Vuelvo después de mucho tiempo sin escribir,por cuestiones de la vida y falta de tiempo y ganas.
Todo comenzó como una aventura de verano en un boliche de la costa cuando nos vimos y al rato de estar bailando decidimos ir al reservado donde empezamos a besarnos y calentarnos, ella estaba muy sexy con un vestido ajustado y muy cortito y escotado por el cual se le asomaban sus pechos, los cuales fueron dulcemente acariciados y besados casi sin detenerme un instante, mientras que su cola también recibían lindos manotazos.con el correr del tiempo mis dedos empezaban a sentir los jugos de su conchita a trevez de su diminuta tanguita, ella mientras tanto comenzaba a pajearme y a decirme las ganas que tenía de ser penetrada, y en un movimiento la tomé por la cintura y la sibi sobre mi pija completamente parada y dura. Estuve un buen rato frotando mí pija entre sus labios vaginale hasta que ella me agarro la pija y la metió dentro suyo, estuvimos un buen rato cogiendonos y besándonos y en medio de esa locura en la que estábamos logré sin demasiada resistencia meterle un dedo en el culo, lo cual la hizo sentir lo que realmente era, una puta en celos. Gimió y acabó y sacó mí pija de su concha y me pajeo hasta hacerme acabar entre sus tetas. Cuando nos levantamos para irnos de ahí nos dimos cuenta que había dos flacos que se estaban pajeando, esa situación fue la que me rompió la cabeza para siempre.
Todo comenzó como una aventura de verano en un boliche de la costa cuando nos vimos y al rato de estar bailando decidimos ir al reservado donde empezamos a besarnos y calentarnos, ella estaba muy sexy con un vestido ajustado y muy cortito y escotado por el cual se le asomaban sus pechos, los cuales fueron dulcemente acariciados y besados casi sin detenerme un instante, mientras que su cola también recibían lindos manotazos.con el correr del tiempo mis dedos empezaban a sentir los jugos de su conchita a trevez de su diminuta tanguita, ella mientras tanto comenzaba a pajearme y a decirme las ganas que tenía de ser penetrada, y en un movimiento la tomé por la cintura y la sibi sobre mi pija completamente parada y dura. Estuve un buen rato frotando mí pija entre sus labios vaginale hasta que ella me agarro la pija y la metió dentro suyo, estuvimos un buen rato cogiendonos y besándonos y en medio de esa locura en la que estábamos logré sin demasiada resistencia meterle un dedo en el culo, lo cual la hizo sentir lo que realmente era, una puta en celos. Gimió y acabó y sacó mí pija de su concha y me pajeo hasta hacerme acabar entre sus tetas. Cuando nos levantamos para irnos de ahí nos dimos cuenta que había dos flacos que se estaban pajeando, esa situación fue la que me rompió la cabeza para siempre.
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