Entre el cielo y el infierno

Hacía un par de días había recibido la noticia de que mis suegros comenzarían las vacaciones este viernes. Estaba promediando el mes de Diciembre y mi novia me había comentado que sus padres se irían este fin de semana y que ella se les agregaría una semana  después debido a que tenía que estudiar para rendir una materia del secundario y poder recibirse, lo que nos dejaba en situación de privilegio y podríamos estar solos todo ese tiempo y coger como es debido.

Antes de las 11 de la mañana ya estaba instalado en la casa de Mari dispuesto a disfrutar de cada centímetro de su cuerpo.
Después de tomar unos mates la cosa se empezó a poner linda y - al estar solos - Mari andada por su casa en ropa interior (cosa que me fascinaba) ...llevando y trayendo su hermoso culito de la cocina al comedor, por lo que redoblando la apuesta, me deshice de mi ropa quedando totalmente desnudo... ella me miraba y mordía su labio inferior calentándome al extremo.
Empezaron los juegos y caricias y en cuestión de minutos estábamos revolcándonos en la cama ...nada mejor que comenzar la mañana con un buen polvo.

Luego de la descarga de "tensiones" procedimos a almorzar en la mesa grande del comedor principal (tenían dos) ...los dos solos por primera vez ... desnudos ... y con un lindo vino de la bodega de mi suegro.
Obviamente la hora de la siesta era un incentivo más para volver a la cama y entonces luego de ayudarla a levantar y limpiar la mesa fuimos a la habitación, no sin antes hacer una "previa" en la cama de sus padres, alimentando el morbo y la excitación ...

Su cama era de esas que debajo tienen otra y se pueden sacar o guardar depende el uso que se le de y estaba ubicada contra la pared, al final de la habitación.
 Prendimos no solo el ventilador de techo sino que trajimos uno de pie de otra habitación: les recuerdo que era Diciembre y las temperaturas estaban alrededor de los 38° ...
Iniciamos nuestra intimidad con un lento y sabroso 69: mi novia sabía cómo mover su lengua ... luego ella me montó cabalgándome un rato y como la ocasión ameritaba una linda comida de culo, le pedí que se pusiera en 4 patas para penetrarla.
Mari se acomodó abriendo un poco sus piernas y arqueando su espalda ... su cola quedaba empinada, a la espera de mi pija ... comencé a pasar mi lengua jugando con su raja y su culo, un ida y vuelta que la hacía ronroñar como a una gata ... sabía que le encantaba eso.
Me interesé en ir poniendo más pasión en la entrada de su hoyito ... ella se retorcía de placer ... apunté e hice el primer intento, pero no quiso entrar ... volví a intentar y calzó la cabeza ... su culo siempre resultaba estrecho al principio, era cuestión de paciencia y saliva.
Estaba en otra sesión de lengua intentando dilatar más su culo cuando fue entonces que escuchamos un ruido, como que alguien quería abrir la puerta principal. Seguí con mi trabajo lingual cuando ahora sí se sintió que la puerta se cerrada y entonces escuchamos una voz que dijo: " ... hola..!! no hay nadie en esta casa ?? ..."

Era la inconfundible voz de Julieta, su hermana ... no la esperábamos !! ... por lo que rápidamente me zambullí a los pies de la cama, Mari me tapó con las sábanas haciendo bulto y corriéndome contra el espacio que quedaba entre esta y la pared ... me quedé inmóvil ... no se me ocurría ninguna idea par zafar de la situación si llegaba a descubrirnos: en realidad, los dos desnudos en la cama no dejaba muchas chances de inventar algo ...

Julieta era un año mayor que mi novia, estaba a punto de cumplir los 19, y estudiaba Medicina en Rosario.
Era muy linda: piel trigueña, ojos verdes, cabello castaño casi rubio, buenas tetas, y si bien no tenía las piernas de su hermana, se defendía bastante... lo que se dice: un manjar.

