Microrrelatos (II)

Te recuerdo nuevamente, y extraño eso que teníamos y eso que no teníamos también. Por que las distancias no significan nada cuando dos cuerpos se piensan, se desean, se calientan, se llevan mutuamente al orgasmo.

Revolviendo el baúl de los recuerdos encuentro aquél barquito que armaste con el papel donde anotábamos los tantos. ¡Qué terrible cogida me pegaste! En el juego, en la cama, y hasta en la cocina.

Te calienta saber que me revolqué con otros. Te tocas mientras te cuento algunos detalles. Se unieron el hambre y las ganas de comer, como se dice. Se unieron tu deseo de verme feliz y disfrutando de mi cuerpo, y el mío de volverte loco relatándote.

Escribí lo anterior pensando en uno, para cuando esto fué publicado ascendió a por lo menos cuatro o cinco la lista de "público" a los que les gusta saber de mis revolcones. ¡Que bellos y pasivos espectadores tiene esta joven mujer mientras experimenta su lado mas desinhibido!

Por momentos caballero, por momento amo en mis fantasías. @Danilo2918 se muestra interesado en los límites -sobre todo en saber aquellos que puede pasar, y a aquellos que no- y gustos de su sumisa. ¡Que viva el intercambio cultural! ¡Que viva mi Bombon Chileno!

"Tan libre por momentos, tan expresiva en el chat, tan boca sucia en el sexo... y después... tan tímida!" ¡Salud! Por siempre alentar a disfrutar, a probar cosas nuevas, a sentirse plena, libre.. y además por describirme a la perfección. ¡Salud!

Si de tamaños hablamos, es la más grande, y una de las más deseadas. Pero siempre digo que eso no es lo más importante. Lo es para mí la moderación con la que me habla en público y el desenfreno con el que puede dirigirse a mí en privado.

La abstinencia la tiene loca. Su cuerpo esta sensible a cualquier estímulo, a veces el solo roce del jean sobre su clítoris puede hacerla temblar y desconcentrarse en momentos inadecuados. "Si, señor. Me repite su consulta, por favor. Hubo interferencias en el audio".

La imagino morocha, senos prominentes enmarcados en un rescatado pero provocativo escote, piernas largas, piel suave y un perfume natural que invita a recorrerla completa a besos, aunque nada de esto es excluyente a decir verdad. ¿Faltará mucho para encontrar la indicada para aquel trío que me gustaría hacer?

Nuevamente en mis pensamientos, querido periodista. ¿Cuándo coincidiremos nuevamente en una cama -o en una silla o en una mesada- para sacarnos las ganas que nos venimos acumulando? ¿Será pronto que podré volver a deleitarme con semejante erección elevándose ante mi?