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el chico de los mandados 16

Ya casi entradala noche baje a la sala de estar y ahí me encontré con Carmen junto a dos señoras,rápidamente entendí que eran las amigas. Me acerque a saludar y ella me laspresento, se llamaban Liliana y Alicia. Liliana era una señora alta muy delgadapelo largo negro y una piel muy blanca arrugada debía tener unos 60 años, podríadecirles que iba muy sexy vestida, pero la realidad es que no, tenia unospantalones muy anchos color marron y una camisa también suelta blanca, casi notenia maquillaje por algún motivo supuse que seria la separada. Alicia en tantoera una señora también unos 60 años, con la piel mejor llevada, era muycaderona, no era gorda pero tenia unas caderas muy anchas y dos pechos que eranmuy grandes apenas sostenidos por el corpiño, se notaba que era una mujer decuerpo muy grande y que había perdido peso con los años.
 
Ambas meresultaron muy amables y copadas, se notaba como nos había dicho Carmen queeran dos mujeres muy recatadas y no esperaba que pudiéramos hacer mucho conellas. Rapidamente se retiraron a unos dormitorios que estaban al lado del lugardonde estábamos nosotros. Cuando se fueron Carmen confirmo lo que pensabaLiliana era la separada y Alicia la viuda, me conto que Liliana había descubiertoque el marido se acostaba con la secretaria y con dos pendejas que hacían pasantíasen su empresa y ahora estaban en juicio de divorcio y se estaba quedando contodo y lo que no le estaba sacando ella se lo estaban sacando las hijas. Quizassuene machista pero no me sorprendio que el marido la hubiera engañado no parecíauna mujer que se preocupara por su imagen y algo me decía que en la cama erabastante basica. Alicia por otro lado había enviudado hacia 10 años, teniahijos y desde que fallecio el marido jamas estuvo con un hombre
 
C: debe servirgen de vuelta
Y: vos decis? La verdadno se si vamos a poder hacer mucho con ellas no parece que tengan nuestra onda
C: no no creopero se que con verlos a uds en acción se van a tentar
Y: jajaja puedeser
C: yo de solotenerte aca y acordarme de lo que hicimos me tiento
 
Mientras decía estome agarro del  bulto y me dio un beso muyapasionado. Mi pija reacciono al instante a lo que ella metio la mano en el pantalóny empezó a pajearme mientras me besaba, poco a poco me fue llevando hasta unode los sillones me hizo sentarme y se sento directamente sobre mi pija sinmediar palabra y empezó a montarme, en ese momento justo pasaba nati que sequedo un segundo mirando la imagen pero enseguida se acerco a nosotros searrodillo y sentí su lengua en mis bolas, detecte el momento justo en que sulengua empezó a jugar en el cuerpo de Carmen por el gemido que escapo de suboca. Seguimos asi con ella alternando entre mi pija y la cola de Carmen sinque nadie hablara solo había gemido. en un momento asome mi rostro y pude ver poruno de los espejos a Liliana que nos esperaba y que tenia sus manos en laentrepierna, evidentemente Carmen tenia razón y nosotros podíamos con lamojigata. Esa imagen hizo que me calentara aun mas y acabara llenando laconchita de Carmen y provocándole un gemido. Carmen salio pronto de encima miome corrió y se sento en el sillón e hizo que nati se tomara mi leche de suconchita y siguera chupando, evidentemente ella también había visto a su amigaporque me hizo señas de que me fuera. En vez de ir directo hacia donde estaba Lilianadecidi sorprenderla, me fui por otro pasillo que ya sabia que me iba a llevaral lugar donde ella estaba, me asome y seguía ahí escondida viendo la situación,podía notar como su mano se movia dentro del pantalón, pantalón que no ayudabaen nada a su figura y hacia que pareciera que tenia un culo fofo, me acerquecon mucho sigilo pero ella noto mi presencia, se puso nerviosa y atino a sacarla mano de su pantalón pero yo la frene, con una de mis manos la agarre de lacintura y con la otra sostubre su mano dentro del pantalón y acerque mis labiosa su oído
 
Y: no te asustes,si estas disfrutando o no?
L: la verdad quesi, no se que me pasa
Y: viste algo quete calentó y es normal – mientras mi mano recorria su brazo y la que estaba ensu cintura la atraía hacia mi pija que ya empzaba a tomar forma de nuevo
L: no es normalque me calienten unos chicos que podrían ser mis hijos teniendo sexo con miamiga
Y: si es normal,y que te gustaría mas ser tu amiga antes cuando estaba yo o ahora que esta conella – bese el lóbulo de su oreja y baje a besar su cuello y lleve la mano demi cintura a uno de sus pechos
L: no se no puedopensar
Y: te gustaría jugarcon esto? – agarre su mano libre y la lleve a mi bulto ella lo apretó fuerte
L: hace mucho queno toco una, y solo fue la de mi ex
Y: te gustaría probarotra?
 
