Cogiéndome a Mi Vecina
Con El Sello de placer y Morbo…
Hola soy Fermín. Esto paso hace un años atrás, con Patricia, tiene 18 años ella llego desde hace como seis meses a la unidad, es delgada su cuerpo se está dibujando apenas, tiene sus tetitas bien duritas porque todavía, un culito redondito y suave, pierna largas y preciosas, ojos grandes boca grande y cabello a los hombros negro, es muy parecida a su mama que esta buenísima, intentare cogérmela. En fin: de vez en cuando la veía en la calle jugando con su hermanito o en la bicicleta, como comprenderás es una chica que llama la atención. Yo le contemplaba de arriba abajo cada que la encontraba y ella solo me miraba fijamente y seria, sobre todo cuando usaba su falda de la escuela, que es bastante corta curiosamente cuando caminaba detrás de ella y siempre se inclinaba a levantar algo o revisarse los zapatos, excepto cuando iba con su mama, dejándome ver sus muslos y sus calzoncitos rosas o blancos, pero no me decía ni una palabra, hasta que un día concedimos en la tienda. Ella compro un botellón de agua y lo amarro a un caretilla, para arrastrarlo a su casa. Hice tiempo y la espere para ir detrás de ella y me diera el gusto de ver sus calzones, ese lindo trasero, llego a su edificio y note que nadie la iba a ayudar a subir el botellón. Me acerque y le dije.
--Hola quieres que te ayude. -Me sonrió por primera vez en seis meses y dijo.
--Si por favor.
Ella iba adelante con su faldita y yo me quede unos escalones atrás para verla, mientras me dijo su nombre y le di el mío y que su mama trabajaba en las tardes. Así que estaba sola el fin de semana y la mayor parte del tiempo su hermanito estaba en casa de su tía, entramos a su departamento y cerré la puerta baje el botellón la mire y le pregunte.
--¿por qué te gusta que te vea las piernas? Ósea son lindas pero porque. -Se sonrojo y bajo la mirada y apenada.
--Pues... Ella no lo decía con facilidad.
--Puedes ser sincera conmigo. -Le dije.
--Es que bueno… me gustas y he visto vídeos en Internet e imagino que me tocan.
--Entiendo eso es normal.
--Si pero no que me tocan cualquier persona.
--Ha no quien algún artista. -Ella negó con la cabeza. --¿Quien entonces lo conozco? -Ella asintió, de una sentí que era alguien del barrio me dio un dolor en el pecho. Luego ella dijo.
--Tu. -Y volvió a bajar la cabeza.
No podía creerlo que me decía esa chica me quede mudo un momento pero luego me acerque la abrase y la bese estaba temblorosa, la tome de la mano la senté en el sillón me hinque mi, separe sus piernas masajeaba de arriba abajo sus piernas estaba excitadísima podía ver una manchita en su calzón.
--¿te gusta? -Pregunte ella no contesto de una.
De nuevo la bese le metí mi lengua hasta su garganta, le saque su camisa y su blusa y empecé a masajear sus tetas y a lamerlas, sus pezones estaban duros le saque el calzón ya empapado y lamí su conchita que lucía peloncita como bebe, se había depilado muy bien, ella no dejaba de gemir.
--Haaaaa, Mmmmmnnn… haaaaa, haaaaa, haaaaa, haaaaa, haaaaaaaaa.
Mi verga estaba a cien, me quite la camisa y baje mis pantalones y calzón hice que tocara mi verga y la apretó mucho, me excito, mas levanté sus piernas a mis hombros y la doble le metí contrabajo la puntita y ella pujaba y me regalaba sus jugos de su vagina virgen y se aferraba a mis brazos empujé mas fuerte hasta que entro poco a poco mas hasta meterla todo no se quejo mucho solo sus lagrimas salían de sus ojos cerrados y el rechinido del sillón.
--Haaaaaaaaaaaaaa. -Soltó ella, cuando entre.
Nos marcaba el ritmo el ruido del sillón, junto con nuestros pujidos hasta que me vine en ella se la saque escurriendo de semen y sangre antes puse mi sudadera abajo para evitar dejar rastro en el sillón. La limpie hasta que dejara de sangrar me vestí y me fui ese fin de semana la vi y le pregunte que si quería hacerlo de nuevo.
Si claro, si vamos a mi casa. -Dijo muy animada.
Entramos le arranque su pants casi lo baje hasta sus rodillas empine en la mesa prepare mi verga en medio de sus nalgas.
--Ahora sos mi putita te voy a enseñar.
--Soy lo que digas pero no me dejes yo te amo haaaaaaaaaa. -Gemía ella.
Le resbale la verga apretaba los dientes para no gritar ya me decía hasta que le metí un dedo en la vagina y la masturbe mientras bombeaba su delicioso y apretadito culito. me dio un orgasmo se la saque y le dije.
--Chúpamela
Sin chistar lo hizo se incoó y comenzó, los videos que vio le enseñaron mucho no pude mas y estalle en su boca al sentir mi semen saco mi verga de su boca y se salpico toda la cara.
--Comételo. -Le dije.
Muy obediente lo hacía, se la metí a la boca otra vez hasta que la limpio toda sin decir nada. Sigo cogiéndomela siempre que puedo, hacemos todo tipo de salvajada, y creo que mi leche le ha caído de maravilla, se está poniendo cada vez más sabroso de culo y tetas y cada vez la mama más rico.
