi novia. Le ofrecí mi pija para lubricarla, lo hizo con mucho gusto, escupió el ano de Mariel y me ayudó a penetrarla. Los gemidos de mi novia eran música para mis oídos, Laura escupía mi verga en el lugar justo para ayudar mi arremetida contra el culo de Mariel. Cada tanto me besaba, lamía mi cuello y me ponía las tetas para que las chupara. La situación era extremadamente caliente, cuando acabé lo hice sobre la espalda de mi novia, su amiga limpió todo con la lengua, incluso mi pija. Estaba exhausto, quería seguir pero mi cuerpo no respondía y todavía me faltaba cogerme a Laura. Nos metimos los tres en la ducha, nos lavamos un poco, Mariel nos pidió privacidad en el baño, entendible luego de lo que habíamos hecho. Solos en la cama con Laura, nos besamos como si fuésemos pareja, nos acariciamos, mi verga estaba al 50%, ella intentó que activara pero no respondía más de lo que estaba, no llegaba a la dureza mínima para poder penetrarla. Entonces fue hasta su bolsa, sacó una pastilla, me la puso en la boca y la tragué con un poco de agua. Empezó a chuparla y al cabo de 10 minutos la tenía dura como una roca. Se sentó encima de mí y me cabalgó de una manera desaforada. Acabé y no se me bajaba, ella seguía cabalgando, salió mi novia del baño, se acostó a mi lado mirando como Laura me cogía, se puso al lado de ella de rodillas, una mano tocándole la concha, la otra en el culo. La frotó hasta hacerla acabar y cayó rendida en la cama. Mariel me mira la pija, ve que todavía tengo dura, se acuesta, levanta las piernas, le lamo la concha y la penetro fuerte mientras le besaba los tobillos. Acabó y yo seguía penetrándola, me dijo que estaba por acabar nuevamente y yo seguía duro. Llegó un punto que Mariel ya no se podía mover por sus medios, Laura le besaba las tetas y frotaba la concha acompañando mi movimiento. Yo sentía ardor en la pija pero no podía acabar. Laura tomó un lubricante, se lo puso en todo el dedo índice y colocándose a mi lado lo introdujo en mi culo buscando la próstata para hacerme acabar. Lo consiguió, sentí que estaba por acabar, saqué la pija de la concha de Mariel, la cual estaba casi desvanecida y acabé sobre ella mientras Laura me pajeaba sin sacar el dedo de mi culo. Fue intenso, uno de mis mejores orgasmos. Agotadisimos los tres, nos dispusimos a dormir. A la mañana sentía un fuerte ardor al orinar, la pija estaba blanda pero de gran tamaño. Las chicas dormían así que las dejé un rato, desayuné y preparé algo para ellas. Después del desayuno, Laura se fue diciendo que ésto debía repetirse. Nos besamos con mi novia, satisfechos de haber cumplido una de nuestras fantasías.
Hay más de Nuestra historia...
http://www.poringa.net/posts/relatos/3499422/Nuestra-historia---Cap-I.html
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Empecé por acariciar y besar el culo de Laura, seguí por lamer su concha jugosa junto con la lengua de Mariel y continué por lamerle el ano. Se notaba que tenía experiencia, introduje un dedo, sin problemas, intenté con el segundo, sin problemas. Al querer meter el tercero, me ofreció un poco de resistencia pero con algo de saliva, entró también. Mientras le apoyaba la pija en la concha para que mi novia la chupara también. Alternaba entre mi verga y la concha de Laura. Me pasé para el otro lado y besando a Laura chupé la concha de Mariel. Estaba muy jugosa. Busqué la manera de chuparle el culo pero la posición no me lo permitía. Entonces acerqué la pija y Laura me la chupó de una forma espectacular mientras la pasaba por la concha de mi novia. Como si comiera los jugos de Mariel usando mi verga de cucharita. Tuve que concentrarme para no acabar, lo logré por unos minutos hasta que se incorporaron y me la chuparon juntas. Se besaban, jugaban con mi verga como si estuvieran compartiendo un helado, no aguanté más y acabé. Mientras lo hacía, ellas pasaban rápidamente la lengua por todo el largo y la pajeaban, una vez que salió todo, Laura lamió un poco, que había caído en mi vientre, y besó a Mariel. Ella hizo lo mismo y lo repitieron hasta no dejar nada. Yo me sentía en el cielo con dos ángeles ninfómanas que tenían por motivo de vida satisfacerme, no quería que se terminara nunca.