No hubo respuestasimplemente se dio vuelta y me beso desesperada, algo se había prendido en ellame besaba mientras su mano derecha seguía adentro del pantalón y su manoizquierda se metio dentro del mio y empezó a pajearme
 
L: perdón si nolo hago bien es que falta practica
Y: lo haces muy bienpodes hacer lo que quiera
 
Seguimos un ratomas asi, yo quería mas, la tome de la mano y la lleve a la sala de estar donde natiseguía chupando la conchita de Carmen que se sonrio cuando me vio entrar con suamiga. La pare de frente a ellos delante de otro de los sillones y empece adesabrochar uno a uno los botones de su camisa cuando termine se la quite teniaun corpiño simple  que también desabroche,la gire un segundo para verlos estaba roja pero muy caliente se mordia su labioinferior, y yo lleve mis labios a uno de sus pechos eran chicos medios caidoscon los pezones muy punteagudos y empece a chuparlo y morderlo ella me sostuvo contrasus pechos y empezó a gemir. Volvi a girarla y la puse nuevamente mirando a suamiga como disfrutaba de la chupada de una pendeja, y lelve mis manos a sucintura para empezar a desabrochar su pantalón, intento frenarme pero no se lopermiti, apareció ante mio un bombachon nada sexy, esta vez fui yo quien se giroy se puso delante de ella
 
Y: te gustaría estarcomo tu amiga?
L: es que noestoy depilada
Y: yo no tepregunte eso
L: nunca me practicaronsexo oral
Y: como que nuncate la chuparon
L: siempre me diocosa y jamas se lo permiti a mi marido
Y: hay quesolucionar eso
 
Baje su bombachay no mentia una mata de pelos negros apareció ante mi, brillosos por lacalentura que esta mujer tenia, la hice sentarse y sin mediar palabra separesus labios y pase mi lengua, el gemido de Liliana fue espectacular era evidenteque jamas había disfrutado de ese placer. Me dedique un largo rato a chupárselay jugar con mis dedos hasta que su cuerpo se tenso por completo y acabo con un gritoque se debe haber escuchado en toda la casa
 
L: por dios comonunca probe esto, que placer julian por dios
Y: queres mas?
L: si quiero masahora quiero todo
Y: que queres
L: que me hagasel amor
Y: en esta casano hacemos el amor
L: como que no?
Y: no aca hacemosotra cosa y vos lo sabes muy bien y lo tenes que pedir como se debe
L: me da vergüenza
Y: para esoestamos aca para que pierdas la vergüenza
L: es que … - lo pensóunos segundos – dios…. Si julian quiero que me cojas quiero que me metas estoduro en mi vagina
 
Me sente y laatraje hacia mi dándome la espalda e hice que empezara a bajar muy lentamente,estaba muy estrecha pero estaba tan mojada que lentamente fui entrando sindificultad, de su boca solo salía un gemido muy largo y que corono con unfuerte si cuando mi pija estuvo complemente dentro de ella. Empece a moverla sucuerpo era tan liviano que podía llevarla como quería. En un determinado momentome di cuenta que tanto Carmen como nati se habían sentado en el piso y setocaban mutuamente les hice un gesto y entendieron muy rápido. En un abrir ycerrar de ojos nati estaba a cuatro patas frente a Liliana que se sorpendiocuando la lengua de nati empezó a recorrer mi pija y su conchita pero lejos deasustarse tomo por los cabellos a la morocha y la atrajo mas hacia ella, y Carmense puso a chupar la conchita de nati. Debemos haber estado unos 5 minutos asicuando Liliana volvi a acabar, su conchita me apretó de tal manera que no pudeevitar acabarle y llenarle toda la conchita podía sentir como mi pija escupiael semen y llenaba cada rincón de su interior. Cuando se relajo me sorprendiosaliendo de encima mio y arrodillándose en ese mismo momento a chupar mi pija ytomar los últimos restos de semen. En ese momento escuchamos un grito, y vimostodos como Alicia caia desmayada al piso, evidentemente no esperaba esa imagen,obviamente se corto el momento y llamamos a bastian que rápidamente vino aayudarnos con ella, la levantamos entre los dos y la llevamos a su habitación, habíareaccionado pero estaba como ida. Las dejamos a las 3 amigas solas y nosotrosnos retiramos
 
No volvi a ver alas 3 mujeres hasta el dia siguiente, pero eso se los contare mañana

2 comentarios - el chico de los mandados 16

kofye2
Excelente cómo siempre. No la cuelgues jajaja