Inicio sexual de mi cuñadita

Esta anécdota me paso mientras estaba de novio con mi actual esposa, siendo todos los involucrados mayores de edad. Para ponerlos en contextos, en ese momento llevaba doce años de noviazgo con mi novia, la cual a su vez tenia una diferencia de 12 años con su única hermana menor, cuando llegue a esa familia, siendo ambos adolescentes, mi cuñada era muy chiquita, por lo que estaba entre su hermana y yo casi como una hija, inclusive había oportunidades en las que salia con nosotros a cenar. Con el paso del tiempo, mi cuñadita fue creciendo claramente, hasta convertirse en en una pendeja de estatura media, pelo rubio enrulado y largo, tetas enormes (sin cirugía), de esas redondas, naturales, bien paraditas, que sobresalen con cualquier remetira y los escotes hacen que pierdas la cabeza, la cola normal, paradita por la flor de la juventud, pero nada demasiado llamativo, completando el combo unos labios carnosos sin entrar en excesos tipo botox descontrolados y unos ojazos claros hermosos.

El feeling entre nosotros empezó por inercia si se puede decir de alguna manera, ya que ella empezó a almorzar conmigo porque durante los días de semana ya por la tarde cursaba el pre ingreso a la Universidad de Córdoba, su casa quedaba bastante lejos y me departamento está a pasos de la sede de la universidad. Mi novia, en ese momento, no almorzaba en mi departamento porque hacia horario de corrido en la oficina, por lo que no llegaba hasta las 19:00, yo, en cambio, al trabajar freelance como publicista/diseñador gráfico/marketing/arquitecto tengo horarios sumamente flexibles. La cuestión es que compartir la comida fue haciendo que de alguna manera las barreras entre nosotros se vayan eliminando, y me convertí en una suerte de confidente, no solo sexual, sino en general, por lo que nos hicimos muy cercanos. De alguna manera la sexualidad se presentaba en nuestras charlas, donde ella me contaba lo que le pasaba, y que la mayoría de los pendejos de su edad tenían la fija en la cabeza, a lo que yo trataba de responder y de alguna forma de insistir, en que se cuide en las relaciones, que tenga cuidado con quien se junta y las cosas normales que aconsejaría cualquier hermano mayor, mas considerando el hecho de que era virgen.

No voy a negar el hecho de que al estar tanto tiempo juntos en algunos momentos me impulsaba el morbo al verla por mi departamento con shorcitos cortos, remeritas ajustadas, o calzas cuando volvia del gimnasio, o inclusive sus culotes tirados en mi cesto de basura, pero de alguna manera trababa de buscar pensamientos en otra cosa y evitar caer en la tentación.

Ese día, mientras almorzabamos, me comento que el pendejo con el que se mensajeaba, había sido visto por su amiga en el boliche a los besos desaforados con otra pendeja, por lo que estaba sumamente molesta, aunque de alguna forma aliviada, por no haberse entregado por primera vez a este pendejo. Yo simplemente la escuchaba, y le decía que ya iba a encontrar a alguien en quien realmente confíe para dar ese paso, a lo que me planteaba que como sabia si era el adecuado o no, y que no estaba seguro de como legar progresivamente a ese punto, explicándole yo que hay muchos pasos o juegos previos que podía hacer para ir soltándose, a lo que sus ojazos respondieron con una amplia apertura, cuando, suena mi telefono, un cliente que me llamaba para que le prepare un proyecto de diseño para una expo que se le venia encima, por lo que nuestra conversación quedo ahí, como seguía hablando con mi cliente, ella se cambio y se fue al gimnasio, yo estuve un rato repasando texturas y colores con mi cliente, por lo que después de una conversación de 50 minutos me tire un rato a descansar, una pequeña siesta para recargar energias.

En un momento, siento que me despiertan, lo primero que pensé, uhhh me re dormí y no hice un carajo en toda la tarde, para mi sorpresa, era mi cuñadita, que había vuelto del gimnasio, se baño y estaba con un shorcito de tela, y una remerita, debajo de la cual no había corpiño, que dejaba a flote esas hermosas tetas:
Ella: Quede pensando en lo que me dijiste mientras almorzabamos...
Yo: Digo muchas boludeces en general, vas a tener que ser mas especifica...y me arroje una pequeña risa
Ella: se rió junto conmigo...y en lo que dijiste de los pasos previos a dar el paso...
Juro que hasta este momento no veía lo que se estaba por desencadenar, eran respuestas lo mas objetivas posibles.
Yo: ah! los hombres tenemos un solo punto que concentra nuestra vida sexual, somos muy básicos, todo pasa por ahí, en dos minutos pasamos de la nada, al sexo al orgasmo y ya estamos, el resto no nos importa, ustedes, en cambio, necesitan tiempo, jugueteo, ambiente, y demas, una buena idea para ver si le importas realmente a alguien es que el vago te haga ese juego previo sin nada a cambio, no es infalible pero es una buena idea.
Ella: Pensó...y que clase de jugueteos?
Yo: Nunca jugaste con vos misma?
Ella: Y...un poco si, pero no sentía tanta necesidad, no explore demasiado, tampoco voy a ocupar un consolador
Yo: No, es normal, la menstruación equilibra bastante las hormonas de las mujeres por eso no tienen la necesidad de estar cascándose todo el día como la mayoría de los pendejos, ademas, no es necesario que uses un consolador, podes jugar con tus manos, lengua, etc. 
Ella: y como por ejemplo?
Yo: depende de cada cuerpo, todos tenemos zonas erogenas, pero a cada uno nos excitan cosas y movimientos distintos, no hay una regla aplicable a todo
Ella: y vos que me harías por ejemplo?
Yo: QUE? Mi cara se habrá transfigurado, había pasado de ser su hermano mayor a su pareja? Me estaba haciendo una cama con su hermana? Me estaba calentando? 5000 preguntas iban por mi cabeza y se unian y chocaban entre si en una fracción de segundos, me quede inmóvil, no sabia que responder, que hacer...
Ella: y si, vos sos un tipo grande, que sabe como tratar a una mujer, eso ya me lo confirmo mi hermana...
Yo: pero...
Ella: pero nada, nadie se tiene por que enterar, esto es algo solo de nosotros dos, ya somos grandes aparte no te estoy pidiendo que dejes a mi hermana, solo te pido una guía...
Yo: pero vos estas loca!!!
En ese momento el morbo se apoderó de mi, se me olvido TODO, aunque inconscientemente...
Ella: mira como la tenes...y estiro su mano por encima de la colcha con la que me habia tapado...
Yo: eso no es señal de nada...
Ella: para mi si...y se abalanzo chupándome la boca, sacándome la colcha, dejandome en boxer y sin remera

