Liz la Hermana Mayor 7: Aceptación

Al día siguiente desperté con el sonido de la alarma de mi celular, había dormido toda la noche aun con mi ropa puesta, me desvestí lentamente porque estaba adolorida y entumecida por estar en la misma posición.

Me metí a la regadera y al sentir el agua caliente sobre mi cuerpo disminuyó el dolor, lo cual fue un alivio, estuve ahí bajo el chorro de agua cayendo en mi espalda varios minutos, sentía como corría por mi cuerpo, deslizándose en cada parte de mi, sentí que dormí muchísimo.


después de bañarme seguí con mi ritual de siempre, elegí que me iba a poner pero como sentía las piernas adoloridas, tenía algunos moretones, me puse unas mallas para estar cómoda y una blusa blanca flojita, baje a desayunar y después me dirigí a la escuela.


ya saben día de hueva en la escuela porque pues no había ido el día anterior entonces no sabía que estaba pasando, así que lo pasé lo más normal que pude, realmente solo quería que me registraron la asistencia e irme lo más pronto posible.


Por fin salí y tocaba recoger a Alex, de camino a casa hablamos de sus clases pues ya faltaban pocos días para que se terminara el curso.


llegamos a casa, después de entrar Alex se tiró en el sillón y yo me senté en otro frente a él


A- ¿y que tal tu clase? ayer ya no me dijiste nada

L- la verdad estuvo super pesada, pensé que podría aguantarla porque considero que tengo buena condición pero no, o sea si aguante pero super cansada.

A- ¿y estuvo divertida?

L- pues fue mucho ejercicio y luego nos pusieron en parejas para practicar derribos

A-¿ y si pudiste?

L- pues me toco con un chavo mas grandote que yo

A- ¿no había otras chicas?

L- No, o sea si hay pero en otros horarios, pero como ese es el ultimo solo estoy yo por ahora

A- bueno al menos aprendiste a defenderte de alguien mas grande

L- pues me costó mucho trabajo, además la ropa que traía me dificultaba moverme bien sin que se me viera todo, en una casi se me salen las niñas jajaja

A- ¿de verdad? y tus compañeros vieron eso

L- obvio si pero disimulaban, muy respetuosos jaja pero obvio note como me veían desde que estábamos con el calentamiento.

A- de seguro les diste un buen show jaja

L- si yo te contara hermanito jeje

A- conozco esa sonrisita ¿que hiciste?

L- nada nada si te cuento te vas a enojar

A- cuéntame ¿paso algo malo?

L- pues no se si malo, pero pues no estaba preparada para la clase, y como terminé toda sudada debía cambiarme la ropa pero el baño estaba ocupado, así que discretamente me cambié delante de ellos

A- ¿o sea que te vieron toda?

L- no tonto ellos estaban distraídos cambiándose y platicando, yo me tapé con una toalla, si acaso me vieron las piernas y las nalgas.

A- ah ok pensé que había pasado algo ¿porque habría de enojarme?

L- pues no se, ¿porque tu hermanita se desnudó frente a un montón de extraños?

A- pero dices que no te vieron nada

L- dije que tal vez me vieron las nalgas

A-¿y? en la playa andas también así y no pasa nada

L- bueno pero es diferente…

A- además creo que tu querías que te vieran

L- ¿porque dices eso?

A- pues porque te desnudaste delante de ellos, podrías haber esperado y cambiarte en el baño

L- pero el baño olía horrible ademas ya era muy tarde

A- podrías no haberte cambiado y bañarte aquí.

L- cómo iba a estar así por la calle

A- ¿que tiene? ¿traias el carro no? por eso creo que tu querías hacerlo

L- … bueno… me voy a mi cuarto.


