A los pocos días, Belinda la volvió a llamar a Annabella y lainvitó a almorzar en un campito a unas cuadras de la casa de Estela, en Olivoshay mucho verde. Mimosa, Beli le dijo que se pusiera muy linda que la pasaba abuscar y comerían sandwichitos ahí en el campo. Excitada, recordando la granexperiencia de su primera vez, Anna se puso blusa y pollera blanca, tacos, semaquilló y se fue con Belinda, también muy bonita de vestido y maquillada, conuna canasta con sandwichitos, gaseosa, postre y su cartera preparada para darlea la entonces rubia.
Llegaron y Belinda estacionó el auto detrás de unos árbolesfrondosos, donde nadie las podría ver. Las dos bajaron y fueron al asientotrasero del auto, donde muy mimosas almorzaron sandwichitos. Mientras comían,Beli le decía cosas dulces, la besaba en la cara y la mimaba. Y luego delpostre, las dos alimentaditas y muy acarameladitas se empezaron a besarse, ahablar suavecito, dulce, diciéndose piropos. Hasta que Belinda no pudo más yempezó a calentarse y a soltar porquerías. Annabella fue entrando en clima ysubiendo de calentura. Beli sacó un polvo de su cartera y se lo hizo oler aAnna, que así se puso mimosa y se excitó. El juego dio resultado, porqueAnnabella se puso loca y le quitó el vestido a Belinda, que a su vez ledesabrochó la blusa y la manoseó para que se sacara la pollera. Las dosquedaron en corpiño y bombacha, Beli sacó crema y le pasó. Excitada, Anna lequitó el corpiño y se sacó el suyo. Belinda explotó, se puso en bolas yAnnabella se quitó suavecito su bombacha.
Y ahí nomás, Belinda desenfrenó su locura: la sentó en elmedio del asiento, la hizo abrirse depiernas bien abierta, le hizo cerrar los ojos, abrió de nuevo la cartera, sacóun salchichón y se lo puso por la vagina. Le exprimió las tetas, se le revolcóy la cepilló con furia y salvajismo, mientras Anna disfrutaba y la puteaba paraexcitarla más. Loca por el polvo, Anna gemía de lo lindo y pedía más y más. YBeli, que había aspirado también, no paró y le dio varias veces hasta que nodio más. Luego durmieron un ratito, repusieron fuerzas y Belinda la llevó a sucasa, despidiéndose de ella con un besote en la boca. Annabella quedó chocha yse masturbó varios días seguidos antes de volver a hacer el amor con su amiga.Genial Belinda. Y Anna también.
Llegaron y Belinda estacionó el auto detrás de unos árbolesfrondosos, donde nadie las podría ver. Las dos bajaron y fueron al asientotrasero del auto, donde muy mimosas almorzaron sandwichitos. Mientras comían,Beli le decía cosas dulces, la besaba en la cara y la mimaba. Y luego delpostre, las dos alimentaditas y muy acarameladitas se empezaron a besarse, ahablar suavecito, dulce, diciéndose piropos. Hasta que Belinda no pudo más yempezó a calentarse y a soltar porquerías. Annabella fue entrando en clima ysubiendo de calentura. Beli sacó un polvo de su cartera y se lo hizo oler aAnna, que así se puso mimosa y se excitó. El juego dio resultado, porqueAnnabella se puso loca y le quitó el vestido a Belinda, que a su vez ledesabrochó la blusa y la manoseó para que se sacara la pollera. Las dosquedaron en corpiño y bombacha, Beli sacó crema y le pasó. Excitada, Anna lequitó el corpiño y se sacó el suyo. Belinda explotó, se puso en bolas yAnnabella se quitó suavecito su bombacha.
Y ahí nomás, Belinda desenfrenó su locura: la sentó en elmedio del asiento, la hizo abrirse depiernas bien abierta, le hizo cerrar los ojos, abrió de nuevo la cartera, sacóun salchichón y se lo puso por la vagina. Le exprimió las tetas, se le revolcóy la cepilló con furia y salvajismo, mientras Anna disfrutaba y la puteaba paraexcitarla más. Loca por el polvo, Anna gemía de lo lindo y pedía más y más. YBeli, que había aspirado también, no paró y le dio varias veces hasta que nodio más. Luego durmieron un ratito, repusieron fuerzas y Belinda la llevó a sucasa, despidiéndose de ella con un besote en la boca. Annabella quedó chocha yse masturbó varios días seguidos antes de volver a hacer el amor con su amiga.Genial Belinda. Y Anna también.
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