En eso volvió Martín con una cerveza en un mano y su verga gigante en la otra... estaba ansiosa por comérmela toda.
Cuando estaba por acabar el segundo hice lo mismo, me la saqué y me trague toda su lechita caliente.
Entonces llamé a Martín y lo hice sentarse en la cama, me puse en cuatro y comencé a degustar ese hermoso pedazo de pija, estaba riquísima. Mientras tanto mi tercer amigo se acomodó detrás y me empezó a coger mi conchita. Me sentía bien puta, chupando mientras me cogían como a una perrita.
- Cielo preparame el culito, quiero disfrutar por ahí también- dije al que me estaba cogiendo.
Me empezó a chupar el culo deliciosamente, entonces se prendieron los demás y entre los tres me manoseaban la cola, me daban nalgadas se turnaban para meterme un dedo, luego dos y por ultimo tres... ya estaba lista. Así que empezaron a darme por mi culito por turnos, desde la pija más chica hasta la más grande, me estaba preparando para la herramienta de Martín, que estaba seguía disfrutando de mi mamada.
Cuando él estaba por acabar me detuve, su leche la quería en otro lado. Entonces me di vuelta para que disfrute de la vista de mi conchita húmeda y mi culito abierto, mientras yo tenía a los otros allí arrodillados en la cama, se la chupaba al del medio y pajeaba a los otros...
- Bueno cielo ahora te toca a vos, rompeme bien el culo- dije girando y mirando a Martín.
Me acomodé bien en cuatro, Martín empezó a meter su pija que ya se veía gigante pero se sentía aún más grande mientras iba entrando en mi anito
- mmmmm mmmmmmm ahhhh cielo que riiiiiiico, mi culito se está estirando, se está rompiendo enserio-
La tenía toda adentro, no podía creer que entró todo ese pedazo, me dolía un poquito, pero sabía que ya iba a empezar a disfrutar en un ratito. Él no se movía, estaba esperando que me acostumbre.
- Ahora si cielo, cogeme- le pedí después de uno minutos.
Empezó a moverse lento, la sacaba hasta la cabecita y luego la volvía a meter toda, iba aumentado la velocidad y por supuesto mi placer... mientras tanto los espectadores se pajeaban mirando la hermosa escena, les pedí que no acaben todavía. Me sentía toda una PUTA!!! y lo estaba disfrutando.
- Pero que hija de puta que sos, mirá la fiesta que tenías planeada Flor- dijo quién me estaba rompiendo literalmente el culo.
Diez minutos después Martín me dijo que ya estaba llegando, así que me la saqué y lo hice bajarse de la cama. Me acosté boca arriba casi en el borde de la cama con las piernas abiertas y levantadas.
- Bebé metémela por el culo así hasta acabarme adentro y uds arrodillense a mi alrededor y vayan acabando, báñenme en leche- dije mientras todos tomaban sus posiciones.
Así que estaba ahí ensartada por el culo, mientras me frotaba mi clítoris, y tres vagos pajeándose, que fueron tirando sus chorros de leche en mis tetas, cara, panza... un verdadero baño de leche
- mmmmm mmmmm mmmmm siiiiii siiiiiiii ahhhhhhhhh- grité mientras llegaba a un orgasmo terrible.
En eso Martín la sacó toda y me la volvió a enterrar con violencia en mi culo, ahí acabó, me lleno mi agujero de leche caliente. Nunca había disfrutado tanto del sexo.
Me quedé unos minutos así, agitada, disfrutando las sensaciones y todavía con una pija en mi culo, que poco a poco iba recuperando su tamaño. Después me levanté, agarré mi cel y lo puse apuntado a la cama, a mis amigos los hice arrodillarse mirando a la cámara y yo, como toda una putita, me puse en cuatro mostrando orgullosamente mi culo roto chorreando leche. Click, un recuerdo, y fui a bañarme.
Cuando salí estaban todos en el patio, así que seguimos bailando, tomando, todos desnudos.
Esa noche me volvieron a coger varias veces cada uno. No se imaginan como terminaron mis agujeritos...
Se hizo de madrugada, me volví a duchar y listo fin de la fiesta.
Martín me llevó de nuevo a mi casa, le di un buen beso al despedirme, y fui a dormir. En un par de días volvía a Santa Fe con mi familia, pero me llevaba un muy buen recuerdo.