La verdad me molestó un poco lo que dijo mi hermano, me acosté en la cama un rato y me dio vueltas en la cabeza sus palabras, pero para distraerme mejor me puse a ver videos en youtube, después de un rato sin darme cuenta me quede dormida.


cuando desperté ya se me hacia tarde para mi clase de defensa, preparé mi maleta y me cambié, esta vez me puse unas mallas y un top cerrado del pecho para evitar que se me salieran las bubis. tome las llaves del carro y me fui apresurada.


Estacione el coche en el mismo lugar que el dia anterior y caminé las cuadras que faltaban para llegar, de todos modos tarda en empezar la clase.


Para mi sorpresa al llegar la clase ya había comenzado, tranquilamente deje mis cosas al fondo del lugar, pasando a la vista de todos.


Profe- Pensé que ya no iba a venir señorita

Liz- ¿porque no?

P- usualmente las chicas como usted no aguantan más de una clase

L- ¿las chicas como yo?

P- si, delicadas, femeninas, consentidas que piensan que por su linda cara todo pueden conseguir

L- ¿usted cree que yo soy así?

P- pues sí, ayer vino vestida como si fuera a modelar, no a pelear, no le dije nada porque pensé que se incomodaría con las miradas de mis muchachos, y ya no vendría más.

L- no me incomoda que me vean...

P- claro que no, si hasta le gusta

L- ¿como dijo?

P- no se haga la inocente señorita por favor, y bueno ya no me haga perder más tiempo se va a quedar a la clase si o no?

L- yo...si…

P- no la escuche

L- SI SEÑOR!!


P- muy bien soldados a trabajar, que hoy vengo de malas y no tendré piedad.


la clase empezó con varios ejercicios pesados, los sentía mas militarizados, correr, saltar, arrastrarse, trepar objetos.

en diferentes circuitos, bastante duros, yo quería llorar, estaba muy cansada quería vomitar, pero me dolieron las palabras del profe así que esa rabia me hizo seguir adelante, se me salían las lagrimas pero se confundían con mi sudor mientras seguía.

mi compañero de la clase pasada, el grandote, gordito no podía más y se tiró al suelo, el profe le gritaba para animarlo


P- ¡¡animo soldado levántese!! no me diga que “la barbie” puede más que usted


yo al pasar le di una palmada en la espalda a mi compañero

L- ¡¡vamos levántate tu puedes!! - le dije con lo que quedaba de mi voz ante la mirada extraña del profe.


Él se levantó y se incorporó de nuevo. después de un par de minutos el profe nos dijo que nos detuviéramos, habíamos terminado el acondicionamiento físico, había pasado ya una hora. nos tiramos todos al suelo.


después de un par de minutos siguió la clase, esta vez el profe preparo ejercicios de golpeo, y en parejas nos puso uno a sostener unos colchones en las manos y el otro a golpear y esquivar.


P- no bajes los brazos en ningún momento- me decía, me ardían los brazos de golpear, pensé que cuando fuera mi turno de sostener los colchones descansaría pero no fue así, me seguía cansando

inmediatamente después de eso nos puso a practicar una llave al hombro, y pasaba a cada pareja a demostrar como se hacía correctamente.

cuando pasó a demostrarla conmigo, me derribó de una manera tan fácil que en un segundo ya sentía como estaba a un movimiento de romperme el hombro, la verdad me dolió un poco pero aguante hacer cualquier sonido.


me soltó y me levanté, a pesar de ser un hombre bastante pequeño y gordito, su técnica demostró sus años de entrenamiento.


P- creo que nos da tiempo para un ejercicio más.

paso con cada uno de mis compañeros y les dio instrucciones y cuando se acercó conmigo me dijo que pasara al centro.

P- tus compañeros te empujaran con esos colchones y tu tienes que golpear esos colchones para alejarlos de ti ok, tienes que aguantar 5 minutos ¡¡comiencen!!


ellos me rodeaban y empujaban con los colchones como si fueran escudos romanos, yo intentaba golpearlos pero no lograba empujarlos, estaba ya muy cansada, mientras golpeaba uno, otro me empujaba por la espalda.


