Hacía cuatro meses que había regresado a Argentina y sólo un mes que vivía en Capital, así que todavía estaba acomodándome en mi nuevo depto y barrio. Si bien la mayoría de mis amigas y mi hermana Cami seguían en La Plata, tenía algunas que vivían también acá.
Era sábado y estaba tirada en la cama y chateando por whatsapp con una de mis amigas, para ver qué hacíamos a la noche.
- Euge qué hacemos hoy?? A dónde vamos?
- Puti vos siempre de joda, que raro! Jaja. Vamos a ***** ?
- Dale, pero tenes a tu amigo para la entrada al vip?
- Obvio, ahora le escribo igual para que nos deje entrar. Sólo nosotras dos? Quién más se suma?
- No sé! Ahora le pregunte a Lara y María
La conversación se vió interrumpida justo a las 15 hs cuando sentí que llamaban despacito a la puerta del depto. Me levanté de la cama y fui a la puerta. Era mi vecino.
Ni hola me dijo. "Mi novia salió un ratito, fue a la casa de la mamá pero vuelve en una hora como máximo", me dijo hablando rápido como para no perder el tiempo.
Yo lo miré con cara seria y me dí vuelta dejando la puerta abierta, claramente invitándolo a pasar. "Vos qué te pensás que yo soy tu puta y podés venir a cogerme cuando quieras?", le dije en tono de enojada. Mi vecino quedó helado, es que sólo nos habíamos visto una sola vez más esa semana (sólo para hacerle un pete) y después no nos habíamos vuelto a ver.
"Ah perdón, no... pensé que tenías ganas y quise aprovechar", me dijo tímidamente con la cara toda roja.
"Mirá ésto es así, yo así como estoy con vos, estoy con otros flacos, es obvio eso. Así que voy a ser yo la que elige cuándo se coge y cuándo no. Vos me avisás cuándo estás solo y yo decido. Estamos?"
"Bueno, pero por eso te estoy diciendo que teníamos una hora, ahora 5 minutos menos porque no parás de hablar". Y sí, él tenía razón, no era que no me gustara que viniese a garcharme o pedirme que se la chupe, pero quería que quede claro que mandaba yo.
De todas formas su respuesta me había gustado, si bien sabía que esa noche segurísimo iba a tener sexo, un rapidín a la hora de la siesta no venía nada mal. Ese día andaba particularmente caliente.
Fue entonces cuando lo agarré de la remera y tirándolo hacia mí le comí la boca. "En una hora te saco dos", le dije con cara y voz de puta mientras no paraba de chaparlo y frotarle la pija por afuera del pantalón. Enseguida se puso toda dura y comencé con lo mio. Me agaché, le bajé el pantalón y los calzoncillos y me quedé contemplando la hermosa pija toda parada.
Como sabia que no había mucho tiempo, no me detuve tanto en la previa, no me detuve a acariciarla y lamerla suavemente como siempre hago, como un heladito. Fui directo a lo bueno y empecé a chuparla bien fuerte, después de todo tenía que cumplir con mi palabra de hacerlo acabar dos veces.
Con una mano en su pene y mi boca succionándole la cabecita, empecé a darle a todo ritmo. Cris empezó a gemir, la situación era muy excitante porque él seguía parado ahí al lado de la puerta con la remera puesta y el pantalón abajo, y yo de rodillas chupándola con casi desesperación.
Cris me agarró del pelo y empezó a empujar fuerte para hacérmela comer toda. De a poquito sus embestidas hacían que su pija entrara más y más en mi boca, hasta que finalmente de un movimiento absolutamente violento, chocó mi cara contra su abdomen: me la había metido toda adentro. Ahí la dejó unos segundos, aunque a mí me pareció una eternidad porque no podía respirar.
Finalmente dejó de hacer presión contra su abdomen, la saqué de mi boca y respiré todo lo que pude empezando a toser un poco. Enseguida volvió a agarrarme y hacerme lo mismo, sólo que esta vez la dejó aún más rato. Yo empecé a toser de nuevo con su pija adentro, haciendo presión hacia afuera porque no me dejaba respirar, pero él tenía mucho más fuerza que yo y no me permitía salirme de la situación.
