Hola hermosa comunidad, cómo están? Espero que bien, sobándose el ganso.
Para los que me vienen siguiendo los relatos anteriores, sabrán que estoy de novio con una piba, que tuvo su pasado trambolico. Era un poco indecisa y probó muchas pijas, de varias edades y en alguna oportunidad, más de una de manera simultánea
La cosa es que mi nivel de morbo está tan alto, que en silencio disfruto de verla hecha una putita. Disfruto saber que se escribe con otros tipos y que desea otras pijas.
Fue una semana, la anterior, muy movida y con algunos encontronazos entre nosotros. No alcanzamos a discutir, pero hubo ratos de silencios demasiado largos.
El domingo por la noche, yo me tiré en el living a mirar fútbol, y ella se acostó en la habitación. Se escuchaba constantemente cómo sonaba el táctil de su teclado, respondiendo mensajes.
Ella se notaba molesta, por el momento y la situación descrita anteriormente. Por ello, no cenamos ni nada por el estilo.
Al rededor de las 00:30hs sale de la pieza, vestida con una calza negra, bien metida en la cola, Zapas blancas(de esas de lona) y una remerita floreada que le hace resaltar sus tetas.
Yo me hice el boludo, que estaba durmiendo, la ví que se perfumó y se fue con una mochila.
No les puedo describir la calentura que sentí en ese momento. Sabía que fue a verse con alguien pero no tenía pruebas. Nunca salió a esa hora sin decirme dónde iba.
Entonces, se me ocurrió una idea.
Decidi revisar su armario, el lugar donde guarda su ropa interior. Conozco cada una de sus tangas, producto de 4 años de convivencia.
Descubri que faltaba una tanga negra, y otra blanca con lunares negros.
Al mismo momento, fui a asegurarme que ropas había dentro del canasto de ropas usadas, donde había una tanga que había usado ese día. El tiempo desde que ella se fue, lo pasé con la chota al palo y con las pulsaciones a mil.
A las 3:20 de la madrugada regresa. Yo obviamente me hice el dormido.
Entró con la mochilita al baño, por un minuto y luego se fue a la pieza. Apagó la luz, cerró la puerta y a dormir.
Mi corazón latía a mil. Estaba re caliente porque sin ser algo brillante, mi plan era bueno y me iba a dar resultados.
Me levanté del sofá y entré al baño. Fui derecho al canasto de ropa usada. Y para gran sorpresa, encontré una tanga NEGRA, con terrible olor a sexo y empapada.
Nose porque pero sin dudar la agarre, y la oli, al tiempo que sin tocarme, se me escapan chorritos de semen de la pija.
Estaba oliendo la tanga de mi putita, que minutos antes había sido usada para coger con otro tipo que no sé quién es y por lo visto, la llenó de leche. (A ella le encanta coger con la tanga puesta a un lado, y que le acaben arriba de la concha).
Imaginarme toda esa situación me hizo acabar unas 3 veces más. Temblaba, estaba en éxtasis total.
Luego si, me fui al dormitorio, me metí en la cama y confirmé que tenía puesta la tanga blanca que faltaba. La pendeja se llevo dos tangas. Una para coger y otra para ponerse y hacer de cuenta que no pasó nada. Es una puta barbara.
Al otro día nos levantamos, pregunté donde había ido, a lo que contesto que salió con una amiga. Si claro, y yo soy Garrincha.
Trataré de sacarle la verdad pero eso será material para el próximo relato. Saludos y gracias por pasarse!!
Para los que me vienen siguiendo los relatos anteriores, sabrán que estoy de novio con una piba, que tuvo su pasado trambolico. Era un poco indecisa y probó muchas pijas, de varias edades y en alguna oportunidad, más de una de manera simultánea
La cosa es que mi nivel de morbo está tan alto, que en silencio disfruto de verla hecha una putita. Disfruto saber que se escribe con otros tipos y que desea otras pijas.
Fue una semana, la anterior, muy movida y con algunos encontronazos entre nosotros. No alcanzamos a discutir, pero hubo ratos de silencios demasiado largos.
El domingo por la noche, yo me tiré en el living a mirar fútbol, y ella se acostó en la habitación. Se escuchaba constantemente cómo sonaba el táctil de su teclado, respondiendo mensajes.
Ella se notaba molesta, por el momento y la situación descrita anteriormente. Por ello, no cenamos ni nada por el estilo.
Al rededor de las 00:30hs sale de la pieza, vestida con una calza negra, bien metida en la cola, Zapas blancas(de esas de lona) y una remerita floreada que le hace resaltar sus tetas.
Yo me hice el boludo, que estaba durmiendo, la ví que se perfumó y se fue con una mochila.
No les puedo describir la calentura que sentí en ese momento. Sabía que fue a verse con alguien pero no tenía pruebas. Nunca salió a esa hora sin decirme dónde iba.
Entonces, se me ocurrió una idea.
Decidi revisar su armario, el lugar donde guarda su ropa interior. Conozco cada una de sus tangas, producto de 4 años de convivencia.
Descubri que faltaba una tanga negra, y otra blanca con lunares negros.
Al mismo momento, fui a asegurarme que ropas había dentro del canasto de ropas usadas, donde había una tanga que había usado ese día. El tiempo desde que ella se fue, lo pasé con la chota al palo y con las pulsaciones a mil.
A las 3:20 de la madrugada regresa. Yo obviamente me hice el dormido.
Entró con la mochilita al baño, por un minuto y luego se fue a la pieza. Apagó la luz, cerró la puerta y a dormir.
Mi corazón latía a mil. Estaba re caliente porque sin ser algo brillante, mi plan era bueno y me iba a dar resultados.
Me levanté del sofá y entré al baño. Fui derecho al canasto de ropa usada. Y para gran sorpresa, encontré una tanga NEGRA, con terrible olor a sexo y empapada.
Nose porque pero sin dudar la agarre, y la oli, al tiempo que sin tocarme, se me escapan chorritos de semen de la pija.
Estaba oliendo la tanga de mi putita, que minutos antes había sido usada para coger con otro tipo que no sé quién es y por lo visto, la llenó de leche. (A ella le encanta coger con la tanga puesta a un lado, y que le acaben arriba de la concha).
Imaginarme toda esa situación me hizo acabar unas 3 veces más. Temblaba, estaba en éxtasis total.
Luego si, me fui al dormitorio, me metí en la cama y confirmé que tenía puesta la tanga blanca que faltaba. La pendeja se llevo dos tangas. Una para coger y otra para ponerse y hacer de cuenta que no pasó nada. Es una puta barbara.
Al otro día nos levantamos, pregunté donde había ido, a lo que contesto que salió con una amiga. Si claro, y yo soy Garrincha.
Trataré de sacarle la verdad pero eso será material para el próximo relato. Saludos y gracias por pasarse!!
6 comentarios - Otra vez, me metió los cuernos.