P- llevas dos minutos Barbie


Escuche eso pero mis brazos ya no me respondían, comencé a bajarlos, y a aguantar los empujones, sentía los colchones presionándome, casi ahogándome mientras yo intentaba tomar aire con mi respiración super agitada.


P- ¡¡Tiempo!! un cuchillooo


se apartaron mis compañeros con sus colchones y otro compañero corrió hacia mí con un cuchillo en la mano


P- ¡¡defiéndase barbie!!


intente defenderme pero estaba exhausta, trate de golpearlo al tipo pero me derribó y sentí como me empujo la panza con el cuchillo. era un cuchillo de utilería.

P- listo quédese ahí en el suelo un minuto, usted esta muerta- me dijo mientras yo agitada intentaba respirar.

L- no es justo no estaba preparada, estoy muy cansada- le dije como pude

P- así es la vida injusta, y así se acaba en un segundo, este es un ejercicio que les pongo a todos mis alumnos, vivan su vida, estén preparados, este es un ejercicio pero allá afuera es así. quédese así hasta que recupere el aliento señorita.

Estuve un par de minutos así, cerré mis ojos mientras descansaba, quería llorar pero contuve mis lágrimas. ya todos se habían ido al fondo a cambiarse.

Me levanté y me acerque a ellos.


P- ¿cómo se llama compañera?

L- Liz

P- compañeros les pido un aplauso para Liz que aguanto todo el entrenamiento.

todos comenzaron a aplaudir

P- y yo te quiero pedir una disculpa Liz porque creí que eras una barbie pero demostraste que eres toda una guerrera, y puedes formar parte de esta familia.


En ese momento dejé salir mis lágrimas, me sentí muy bien de recibir el reconocimiento de mi clase y el profe.


después todos siguieron con lo suyo, yo me calme y me quite los tenis. el profe se acercó conmigo


P- Y Qué bueno que hoy te trajiste ropa más apta cubre te cubre todo,

L- pero profe usted lo dijo, a mi me gusta que me vean no?- dije mientras me secaba las lágrimas

P- perdón por eso, tuve un mal dia... por cierto el baño está libre para que se cambie.

L- ¿porque? si todos se están cambiando aquí- dije sonriendo mientras me bajaba las mallas, hasta los muslos, dejando ver mis nalgas mojadas por el sudor del entrenamiento.

P- para que no se incomode

L- ¿quien? disculpen chicos ¿a alguien le incomoda si me cambio aquí?- pregunté mientras me quitaba por completo las mallas y quedaba solamente en mi top y una tanga negra. todos voltearon a verme pero nadie dijo nada.

L- ¿lo ve profe? nadie se incomoda en esta familia- le dije mientras iba hacia mi maleta, caminaba lentamente a la vista de todos meneando las caderas, mientras me quitaba el top, cubriéndome los pechos con las manos haciéndolos rebotar un poquito con cada paso, sonriendoles a todos mientras pasaba, llegué a mi maleta y agachándome sin doblar las rodillas pretendía buscar algo dentro de ella, tomándome mi tiempo, parando bien la cola para que me vieran, sentí como me devoraban con la mirada, moví la cola de un lado a otro juguetonamente, me detuve y voltee sobre mi hombro, al hacer esto todos dejaron de verme, pretendiendo que no me estaban viendo, tome mi toalla, la puse sobre mis hombros cubriéndome los pechos con los extremos, tomé la maleta y volví hacia donde estaba el profe, me senté en una sillita

P- Liz no tienes porque hacer esto, perdón por lo que dije

L- profe de verdad no lo hago para probar nada, es solo que usted es la segunda persona que me dice eso hoy, y ¿que tal si es cierto? tal vez si me gusta 😉

P- entiendo, pero no quiero que vaya a haber problemas con los compañeros

Me levanté de la silla

L- ¡oigan chicos! aysh no finjan que no me estaban viendo ¿les puedo hacer una pregunta? a alguien le causa problemas que este yo asi como estoy?

todos respondieron tímidamente que no

L- y a usted profe- me acerque hasta él, inclinándome de manera sexy, acercando mi cara a la suya, la toalla colgaba de mi cuello, ya no cubría mis pechos que apuntaban al suelo,y con voz de niña buena le pregunté -¿le causa problemas tenerme así?