Una mezcla de desesperación y absoluta calentura me invadieron. Me sentía tremendamente puta haciéndome eso, pero al mismo tiempo realmente, no me dejaba respirar. Por mis ojos empezaron a caer una lágrimas al mismo tiempo que empecé a toser tanto que le golpee las piernas con mis manos para que me la sacara. Recién ahí me dejo respirar.
"Viniste con todo", le dije. Era nuestro tercer encuentro (el primero lo pueden leer ACÁ, el segundo como había dicho fue sólo un pete al pasar) y se ponían cada vez más calientes, violentos y excitantes. Tardé unos minutos en recuperarme. "Estás bien?", me preguntó. Aún respirarando fuerte y con los ojos todos llorozos, le dije que sí. "Entonces vení para acá", me dijo agarrándome fuerte y metiéndola de nuevo. Para colmo esta vez no la metíó de a poco, de una solo bocado me la hacia comer.
Me lo hizo un par de veces más hasta que no pude más. Tenía lágrimas en los ojos de tanto toser y atragantarme. Así que volví a lo mío, clavé mis ojos en los suyos y empecé a chupársela de nuevo a full, cada vez más rápido.
"Ay Dios, a este ritmo no te aguanto nada", me dijo con respiración entrecortada mientras yo seguía mirándolo y ahora pajeándolo a dos manos. "Es la idea bebé", le dije con voz de putita y aún respirando con dificultad de la cogida por la boca que me había pegado. "Quiero que me des mucha lechita, sí? Hay mucha bebé? Hay mucha?", empecé a decirle pajeándolo más y más fuerte.
Para hacerlo sufrir un poquito, bajé un poco el ritmo, siendo yo esta vez la que me comiera la pija de un bocado. La dejé toda adentro de mi boca y la saqué. Así un par de veces, sabía que eso lo volvía loco pero sería más difícil que me acabe de esa forma.
Tras un par de veces empecé a sucionarla de nuevo pasando la lengua por toda la cabeza. Luego de nuevo lo empecé a pajear pero esta vez con mi boca abierta y la cabeza del pene apoyada en mi lengua.
"Qué hora es?", le dije mientras seguia la paja a todo ritmo. Cris se agachó un momento a buscar el celular del pantalón que tenia por las rodillas y miró la hora. "15.17 hs", habían pasado ya 17 minutos. Aceleré entonces el ritmo de la paja pidiéndole casi a gritos que me la diera de tomar.
Fue cuestión de unos segundos para que el primer chorro de leche entrara en mi boca, seguidos de otros tres que me llenaron la boca casi por completo. Era increíble la cantidad de semen que había salido. Claramente no la estaba poniendo mucho. Mientras seguía pajeándolo y la leche seguía saliendo, Cris gemía y gozaba sin dejar de mirarme, de mirar cómo estaba saliendo toda esa leche de su pene llenándome la boca.
La pija lentamente comenzó a perder dureza, así que la saqué de mi boca y le mostré todo lo que me había . Ahora venia la mejor parte porque empecé a saborear su semen haciendo burbujitas y jugando con mi lengua. Lamentablemente un poco se me terminó cayendo al piso, pero lo que quedó me lo tragué sin dificultad, siempre mirándolo a los ojos.
Yo volaba literalmente de la calentura, necesitaba esa pija dentro mío, necesitaba urgente un orgasmo para calmarme un poco. Para colmo, teníamos el tiempo a contra reloj así que traté de no ponerlo nervioso para que se la parara de nuevo. Lo ayudé sacándome la poca ropa que tenia puesta (como les dije, en mi depto suelo andar semidesnuda) y le agarré la mano para que me frotara la concha.
Los dos parados aún al lado de la puerta, con mis lolas pegadas a su pecho y su mano acariciándome la concha y la boca en un pezón, empecé a gemir suavemente a medida que subia mi calentura, que ya se por sí, estaba por las nubes.
Luego le agarré la mano y lo llevé hasta la cama mientras recién me daba cuenta que el celular que había dejado tirado en el sommier no paraba de sonar con notificaciones. "Debe ser Euge que no le contesté más".
Cris me tiró en la cama, me abrió las piernas y comenzó a lamerme la concha. Estaba mojadísima y sedienta de pija. No daba más. "Me la chupás y ahora soy yo la que te acabo al toque, no puedo más, necesito acabar ya". Le dije.
