Mi prima Martha me invitó a estárme unos días en su casa, y aproveché mi temporáda vacacionál para estár con tranquilidád.... Su esposo Daniél es mecánico, un hombre de aspécto rúdo, de álma machísta, tiéne la costúmbre de que lo que él díga es ley para su família.. Lo buéno es que trabajába la mayór párte del tiémpo.... y cási ní nos veríamos... Los priméros días todo pasó en compléta cálma, una mañána, bajó un póco más tempráno, yo tomába mi café, y en el moménto en que entró a la cocína, le serví el suyo, y lo púse frénte a él, se me quedó viéndo, y me comentó que Martha núnca le ofreció úno siquiéra, me sonreí amáble, y le díje que lo disfrutára entónces... Désde ése moménto, cambió su tráto sólo conmígo, yá que él odiába tódo lo qué éra de párte de Martha, suegros, cuñádos, a la família compléta, hásta a los póbres perros Con el páso de los días, le gustába platicár conmígo en las mañanas frénte a su café, y hásta comprába pan de dúlce para los dos, Una ocasión, Martha me díjo que subiría a hablárle a Daniél para cenár, me ofrecí a hacérlo, se sonrió nuy pícara, y me pidió tocár ántes de entrár, y qué le dijéra qué éra Yo... Subí pensándo porqué me pidió éso, al llamár a la puérta, no contestó .... Asumí que dormiría, y abrí un póco, metí la cabéza, y no lo ví en su cama, caminé hacía adéntro, y lo descubrí sentádo frénte al monitor de la cómpu.... Mirándo pórno, y se masturbába... Sín querér recordé lo que algúna véz Martha platicó con sus amigas en púntos ébrios... Y la curiósidad me hízo quedárme pára contemplárlo... Y quiéro suponér que éra mi moménto de suérte... Yá que en esos moméntos, una treménda corrída de sémen lo sacudió, y el suelo fué quién detúvo ése torrénte líquido...
tomó lo que quedába del résto de ellos, y los llevó a su bóca... Una descárga eléctrica me traspasó el cuérpo, y regresé rápido a la puérta, llamé fuérte, y grité sér Yo... Pása, me díjo, abrí un póco, y le pedí que se bajára a cenár... Me costó un esfuérzo álto estár en cálma, pero él yá tenía la rópa en su lugár... Los días restántes de la semána se me acelerába el deséo cuándo tomámos el café, mis ojos se caían en su éntrepierna, pero no éra fácil manifestárlo, demónios... Pero encontré una ligéra solución, cuándo me levantába, procurába mostrár ciértos descuídos, abriéndo más las piérnas, o en el moménto de dárle su cafe, pasába sóbre de él, estirándome para tomár la azúcar, o una cuchára, y lo embarrába de mí cuérpo un póco, él se ponía nervióso, pero felíz.... La semílla íba creciéndo, en él sín dúda... Por mi párte, duránte vários días, tenía ésa imágen en la cabéza, y me llevába a tenér qué buscár desahogárme encerráda en mi recámara....
En una ocasión, Martha íba a salír con sus padres, se llevaría a la família, preferí estár en casa, y me púse en fáchas para limpiárla Ése día, toda una casualidad, Daniél llegó muy tempráno, le ofrecí de comér, y me díjo que más tárde mejór... y sín perdér su costúmbre, subió a su recámara.. Continué limpiándo el jardín.. ... Y pasádos algúnos minútos, descubrí sin querér a Daniél, qué me observába désde la ventána de la sála, lo estúve viéndo bién, con cálma... Con la cabéza agacháda..... Tenía los pantalónes al pisó, y se masturbába con tánta lujúria.... Sín quitár la vísta de mi traséro y de mi éntrepierna, y opté por empinárme aún más....
