Disfrutando como lo quería

Este relato es continuación del anterior... O más bien con el mismo personaje. Espero les guste que yo me calenté mucho recordando

Se acuerdan de que les Conte que siempre había razón para emborracharnos?... bueno ese día no era la excepción… todos nos fuimos de gira por ahí. La tarde iba avanzando y la noche llegaba, tenia la casa de mi viejo sola que mas daba invitar a los que todavía teníamos pila, La verdad con FJ no habíamos hablado más de lo que había sucedido era cosa del pasado. 
Llegamos a casa con aun más para tomar y comenzamos a conversar estaban dos amigos, FJ y yo. La noche se fue pasando y ya estábamos cansados al otro día la universidad esperaba, pero había solo dos camas en mi casa, rápidamente uno de mis amigos se apropio de mi cama que eran más pequeña y nos quedamos FJ mi amiga y yo en la cama más grande (lo sé piensan alto trío, pero eso será para otra historia).
A penas cerré los ojos sentí como FJ me iba corriendo la mano por la pierna buscando mi culo, me volteé para decirle que no daba, que mi amiga estaba ahí, pero les conté del ímpetu de ese hombre, bueno así mismo me comió la boca. 
Alcohol más calentura significa nada importa, así que nos fuimos al baño, pero todo era muy pequeño y no iba a hacer mucho ahí… Pero el sillón era perfecto, sin más fuimos al sillón y nos comenzamos a besar y como me comió la boca, y sus manos se fueron directo a mis tetas… Que grande son! Me encantan estos melones me soltó… dos minutos y mi sostén estaba en sus manos y su lengua en mis pezones. 
Y yo para que mentir solo pensaba en que por fin me comería ese pene duro, grande y grueso… así que sin pensar que mis dos amigos estaban durmiendo en las piezas, por fin pude desnudarlo y ver lo que había tocado y tenido entre mis piernas. Era un pene grueso y largo como de peli porno y durísimo justo para que lo comería. Sin pensarlo abri la boca y lo comencé a chupar y lamer, de vez en cuando levantaba la vista solo para ver sus caras de placer, pero me sentía comiendo el mejor dulce, su pene era delicioso, podía recorrerlo con ambas manos y jugar a cuanto entraba en mi boca. 
Luego de un rato de comerlo tal como a mi me gusta es decir sin parar y completo, era hora de sentir de nuevo en mi vagina su pene grueso, estaba húmeda, mojada y caliente…. Sus manos me tomaron la cintura y me pusieron en cuatro para recibir su pene caliente, sentí como entraba cómodamente pero a medida que fue clavándolo, me di cuenta de lo grande que era, estaba loca de placer.
Me dice que lo cabalgue, y sin pensarlo lo monte, que pedazo de pene le dije, y con su voz segura, me dijo… sabes que todo lo que tengo es lo mejor, y como tenia razón. Ayude a su pene a entrar y mientras lo iba metiendo su manos y su lengua recorrían mis tetas jugando a morder y lamer, estaba en fuego, asi que nada de suavidad me volví loca subiendo y bajando por ese pene delicioso, estaba absolutamente mojada y acabe cabalgando su pene durísimo.
Baje a chupárselo de nuevo, eran un pene que merecía eso y más, y para mi sorpresa me ofrece un 69… pienso que rico número y me acomoda de la mejor manera, y se mete en mi concha y comienza a lamer como nunca nadie lo había hecho, su lengua era gruesa y cubría todo mi clítoris el placer que me producía hacia que cada vez quisiera chuparlo más y mejor. A medida que me chupaba la concha, sentía como su lengua iba más allá hasta llegar a mi cola y sus dedos comenzaron a jugar con esa abertura, me fue lamiendo y colando los dedos en la cola , yo solo comía y comía su pene, pero para ese entonces estaba humectada, dilatada y llego el segundo orgasmo. 
Después de golpearme la cola suave pero duro con las manos, me dijo ponte en cuatro y sabía lo que venía, su pene quería mi cola, pare bien la cola y me siguió lamiendo, una vez bien mojada apoyo la cabeza de su pene y comenzó a penetrarme mientras sus manos jugaban con mi clítoris, yo solo podía pensar que iba a quedar abiertísima con semejante pedazo. Me fue penetrando más y más, hasta que sentí sus pelotas chocar con mi culo y dije esta dentro y me dijo sí, entro completo. Y comenzó a darme y masajear mi cola y sentí como su pene se hinchaba más y luego de unos minutos sentí el chorro caliente de leche dentro de mi cola y como a medida que lo iba sacando seguía chorreando. 
Nos fuimos cada uno al baño en turnos mientras el otro se aseguraba que nadie allá despertado, los chicos dormían… Nos quedamos un rato desnudo en el sillón conversando de la vida, hasta que tomo una lata de papas fritas y las volcó en su pene (jamás había comido mezcla semejante), me dijo chúpamela de nuevo, eres como un diosa haciéndolo… con semejante piropo no lo dude, dos o tres chupadas y su pene volvía a tomar forma y comencé a chuparlo más rápido y mientras comía papas fritas me iba comiendo ese pedazote de pene. 
Una vez acabadas las papas fritas (que eran solo pedacitos) me monté de nuevo en su pene que ya estaba durísimo de nuevo y comencé a moverme lentamente, disfrutando de como se sentía y buscando otro orgasmo, que no tardo nada en llegar… Ya van tres me dice eres una golosa y sucia se come mis tetas y comienza a clavarme durísimo y viene un cuarto orgasmo. Bueno entonces me dice, ahora me toca a mí, vuelve a la carga me pone en cuatro y me clava el pene en la concha que estaba mojadisima, luego de empaparse de mi humedad, vuelve a buscar mi cola, esta vez ya no había suavidad me rompió entera y acabo nuevamente llenándome la cola de leche. 
Lo besé y le agradecí los orgasmos… Nos fuimos a dormir… hasta el día de hoy mi amiga no se explica como tuve semejante polvo con ella durmiendo en mi pieza.

Espero sus comentarios!