Y realmente fue así, porque fue cuestión de empezar a succionarme el clítoris para que un tremendo orgasmo me llegara. Empecé a gritar y retorcerme lo que podía, Cris seguía chupándomela mientras yo acababa y gozaba a más no poder. Para colmo no me dejaba ni cerrar las piernas, me las mantenía abierta con su lengua trabajando a full.
No sé cuánto duró ese orgasmo, sólo sé que cerré los ojos mientras un escalofrío me invadía el cuerpo entero, sintiendo sólo cómo la lengua de mi chico me recorría la concha entera. Que me la sigan chupando mientras acababa me hacía volar la mente.
"Te dije que no iba a aguantar, no podía más", le dije sonriendo y con la cara toda roja del calor que me había agarrado. Cris no me contestó, seguía chupándola pero ahora con dos dedos que entraban y salían de mi concha. Yo seguía gimiendo y el celular seguía sonando, ahora con llamadas.
Mientras mi vecino me la chupaba, agarré el celu, entré al whatsapp y me encontré con varios mjes y llamadas de Euge (es intensa) sobre qué hacíamos esta noche, que estaba esperándome a que le dijera si éramos sólo nosotras o no para avisarle a su amigo del vip. Es que aparentemente tenían que entregar la lista de personas.
Leí los mjes así nomás como pude mientras gozaba del sexo oral de Cris que seguía metiendo y sacando los dedos. De repente sonó el celu de nuevo con una llamada, y para que no jodiera más, la atendí.
- Nena qué hacés?? Mi amigo me está esperando que tiene que entregar la lista ya!
- Puti, no sé, no les pregunté a las chicas Yo apenas podía hablar, hablaba entrecortada, agitada y respiraba intensamente.
- Qué te pasa que estás así? Boluda jodeme te la están poniendo???
- Casi. Estamos en eso. Le dije como pude, no podía ni concentrarme.
En ese momento Cris estaba golpéandome la conchita suavemente con la cabeza de su pija, pidiendo permiso para penetrarme. El tema que es no se había puesto forro, no sé por qué, aunque imagino que quería cogerme así, por eso no me la había metido.
A esa altura, con la calentura que tenia le hice un gesto de que tenia permiso para meterla. Cris entonces me penetró y me fue imposible no gemir mientras seguía con el teléfono en el oído y Euge diciéndome cosas que ya no entendía. Mi amiga empezó a reírse mal mientras me decía de todo, básicamente: puta. Pero con onda, éramos amigas de hace años y las dos teníamos sexo grupal muy seguido.
Parece que a Cris le calentó mucho esa situación porque empezó a embestirme violentamente, mientras yo gemía y gritaba cada vez más fuerte.
"Después escribo", le dije como pude a mi amiga mientras seguía gimiendo y tiré el celu al otro lado de la cama. Levanté entonces la cabeza fijando mis ojos en la pija de mi vecino que entraba y salía de mi concha mojada a todo ritmo. Yo seguía gimiendo explotando de la calentura, sabia que no iba a durar mucho más tampoco. Era todo muy excitante.
Cris me cogió un rato así hasta que me levantó de la cama y me puso en cuatro. Mientras me agarraba del pelo y me tiraba la cabeza hacia atrás pude sentir cómo su pija nuevamente me penetraba toda, con un dedo metido por completo en mi cola.
A los pocos minutos acabé de nuevo. "Ay sí, ay sí, te estoy acabando de nuevo", empecé a gritarle a mi macho mientras gozaba del orgasmo de una manera increíble. Mientras tanto él seguía metiendo y sacando la pija cada vez más rápido, ya estaríamos cerca de cumplirse la hora disponible que tendríamos.
Luego de acabar, me salí de la posición y lo acosté en la cama. "Te dije que te iba a sacar dos yo", así que me senté arriba de su chota y empecé a garchármelo con todas mis fuerzas. Lo embestía con todo mi peso (igual soy livianita) metiéndome la pija entera y chocando nuestros cuerpos. Una y otra vez con todas mis fuerzas hacía que su pija entrara y saliera mientras yo lo miraba fijo y le gritaba que me acabe.
Fue cuestión de dos o tres minutos para que mi vecino empezara a acabar, era imposible aguantar ese ritmo con las embestidas bestiales que le estaba pegando. Realmente, me lo estaba violando.