A partír de ése día, sus pláticas éran póco más pícaras, y yo le seguía el juégo de iguál fórma.. Al iniciár la siguiénte semána, mis descuídos y arrimónes aumentáron de su nivél, mis tetas yá no sólo chocában en sus brázos, sinó en los hombros y su cabéza... Aún no dában en la cara..... de moménto.. Cuándo se salía a trabajár, priméro salía su erección, después Él... Jaja.. Y un día me dí cuénta de qué siémpre bajába a la cocina por un vaso con agua en la madrugáda, y se me ocurrió hacérle travesúritas...... Entónces fué qué bajé ántes de las 3, y me púse a limpiár la cocína, con tán sólo una playéra puésta, acomodé una charóla de alumínio, para podér vér su refléjo, al cábo de un ráto, escuché pásos descálzos por la escaléra, en efécto, éra Daniél, qué entró a la cocína en calzón, me observó un póco, y se giró de vuélta a su cuárto, buéno, no húbo acercamiénto, pero Sí sucedió álgo... Simplemente, nos vímos mejór... Luégo en nuéstro moménto del café, hacía brómas cómo de costúmbre, pero yá no en dóble sentído, trató de ponér un ligéro múro... Pero sus ojos me acariciában compléta con deséo... Y no "quería" levantárse de su lugár, por tenér una erección bárbara.. Y lo obligába a parárse para corrérlo al trabájo, divirtiéndome con vér su verga paradísima y en ciérta fórma, se llevó mi imágen de las nalgas.....
Pero no se lo híce a diário, quería que se viéra naturál y espontáneo, así qué, por 3 días más, "me porté bién".... Igual no hubo ní arrimónes ní descuídos, tán sólo el café.. Aúnque de párte suya, túvo a bién dárme repegónes éntre mis nalgas fugásmente, y lo espiába cuándo se metía a su cuárto en cuánto llegába.... El jueves por la noche, mi prima preparába lo qué sería la sorprésa para la comída del cúmple de Daniél para el sábado, la mandé a dormír, miéntras que yo avanzába con cuidár la preparación de la mísma... Cási dában las 3, y me alisté para recibír a Daniél, y entónces entró a la cocína... Se me quedó viéndo, y me giré a saludárlo... Se sorprendió mucho que yo estuviéra cómo si náda pasára, respondió el salúdo, y le serví su agua qué saqué del refrigeradór, y me púse a platicár con él miéntras le dába la espálda y revisába lo de la hornílla, se recargó en la mesa sín sentárse, me recorría con toda cálma en todo mi cuérpo, en muy póco tiémpo se le manifestába bájo el calzón, una verga más paráda qué un árbol canadiénse... Apagué la hornílla, y me despedí de él, subiéndo de prísa a mi cuárto....
El sábado fué un día muy ajetreádo, tódo salió de maravílla, y al finál, el cansáncio nos atrapó, y dormímos cómo bendítos... Sín preocupaciónes... Por la mañana del domíngo, me levanté y me púse a limpiár mi cuárto, llamáron a la puérta, pero no súpe qué respondér, pués tenémos todos la mala costúmbre de pasárnos trás tocár, y tán sólo escuché: <Qué Cuuul...pa tiéne el sol de su lúz... >. Refiriéndose a mi culo... Éra Daniél, qué se pasó y cerró la puérta trás de sí... Tán sólo me sonreí y lo corrí del cuárto éntre brómas, y me quedé así en 4 empináda.... Por no podérme levantár de prísa....
Duránte la siguiénte semána, me púse a arreglár mi cuárto pára entregarlo y estár tranquíla, pués yá estába a días de volvér a mi casa... Aproveché la "hora del café" pára agradecérle a Daniél su hospitalidád, y sus cámbios positívos, y ése día se fué un póco tríste... Al iguál que tampóco húbo náda de mi párte... Y ésa mísma noche, me alistába a dormír, después de habér estádo viéndo una péli , yá cási éra la média noche, llegué a mi cuárto, y me senté un ráto sóbre la cama, escuchába álgo de música, y boté mi calzádo léjos de mí... Me pareció escuchár el sonído cuándo te retíras la rópa, pero no le dí mucha importáncia, bajé un ládo de las cobíjas, y alisté mi almoháda, cuando escuché decír: <Te voy a cogér bién Ríco... Me tiénes muy caliénte mamasita.... >. ... Me giré y ahí estába Daniél déntro de mi cuárto, complétamente desnúdo,
Me empujó y lo empujó hásta el tópe de su púbis, caímos tendídos en la cama, cómo no úso panty, fué bastánte fácil qué llegára sín probléma, me cogió así de misionéro, lanzándo sus cremósos líquidos tán déntro de mí, me jaló hacía atrás, y me empinó al fílo de la cama, bombeába con súma fuérza y así continuó hásta repetír un lecházo iguál... Cambiámos tántas posiciónes, y en cáda una, intentába dejárme sus miéles, y aúnque no lo lográba, se sentía deliciósa la sensación de que "pasába"..... Después, íba intercambiándo a hacér oráles, quedámos en un 69 várias véces, perdí la cuénta de habér tragádo lechita, y las horas volában, ámbos gemíamos y nos costába trabajo dominár el siléncio, y éntre sudóres, los líquidos vertídos qué escurrían bajándo éntre los dos... Éra una súper méga sensación y más por tenér que callárnos uno al ótro sín lográrlo tánto, y la enórme sensación de podér sér descubiértos hacía más exitánte el encuéntro....
