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Borrachas en la cabaña

Pasó hace poco. Fuimos con Flor y Daiana a pasar unos días en una cabaña que alquiló el novio de Dai. El plan era simple. Ellos iban a tener un finde largo juntos (él vive en su pueblo y la ve solo los fines de semana o feriados) y nosotras dos podiamos enganchar algunos machos o jugar entre nosotras como saben que nos gusta. La cosa venía bien. El loco que se llama Omar vino puntual. Cargó las valijas en la parte de atras de la camioneta y salimos los cuatro. Dai con un short amarillo bien apretado, una remerita de la facu y sandalias. Flor y yo con unos vestiditos de verano, el mio era violeta y el de ella rosa. Mi vestido era mas escotado porque me gusta lucir mis tetas. A mitad de camino nos enteramos que Omar había alquilado la cabaña con unos amigos y que ellos nos esperaban allá con un asado. Las dos miramos a Dai que nada nos dijo de esos gauchos en nuestra cabaña. Ella se sonrió en el espejo y levantó sus hombros como diciendo y bueno. Al llegar nos encontramos con tres navos tomando fernet en una botella cortada. Los tipos nos miraron como si fueramos modelos de playboy lo que nos causó gracia y un poco de pena por ellos que no estaban ni un poco en carrera para tener algo con nosotras. Eran tipos un poco grotescos. Pinta de pueblerinos mal hablados pero hicieron un buen asado y como nos querían coger eran muy amables. Flor aprovechaba. Les mangueaba puchos, los hacía hacer todas las tareas de la casa y los tipos aceptaban gustosos por una sonrisa y un beso en la mejilla. Así pasamos casi todo el primer día. A la noche los novios se encerraron y nosotras salimos con los esclavos de Flor.
Fuimos a un boliche medio pelo que había en la zona. Un lugar chico pero había buena música y los flacos nos pagaban la bebida así que no teníamos que abrir la cartera. Eran poco más de las tres y Flor ya estaba tambaleando. A mi me ofrecían pero yo con un poco que tome me mamo y no tenía planes de hacerlo. A mi amiga en cambio se le notaba el pedo pero lo que se notaba mal era como mientras hablaba le iban llenando el vaso los pajeros amigos de Omar. Era algo tan obvio que por un momento pensé que mi amiga estaba fingiendo lo borracha pero me iba dando cuenta que no era así.
Empecé a joderlos para que volvamos a la cabaña. Ahí por lo menos estaba Omar que si bien era un pollerudo al menos por respeto a Daiana pondría un poco de orden.
Cuando subimos a la camioneta la hice pasar al asiento de atrás de la cabina a Flor y me senté al lado suyo. Uno de los flacos se quiso meter pero lo dejé del otro lado. Los otros dos subieron adelante y miraban con cara de degenerados. El que venía al lado mío se dio cuenta enseguida que no tenía ningún interés en él y me salteaba tratando de dirigirse a Flor que estaba tan borracha que se reía de todo. Apenas llegamos a la cabaña yo que venía con mi plan maquinado en la cabeza pasé derecho al cuarto de Dai y Omar pero no tuve en cuenta lo que podía encontrar. Abrí la puerta de lado a lado como si fuera mi casa y adentro estaba mi amiga en bolas haciéndole una buena mamada a fondo a su novio. Apenas me vieron el flaco se cubrió como una virgen y mi amiga se enfureció, traté de explicarle lo que pasaba pero entre gritos y empujones me sacó del cuarto. Estaba tan enojada y avergonzada con mi interrupción que no escuchaba una sola palabra de lo que intenté decirle. La discusión que fue más una cagada a pedos de Daiana duró algunos minutos y al darme cuenta que mis intentos eran inútiles decidí volver al living y buscar a Flor. Estaba pegando la vuelta cuando escuché unos gemidos y mi paso cansado se aceleró sospechando lo que pasaba.
Apenas me asomé me encontré a mi amiga casi desnuda. con la tanga a media pierna siendo cogida en cuatro por uno de esos provincianos. Otro le estaba llenando la boca de verga y el tercero más lento se estaba terminando de desvestir en el sillón. La iban a re enfiestar los muy zarpados. No es que me joda el sexo grupal pero esos tipos no eran para nada nuestra medida de macho. Fui corriendo empujé al que le ocupaba la boca y los empecé a insultar. Los tres ya venían chupados así que se cagaban de risa. A esa altura Flor gemía por el garche pero no fijaba la vista en ningún lado en particular. Se le notaba el mareo. Entre los otros dos trataban de callarme y me forcejeaban para que no me lleve a Flor. A uno de esos genios campiranos se le ocurrió la idea de hacerme tomar un poco para que quede como una borracha mentirosa al ver la poca bola que me habían dado la primera vez que los quise acusar. Uno de ellos me agarró y el otro buscó una botella verde de ginebra que había en una despensa. A todo eso habían largado un poco a Flor para solucionar el problemita mío. Apenas me acercaron la botella me di cuenta que era fuertisima la bebida y apreté los labios para no tomar ni una gota pero entre el forcejeo aflojé la boca para decirles que me dejen y metieron el pico de la botella abierta en mi boca levantando el culo de la botella totalmente. El fuerte alcohol empezó a rebalsar de mi boca y ante