Otro Suegro Caliente 1
Con se Sello de Placer y Morbo
Historia de Ficción
Crónicas de los Suegros
Laura y Darío son recién casados que se fueron ha un cruceros por el Caribe de luna de miel, Laura estaba muy alucinada de este viaje, le gusta los lujos que su reciente esposo le daba, y al el lo le importaba disfrutar de ello, la cosa se pusieron algo tensa para Laura cuando su marido le dijo que para el viaje iría su padre, es decir el suegro de Laura; ella no lo entendía era su luna de miel porque debía de compartirla con un extraño, pero así se fue, ella tampoco pudo hacer gran cosa, su marido la convenció fácil, con la escusa, que su padre no pudo estar en la boda y no la conocía mas que de fotos y de lo que su esposo le había contado.
Para ella era extraño pero no quiso decir nada, era obvio que su marido era muy unido ha su padre, y bueno ella no quería formar una discusión tonta en su luna de miel, los días fueron normales, se le presento el sujeto era un hombre alto mas que su hijo media 1.88 de estatura, tenía rasgos idéntico, si su marido envejecía se verías idéntico ha su padre, y no será mal era un señor guapo, tenia los ojos verde mar que brillaban con una formas que hacia que Laura temblara y se sintiera incomoda cuando el la miraba fijo, su cabello completamente blanco platinado, bigotes espeso blancos delgado de manos grandes y fuerte cuando la saludo, con la mano lo noto, de piernas largas, era un hombre duro, su nombre era igual Lucas, ella le llamo señor Lucas, pero el le dijo que le llamara será Lucas, o suegro.
--O también puede decirme suegrito o papi. -Ese comentario le hizo gracias a su esposo, pero a ella la incomodo.
Ella decidió llamarle suegro para evitar problemas y confusiones, las cosas se empezaron ha complicar muy rápido.
Laura pensó que solo era saludarlo y el estaría por su lado, pero no, día tras días el suegro estaba hay, y lo peor era que parecía como se la comía con la mirada, como la desnudada con la vista, eso la hacia sentir incomoda, mas de una noche se acostó con ganas de decirle ha su marido que era lo que pasaba, pero al verlo como habla de su padre se de detenía, su marido idolatraba a su padre, ella pensaba.
--¡Tal ves es imaginación!
--¡¿Y si no es así?!
--¡¿Que con que mire todos los hombres del crucero y las mujeres me miraban?! -Decía ella y era cierto Laura tenia un cuerpazo producto de la genética, comer sano mucho ejercicio y el santo bisturí.
Ella era rubia natural de pelo largo y liso que caía en sus hombres como oro batido, bien cuidada, de piel blanca, cutis perfecto, buena figura, ojos verde felinos, senos grandes y duro gracias a la medicina, cintura pequeña, abdomen plano, cola paradita bien firme y redondeada, en forma de corazón que resaltaban con su cintura de avispa paradita de buen trabajo en el Gym, piernas largas y gruesa carnosas firmes por el ejercicio, ella media como 1.78, su esposo era de 1.80. Pero su suegro era de 1.88, delgado y lujurioso como ninguno. Sus medidas eran 97-60-99, con los senos hecho y un trasero trabajado, era una hermosura, ella pensó que su luna de miel seria como las de cualquier recién casado, pero no fue así.
--¿Wow este crusero es una preciosura no lo crees amor? -Pregunto su esposo alegre.
--¡Así es amor, nos la pasaremos bien aquí! -Dijo ella dándole un beso. Sintiendo la mirada de su suegro a tras.
Fue cuando se le callo su cartera y se agacho para recogerla y sintió como la mirada de su suegro le atravesaba el trasero, ella se levanto de una, y siguió su camino sintiéndose extraña, alcanzo ha su esposo y se enrosco en su brazo.
--Hussss he visto algo genial. -Dijo el suegro acercándose a la pareja.
--Lo se padre, mira hay muchos turista, es una buena época. -Dijo su hijo distraído de lo que en verdad veía su padre.
El suegro no podía dejar de pensar en el cuerpazo de esa hembra y en lo mucho que lo disfrutaría. Luego de un suave desayuno, y de una charla amena en la que el suegro no dejo de mirarla por un segundo el escote de su nuera, fue que decidieron ir a la piscina.