P- No me provoques así niña que no soy de palo

L- ¿y entonces qué guarda ahí? le pregunté mientras acariciaba su muslo y señalaba su paquete

P- pues es que..

L- ¿no lo hago mal para ser solo una cara bonita verdad? 😉

P- ay hija tu tienes mas que solo la cara bonita

L- entonces que dicen muchachos puedo quedarme en su clase

todos respondieron que sí

P- ok pero entonces debe haber algunas reglas, primero que nada todo debe quedar aquí en la clase, porque si no, habrá problemas, segundo, respeto, no queremos ofender a Liz y que se nos vaya, después de estar solo hombres en esta clase es una maravilla tener a tan hermosa mujer entre nosotros como si estuviera en su casa, y pues no se que piense Liz o porque hace esto.

L- pues no se porque lo hago pero lo disfruto, y siéntanse en la confianza de ustedes también hacerlo, digo no me molesta que me vean ni verlos a ustedes, es como si estuviéramos en la playa todos. además son malisimos disimulando, que no me ven- me acerque a saludar y presentarme de uno en uno y preguntarle sus nombres.


después fui a sacar mi ropa y el profe sacó algo de su mochila

P- Liz quedaste con varios moretones, ten esta crema te ayudará

L- gracias profe

comencé a ponerme en las piernas frotando en círculos mis muslos, se sentía muy bien, era una sensación fresca y relajante, - mmm que rico- dije como si estuviera gimiendo, mientras me frotaba las piernas

P- Niña contrólese que no ve que altera a los muchachos, vea como tiene ya al pobre Carlitos (era mi compañero la clase pasada, el grandote gordito)

L- ay perdón es que se siente delicioso, Carlitos ¿me ayudas a ponerme en la espalda?

Tímidamente Carlitos asintió con la cabeza y se acercó le puse un poco de crema en sus manos y dándole la espalda me incliné para seguir frotando las piernas

sentía sus grandes manos acariciando mi espalda, con mucha delicadeza como si pensara que me fuera a romper, me sentía tan pequeña en manos de él, me frotaba desde los hombros hasta la cintura, me relajaba bastante y cerré mis ojos, hasta que escuche a alguien preguntar si también podría ayudarme

P- Chicos contrólense, ella es la que pone las reglas ahora.

Abrí los ojos y vi a todos alrededor de mí observando bastante agitados, algunos vestidos otros en ropa interior

L- oh cielos bajen esas armas, me siento asaltada con tantas pistolas apuntándome jaja

era muy excitante ver sus caras, me recordaba la cara de mis hermanitos y detrás de ellos el profe, se estaba frotando el pene sobre la ropa

L- ¿que hace profe?

P- perdón no lo pude evitar, pero no soy el único ve como los tienes a todos

Vi que algunos tenían algunas manchas en su ropa, de que se estaban poniendo húmedos

L- los tengo donde quería ¿aun piensan que soy una niña consentida?

los miraba mientras tomaba mi ropa para vestirme

P- ¡que mala! ¿este era tu plan? ¿dejarnos así?

L- ay esta bien ¿les parece si juego un ratito para ustedes?

me subí la tanga hasta la cintura, para meterla bien entre mis nalgas camine hacia una silla y me senté abriendo bien las piernas tome un poco de crema y la deje caer en mis piernas, frotándome mientras las abria mas

L- si tienen algo que hacer háganlo no estaré asi toda la noche

Rápido algunos entendieron a qué me refería, y metieron su mano bajo su ropa para masturbarse.

yo seguía frotando mis piernas abiertas recorriendolas desde los pies hasta mis ingles, me quité la toalla, dejando descubierto mis pechos escucho varias voces diciendo cosas como “uff mamacita”, “que rico” con mis dedos tome un poco de crema y la deje caer sobre mis tetas, para hacer que se imaginaran otra cosa, froté mis pechos con la crema, la sensación era muy placentera solté un leve gemido, mientras levantaba mis pechos con mis manos, presionándolos, y acariciando mis pezones.

