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Amo Negro, esclava blanca

AMO NEGRO, ESCLAVA BLANCA
Soy Mariana, a punto de cumplir mis 28 años, tez blanca,cabello negro, buen cuerpo (98 de tetas sobre todo). Vivo en Capital, más precisamente en Villa del Parque. Tengo una vida sexual muy activa, soy de lasque puede disfrutar el sexo sin amor. Es más, esto es lo que busco últimamente:sexo sin amor, sin compromiso, ni promesas románticas vacías. Un par de horas de juegos y pasiones intensas. Y chau. Next.


Pero, ahora, al punto. Después de ver tantos africanos atendiendo esos puestos callejeros de relojes, anteojos y otras baratijas, me entraron las ganas de probar con uno. Habiéndolo hecho  con personas de raza amarilla (un coreano y un japonés, ambos con escasa suerte) se me antojaron que los negros iban a ser experiencias más satisfactorias. Puse manos a la obra entonces. Estaba asistiendo a un curso de diseño de indumentaria en una escuela del barrio de Liniers, más precisamente en la calle Carhué a pocos metros de la Avenida Rivadavia. A la salida misma de la escuela había uno de esos puestos atendido por un negro. Piel negra azabache, alto, delgado. Terminaba sus tareas y levantaba su puesto a las 19.00. Mi curso terminaba a las 18.00 horas. Tuve que retrasarme para que disminuya el tráfico de gente (sobre todo de los compañeros y compañeras del curso). Era viernes. Unos minutos antes de las 19.00 me acerco al puesto.  Pollera por arriba de la rodilla, zapatos bajos, camisa oscura con dos botones desabrochados y sin corpiño (no fue un olvido, fue absolutamente premeditado). Exhibiendo mi másamplia sonrisa empiezo a mostrar curiosidad por unos collares. Se los pido para probármelos, me los entrega y al tomarlos no mezquino para nada el contacto con su mano. Al sentir ese roce me regala una sonrisa pícara y se ofrece para abrir y cerrar el broche del collar. Se pone a mi espalda, hecho que aprovecho para desabotonar el tercer botón  de mi camisa. Me ajusta el collar, cierra el broche y vuelve al frente de mí. Se dio cuenta de inmediato del botón desabrochado y del paisaje de mis 98 de tetas más desvergonzadamente exhibidas. Ahí fue cuando Bocar (ese era su nombre) pasó ala ofensiva y fue más al frente, tomando el adorno del collar de entre mis lolas, dándome un generoso roce que empezó a elevar mi temperatura.  Ya estando totalmente desbocada y con las pulsaciones a mil, le tomo la mano yo y hago que la apoye directamente sobre mi teta izquierda.  Después de fregarla un poco y darme un húmedo beso en la boca, empezó a levantar la mercadería haciendo un bulto grande con el paño sobre el que estaba expuesta. Le expliqué que estaba con coche. Que podíamos ir a donde quisiéramos. Lo llevé a un telo de la Avenida Juan B. Alberdi y Medina al que fui infinidad de veces. Ni bien nos subimos al coche me sacó violentamente la tanga rompiéndola, y en el trayecto me metió mano por todos lados, ofreciendo un espectáculo que fue bien apreciado por los pasajeros de dos colectivos que pasaron al lado nuestro.Llegando al telo tenía cinco botones de la camisa desabrochados y tuve que parar una cuadra antes para emprolijarme un poco, porque ya estaba con las tetas afuera de mi camisa.
Una vez que llegamos a la habitación y cerramos la puerta,Bocar se tornó en dominador, dejando para mí el papel de sumisa (papel que me encanta).Abrió las persianas e iluminó totalmente la pieza. Se bajó el pantalón de jogging que tenía (sin calzoncillos) y agarrándome del cabello me hizo arrodillar y poniendo su gran pija delante de mi boca, me dijo con su español precario, que la abra. Yo quería ver ese muy buen instrumento negro, pero me tiró del cabello que todavía tenía tomado y me repitió en voz más alta “Abrí boca….grande”. Lo hice y él me la metió de un golpe y empezó un mete – saca que el ayudaba poniendo su mano en mi nuca y empujando mi