--Me alegra mucho que pudieras venir padre. -Dijo su hijo sonriendo a su padre le devolvió la sonrisa mientras que tomaba su trago.
--A mi más hijo… créeme a mí más. -Dijo con vos maliciosa su nuera lo escucho y se erizo, aun así trato de relajarse, ella estaba determinada a que eso no la molestaría, así que decidió ponerse su bikini y tomar el sol, fue cuando el suegro la note y no podía contar sus deseos de tocar ha esa hembra que tenía a un lado, pero su hijo estaba hay muy cerca.
--¡La piscina es linda no lo crees hijo!
--¿Si padre es mas voy para ella tu no lo aras?
--Descansare aquí un poco, pero ve hijo. -Dijo su padre con ansias que se fuera, y así fue, su hijo se fue ha dar un chapuzón, espero un rato controlando sus deseo.
--Baya el sol esta fuerte Laura no lo cresas. -Cuando ya vio que era hora izo sus movimientos el suegro.
--A si… si… fuerte. -Dijo ella algo aturdida de que su suegro le hablara.
--¿No quieres algo de protección solar?
--No gracias estoy bien.
--¡No, no ni mas faltaba yo te la pongo! -Se apresuro el suegro ante de que Laura dijera algo.
Su suegro empezó ha acariciar su trasero, ha pasar su mano por su cuerpo suavemente le untaba su protector solar suavemente y Laura se confió, se relajo, pues esas manos grandes no eran nada torpes, cuando bajo la guardia.
Fue cuando Lucas lo noto, y ataco, y así lo izo, sus manos eran grandes y firmes, y el sabia muy bien que era lo que debía de hacer, empiezo primero ha relajar ha Laura, poco ha poco aguantando el mismo sus ansias de comer, ya en su juventud, había perdido muchas hembras por su impaciencia, esta ves el viejo lobo, no solo era ardiente y deseoso si no precavido, sus manos se concentraron en sus hombros luego en sus espalda, bajaba suavemente untando el protector solar suavemente mientras su sexy nuera gemía relajada saber lo que pasaría, sus manos se movían suavemente pero con firmeza a la ves Laura se confió; terrible error, el empezó ha acariciar sus espalda sus cintura midiéndola con sus manos, luego bajo ha sus piernas firmes y torneadas las masajeo haya sus pantorrillas, hasta sus dedos de los pies, era bueno dando masaje en los pies, ella gemía suavemente.
--Mmnnnn, mmmmm, Mmnnn, husssfffff, Husffff…
Lucas sonrió por ello, siguió con lo suyo suavemente, luego subió asta sus hombre hay dejo una de sus manos, la izquierda, y con la manos derecha bajo hasta sus axila, la izquierda le siguió por la otras, rosaron sus senos, Laura no dijo ni sintió nada, solo estaba pendiente de el placer que sentía, jamás nadie la había tocado de esa manera.
--Mmnnnn, Mmnnn, Mmnnn, Mnnnnn, Mmmnnn… Ahhhh ohhh que rico, Siiiiii… -Salió de su boca. Y estaba acabada, Lucas sonrió.
Era la hora, Lucas subí sus manos hasta sus hombros dejo firme en ellos su mano izquierda y su derecha, bueno esa manos se deslizo hacia su trasero sus nalgas, pero por debajo de su bikini, hay fue cuando Laura se agito, intento levantarse de golpe, pero no pudo, no pudo porque Lucas su suegro tenia su mano izquierda bien puesta sobre ella con firmeza.
--¿Luuuu, Lucas que se supone que estas haciendo? -Pregunto ella sorprendida.
--Hooo… lo siendo Laura querida es por la culpa del bronceado, mi mano se resbalo. -Dijo bajando sus dedos aun mas, sus grandes largos y gruesos dedos justo dentro de sus nalgas acariciando su ano y su concha, haciendo que Laura gimiera que no supiera que hacer.
-- Ahí, ahí, ahí uhh, uhh, uhh… -Sintió miedo sin duda alguna, el frotaba las yemas de sus dedos en sus vagina en su ano.
