Desperté y salí de la recámara de Rosa, fui al baño, regresé y saqué un condón del guardarropa de Rosa, entré a la habitación de Katy, me senté a su lado y le acaricié el cabello, se despertó y me vio.
-Hoy es tu última lección.- y le mostré el condón, le fui quitando las sábanas, se levantó, abrí el condón y se lo di para que me lo pusiera -Primero tienes que chuparme el pene, eso te va a ayudar a ponerme el condón.- lo hizo y supo como ponerme el condón, luego me levanté y me puse en frente de ella, la besé y le acariciaba las tetas, ponía su mano en mi pene, le dije que se recostara, le abrí las piernas y me puse encima de ella, empezaba a respirar muy agitada, le dije que se calmara, que sería rápido si ella me ayudaba -Oye...ya casi terminamos, solo hoy y ya, te va a doler pero después de un tiempo solo te incomodará.- abrí más sus piernas, frotaba mi pene en su vagina peluda, metí la punta y ya empezaba a llorar, poco a poco fui metiendo todo mi pene que empezó a gritar, la callé con mi mano en su boca, me movía lento para no lastimarla más, se movía mucho, me empujaba pero yo no la dejaba, solo cinco minutos y entonces eyaculé, por lo mismo ella gritó más fuerte porque mi pene se puso más duro, entonces nos relajamos, saqué mi pene y me quité el condón, se lo mostré todo lleno de mi leche -Lo ves, fue rápido.- me recosté a su lado -Solo dos más y ya, tendré que irme a casa de mi tía Angela, pero te vendré a visitar.- me levanté y me bañé, ella no.
Más tarde, cerca de las tres de la tarde, me Katy no hizo nada en todo el día, se quedó en su recámara todo el día, fui a la recámara de Rosa, saqué otro condón, llamé a Katy para que viniera a la sala, me senté y ella se quedó parada, como el sillón está al lado de la mesa le pedí que tomará una silla, me levanté, ya empezaba a excitarme, me puse el condón, ella me veía con más miedo que en la mañana, la tomé de los brazos, le chupé las tetas y la besé, la volteé con fuerza, le dije que se subiera a la silla, se quedó incada en ella, le empecé a meter mi pene con lago de rapidez y fuerza, volvió a llorar, no le tapé la boca, la dejé gritar, yo me movía como si estuviera haciéndolo con Rosa, a mi ritmo me excitaba tanto que se ponía duro y sentía la eyaculación aproximarse, pero seguía teniendo mi pene dentro, la tomaba de sus brazos y la besaba, luego de las tetas, suaves y pequeñas y conforme me acercaba al clímax me sostenía del mango lateral de la silla, iba más rápido y más rápido ella gritaba y gritaba, hasta que eyaculé tanto y tan fuerte que lloró a mares y yo la besaba por la espalda, la fui besando hasta bajar a su culo todo rojo y adolorido, saqué mi pene del condón, lo amarré y se lo di -Como mi muestra de cariño para ti- me senté y solo vi como trataba de ponerse de pie, pero no podía, hasta que la tomé del brazo y las piernas y la llevé a su recámara, donde pasamos el resto de día...
-Hoy es tu última lección.- y le mostré el condón, le fui quitando las sábanas, se levantó, abrí el condón y se lo di para que me lo pusiera -Primero tienes que chuparme el pene, eso te va a ayudar a ponerme el condón.- lo hizo y supo como ponerme el condón, luego me levanté y me puse en frente de ella, la besé y le acariciaba las tetas, ponía su mano en mi pene, le dije que se recostara, le abrí las piernas y me puse encima de ella, empezaba a respirar muy agitada, le dije que se calmara, que sería rápido si ella me ayudaba -Oye...ya casi terminamos, solo hoy y ya, te va a doler pero después de un tiempo solo te incomodará.- abrí más sus piernas, frotaba mi pene en su vagina peluda, metí la punta y ya empezaba a llorar, poco a poco fui metiendo todo mi pene que empezó a gritar, la callé con mi mano en su boca, me movía lento para no lastimarla más, se movía mucho, me empujaba pero yo no la dejaba, solo cinco minutos y entonces eyaculé, por lo mismo ella gritó más fuerte porque mi pene se puso más duro, entonces nos relajamos, saqué mi pene y me quité el condón, se lo mostré todo lleno de mi leche -Lo ves, fue rápido.- me recosté a su lado -Solo dos más y ya, tendré que irme a casa de mi tía Angela, pero te vendré a visitar.- me levanté y me bañé, ella no.
Más tarde, cerca de las tres de la tarde, me Katy no hizo nada en todo el día, se quedó en su recámara todo el día, fui a la recámara de Rosa, saqué otro condón, llamé a Katy para que viniera a la sala, me senté y ella se quedó parada, como el sillón está al lado de la mesa le pedí que tomará una silla, me levanté, ya empezaba a excitarme, me puse el condón, ella me veía con más miedo que en la mañana, la tomé de los brazos, le chupé las tetas y la besé, la volteé con fuerza, le dije que se subiera a la silla, se quedó incada en ella, le empecé a meter mi pene con lago de rapidez y fuerza, volvió a llorar, no le tapé la boca, la dejé gritar, yo me movía como si estuviera haciéndolo con Rosa, a mi ritmo me excitaba tanto que se ponía duro y sentía la eyaculación aproximarse, pero seguía teniendo mi pene dentro, la tomaba de sus brazos y la besaba, luego de las tetas, suaves y pequeñas y conforme me acercaba al clímax me sostenía del mango lateral de la silla, iba más rápido y más rápido ella gritaba y gritaba, hasta que eyaculé tanto y tan fuerte que lloró a mares y yo la besaba por la espalda, la fui besando hasta bajar a su culo todo rojo y adolorido, saqué mi pene del condón, lo amarré y se lo di -Como mi muestra de cariño para ti- me senté y solo vi como trataba de ponerse de pie, pero no podía, hasta que la tomé del brazo y las piernas y la llevé a su recámara, donde pasamos el resto de día...
0 comentarios - Le enseño sexualidad a mi prima inocente. III