cabeza hacia sí. No me resistí para nada, y en segundos estaba con toda la pija dentro de mi boca. Dejándola adentro totalmente empecé a mover mi lengua y ahí me detuve para mirarlo. No era lindo, su piel era negra,bruñida, azabache, de ese color que ofrece un contraste llamativo con sus  dientes o sus ojos que estaban muy abiertos por el “tratamiento” que le estaba dando. En segundos, retomó su papel de dominador y poniéndome de pie me señaló imperativamente la cama. Me incorporo y me acuesto en la cama boca arriba, pero él, bruscamente y expresando algo de enojo, me dio vuelta y me puso “en cuatro”, dándome unas nalgadas y diciéndome que obedeciera, que las órdenes las daba él (o al menos eso interpreté). Fue así que recibí sus primeros embates profundos al tiempo que me empezó a hablar sucio con su rudimentario español ( repetía incansablemente “puta” y “gusta pija”y yo respondiéndole “sí, soy puta” y “sí, me encanta, dámela toda”). Al margen de que me excita enormemente que me hablen lo más sucio posible, yo ya estaba en el cielo por sentir toda esa maquinaria oscura moviéndose sabiamente en mi interior. A partir de ese momento, y manejándome autoritariamente me fue colocando de todas las formas habidas y por haber, propinándome nalgadas  y dándome placer como pocas veces  he recibido. Arriba, abajo,  de costado, parada, acostada sobre el suelo yterminando con una sincronización envidiable los dos parados, al lado de la ventana mostrando mis tetas al exterior y el empalándome por atrás, gritándonos“sos muy puta” él,  y yo “soy TU puta”.
Cuando él ya estaba fumando un cigarrillo y yo temblando de tanto placer recibido, me preguntó si realmente “yo era su puta” y si haría todo lo que él me pidiera. Apoyando mi cabeza en sus abdominales le respondí,sin dudar “sí, todo”. Aplastando el cigarrillo, me levantó con sus brazos fuertes y puso mi cabeza sobre la almohada y yo me dejé llevar, sintiéndome su esclava dispuesta a hacer gustosamente todo lo que me insinuara mi amo.  Flexionó sus rodillas a ambos lados de mi cabeza. “chupa, puta”, orden que obedecí de inmediato. Simplemente escuchándolo y viendo a mi negro me excite nuevamente chupándole la pija y el metiéndome mano en todos mis orificios, nos fuimos entonando nuevamente  y  ésta vez el acabó regando mi boca con blanca y más que abundante leche.
Ya volviendo, de vuelta en el coche, me siguió metiendo mano aprovechando que no me había puesto la tanga que él me había roto. En el camino me volvió a preguntar si iba a hacerle caso a lo que me pidiera. “Tienes una esclava puta esperando que ordenes”. Nos intercambiamos los celulares y nos despedimos con un gran beso y caricias amparadas por la noche. Me prometió que el viernes siguiente nos volveríamos a ver.
El jueves siguiente me llama y me pide que vaya a su puesto al día siguiente a las 19.00.  Aprovechando nuestro roles de dominador y sumisa me ordenó que vaya sin ropa interior. “Lo haré, Bocar”. Al llegar al otro día con poca gente circulando en la zona, veo a Bocar, al lado de un compañero, tan negro como él, no tan alto pero más corpulento. Yo había ido vestida de la misma manera, es decir pollera, camisa,zapatos bajos y, de acuerdo a lo pedido, sin ropa interior. Nos damos con Bocar un gran chupón en la boca y pone susmanos como para verificar si había obedecido sus órdenes, en cuanto a la ausencia total de ropa interior. Luego habla en su idioma con la persona que lo acompañaba y ambos se ponen a reír estentóreamente. Acercándose Bocar, abre el tercer botón de mi camisa, para ofrecer a su amigo una vista más generosa. Mientras el acompañante  me empieza a mirar cada milímetro de piel, Bocar me empieza a explicar que Adama (así se llamaba el acompañante) había llegado hacía 15 días de su país y no hablaba nada de español y que hacía tiempo que no tenía contacto con mujeres. No hizo falta que me aclarara más.
 