--Mis manos son tan torpes mas tus curvas, bueno mi mano termino chocando al final… perdón. -Dijo el suavemente Laura no sabía que decir Ho hacer, si gritar ¿Ho que podía hacer?
--Será mejor que pares Lucas haaaa hoooo. -Gemida Laura. --Tu hijo nos puede ver déjame ya haaaaa. -Gemía ella apretando sus dientes mordiéndose los labios. --Por favorrr, paraaaa haaaaa. -Gimió, estaba a punto de acabar, pero Lucas la dejo, venia su hijo.
Darío su hijo venia sonriendo, sin saber lo que pasaba Ho lo que pasaría “¡Pobre idiota!”
--¡¿Hola padre, Laura el agua esta riquísima, no quieren darse un chapuzón?!
--No gracias hijo. -Dijo su padre poniendo la mano en el hombro. --En este corto tiempo tu esposa y yo nos hemos acercado más.
--¡Ha eso es bueno! -Dijo su hijo, miro ha su esposa. --¿A amor estas bien, te sientes bien? Te ves roja.
--Es por el sol. -Dijo ella aturdida.
--Ha si quieres te llevo ha la habitación.
--No, no te preocupes por mi, yo me iré ha recostar sola.
--¿Segura?
--Si claro amor sigue disfrutando la piscina. -Dijo su esposa dándole un beso en la mejilla. -Su suegro la tomo de inmediato por la cintura con suavidad pero con firmeza y le dio un beso en la mejilla si, pero muy cerca de la boca ella estaba aturdida de que hiciera eso delante de su hijo, pero por lo visto su hijo no se dio de cuanta o no vio malicia en ello.
--Descansa Laura si. -Dijo su suegro mirándola fijamente con sus ojos verdes claro luego miro ha su hijo. --Ha hijo sabes me han dicho que el casino de este crucero es fantástico.
--Ha en serio. -Los ojos de su hijo se iluminaron mientras que su esposa se retiraba aturdida pro lo que pasaba.
Laura se retiro como pudo sus piernas le temblaban y no sabia que hacer o decir, no tenia idea lo que le deparaba el futuro.
Continuara…
Con se Sello de Placer y Morbo
Historia de Ficción
Crónicas de los Suegros
Laura y Darío son recién casados que se fueron ha un cruceros por el Caribe de luna de miel, Laura estaba muy alucinada de este viaje, le gusta los lujos que su reciente esposo le daba, y al el lo le importaba disfrutar de ello, la cosa se pusieron algo tensa para Laura cuando su marido le dijo que para el viaje iría su padre, es decir el suegro de Laura; ella no lo entendía era su luna de miel porque debía de compartirla con un extraño, pero así se fue, ella tampoco pudo hacer gran cosa, su marido la convenció fácil, con la escusa, que su padre no pudo estar en la boda y no la conocía mas que de fotos y de lo que su esposo le había contado.
Para ella era extraño pero no quiso decir nada, era obvio que su marido era muy unido ha su padre, y bueno ella no quería formar una discusión tonta en su luna de miel, los días fueron normales, se le presento el sujeto era un hombre alto mas que su hijo media 1.88 de estatura, tenía rasgos idéntico, si su marido envejecía se verías idéntico ha su padre, y no será mal era un señor guapo, tenia los ojos verde mar que brillaban con una formas que hacia que Laura temblara y se sintiera incomoda cuando el la miraba fijo, su cabello completamente blanco platinado, bigotes espeso blancos delgado de manos grandes y fuerte cuando la saludo, con la mano lo noto, de piernas largas, era un hombre duro, su nombre era igual Lucas, ella le llamo señor Lucas, pero el le dijo que le llamara será Lucas, o suegro.
--O también puede decirme suegrito o papi. -Ese comentario le hizo gracias a su esposo, pero a ella la incomodo.
Ella decidió llamarle suegro para evitar problemas y confusiones, las cosas se empezaron ha complicar muy rápido.
Laura pensó que solo era saludarlo y el estaría por su lado, pero no, día tras días el suegro estaba hay, y lo peor era que parecía como se la comía con la mirada, como la desnudada con la vista, eso la hacia sentir incomoda, mas de una noche se acostó con ganas de decirle ha su marido que era lo que pasaba, pero al verlo como habla de su padre se de detenía, su marido idolatraba a su padre, ella pensaba.
