Mi mejor amigo, su novia y yo.

Era verano y el calor se hacia insoportable.Mi mejor amigo estaba en una quinta de vacaciones y me invitó a pasar unos días allí.Él tenia 21 años y yo 19.Nos llevabamos de maravillas y nunca había pasado nada entre nosotros.
En ese momento él estaba chateando por MSN con su novia de turno.Una morocha espectacular de piel morena,con unas tetas redondas, grandes y firmes y su cola era paradita pero no grande.Yo soy rubia, tez blanca con un culo que genera envidia, cintura de avispa y buenas tetas pero no tan grandes como las de ella.
Mientras chateaba con ella pude ver que tenia una pagina porno abierta sobre tríos.No les puedo explicar lo caliente que me puse imaginando un trío con semejante morocha.
Bromeando le dije: me parece que estas considerando la posibilidad de hacer un trío con tu novia, y el respondió que si, pero no sabía como pedírselo a la otra chica.
Para ese momento yo era virgen, y él lo sabia.Me confesó que solo la idea de penetrarme lo hacia perder la razón, y que su novia era bisexual y estaba muy caliente conmigo.Obviamente no le creía y me dijo: te lo voy a demostrar.
Me hizo sentir su erección y luego de sacarle una foto a mi culo, se lo envió a la morocha...ella le mandó una foto de su tanguita blanca toda mojadita diciendo mira como me pone la rubia.
Yo tenia una calentura que no podía más y obviamente le pedí que trajera a la morocha.
No se si era tal la calentura que tenia, pero no estaba nerviosa...solo quería que llegara la morocha para chuparle la concha .
Cuando llegó mi tanga estaba hecha agua, apenas me rozara yo iba a acabar como la gran putita en la que me estaba convirtiendo.
Apenas llegó, pude ver su cara de lujuría y me di cuenta que no íbamos a durar nada.Nos acercamos lentamente , me corrió el pelo de la cara y nos dimos el beso más caliente de nuestras vidas.Nuestras bocas bien abiertas , pura, lengua, saliva pero todo muy lento y sensual.No solo para enloquecernos a nosotros, sino al macho que nos iba a penetrar más tarde.
No podíamos parar de tocarnos las tetas, los culos, pero queríamos guardar nuestras conchitas para darnos mucha boca y lengua.No les puedo explicar lo que fue chupar esas tetas, esos pezones, pasar la lengua entre sus dos tetas transpiradas....
Fui bajando más y más besando sus abdominales perfectos y podía sentir el aroma a hembra en celo que emanaba de su concha tan abierta y mojada.Le pedí que se recostara en el sillón de un cuerpo así iba a poder degustar esa exquisitez de concha a mi gusto.Probar su concha me hizo enloquecer y a ella largar gemidos que me estaban transformando una puta caliente profesional en chupar conchas.La morocha no me duró nada, a los dos minutos me mojó toda la carita...pero pedía más.Yo tenia la concha hinchada, mojada y me dolía de lo caliente que estaba.Tenía hambre...pero hambre de pija.Mi amigo, que es un amante perfecto se dio cuenta y sin mediar palabras me penetró...
Continuará