el ahogo instintivamente tragué mientras veía el contenido bajar en la botella. Apenas me apartaron la botella tuve ganas de vomitar y uno de los flacos me sacó afuera para que no fuera a ensuciar. La combinación de la ginebra y el aire fresco me puso en pedo automaticamente y toda la cabaña empezó a dar vueltas para mi. Lo siguiente que recuerdo fueron susurros y caer sobre el sillón tirones en mi ropa y una boca chupando mis tetas. Logre focalizar la vista y vi al más grandote de los tres que me chupaba una teta mientras empezaba a colarme un dedo en la concha. Yo gemí buscando a mi amiga que estaba arrodillada chupando otra pija. En eso veo que el otro flaco la agarra de atras y la penetra con ganas. El que estaba conmigo bajó a mi concha y empezó a chupar. Siento una voz de atras del sillon que dice: para esto me fuiste a buscar putita? Era Omar en boxer. Al parecer había terminado de coger con Daiana y la había dejado durmiendo. Yo estaba tan borracha que me reí de lo absurdo de su comentario pero eso para él fue un si. Dio la vuelta en el sillón y me empezó a comer la boca mientras me apretaba con fuerza las tetas. Estabamos en medio de un doble trío con el novio de nuestra amiga y sus grotescos amigos pero en ese punto recordé la poca bola que me había dado Daiana cuando traté de evitar todo eso en primer lugar y empecé a meter mi lengua hasta la garganta de Omar que se calentó el doble. Dejamos de besarnos un segundo y respondí a su pregunta. Para esto te fui a buscar, quiero mucha pija. Fue suficiente que lo diga para que se quite el boxer y me llene la boca con su pija. Aún tenía gusto a sexo por la cogida que le había dado a mi amiga y eso me calentó más. Se la chupaba con dedicación. Nos cargaron y nos llevaron al cuarto donde dormian los amigos de Omar. Nos tiraron en una cama a las dos desnudas casi a oscuras, Senti manos y bocas por todo mi cuerpo y los gemidos de Flor me decían que estaba sintiendo lo mismo Nos enfrentaron a las dos en cuatro y nos besamos como más nos gusta. Con mucha lengua para hacer bueno el show. Los aplausos no tardaron en llegar pero eran los cuerpos de Omar y uno de sus amigos que nos cogían haciendo que nuestras nalgas suenen al chocar con sus cuerpos, Veía de frente como el novio de nuestra amiga se cogía a Flor y su amigo detrás mio me daba a mi. Las dos gemiamos casi a los gritos entre besos lesbicos que calentaban a los chicos. Ellos cambiaban sus lugares para cogernos todos un rato. Omar me dijo: veni acá tetona trola, a vos te voy a garchar yo solo y me llevó a la cama que estaba al lado. Se me subió arriba y me cogió chupando mis tetas. A un lado veía como sus amigos se habían acomodado y el más grandote le estaba haciendo el culo a Flor. Los otros dos se repartieron su concha y su boca para que tuviera las tres pijas adentro a la vez. Ver el culo dilatado de mi amiga tragando pija calentó fuerte al novio de Dai que empezó a jugar con sus dedos en el mío. El que estaba cogiendo por la concha a mi amiguita dejó su lugar y puso su pija en mi dilatado culo. Ya la traía lubricada por la concha jugosa de Flor así que entró sin mucha ayuda. Flor gritaba menos porque seguía chupando pija pero a mi me tapaban la boca porque mis gritos eran ensordecedores y Omar no quería que Dai lo agarre con las manos en la masa. Un poco por eso aceleró el garche que me daba y cuando estaba por acabar la sacó y me bañó las tetas de leche. Cambió lugar con el amigo al que Flor le chupaba la pija e hizo que mi amiga se la limpie. El otro flaco al verme con las tetas chorreando semen me la puso en la boca y agarrandome del pelo me la hundió hasta la garganta a toda velocidad. Tardó poco en acabar después de varios minutos de mi amiga chupandosela y con mis ojos fijos en su cara. Mis labios desbordaron leche y saliva. El que me culeaba no paraba y me daba más fuerte así que no tardé en llegar al orgasmo. Al poco tiempo sentí el semen llenando mi culo. Omar y su amigo acabaron sobre la cara de Flor y enseguida el hijo de puta se fue a bañar para volver con su novia que dormía como la princesa Aurora. Yo me quedé dormida entre los dos amigos de Omar mientras Flor seguía chupandole la pija flácida al otro ordinario que estaba acostado con las manos atrás de la cabeza. Al día siguiente despertamos las dos desnudas en nuestra habitación. Flor no recordaba nada y yo fingí no hacerlo tampoco. La única queja de Daiana fue que yo había llegado supuestamente en pedo y me metí a su cuarto. Las miradas de complicidad entre su novio y los tres amigos eran obvias además aún quedaban unos días en la cabaña que los ilusionaban con más acción.

8 comentarios - Borrachas en la cabaña

pablo2727
Que buen relato, me calento mal!!! Se me puso al palo!
Royito1974
Se hacían las lindas y los paisanos las reculiaron y las llenaron de leche jaja
exiliado-40
que perra alzada que soso jajajaj como te rompieron toda nena como gozaste y ue caliente me pusiste +8
Sergiocorno
Que hermosas putas nos calentastes mal van pts.
danydan
excelente! van puntos...
diablo5802
me gusto mucho el relato escribes muy bien me calientas mucho.