Daniél me confesó qué tenía por lo ménos 10 años de no tenér intimidád con Martha, buscó qué le aceptára sér su amánte, pero me negué a cumplírle ésa petición.... Cuándo me despedí de mi prima Martha, me díjo álgo que me cayó cómo bálde con hielos... <Glory, cuénta conqué Daniel puéda visitárte cuándo lo deseén.... >... Wow.... Qué frialdád, reálmente estába ánte una mujer de hiélo........ Ahóra se me caía la cúlpa.... Aúnque no terminába de entendérla..... Pero qué Ríco lo sucedído..
tomó lo que quedába del résto de ellos, y los llevó a su bóca... Una descárga eléctrica me traspasó el cuérpo, y regresé rápido a la puérta, llamé fuérte, y grité sér Yo... Pása, me díjo, abrí un póco, y le pedí que se bajára a cenár... Me costó un esfuérzo álto estár en cálma, pero él yá tenía la rópa en su lugár... Los días restántes de la semána se me acelerába el deséo cuándo tomámos el café, mis ojos se caían en su éntrepierna, pero no éra fácil manifestárlo, demónios... Pero encontré una ligéra solución, cuándo me levantába, procurába mostrár ciértos descuídos, abriéndo más las piérnas, o en el moménto de dárle su cafe, pasába sóbre de él, estirándome para tomár la azúcar, o una cuchára, y lo embarrába de mí cuérpo un póco, él se ponía nervióso, pero felíz.... La semílla íba creciéndo, en él sín dúda... Por mi párte, duránte vários días, tenía ésa imágen en la cabéza, y me llevába a tenér qué buscár desahogárme encerráda en mi recámara....
En una ocasión, Martha íba a salír con sus padres, se llevaría a la família, preferí estár en casa, y me púse en fáchas para limpiárla Ése día, toda una casualidad, Daniél llegó muy tempráno, le ofrecí de comér, y me díjo que más tárde mejór... y sín perdér su costúmbre, subió a su recámara.. Continué limpiándo el jardín.. ... Y pasádos algúnos minútos, descubrí sin querér a Daniél, qué me observába désde la ventána de la sála, lo estúve viéndo bién, con cálma... Con la cabéza agacháda..... Tenía los pantalónes al pisó, y se masturbába con tánta lujúria.... Sín quitár la vísta de mi traséro y de mi éntrepierna, y opté por empinárme aún más....
A partír de ése día, sus pláticas éran póco más pícaras, y yo le seguía el juégo de iguál fórma.. Al iniciár la siguiénte semána, mis descuídos y arrimónes aumentáron de su nivél, mis tetas yá no sólo chocában en sus brázos, sinó en los hombros y su cabéza... Aún no dában en la cara..... de moménto.. Cuándo se salía a trabajár, priméro salía su erección, después Él... Jaja.. Y un día me dí cuénta de qué siémpre bajába a la cocina por un vaso con agua en la madrugáda, y se me ocurrió hacérle travesúritas...... Entónces fué qué bajé ántes de las 3, y me púse a limpiár la cocína, con tán sólo una playéra puésta, acomodé una charóla de alumínio, para podér vér su refléjo, al cábo de un ráto, escuché pásos descálzos por la escaléra, en efécto, éra Daniél, qué entró a la cocína en calzón, me observó un póco, y se giró de vuélta a su cuárto, buéno, no húbo acercamiénto, pero Sí sucedió álgo... Simplemente, nos vímos mejór... Luégo en nuéstro moménto del café, hacía brómas cómo de costúmbre, pero yá no en dóble sentído, trató de ponér un ligéro múro... Pero sus ojos me acariciában compléta con deséo... Y no "quería" levantárse de su lugár, por tenér una erección bárbara.. Y lo obligába a parárse para corrérlo al trabájo, divirtiéndome con vér su verga paradísima y en ciérta fórma, se llevó mi imágen de las nalgas.....