Cuando estaba por acabar el segundo hice lo mismo, me la saqué y me trague toda su lechita caliente.
Entonces llamé a Martín y lo hice sentarse en la cama, me puse en cuatro y comencé a degustar ese hermoso pedazo de pija, estaba riquísima. Mientras tanto mi tercer amigo se acomodó detrás y me empezó a coger mi conchita. Me sentía bien puta, chupando mientras me cogían como a una perrita.
- Cielo preparame el culito, quiero disfrutar por ahí también- dije al que me estaba cogiendo.
Me empezó a chupar el culo deliciosamente, entonces se prendieron los demás y entre los tres me manoseaban la cola, me daban nalgadas se turnaban para meterme un dedo, luego dos y por ultimo tres... ya estaba lista. Así que empezaron a darme por mi culito por turnos, desde la pija más chica hasta la más grande, me estaba preparando para la herramienta de Martín, que estaba seguía disfrutando de mi mamada.
Cuando él estaba por acabar me detuve, su leche la quería en otro lado. Entonces me di vuelta para que disfrute de la vista de mi conchita húmeda y mi culito abierto, mientras yo tenía a los otros allí arrodillados en la cama, se la chupaba al del medio y pajeaba a los otros...
- Bueno cielo ahora te toca a vos, rompeme bien el culo- dije girando y mirando a Martín.
Me acomodé bien en cuatro, Martín empezó a meter su pija que ya se veía gigante pero se sentía aún más grande mientras iba entrando en mi anito
- mmmmm mmmmmmm ahhhh cielo que riiiiiiico, mi culito se está estirando, se está rompiendo enserio-
La tenía toda adentro, no podía creer que entró todo ese pedazo, me dolía un poquito, pero sabía que ya iba a empezar a disfrutar en un ratito. Él no se movía, estaba esperando que me acostumbre.
- Ahora si cielo, cogeme- le pedí después de uno minutos.
Empezó a moverse lento, la sacaba hasta la cabecita y luego la volvía a meter toda, iba aumentado la velocidad y por supuesto mi placer... mientras tanto los espectadores se pajeaban mirando la hermosa escena, les pedí que no acaben todavía. Me sentía toda una PUTA!!! y lo estaba disfrutando.
- Pero que hija de puta que sos, mirá la fiesta que tenías planeada Flor- dijo quién me estaba rompiendo literalmente el culo.
Diez minutos después Martín me dijo que ya estaba llegando, así que me la saqué y lo hice bajarse de la cama. Me acosté boca arriba casi en el borde de la cama con las piernas abiertas y levantadas.
- Bebé metémela por el culo así hasta acabarme adentro y uds arrodillense a mi alrededor y vayan acabando, báñenme en leche- dije mientras todos tomaban sus posiciones.
Así que estaba ahí ensartada por el culo, mientras me frotaba mi clítoris, y tres vagos pajeándose, que fueron tirando sus chorros de leche en mis tetas, cara, panza... un verdadero baño de leche
- mmmmm mmmmm mmmmm siiiiii siiiiiiii ahhhhhhhhh- grité mientras llegaba a un orgasmo terrible.
En eso Martín la sacó toda y me la volvió a enterrar con violencia en mi culo, ahí acabó, me lleno mi agujero de leche caliente. Nunca había disfrutado tanto del sexo.
Me quedé unos minutos así, agitada, disfrutando las sensaciones y todavía con una pija en mi culo, que poco a poco iba recuperando su tamaño. Después me levanté, agarré mi cel y lo puse apuntado a la cama, a mis amigos los hice arrodillarse mirando a la cámara y yo, como toda una putita, me puse en cuatro mostrando orgullosamente mi culo roto chorreando leche. Click, un recuerdo, y fui a bañarme.
Cuando salí estaban todos en el patio, así que seguimos bailando, tomando, todos desnudos.
Esa noche me volvieron a coger varias veces cada uno. No se imaginan como terminaron mis agujeritos...
Se hizo de madrugada, me volví a duchar y listo fin de la fiesta.
Martín me llevó de nuevo a mi casa, le di un buen beso al despedirme, y fui a dormir. En un par de días volvía a Santa Fe con mi familia, pero me llevaba un muy buen recuerdo.
1 comentarios - Fiesta de Recepción 2