Entró a la pieza y se acercó a saludar a mi novia, comentándole que había perdido el colectivo el día anterior y por eso no había podido llegar para irse con sus padres, por lo que ahora se iría con ella.
Mari permanecía tapada con la sábana y no articulaba movimiento o palabra alguna... Julieta empezó a desarmar el bolso de viaje y continuaba hablándole a mi novia, quien se había acomodado de costado, dando la espalda a la pared.
Yo permanecía ahí abajo, transpirado, muerto de calor e inundado de olor a sexo y a lo que se les ocurra ... y - sacando mi diablo interior - comencé a acariciar la cola de Mari, pasando mis dedos por la raya e internándolos en su conchita todavía húmeda.
Ella entendió el juego y abrió un poco sus piernas permitiendo a mis dedos jugar, llenándose de jugo ... los llevaba a la boca, los humedecía con mi saliva y volvía a deslizarlos y meterlos de a poco ... 
Julieta dijo que iba al baño y ya volvía ... Mari quiso ponerse la bombacha - que no encontraba- y aproveché y me zambullí entre sus piernas, metiendole la lengua y mordiendo su clítoris.
Mi novia intentaba sacarme pero a la vez me hundía la cabeza en su concha sin dejarme respirar, y antes que volviese su hermana me retiré, metiéndome de nuevo bajo las sábanas y contra la pared ... ella aprovechó y acomodó su ropa interior.

Mari le dijo a Julieta que se iba a dar una ducha rápida para sacarse el calor a lo que ésta contestó que luego lo haría ella.
Mi novia se fue al baño y yo - apretado entre la cama y la pared- intenté quedarme lo más quieto que pudiese. En eso recordé que mi ropa estaba a los pies de la cama !!! ... corriendo de a poco las sábanas con mis dedos traté de obtener una visión que me permitiera ver por dónde andaba mi ropa, pero lo que encontraron mis ojos fue a Julieta sacándose la ropa ...
Hice un hueco con los pliegues de la sábana y me dediqué a mirar ... era increíble ... mi cuñada estaba desnudándose ante mí ... parecía una película en cámara lenta ... se soltó el cabello y luego de sacarse la musculosa desprendió su corpiño,  y aparecieron esos pecho hermosos, en forma de copa, con el pezón apuntando hacia arriba ...
Mi pija explotaba, casi que me dolía de la hinchazón que tenía ... y ella tocaba sus tetas suavemente, rascando con sus uñas sus pezones ... manoteé mi verga y empecé a pajearme despacio intentando no se diera cuenta de mi presencia, pero ella estaba abstraída por acariciar su cuerpo ... ahí estaba mi cuñada !! por Dios ... gracias por regalarme este momento !!! ...
No duró mucho "nuestra" intimidad, mi novia apareció en la puerta, tapada con la toalla, diciéndole a su hermana que podía usar el baño, que tuviese cuidado de no resbalarse.

Julieta tomó su toallón y se fue ... ni bien sentí el ruido del agua caer salté de la cama, tomé a Mari de los brazos y la hice poner de frente a la pared dándome la espalda ... bajé y mojé su concha con la lengua y pegándole para que abriese las piernas metí mi verga hasta el fondo, de una, sin darle ninguna explicación ...
La cogí a lo salvaje con un meta y saque frenético, se sentía el golpe de mis huevos contra sus nalgas ... y acabé enseguida ... largué leche como hacía rato no o hacía ...
Mari no entendía nada, pero le encantó y me lo agradeció bajando y limpiando con su boca los restos de leche que quedaban en mi pija ... fue un polvo maravilloso ... "compartido" por ambas hermanas.

Me vestí rápidamente y salí hacia la sala principal, quedándome allí hasta que Julieta apareció ya bañada y cambiada... me saludó con un beso y un abrazo - algo poco habitual en ella- ... olía muy rico ... y guiñándome un ojo me dijo: " ... cuñadito, hace mucho que viniste ? ..."

Con Mari cortamos a los pocos meses ... la vida me permitió - unos meses después -"conocer" mas  a Julieta, con quien terminamos siendo novios durante 3 años.

El cielo y el infierno habían coincidido en una habitación.