--¡Tal ves es imaginación!
--¡¿Y si no es así?!
--¡¿Que con que mire todos los hombres del crucero y las mujeres me miraban?! -Decía ella y era cierto Laura tenia un cuerpazo producto de la genética, comer sano mucho ejercicio y el santo bisturí.
Ella era rubia natural de pelo largo y liso que caía en sus hombres como oro batido, bien cuidada, de piel blanca, cutis perfecto, buena figura, ojos verde felinos, senos grandes y duro gracias a la medicina, cintura pequeña, abdomen plano, cola paradita bien firme y redondeada, en forma de corazón que resaltaban con su cintura de avispa paradita de buen trabajo en el Gym, piernas largas y gruesa carnosas firmes por el ejercicio, ella media como 1.78, su esposo era de 1.80. Pero su suegro era de 1.88, delgado y lujurioso como ninguno. Sus medidas eran 97-60-99, con los senos hecho y un trasero trabajado, era una hermosura, ella pensó que su luna de miel seria como las de cualquier recién casado, pero no fue así.
--¿Wow este crusero es una preciosura no lo crees amor? -Pregunto su esposo alegre.
--¡Así es amor, nos la pasaremos bien aquí! -Dijo ella dándole un beso. Sintiendo la mirada de su suegro a tras.
Fue cuando se le callo su cartera y se agacho para recogerla y sintió como la mirada de su suegro le atravesaba el trasero, ella se levanto de una, y siguió su camino sintiéndose extraña, alcanzo ha su esposo y se enrosco en su brazo.
--Hussss he visto algo genial. -Dijo el suegro acercándose a la pareja.
--Lo se padre, mira hay muchos turista, es una buena época. -Dijo su hijo distraído de lo que en verdad veía su padre.
El suegro no podía dejar de pensar en el cuerpazo de esa hembra y en lo mucho que lo disfrutaría. Luego de un suave desayuno, y de una charla amena en la que el suegro no dejo de mirarla por un segundo el escote de su nuera, fue que decidieron ir a la piscina.
--Me alegra mucho que pudieras venir padre. -Dijo su hijo sonriendo a su padre le devolvió la sonrisa mientras que tomaba su trago.
--A mi más hijo… créeme a mí más. -Dijo con vos maliciosa su nuera lo escucho y se erizo, aun así trato de relajarse, ella estaba determinada a que eso no la molestaría, así que decidió ponerse su bikini y tomar el sol, fue cuando el suegro la note y no podía contar sus deseos de tocar ha esa hembra que tenía a un lado, pero su hijo estaba hay muy cerca.
--¡La piscina es linda no lo crees hijo!
--¿Si padre es mas voy para ella tu no lo aras?
--Descansare aquí un poco, pero ve hijo. -Dijo su padre con ansias que se fuera, y así fue, su hijo se fue ha dar un chapuzón, espero un rato controlando sus deseo.
--Baya el sol esta fuerte Laura no lo cresas. -Cuando ya vio que era hora izo sus movimientos el suegro.
--A si… si… fuerte. -Dijo ella algo aturdida de que su suegro le hablara.
--¿No quieres algo de protección solar?
--No gracias estoy bien.
--¡No, no ni mas faltaba yo te la pongo! -Se apresuro el suegro ante de que Laura dijera algo.
Su suegro empezó ha acariciar su trasero, ha pasar su mano por su cuerpo suavemente le untaba su protector solar suavemente y Laura se confió, se relajo, pues esas manos grandes no eran nada torpes, cuando bajo la guardia.
Fue cuando Lucas lo noto, y ataco, y así lo izo, sus manos eran grandes y firmes, y el sabia muy bien que era lo que debía de hacer, empiezo primero ha relajar ha Laura, poco ha poco aguantando el mismo sus ansias de comer, ya en su juventud, había perdido muchas hembras por su impaciencia, esta ves el viejo lobo, no solo era ardiente y deseoso si no precavido, sus manos se concentraron en sus hombros luego en sus espalda, bajaba suavemente untando el protector solar suavemente mientras su sexy nuera gemía relajada saber lo que pasaría, sus manos se movían suavemente pero con firmeza a la ves Laura se confió; terrible error, el empezó ha acariciar sus espalda sus cintura midiéndola con sus manos, luego bajo ha sus piernas firmes y torneadas las masajeo haya sus pantorrillas, hasta sus dedos de los pies, era bueno dando masaje en los pies, ella gemía suavemente.