La parte más linda fue cuando empecé a sentir la leche calentita dentro de mi concha. Ahí bajé el ritmo, haciendo que su pija me penetrara más lentamente y mientras al mismo nos matábamos a besos con lengua. Tuve mi pija adentro hasta que murió, y recién ahí me salí de arriba suyo.
Su leche empezó a chorrearme por la concha y las piernas, ensuciando también todas las sábanas. "Hijo de mil seguís teniendo un montón de leche", le dije riéndome. Se ve que a la novia no se la estaba poniendo.
Yo estaba feliz de verme la conchita así, nada más hermoso que garchar sin forro y que te acaben adentro. Y lo mejor es que ahora íbamos a empezar a cogernos así.
Cris se levantó rápido de la cama y miró el celu, eran las 16 hs en punto. "Me voy", dijo mientras se vestía rápido. Yo ni le contesté, estaba tirada en cama desnuda y toda enchastrada de leche, pero feliz. Un poco de semen seguía saliendo de mi concha.
Agarré el celu y ví que la llamada de Euge no estaba finalizada. La muy hija de puta había escuchado todo.
- Estás ahí?? Forra estabas escuchando todo!!!
- Jajaja no podía perderme eso, jajaja. Lo re garchaste!!!
- Sí, lo hice acabar adentro, jaja.
- Puta!!!
- Bueno sigamos con lo de hoy. Perdón que te dejé colgada pero pintó garchar, jajaja.
- Hija de puta! Pero ya terminaron? Ya se fue? Contame!
- Me llamaste justo cuando me la había metido! Es imposible no gritar, ya me conocés cómo soy cuando la tengo adentro. Sí, la novia ya volvía.
- Jajaja bueno qué hacemos? Mi amigo me está esperando.
- Sólo vos y yo. Más porongas para nosotras.
- Mejor sí, si ya estaba necesitada de sexo ahora con ésto mucho más.
- Genial, entonces hoy se coge fuerte!
- Sii sexo a full amiga
Me quedé dormida una hora y cuando me desperté ya eran las 17.30 hs. Me pegué un duchita, me fui al gym a entrenar y volví a las 19.30 hs. De nuevo duchita y empecé a cambiarme para salir a comer con Euge y luego al boliche.
Me sentía bien, no estaba cansada y seguía caliente. No sé por qué, pero pensé que ese finde iba a ser sumamente intenso.
CONTINUARÁ...
Era sábado y estaba tirada en la cama y chateando por whatsapp con una de mis amigas, para ver qué hacíamos a la noche.
- Euge qué hacemos hoy?? A dónde vamos?
- Puti vos siempre de joda, que raro! Jaja. Vamos a ***** ?
- Dale, pero tenes a tu amigo para la entrada al vip?
- Obvio, ahora le escribo igual para que nos deje entrar. Sólo nosotras dos? Quién más se suma?
- No sé! Ahora le pregunte a Lara y María
La conversación se vió interrumpida justo a las 15 hs cuando sentí que llamaban despacito a la puerta del depto. Me levanté de la cama y fui a la puerta. Era mi vecino.
Ni hola me dijo. "Mi novia salió un ratito, fue a la casa de la mamá pero vuelve en una hora como máximo", me dijo hablando rápido como para no perder el tiempo.
Yo lo miré con cara seria y me dí vuelta dejando la puerta abierta, claramente invitándolo a pasar. "Vos qué te pensás que yo soy tu puta y podés venir a cogerme cuando quieras?", le dije en tono de enojada. Mi vecino quedó helado, es que sólo nos habíamos visto una sola vez más esa semana (sólo para hacerle un pete) y después no nos habíamos vuelto a ver.
"Ah perdón, no... pensé que tenías ganas y quise aprovechar", me dijo tímidamente con la cara toda roja.
"Mirá ésto es así, yo así como estoy con vos, estoy con otros flacos, es obvio eso. Así que voy a ser yo la que elige cuándo se coge y cuándo no. Vos me avisás cuándo estás solo y yo decido. Estamos?"
"Bueno, pero por eso te estoy diciendo que teníamos una hora, ahora 5 minutos menos porque no parás de hablar". Y sí, él tenía razón, no era que no me gustara que viniese a garcharme o pedirme que se la chupe, pero quería que quede claro que mandaba yo.
De todas formas su respuesta me había gustado, si bien sabía que esa noche segurísimo iba a tener sexo, un rapidín a la hora de la siesta no venía nada mal. Ese día andaba particularmente caliente.