Nos presenta y le doy un beso en la mejilla. Me señala la otra mejilla. Adiviné que en su país se dan dos besos, así que le “pagué” el beso adeudado, y nos reímos los tres. Adama empezó a romper el hielo acariciándome la cara y diciendo algo a Bocar. Bocar le dice “linda” y Adama repite “linda” defectuosamente. Luego Bocar le dice señalándome “puta” y Adama también lo repite. Más risas y más y más. En ese momento salió un compañero dela escuela que me vio coqueteando sin ningún tapujo con los senegaleses, pero eso ya forma parte de otra historia. Acercándome a Bocar le pregunté algo que después me pareció obvio, si los tres íbamos a estar en la misma cama. “Yo ordeno” dijo Bocar.
 
En Argentina hacia poco tiempo que se había permitido el uso de las habitaciones de los albergues transitorios por más de dos personas. Yo no sabía si se estaba aplicando esa medida en todos los telos. Por lo tanto,fui a lo seguro. Fui a un hotel en la calle Bahía Blanca, en Floresta donde yo ya había realizado un par de tríos.
Ya en el coche Adama, sentado en el asiento del acompañante  no podía esperar más y empezó  a chuponearme y meterme mano por todos lados. Obvio que le tuve que decir a Bocar que le pidiera calma, que yo ya había accedido y que haríamos todo lo que ellos quisieran dentro de unos minutos. A pesar de lo dicho Adama siguió metiendo mano, pero más tranquilo.Una vez en el hotel y una vez cerrada la puerta de la habitación, no pude contenerlos a los dos. Me dejé llevar y debido principalmente al gran estado de necesidad de Adama me llenaron de leche todo mi cuerpo. Empezando con mi boca,en la fellatio más corta que haya realizado jamás. Creo que fueron menos de 30 segundos y reventó en mi boca mandando su contenido directo a mi esófago. No necesitó nunca Adama tiempo para recuperarse. A continuación me puso en cuatro(también poniéndose en dominante) y me penetró por atrás mientras que Bocar me penetraba por mi boca. Ahí empezaron los dos a ponerme y sacarme de las posturas que querían experimentar con cierta rudeza y con profusión de nalgadas y lenguaje sucio. Adama luego optó por mi culo mientras Bocar me daba por la concha. Así me acabaron una y otra vez invirtiendo los roles y las posiciones.Hasta que en un gran final y mientras yo me desmayaba en la cama se masturbaron arriba mío para terminar en una lluvia blanca que me dejó enchastrada, muerta de cansancio, con el culo rojo de tantas nalgadas y muy, pero muy feliz.
Con Adama solo nos pudimos vernos una vez más porque me enteré que  llegó la esposa desde Senegal. Nos seguimos viendo con Bocar pero más espaciadamente. Una vez por mes,aproximadamente, ya forma parte de las amistades que tengo con derechos. Obviamente nuestra única salida es el telo. Adonde yo puedo someterme sin ninguna limitación a todas las órdenes del oscuro amo de todos mis deseos.
 
FIN

17 comentarios - Amo Negro, esclava blanca

pakonert
puedo yo?....
Marianamull +1
jajajajaja...por que no??
maechiquito
@Marianamull, te gustaría experimentar con un cubano morocho?
Lulu615
Sigue en liniers el tipo del relato
Marianamull
Si nos referimos al mismo puesto (mi escuela estaba en Carhué 9 y el puesto estaba frente a la escuela) te cuento que a Bocar lo trasladaron a un puesto mejor hace 6 meses mas o menos.
TiziOeste666
Yo pienso q a cualquier negro q le digas se prende
lmasse74
muy bueno el relato, charlemos
Marianamull +1
Gracias por el comentario Imasse74. Los valoro tanto o mas que los puntos. Beso
lmasse74
por nada, un placer
ossieman
Ufff me viste la cabeza
Marianamull +1
Gracias por el comentario. Beso
Marc_2
Bien nena.!!! Y si es real mejor. Fueron 10 bien merecidos.
Marianamull +1
Muchas gracias por el comentario. Fue bien real. Te mando un beso
Marc_2
@Marianamull subí una foto tuya aunque sea mínima así te imaginamos mejor trolita.
Te-deseo-mucho
Que experiencia caliente ,no dejo de imaginarte comiendo esas 2 pijas enormes,y me éxito como loco
SergioYlao
me encantan los negros .soy laura .casada .41 .necesito me pases datos .quiero probar dos pijas negras juntas ....
SergioYlao
me volaste la cabeza cielo .estoy deseseperada de calentura .quiero tus negros .ji.ji
SergioYlao
nos hablamos al privado .diosa .estoy ansiosa por preguntarte de todo y mi marido caliente con tu relsto...
andomoron
eso es verdad te felicito ,tuve una compañera de trabajo que estuvo con uno de los negros, creo que nunca mas volvio con un blanco ajjajaa.
cuando quieras charlamos
cuquito7821
Que lindo sería comerse dos negras, solo que donde vivo, pocas hay de esa raza
Melquior
Tenes un nuevo admirador bebé
Pervberto
Un comité de bienvenida para inmigrantes de una sola persona.
TiziOeste666 +1
Una fantasía mía es estar con negros
andomoron
Ojalá se te cumpla
andomoron
Mariana y que onda se nota la diferencia entre la chota negra y una de un blanco?
Me acuerdo que mi ex compañera de laburo contó que nunca había visto algo tan grande en su vida anaja