Siguieron jugando entre ellas hasta que volví al juego, no dejé de tocarlas nunca para poder apurar mi retorno. Procedí a hacer lo que me había faltado, chuparle el culo a Mariel. Me pusé a la tarea introduciendo de a poco un dedo más, hacía lo mismo con Laura, solo que ella estaba en otra posición y usaba los jugos de su vagina para lubricar mis dedos. Luego de unos minutos, Laura se puso encima de Mariel, puso sus manos en las nalgas, las separó bien y me pidió que le penetrara el culo a mi novia. Le ofrecí mi pija para lubricarla, lo hizo con mucho gusto, escupió el ano de Mariel y me ayudó a penetrarla. Los gemidos de mi novia eran música para mis oídos, Laura escupía mi verga en el lugar justo para ayudar mi arremetida contra el culo de Mariel. Cada tanto me besaba, lamía mi cuello y me ponía las tetas para que las chupara. La situación era extremadamente caliente, cuando acabé lo hice sobre la espalda de mi novia, su amiga limpió todo con la lengua, incluso mi pija. Estaba exhausto, quería seguir pero mi cuerpo no respondía y todavía me faltaba cogerme a Laura. Nos metimos los tres en la ducha, nos lavamos un poco, Mariel nos pidió privacidad en el baño, entendible luego de lo que habíamos hecho. Solos en la cama con Laura, nos besamos como si fuésemos pareja, nos acariciamos, mi verga estaba al 50%, ella intentó que activara pero no respondía más de lo que estaba, no llegaba a la dureza mínima para poder penetrarla. Entonces fue hasta su bolsa, sacó una pastilla, me la puso en la boca y la tragué con un poco de agua. Empezó a chuparla y al cabo de 10 minutos la tenía dura como una roca. Se sentó encima de mí y me cabalgó de una manera desaforada. Acabé y no se me bajaba, ella seguía cabalgando, salió mi novia del baño, se acostó a mi lado mirando como Laura me cogía, se puso al lado de ella de rodillas, una mano tocándole la concha, la otra en el culo. La frotó hasta hacerla acabar y cayó rendida en la cama. Mariel me mira la pija, ve que todavía tengo dura, se acuesta, levanta las piernas, le lamo la concha y la penetro fuerte mientras le besaba los tobillos. Acabó y yo seguía penetrándola, me dijo que estaba por acabar nuevamente y yo seguía duro. Llegó un punto que Mariel ya no se podía mover por sus medios, Laura le besaba las tetas y frotaba la concha acompañando mi movimiento. Yo sentía ardor en la pija pero no podía acabar. Laura tomó un lubricante, se lo puso en todo el dedo índice y colocándose a mi lado lo introdujo en mi culo buscando la próstata para hacerme acabar. Lo consiguió, sentí que estaba por acabar, saqué la pija de la concha de Mariel, la cual estaba casi desvanecida y acabé sobre ella mientras Laura me pajeaba sin sacar el dedo de mi culo. Fue intenso, uno de mis mejores orgasmos. Agotadisimos los tres, nos dispusimos a dormir. A la mañana sentía un fuerte ardor al orinar, la pija estaba blanda pero de gran tamaño. Las chicas dormían así que las dejé un rato, desayuné y preparé algo para ellas. Después del desayuno, Laura se fue diciendo que ésto debía repetirse. Nos besamos con mi novia, satisfechos de haber cumplido una de nuestras fantasías.
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0 comentarios - Nuestra historia - Cap. III