Fue entonces cuando lo agarré de la remera y tirándolo hacia mí le comí la boca. "En una hora te saco dos", le dije con cara y voz de puta mientras no paraba de chaparlo y frotarle la pija por afuera del pantalón. Enseguida se puso toda dura y comencé con lo mio. Me agaché, le bajé el pantalón y los calzoncillos y me quedé contemplando la hermosa pija toda parada.
Como sabia que no había mucho tiempo, no me detuve tanto en la previa, no me detuve a acariciarla y lamerla suavemente como siempre hago, como un heladito. Fui directo a lo bueno y empecé a chuparla bien fuerte, después de todo tenía que cumplir con mi palabra de hacerlo acabar dos veces.
Con una mano en su pene y mi boca succionándole la cabecita, empecé a darle a todo ritmo. Cris empezó a gemir, la situación era muy excitante porque él seguía parado ahí al lado de la puerta con la remera puesta y el pantalón abajo, y yo de rodillas chupándola con casi desesperación.
Cris me agarró del pelo y empezó a empujar fuerte para hacérmela comer toda. De a poquito sus embestidas hacían que su pija entrara más y más en mi boca, hasta que finalmente de un movimiento absolutamente violento, chocó mi cara contra su abdomen: me la había metido toda adentro. Ahí la dejó unos segundos, aunque a mí me pareció una eternidad porque no podía respirar.
Finalmente dejó de hacer presión contra su abdomen, la saqué de mi boca y respiré todo lo que pude empezando a toser un poco. Enseguida volvió a agarrarme y hacerme lo mismo, sólo que esta vez la dejó aún más rato. Yo empecé a toser de nuevo con su pija adentro, haciendo presión hacia afuera porque no me dejaba respirar, pero él tenía mucho más fuerza que yo y no me permitía salirme de la situación.
Una mezcla de desesperación y absoluta calentura me invadieron. Me sentía tremendamente puta haciéndome eso, pero al mismo tiempo realmente, no me dejaba respirar. Por mis ojos empezaron a caer una lágrimas al mismo tiempo que empecé a toser tanto que le golpee las piernas con mis manos para que me la sacara. Recién ahí me dejo respirar.
"Viniste con todo", le dije. Era nuestro tercer encuentro (el primero lo pueden leer ACÁ, el segundo como había dicho fue sólo un pete al pasar) y se ponían cada vez más calientes, violentos y excitantes. Tardé unos minutos en recuperarme. "Estás bien?", me preguntó. Aún respirarando fuerte y con los ojos todos llorozos, le dije que sí. "Entonces vení para acá", me dijo agarrándome fuerte y metiéndola de nuevo. Para colmo esta vez no la metíó de a poco, de una solo bocado me la hacia comer.
Me lo hizo un par de veces más hasta que no pude más. Tenía lágrimas en los ojos de tanto toser y atragantarme. Así que volví a lo mío, clavé mis ojos en los suyos y empecé a chupársela de nuevo a full, cada vez más rápido.
"Ay Dios, a este ritmo no te aguanto nada", me dijo con respiración entrecortada mientras yo seguía mirándolo y ahora pajeándolo a dos manos. "Es la idea bebé", le dije con voz de putita y aún respirando con dificultad de la cogida por la boca que me había pegado. "Quiero que me des mucha lechita, sí? Hay mucha bebé? Hay mucha?", empecé a decirle pajeándolo más y más fuerte.
Para hacerlo sufrir un poquito, bajé un poco el ritmo, siendo yo esta vez la que me comiera la pija de un bocado. La dejé toda adentro de mi boca y la saqué. Así un par de veces, sabía que eso lo volvía loco pero sería más difícil que me acabe de esa forma.
Tras un par de veces empecé a sucionarla de nuevo pasando la lengua por toda la cabeza. Luego de nuevo lo empecé a pajear pero esta vez con mi boca abierta y la cabeza del pene apoyada en mi lengua.
"Qué hora es?", le dije mientras seguia la paja a todo ritmo. Cris se agachó un momento a buscar el celular del pantalón que tenia por las rodillas y miró la hora. "15.17 hs", habían pasado ya 17 minutos. Aceleré entonces el ritmo de la paja pidiéndole casi a gritos que me la diera de tomar.