Con una mano comencé a acariciar mi cintura, mi pancita y mi abdomen por debajo de la tanguita. me levanté y me puse con las nalgas hacia ellos, tome un poco más de crema y la deje caer sobre mis nalgas dejándolo escurrir un poco y recogiéndolo con mis dedos para untarlo en las nalgas, con firmeza.

escuche cómo caían unas gotas al suelo, no saben como me excita eso pues sabía que alguien se había venido viéndome juguetear, para ese entonces ya me había puesto crema en todo el cuerpo, miré para ver cuantos ya habían terminado, faltaban solo dos, Carlitos y el profe, los demás ya se habían venido, cambie de posición, me puse a gatas delante de ellos, y por debajo de mi tanga comencé a tocarme, frotando la vagina, asegurándome de que ellos pudieran ver los movimientos de mi mano, estaba muy caliente y sin darme cuenta comencé a gemir.

Sentí como un poco de semen caía cerca de mi pierna, mire para ver quien era el que casi me baña en semen, era el profe. estaba fuera de combate y Carlitos seguía bastante tranquilo, viendo atentamente, tocándose por debajo de su pants, me levanté y lo senté en una silla y me acerque a él gimiendole un poco al oído, noté como su respiración se aceleraba, así que decidí acabarlo de una vez por todas, saqué mi mano de mi ropa interior, estaba bastante húmeda y la dirigí lentamente hacia la suya, con la que se estaba masturbando, tome su mano ya moví lentamente para masturbarlo, al sentir mi mano mojada con mis fluidos soltó un suave gemido y rápido saco su pene lanzando chorros de semen por todo el piso, sentí un poco caer en mi muslo.

L- el último, ¿contentos?

P- Cuando llegaste no creí que pasara esto

L- ¿que tal profe? los vencí a todos hasta a usted

me fui a donde estaba mi toalla y me limpié el cuerpo, me baje lentamente la tanga cubriendo mi vagina con mi mano

P- ¿no nos vas a dejar verte ahí?

L- no no no, tal vez otro dia

tome mi ropa interior y sin descubrirme me la puse, traía una falda y me la puse, decidí no ponerme brasier, solo la blusa.

P-oigan cada quien limpie su regadero por favor

L- jajaja sorry por eso, ¿alguien podría acompañarme a mi carro por favor?


después de limpiar me acompañaron dos de mis compañeros, Carlos y Ramón

este último era el que me acompaño el dia anterior. iban ambos en silencio, como idos, parecían apenados.


L- bueno muchas gracias por acompañarme- me despedí de ellos con un beso en la mejilla y me fui a casa.


al llegar subí a mi cuarto, y me recosté en la cama un minuto, me sentía exhausta pero satisfecha, me sentía muy sexy y decidida, comencé a buscar entre mis ropas y saque todas las que no me parecen sexys, tire todo lo que no fuera una tanga o bikini y también los brasieres discretos. me desnude y me recosté en la cama tenía algo pendiente, abrí mis piernas y puse mi mano sobre mi vagina, separándolos comencé a meter dos de mis dedos, estaba muy mojada, y empece a dedearme rápidamente, frenéticamente mientras con la otra mano apretaba mis tetas, ya estaba muy caliente así que rápido fui subiendo hacia el orgasmo, mientras lo hacía recordaba las caras de mis compañeros y como habían terminado por mi, solté un largo gemido.

segundos después escuche mi celular recibir un mensaje, era de Alex

A- ¿estas bien?

L- Alex creo que si tienes razón, si me gusta 😉


apagué mi celular y me dormí con una sonrisa dibujada.