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Conociendo el Placer 1

Conociendo el Placer 1
Con El Sello De Placer Y Morbo…
Mi nombre es Sofía y quiero contarles parte de mi vida. Tengo 30 años, 1,78, rubia, pelo corto, ojos grisáceos y una buenas figura. Medias 94-60-96, con piernas largas y torneada mi colita bien paradita redondita y dura, años en el Gym, y mucha dieta, con una cintura de avispa, me cuido mucho mi cuerpo. Nací en un hogar de clase media alta, mi padre comerciante empresario y mi madre ama de casa. Mi juventud hasta cumplir mis 17 años fue realmente hermosa. A los dos meses después de mi fiesta de 17 años, mi madre falleció en forma fulminante. Mi padre y yo quedamos solos y tratamos de arreglarnos. Yo estudiaba en un privado y hacia cosas de la casa, como hacer la limpieza, lavar la ropa, intentaba planchar y hacia algunas comidas. Todo iba bien, hasta que un día mi padre, de 40 años, me dijo que se casaría con una mujer que había conocido hacia unos meses. Eso me cayó como una patada al hígado. Era muy pronto de la muerte de mamá. Un día se lo dije y terminamos discutiendo, diciéndome que era una pendeja para meterse en su vida. Un día la trajo a casa, era una mujer común de unos 31 años, pero en ella había algunas cosas que no me gustaban. Pero mi opinión no cuenta en eso y se casaron. Ya desde su casamiento entramos las dos a discutir por cualquier cosa. Yo no era una santita pero tampoco el diablo que ella le pintaba que era a mi padre. Ya con casi 18 años empezaba a desilusionarme de esta vida. Pensar que cuando vivía mi madre, todo iba sobre rieles, ella unía mucho la familia. Para colmo de males, para mí, ella quedo embarazada enseguida, por lo cual cada día yo me sentía más apartada de la casa. Yo no era virgen, ni mucho menos, pero no encontraba satisfacción en acostarme y tener sexo con mis amigos de la misma edad. Mi vida era insípida y aburrida, siempre lo mismo. Empecé a ir a discotecas club nocturnos, a bailar hasta altas hora de la mañana siguiente, comencé a tomar distintos tragos y bailar frenéticamente. Mi padre para colmo redujo lo que daba por mes, en parte por pedido de ella, ya que yo seguía y bien en los estudios. Para ir a una disco los viernes y sábados era por tarjeta todo, así que se arruino para mí en ese punto, cuando una vez íbamos a otro y no conocido, tratábamos de conseguir entradas y si no debíamos colarnos. A veces no entrábamos de ninguna manera, entonces le ofrecíamos a los que vigilaban la puerta hacerles un pete rápido. Íbamos a un lugar más oscuro, detrás de árbol y cerca del lugar, no arrodillamos y le chapábamos la pija. Esa era nuestra entrada. Al principio me costaba hacerlo, pero luego entre en el momento. Una vez adentro gastábamos la plata que teníamos en éxtasis y agua mineral. A la salida íbamos caminando a nuestras casas, sino habíamos enganchado algún muchacho que nos lleve en coche. Ni para taxi de vuelta teníamos. Una noche de esas y sin plata ni para una pastilla, habiendo pagado con un pete, estaba en la barra en la disco y detrás de ella había un tipo de 30 años más a menos que me miraba fijamente. Era muy guapo lo admito, y empecé a mirarlo más seguido. Se acerco siempre detrás de la barra y me dijo.
--Hola me llamo Lucas, quieres un trago.
--Mi nombre es Sofía, gracias pero no. Hoy estoy seca.
--Yo te lo ofrezco gratis. ¿Sí?
--bueno gracias.
--Aquí tienes. Qué edad tienes Sofía.
--20.
--Mm, segura, ¿a ver el documento?
Saque de mi pantalón el documento y se lo mostré muy rápido, cosa que no viera. Pero tomo mi mano y me la saco.
--Acá dice que en un mes vas a cumplir los 18 años o calculo mal yo.
--Esta bien tengo 18 años, ya me voy.
--Espera, no he dicho eso. Yo soy el encargado general. Eres una de esas pasa documentos.
--Pase con el de una amiga.
A veces las mas chicas del grupo al no tener los 20 años, íbamos atrás de las mayores y una vez ellas entraban pasaban el documento para entrar otra. Siempre tratábamos de buscar los parecidos, pero en chicas de esa edad, éramos todas parecidas. Los de la entrada miraban a la ligera y así entrábamos.
-Claro aprovechan el tumulto y pasan. Otras lo que hacen son petes. -Se debe haber dado cuenta porque me puse roja.
--No, no es nuestro caso.
--Esta bien, tranquilízate no voy a sacarte, y si fuera tu casa no te jugaría créeme. -Me dio una sonrisa muy linda.
--Gracias.
--Sabes que eres muy bonita, buen cuerpo para tu edad años y esos ojos claros que acá con esta luz no se ve bien el color.
--Son grises.
--Vaya que hermoso color de ojos. ¿Dime tienes noviecito?
--Ahora no.
--Quédate, si quieres otro trago pídemelo.