Fue cuestión de unos segundos para que el primer chorro de leche entrara en mi boca, seguidos de otros tres que me llenaron la boca casi por completo. Era increíble la cantidad de semen que había salido. Claramente no la estaba poniendo mucho. Mientras seguía pajeándolo y la leche seguía saliendo, Cris gemía y gozaba sin dejar de mirarme, de mirar cómo estaba saliendo toda esa leche de su pene llenándome la boca.
La pija lentamente comenzó a perder dureza, así que la saqué de mi boca y le mostré todo lo que me había . Ahora venia la mejor parte porque empecé a saborear su semen haciendo burbujitas y jugando con mi lengua. Lamentablemente un poco se me terminó cayendo al piso, pero lo que quedó me lo tragué sin dificultad, siempre mirándolo a los ojos.
Yo volaba literalmente de la calentura, necesitaba esa pija dentro mío, necesitaba urgente un orgasmo para calmarme un poco. Para colmo, teníamos el tiempo a contra reloj así que traté de no ponerlo nervioso para que se la parara de nuevo. Lo ayudé sacándome la poca ropa que tenia puesta (como les dije, en mi depto suelo andar semidesnuda) y le agarré la mano para que me frotara la concha.
Los dos parados aún al lado de la puerta, con mis lolas pegadas a su pecho y su mano acariciándome la concha y la boca en un pezón, empecé a gemir suavemente a medida que subia mi calentura, que ya se por sí, estaba por las nubes.
Luego le agarré la mano y lo llevé hasta la cama mientras recién me daba cuenta que el celular que había dejado tirado en el sommier no paraba de sonar con notificaciones. "Debe ser Euge que no le contesté más".
Cris me tiró en la cama, me abrió las piernas y comenzó a lamerme la concha. Estaba mojadísima y sedienta de pija. No daba más. "Me la chupás y ahora soy yo la que te acabo al toque, no puedo más, necesito acabar ya". Le dije.
Y realmente fue así, porque fue cuestión de empezar a succionarme el clítoris para que un tremendo orgasmo me llegara. Empecé a gritar y retorcerme lo que podía, Cris seguía chupándomela mientras yo acababa y gozaba a más no poder. Para colmo no me dejaba ni cerrar las piernas, me las mantenía abierta con su lengua trabajando a full.
No sé cuánto duró ese orgasmo, sólo sé que cerré los ojos mientras un escalofrío me invadía el cuerpo entero, sintiendo sólo cómo la lengua de mi chico me recorría la concha entera. Que me la sigan chupando mientras acababa me hacía volar la mente.
"Te dije que no iba a aguantar, no podía más", le dije sonriendo y con la cara toda roja del calor que me había agarrado. Cris no me contestó, seguía chupándola pero ahora con dos dedos que entraban y salían de mi concha. Yo seguía gimiendo y el celular seguía sonando, ahora con llamadas.
Mientras mi vecino me la chupaba, agarré el celu, entré al whatsapp y me encontré con varios mjes y llamadas de Euge (es intensa) sobre qué hacíamos esta noche, que estaba esperándome a que le dijera si éramos sólo nosotras o no para avisarle a su amigo del vip. Es que aparentemente tenían que entregar la lista de personas.
Leí los mjes así nomás como pude mientras gozaba del sexo oral de Cris que seguía metiendo y sacando los dedos. De repente sonó el celu de nuevo con una llamada, y para que no jodiera más, la atendí.
- Nena qué hacés?? Mi amigo me está esperando que tiene que entregar la lista ya!
- Puti, no sé, no les pregunté a las chicas Yo apenas podía hablar, hablaba entrecortada, agitada y respiraba intensamente.
- Qué te pasa que estás así? Boluda jodeme te la están poniendo???
- Casi. Estamos en eso. Le dije como pude, no podía ni concentrarme.
En ese momento Cris estaba golpéandome la conchita suavemente con la cabeza de su pija, pidiendo permiso para penetrarme. El tema que es no se había puesto forro, no sé por qué, aunque imagino que quería cogerme así, por eso no me la había metido.
A esa altura, con la calentura que tenia le hice un gesto de que tenia permiso para meterla. Cris entonces me penetró y me fue imposible no gemir mientras seguía con el teléfono en el oído y Euge diciéndome cosas que ya no entendía. Mi amiga empezó a reírse mal mientras me decía de todo, básicamente: puta. Pero con onda, éramos amigas de hace años y las dos teníamos sexo grupal muy seguido.