Acá, como se podrán imaginar ya estaba en una montaña rusa, me esta besando con una pendeja 15 años menor, que era una bomba, cuyas tetas en mi pecho me hacían delirar, cuyas piernas se pasaban por mi verga llevándome así nomas al limite de la explosión. Pero en un momento de lucidez dije, esto es un trabajo que tiene que hacerse de a poco, y fue cuando empece a besarle el cuello y a acariciarle la parte baja de la espalda, con movimientos circulares, lo que me decía que iba en buen camino porque su respiración se comenzó a acelerar, ella mientras tanto manoteaba mi verga, por encima del pantalón, a lo que tenia que hacer milagros para no acabar ahí.
Ella: quiero que me hagas tuya...quiero que me enseñes todo...me re calentas...sueño que todas las noches me haces tuya...no se que inventar para verte y quedarme aca...
Yo: no podía hablar...

Fue entonces cuando, le saque la remera y ahí vi el paraíso, una tetas blanquitas, redondas, con unos pezones y aureolas rosadas, enormes, con mis dos manos no podía cubrirlas completas, firmes, me volvió loco, la acosté boca arriba en la cama y empece a manosearlas al tiempo que hacia un camino con mi lengua, esto hacia que se retuerza, hacia un camino desde su panza, subiendo por sus tetas, pasando por al lado de sus pezones y llegando atrás de su oreja, mientras con la otra mano acariciaba la parte interna de su pierna, no les puedo explicar como gemía, no se si fue la calentura acumulada, el momento, no estoy seguro, repetí el proceso varias veces, intercambiando los lados hasta que en una oportunidad bajo de su oreja, vuelvo a su pezón y se lo empiezo a chupar, a la par que mi mano pasaba por encima de su shorcito por su conchita, que ya se empezaba a humedecer...en ese momento explotó un orgasmo que hizo que me agarrara del cuello y me empujara contra sus tetas....y ahí fue cuando pensé, si la hago bien, me gano el quini6, el primer instinto me hizo querer sacar mi pija que ya estaba por explotar y metersela como si no hubiera un mañana, pero fui un poco mas inteligente.

Todavía no había recuperado el aliento, cuando empece a sacarle el shorcito, enorme fue mi sorpresa, cuando encontré toda su tanga húmeda, con las piernas aun temblando, cuando el shorcito paso sus tobillos, empeze a besar el lado interno de sus piernas...
Ella: hay hijo de puta por favor cogeme...
Yo: te gusta?
Ella: me encanta...que me hiciste....estoy toda mojada...
Yo: y falta lo mejor...
Seguía haciendo mi caminito hacia su concha por su pierna izquierda, ella solo atinaba a gemir y a agarrarse de mi cabeza, cuando llegue a su conchita no pude evitar saborear su humedad, estaba entregada, toda su tanga estaba húmeda, empece a lamer la unión de su conchita con sus piernas de abajo hacia arriba, mientras la miraba, y veía que estaba con los ojos cerrados aumentando su ritmo de respiración, estaba como loca, seguí lamiendo en círculos por encima de su tanga, pasando en algunas pares hasta su piel, hasta que note que su respiración iba aumentando al punto cúspide nuevamente, en ese momento emprendí el camino de vuelta por el interior de su pierna derecha hacia sus tobillos, cuando llegue alli mientras besaba su tobillo empece a retirarle la tanguita que en ese momento chorreaba...me cuesta explicar lo que era su concha, depilada, labios chiquitos, toda rosadita, su clítoris estaba durito por el momento, no podía creerlo, le corrí a un lado los labios y empece a chuparle la parte de adentro, a lo que se contorsionaba, chupaba un lado y el otro y en el tercero pasaba mi lengua por su clítoris, notaba que su lubricación aumentaba cada vez mas, cuando vi que el momento era inminente, entonces pase a chuparle la entrada de su conchita, era el primero que metía los labios ahí, todo suevecita, sumamente húmeda, era el paraíso, alternaba lenguetazos sobre su conchita y su clítoris, no lo hice mas de 4 veces cuando exploto en un orgasmo, apretó mi cuello con sus piernas y dio un gemido enorme, humedeciendo toda la cama. Cuando recupero el aliento me estiro hacia su cara y me dio comió la boca con lujuria, me aparte y le dije al oido "esto es solo el principio..." y me fui de la habitación.