--Esta bien así, Lucas.
--Enseguida vuelvo. -Se alejo de mí y de la barra, por una puerta que estaba detrás de la barra. Volvió a los pocos minutos.
--Bueno, ahora viene un relevo, así podemos tomar algo tranquilos.
--no te preocupes, estoy bien.
--te diría que estas muy bien.
--gracias. -Vino el reemplazo que solicito y me invito a ir a un VIP
Subimos al primer piso, yo nunca había estado en un VIP, parece que era el del dueño. Había una mesa, algunas sillas y sofá chico. Una pequeña heladerita y nada más. Nos sentamos en la ventana que podíamos ver hacia fuera sin ser vistos. vi. a mis amigas bailando y alguna de ella disfrutando a lo loco. Se sentó a mi lado y abrió una botella de champaña, invitándome a beber. Brindamos y me ofreció un cigarrillo. Lo tome, lo encendió y los dos fumamos del mismo. Poco a poco puso su mano sobre mis hombros, estrechando más la distancia entre ambos. Con su mano masajeaba mi nuca, cosa que me calienta. Luego acerco su cara a la mía y comenzó a besarme. Su lengua que debo de decir era muy larga y grande, además que el sabia usarla pues nadie me había besado como él lo hacía, eso me puso a millón, su lengua entraba y salía de mi boca chocando con la mía y su mano apretaba mis tetas.
--Mmmmmmnnn. -Gemía ante eso.
Me hizo tirar hacia delante y bajo el cierre de mi vestido y desabotono mi sostén, con mucha experiencia, quedando mis tetas al aire.
--¡Que barbaridad nena, que bien estas con esas tetitas de pezones rosados y duros!
Al mismo tiempo su boca fue a mis pezones a lamerlos, mientras su mano abría la cremallera de su pantalón. Tomo mi mano y la dirigió a su bragueta, haciéndola entrar. Tenía su pija ya parada a reventar y caliente como un hierro candente. Era grande era enorme y muy gruesa. La saque y la juguetee con mi mano. Tomándome de la nuca hizo bajar mi cabeza hasta ella. Abrí la boca y la introdujo en ella, era muy gruesa así que me costó tragármela. Era largar y muy gruesa. Tal vez soy repetitiva pero era que era muy grande y gruesa, más que cualquiera otra que haya visto. Él cuando vio que estaba ya direccionada a chuparle la pija, puso su mano debajo de mi vestido y haciéndome levantar un poco del asiento, bajo mi bombacha. Metió de lleno su mano sobre mi concha y tuve un suspiro largo.
--Mmmmmmmmmnnnnnnnnnnn… -Sus dedos sabían lo que hacían tenía mucha experiencia casi me hace acabar hay mismo tan solo con sus carisias, tenia dedos grandes y gruesos pero con mucha experiencia.
Dándose cuenta el que había tocado mi clítoris. Empecé a moverme mas y el saco su pija de mi boca haciéndome acostar. Empezó a penetrarme.
Haaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaay… Para semejante pija era bastante estrecha. --Ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha. -Cuando la puso toda adentro empezó a moverse entrando y saliendo. --Haaaa, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha. -Me hacia delirar de placer. --Haaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa, Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, haaaaaaaaaa…-Yo acompañaba los movimientos. --Ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, haaaaaaaaa... De pronto la saco totalmente.
--¡Que haces no me la saques ahora, por favor!
--Te gusta así putita.
--Me encanta adentro, no la saques. -La volvió a hacer entrar y de golpe se detenía en el bombeo
--Haaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa… ¡sigue que haces! ¡no pares! ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, haaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaay…
--Como te gusta la pija pendeja puta.
--Me encanta tu pija, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha… Mmmmmmmmmmmm, nooooooooo, siiii, no pares por favor, ayyyyyyyyyy, divino, asiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii Ahhhh ohhh que rico, Siiiiii, me gustaaaaaa, Sigueee, que ricooooo, haaaaa me encanta papi haaaaaaa… ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, Haaaaaaaaaaaaaaaaaaa…
Quede exhausta, nunca en mi corta vida había tenido semejante orgasmos. Eso era satisfacer a una mujer. El quedo a mi lado rendido igual Al rato nos vestimos y bajamos al salón a divertirnos un rato.
--Espera te llevo a tu casa.
--Es que vine con dos chicas más.
--No importa las llevo a todas. -Llevo primero a mis dos amigas y luego a mí. Al llegar detuvo el coche frente al edificio y conversamos.
--¿La verdad me gustas mucho, tienes celular?
--Me siento bien contigo, si tengo, te doy el número.
--Dámelo, te ingreso el mío. -Le di el celular e ingreso él su número. Me lo devolvió y mire no había un Lucas. Dándose cuenta dijo.
--No lo busques por Lucas.
--Que guacho eres MI Macho.
--Lógico a partir de ahora soy tu macho. Yo te llamare a cualquier hora y día y te venís adonde este donde este yo. ¿Entendido?
--Siii. -dándome un beso en mi boca.
--Ahora anda a dormir.
--Si, chau.
Continuara…

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