Parece que a Cris le calentó mucho esa situación porque empezó a embestirme violentamente, mientras yo gemía y gritaba cada vez más fuerte.
"Después escribo", le dije como pude a mi amiga mientras seguía gimiendo y tiré el celu al otro lado de la cama. Levanté entonces la cabeza fijando mis ojos en la pija de mi vecino que entraba y salía de mi concha mojada a todo ritmo. Yo seguía gimiendo explotando de la calentura, sabia que no iba a durar mucho más tampoco. Era todo muy excitante.
Cris me cogió un rato así hasta que me levantó de la cama y me puso en cuatro. Mientras me agarraba del pelo y me tiraba la cabeza hacia atrás pude sentir cómo su pija nuevamente me penetraba toda, con un dedo metido por completo en mi cola.
A los pocos minutos acabé de nuevo. "Ay sí, ay sí, te estoy acabando de nuevo", empecé a gritarle a mi macho mientras gozaba del orgasmo de una manera increíble. Mientras tanto él seguía metiendo y sacando la pija cada vez más rápido, ya estaríamos cerca de cumplirse la hora disponible que tendríamos.
Luego de acabar, me salí de la posición y lo acosté en la cama. "Te dije que te iba a sacar dos yo", así que me senté arriba de su chota y empecé a garchármelo con todas mis fuerzas. Lo embestía con todo mi peso (igual soy livianita) metiéndome la pija entera y chocando nuestros cuerpos. Una y otra vez con todas mis fuerzas hacía que su pija entrara y saliera mientras yo lo miraba fijo y le gritaba que me acabe.
Fue cuestión de dos o tres minutos para que mi vecino empezara a acabar, era imposible aguantar ese ritmo con las embestidas bestiales que le estaba pegando. Realmente, me lo estaba violando.
La parte más linda fue cuando empecé a sentir la leche calentita dentro de mi concha. Ahí bajé el ritmo, haciendo que su pija me penetrara más lentamente y mientras al mismo nos matábamos a besos con lengua. Tuve mi pija adentro hasta que murió, y recién ahí me salí de arriba suyo.
Su leche empezó a chorrearme por la concha y las piernas, ensuciando también todas las sábanas. "Hijo de mil seguís teniendo un montón de leche", le dije riéndome. Se ve que a la novia no se la estaba poniendo.
Yo estaba feliz de verme la conchita así, nada más hermoso que garchar sin forro y que te acaben adentro. Y lo mejor es que ahora íbamos a empezar a cogernos así.
Cris se levantó rápido de la cama y miró el celu, eran las 16 hs en punto. "Me voy", dijo mientras se vestía rápido. Yo ni le contesté, estaba tirada en cama desnuda y toda enchastrada de leche, pero feliz. Un poco de semen seguía saliendo de mi concha.
Agarré el celu y ví que la llamada de Euge no estaba finalizada. La muy hija de puta había escuchado todo.
- Estás ahí?? Forra estabas escuchando todo!!!
- Jajaja no podía perderme eso, jajaja. Lo re garchaste!!!
- Sí, lo hice acabar adentro, jaja.
- Puta!!!
- Bueno sigamos con lo de hoy. Perdón que te dejé colgada pero pintó garchar, jajaja.
- Hija de puta! Pero ya terminaron? Ya se fue? Contame!
- Me llamaste justo cuando me la había metido! Es imposible no gritar, ya me conocés cómo soy cuando la tengo adentro. Sí, la novia ya volvía.
- Jajaja bueno qué hacemos? Mi amigo me está esperando.
- Sólo vos y yo. Más porongas para nosotras.
- Mejor sí, si ya estaba necesitada de sexo ahora con ésto mucho más.
- Genial, entonces hoy se coge fuerte!
- Sii sexo a full amiga
Me quedé dormida una hora y cuando me desperté ya eran las 17.30 hs. Me pegué un duchita, me fui al gym a entrenar y volví a las 19.30 hs. De nuevo duchita y empecé a cambiarme para salir a comer con Euge y luego al boliche.
Me sentía bien, no estaba cansada y seguía caliente. No sé por qué, pero pensé que ese finde iba a ser sumamente intenso.
CONTINUARÁ...
17 comentarios - 2. Finde a puro sexo (Primera parte)