Pero no se lo híce a diário, quería que se viéra naturál y espontáneo, así qué, por 3 días más, "me porté bién".... Igual no hubo ní arrimónes ní descuídos, tán sólo el café.. Aúnque de párte suya, túvo a bién dárme repegónes éntre mis nalgas fugásmente, y lo espiába cuándo se metía a su cuárto en cuánto llegába.... El jueves por la noche, mi prima preparába lo qué sería la sorprésa para la comída del cúmple de Daniél para el sábado, la mandé a dormír, miéntras que yo avanzába con cuidár la preparación de la mísma... Cási dában las 3, y me alisté para recibír a Daniél, y entónces entró a la cocína... Se me quedó viéndo, y me giré a saludárlo... Se sorprendió mucho que yo estuviéra cómo si náda pasára, respondió el salúdo, y le serví su agua qué saqué del refrigeradór, y me púse a platicár con él miéntras le dába la espálda y revisába lo de la hornílla, se recargó en la mesa sín sentárse, me recorría con toda cálma en todo mi cuérpo, en muy póco tiémpo se le manifestába bájo el calzón, una verga más paráda qué un árbol canadiénse... Apagué la hornílla, y me despedí de él, subiéndo de prísa a mi cuárto....
El sábado fué un día muy ajetreádo, tódo salió de maravílla, y al finál, el cansáncio nos atrapó, y dormímos cómo bendítos... Sín preocupaciónes... Por la mañana del domíngo, me levanté y me púse a limpiár mi cuárto, llamáron a la puérta, pero no súpe qué respondér, pués tenémos todos la mala costúmbre de pasárnos trás tocár, y tán sólo escuché: <Qué Cuuul...pa tiéne el sol de su lúz... >. Refiriéndose a mi culo... Éra Daniél, qué se pasó y cerró la puérta trás de sí... Tán sólo me sonreí y lo corrí del cuárto éntre brómas, y me quedé así en 4 empináda.... Por no podérme levantár de prísa....
Duránte la siguiénte semána, me púse a arreglár mi cuárto pára entregarlo y estár tranquíla, pués yá estába a días de volvér a mi casa... Aproveché la "hora del café" pára agradecérle a Daniél su hospitalidád, y sus cámbios positívos, y ése día se fué un póco tríste... Al iguál que tampóco húbo náda de mi párte... Y ésa mísma noche, me alistába a dormír, después de habér estádo viéndo una péli , yá cási éra la média noche, llegué a mi cuárto, y me senté un ráto sóbre la cama, escuchába álgo de música, y boté mi calzádo léjos de mí... Me pareció escuchár el sonído cuándo te retíras la rópa, pero no le dí mucha importáncia, bajé un ládo de las cobíjas, y alisté mi almoháda, cuando escuché decír: <Te voy a cogér bién Ríco... Me tiénes muy caliénte mamasita.... >. ... Me giré y ahí estába Daniél déntro de mi cuárto, complétamente desnúdo,
Me empujó y lo empujó hásta el tópe de su púbis, caímos tendídos en la cama, cómo no úso panty, fué bastánte fácil qué llegára sín probléma, me cogió así de misionéro, lanzándo sus cremósos líquidos tán déntro de mí, me jaló hacía atrás, y me empinó al fílo de la cama, bombeába con súma fuérza y así continuó hásta repetír un lecházo iguál... Cambiámos tántas posiciónes, y en cáda una, intentába dejárme sus miéles, y aúnque no lo lográba, se sentía deliciósa la sensación de que "pasába"..... Después, íba intercambiándo a hacér oráles, quedámos en un 69 várias véces, perdí la cuénta de habér tragádo lechita, y las horas volában, ámbos gemíamos y nos costába trabajo dominár el siléncio, y éntre sudóres, los líquidos vertídos qué escurrían bajándo éntre los dos... Éra una súper méga sensación y más por tenér que callárnos uno al ótro sín lográrlo tánto, y la enórme sensación de podér sér descubiértos hacía más exitánte el encuéntro....
Daniél me confesó qué tenía por lo ménos 10 años de no tenér intimidád con Martha, buscó qué le aceptára sér su amánte, pero me negué a cumplírle ésa petición.... Cuándo me despedí de mi prima Martha, me díjo álgo que me cayó cómo bálde con hielos... <Glory, cuénta conqué Daniel puéda visitárte cuándo lo deseén.... >... Wow.... Qué frialdád, reálmente estába ánte una mujer de hiélo........ Ahóra se me caía la cúlpa.... Aúnque no terminába de entendérla..... Pero qué Ríco lo sucedído..
5 comentarios - La mujer de hielo... Ní
gracias por pasárte prófe ...💋💋💋💋💋💋💋💋
Gracias pp..... por lo qué me díces.... 💋💋 chavál precóz.... estás aquí désde los 16 años? wohhw...