--Mmnnnn, mmmmm, Mmnnn, husssfffff, Husffff…
Lucas sonrió por ello, siguió con lo suyo suavemente, luego subió asta sus hombre hay dejo una de sus manos, la izquierda, y con la manos derecha bajo hasta sus axila, la izquierda le siguió por la otras, rosaron sus senos, Laura no dijo ni sintió nada, solo estaba pendiente de el placer que sentía, jamás nadie la había tocado de esa manera.
--Mmnnnn, Mmnnn, Mmnnn, Mnnnnn, Mmmnnn… Ahhhh ohhh que rico, Siiiiii… -Salió de su boca. Y estaba acabada, Lucas sonrió.
Era la hora, Lucas subí sus manos hasta sus hombros dejo firme en ellos su mano izquierda y su derecha, bueno esa manos se deslizo hacia su trasero sus nalgas, pero por debajo de su bikini, hay fue cuando Laura se agito, intento levantarse de golpe, pero no pudo, no pudo porque Lucas su suegro tenia su mano izquierda bien puesta sobre ella con firmeza.
--¿Luuuu, Lucas que se supone que estas haciendo? -Pregunto ella sorprendida.
--Hooo… lo siendo Laura querida es por la culpa del bronceado, mi mano se resbalo. -Dijo bajando sus dedos aun mas, sus grandes largos y gruesos dedos justo dentro de sus nalgas acariciando su ano y su concha, haciendo que Laura gimiera que no supiera que hacer.
-- Ahí, ahí, ahí uhh, uhh, uhh… -Sintió miedo sin duda alguna, el frotaba las yemas de sus dedos en sus vagina en su ano.
--Mis manos son tan torpes mas tus curvas, bueno mi mano termino chocando al final… perdón. -Dijo el suavemente Laura no sabía que decir Ho hacer, si gritar ¿Ho que podía hacer?
--Será mejor que pares Lucas haaaa hoooo. -Gemida Laura. --Tu hijo nos puede ver déjame ya haaaaa. -Gemía ella apretando sus dientes mordiéndose los labios. --Por favorrr, paraaaa haaaaa. -Gimió, estaba a punto de acabar, pero Lucas la dejo, venia su hijo.
Darío su hijo venia sonriendo, sin saber lo que pasaba Ho lo que pasaría “¡Pobre idiota!”
--¡¿Hola padre, Laura el agua esta riquísima, no quieren darse un chapuzón?!
--No gracias hijo. -Dijo su padre poniendo la mano en el hombro. --En este corto tiempo tu esposa y yo nos hemos acercado más.
--¡Ha eso es bueno! -Dijo su hijo, miro ha su esposa. --¿A amor estas bien, te sientes bien? Te ves roja.
--Es por el sol. -Dijo ella aturdida.
--Ha si quieres te llevo ha la habitación.
--No, no te preocupes por mi, yo me iré ha recostar sola.
--¿Segura?
--Si claro amor sigue disfrutando la piscina. -Dijo su esposa dándole un beso en la mejilla. -Su suegro la tomo de inmediato por la cintura con suavidad pero con firmeza y le dio un beso en la mejilla si, pero muy cerca de la boca ella estaba aturdida de que hiciera eso delante de su hijo, pero por lo visto su hijo no se dio de cuanta o no vio malicia en ello.
--Descansa Laura si. -Dijo su suegro mirándola fijamente con sus ojos verdes claro luego miro ha su hijo. --Ha hijo sabes me han dicho que el casino de este crucero es fantástico.
--Ha en serio. -Los ojos de su hijo se iluminaron mientras que su esposa se retiraba aturdida pro lo que pasaba.
Laura se retiro como pudo sus piernas le temblaban y no sabia que hacer o decir, no tenia idea lo que le deparaba el futuro.
Continuara…
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