Fin…
Con El Sello de placer y Morbo…
Hola soy Fermín. Esto paso hace un años atrás, con Patricia, tiene 18 años ella llego desde hace como seis meses a la unidad, es delgada su cuerpo se está dibujando apenas, tiene sus tetitas bien duritas porque todavía, un culito redondito y suave, pierna largas y preciosas, ojos grandes boca grande y cabello a los hombros negro, es muy parecida a su mama que esta buenísima, intentare cogérmela. En fin: de vez en cuando la veía en la calle jugando con su hermanito o en la bicicleta, como comprenderás es una chica que llama la atención. Yo le contemplaba de arriba abajo cada que la encontraba y ella solo me miraba fijamente y seria, sobre todo cuando usaba su falda de la escuela, que es bastante corta curiosamente cuando caminaba detrás de ella y siempre se inclinaba a levantar algo o revisarse los zapatos, excepto cuando iba con su mama, dejándome ver sus muslos y sus calzoncitos rosas o blancos, pero no me decía ni una palabra, hasta que un día concedimos en la tienda. Ella compro un botellón de agua y lo amarro a un caretilla, para arrastrarlo a su casa. Hice tiempo y la espere para ir detrás de ella y me diera el gusto de ver sus calzones, ese lindo trasero, llego a su edificio y note que nadie la iba a ayudar a subir el botellón. Me acerque y le dije.
--Hola quieres que te ayude. -Me sonrió por primera vez en seis meses y dijo.
--Si por favor.
Ella iba adelante con su faldita y yo me quede unos escalones atrás para verla, mientras me dijo su nombre y le di el mío y que su mama trabajaba en las tardes. Así que estaba sola el fin de semana y la mayor parte del tiempo su hermanito estaba en casa de su tía, entramos a su departamento y cerré la puerta baje el botellón la mire y le pregunte.
--¿por qué te gusta que te vea las piernas? Ósea son lindas pero porque. -Se sonrojo y bajo la mirada y apenada.
--Pues... Ella no lo decía con facilidad.
--Puedes ser sincera conmigo. -Le dije.
--Es que bueno… me gustas y he visto vídeos en Internet e imagino que me tocan.
--Entiendo eso es normal.
--Si pero no que me tocan cualquier persona.
--Ha no quien algún artista. -Ella negó con la cabeza. --¿Quien entonces lo conozco? -Ella asintió, de una sentí que era alguien del barrio me dio un dolor en el pecho. Luego ella dijo.
--Tu. -Y volvió a bajar la cabeza.
No podía creerlo que me decía esa chica me quede mudo un momento pero luego me acerque la abrase y la bese estaba temblorosa, la tome de la mano la senté en el sillón me hinque mi, separe sus piernas masajeaba de arriba abajo sus piernas estaba excitadísima podía ver una manchita en su calzón.
--¿te gusta? -Pregunte ella no contesto de una.
De nuevo la bese le metí mi lengua hasta su garganta, le saque su camisa y su blusa y empecé a masajear sus tetas y a lamerlas, sus pezones estaban duros le saque el calzón ya empapado y lamí su conchita que lucía peloncita como bebe, se había depilado muy bien, ella no dejaba de gemir.
--Haaaaa, Mmmmmnnn… haaaaa, haaaaa, haaaaa, haaaaa, haaaaaaaaa.
Mi verga estaba a cien, me quite la camisa y baje mis pantalones y calzón hice que tocara mi verga y la apretó mucho, me excito, mas levanté sus piernas a mis hombros y la doble le metí contrabajo la puntita y ella pujaba y me regalaba sus jugos de su vagina virgen y se aferraba a mis brazos empujé mas fuerte hasta que entro poco a poco mas hasta meterla todo no se quejo mucho solo sus lagrimas salían de sus ojos cerrados y el rechinido del sillón.
--Haaaaaaaaaaaaaa. -Soltó ella, cuando entre.
Nos marcaba el ritmo el ruido del sillón, junto con nuestros pujidos hasta que me vine en ella se la saque escurriendo de semen y sangre antes puse mi sudadera abajo para evitar dejar rastro en el sillón. La limpie hasta que dejara de sangrar me vestí y me fui ese fin de semana la vi y le pregunte que si quería hacerlo de nuevo.
Si claro, si vamos a mi casa. -Dijo muy animada.
Entramos le arranque su pants casi lo baje hasta sus rodillas empine en la mesa prepare mi verga en medio de sus nalgas.
--Ahora sos mi putita te voy a enseñar.
--Soy lo que digas pero no me dejes yo te amo haaaaaaaaaa. -Gemía ella.
Le resbale la verga apretaba los dientes para no gritar ya me decía hasta que le metí un dedo en la vagina y la masturbe mientras bombeaba su delicioso y apretadito culito. me dio un orgasmo se la saque y le dije.
--Chúpamela
Sin chistar lo hizo se incoó y comenzó, los videos que vio le enseñaron mucho no pude mas y estalle en su boca al sentir mi semen saco mi verga de su boca y se salpico toda la cara.
--Comételo. -Le dije.
Muy obediente lo hacía, se la metí a la boca otra vez hasta que la limpio toda sin decir nada. Sigo cogiéndomela siempre que puedo, hacemos todo tipo de salvajada, y creo que mi leche le ha caído de maravilla, se está poniendo cada vez más sabroso de culo y tetas y cada vez la mama más rico.
Fin…
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