Relato Cukold - Corneador

Hacía ya un tiempo la miraba con deseo, trabajábamos juntos y cada vez que me pasaba por al lado podía oler su piel, su aroma, su deseo...
Sobre su escritorio, descansaba en un portarretratos una foto de ella en una playa del caribe, abrazada a él, Cristian, su novio y hasta ahí para mí, una barrera imposible de superar ya que ella hablaba mucho de él y lo bien que estaban.
Llegando fin de año, en la oficina decidimos organizar un after office luego del brindis con los dueños de la empresa.
Ese día, Mariana estaba vestida con un pantalón negro que marcaba su cola y su cintura, tenía una remerita que apenas dejaba descubrir su abdomen y con un escote que mostraba el inicio de sus pechos, cabe destacar que ella no era una mujer voluptuosa, pero tenía una figura tan armoniosa, como su actitud de perra al caminar y creo que eso es lo que más me calentaba de ella.
Cruzábamos diálogos en algún almuerzo, risas, nos mirábamos, pero para mí ella era imposible, aunque siempre había como un “algo” en el aire entre nosotros dos.
Durante el brindis, los dueños dando el mensaje de fin de año, aprovechan la oportunidad para contar que a partir del 31/12, Mariana dejaba de trabajar con nosotros, contaron que se iba a vivir a Italia por una oportunidad laboral que tenía su novio. Luego de la noticia, los 20 que éramos nos acercamos a saludarla, para mí sorpresa se dio entre ambos un abrazo espontáneo y debo reconocer que en ese instante que me apoyó el cuerpo, me prendí fuego... “Bueno, mucha suerte loca, cuídate” “Che, todavía no me voy, nos falta el after...”
Que carajo me quizo decir con eso? Me quemé la cabeza pensando desde la oficina hasta el bar.
Al llegar empezamos a tomar, música, empezamos a bailar y yo sentí que ella me buscaba. Que pajero! Es todo producto de mi cabeza, mira si esta mina me va a buscar a mi?
Nos ponemos a hablar y por el volumen nos acercábamos bastante para hablarnos, me hablaba cerca del oído y yo no podía disimular lo dura que me se ponía la pija.
Estábamos MUY cerca, casi boca con boca hasta que “Ah Mira! Ahí vino Cristian” Para mis adentros pensé “La concha de tu madre flaco!!!”
Ya con la fiesta arruinada y sin motivos para quedarme, ademas de ya estar medio ebrio, decido ir al baño y partir para mi casa.
Encaro para el baño, entro... atrás mío, antes que se cierre la puerta, aparece él, su novio... dale flaco, déjame mear en paz la puta que te parió!!!
Se pone al lado mío y mientras estaba cada uno en lo suyo me dice: “Hace 15 minutos que los estaba mirando”. Me pusé bordo, no sabia donde meterme. “Qué onda con la flaca?” Me tira...
No sabia que carajo contestar “Buena onda, es copada, no pasa nada”...
Me mira de arriba a abajo y me dice “Vos te la querías coger?”
“No, no... nada que ver”
“Yo los estaba viendo 5 minutos más y te comía la boca ella”
Yo no sabia donde meterme, no sabia si me iba a cagar a trompadas o que...
“Ella me vió que yo estaba ahí y no te aflojó, sabe que me calienta que los flacos se la quieran coger”
Se me acerca al oído y me dice “Y cada tanto alguno se la coge... para mi”
Literalmente me explotaba la pija... que me está diciendo este flaco? Que mierda pasa?
Me pone la mano en el hombro y me dice... ella elige y me parece que te eligió, veni conmigo...”
Mudo, pálido, lo sigo... se para adelante de ella, le habla al oído, ella me mira... yo la miro... hablan, me siento incomodo... me voy a la barra a comprar una cerveza.
Cuando tengo la cerveza en la mano, siento la voz de ella que me dice “Salgamos, vení con nosotros” y me agarra la mano.
Yo no entendía nada de nada, pero veía su cola caminar adelante mío y ya estaba jugado... la sigo.
Salimos y me dice, Cristian fue a buscar el auto, ya viene, vamos a casa a tomar algo más...
Llega el auto, el flaco baja la ventilla y tira... “Llego el remise, vayan atrás chicos, así van más cómodos”
Ella se ríe, me dice subí, me subo, se sube atrás... hacemos media cuadra y me empieza a acariciar la pija, que era de piedra, por arriba del pantalón, mientras ellos hablaban de lo que había para tomar en su casa.
Con total naturalidad, me desabrocha el cinturón, me abre el pantalón, saca mi pija totalmente húmeda y empieza a chuparla, casi al mismo tiempo que él, baja el espejo del parabrisas para verla chuparmela toda.
No sabia que hacer para no llenarle la boca de leche... como pude le dije “Ay para, porque no puedo más”
Él se da vuelta y me dice “llénale la boca de leche”.
Medio segundo después se escuchó una pequeñita arcada y ella que hacía “mmmmmm” que rico...

No lo podía creer... me reía de nervios, no entendía nada.
Llegamos a la casa, como si nada me hicieron pasar.
El abre una cerveza, me convida... prende la tv me pregunta de qué cuadro soy... hablamos
A los 10 minutos aparece ella, vestida o desvestida para matar... en ropa interior, un tanga que prácticamente no existía, me atraganté cuando la vi y no podía para de toser...
Me lleva la sillón, me sienta, me desviste suavemente bajo la atenta mirada de él.... de nuevo, estaba al palo.... me la toca... me da un forro, me lo pongo y se sienta arriba mío... empieza a moverse... el se levanta y le saca el corpiño... se para atrás... “Agarrale la cola” cuanto había deseado ese orto... se lo agarro fuerte con las dos manos, lo manoseó de forma desbocada mientras le chupo las tetas... ella gemía y lo miraba fijo a él.... “No sabes lo dura que tiene la pija” le dice ella a él... y él le dice “Cogetela toda”.
Ella se empieza a mover más fuerte, se aprieta toda contra mí y yo ya no daba más, las ganas de cogerla acumuladas, el morbo del flaco mirando, tocándose, acercando la cara al culo de ella se para ver como entraba y salía mi pija... no pude más y acabé como sino hubiese acabado hacía 20 minutos...
“que ganas que tenia de cogerte” me soltó... ya me había bajado la calentura, me sentía muy raro, ellos hablaban como si nada... ese culo, esas tetas... sus curvas, habían sido mías. Increíble, que locura...
Terminamos una cerveza más y les dije que me iba, me acompañó ella hasta abajo y me dijo “Si venís a Italia, tenes lugar donde parar, comer y coger”. Nos dimos un beso en la mejilla y nos despedimos hasta el día siguiente...