Mas de los naipes
Los días iban pasando como así las semanas y los meses.
La cuestión entre Cristina y yo mejoraban gracias al psiquiatra q la trataba y a las drogas q le suministraba.
Estas la dejaban media auto en algunos momentos.
Todo era muy tranquilo y estaba bien q así lo fuese después de la tormenta q tuvimos q atravesar.
Las lesiones anales y vaginales fueron con el tiempo y algunas pequeñas cirugías, sanando.
Teníamos sexo con sumo cuidado. Aburrido para mí y sobre todo para ella.
La falta de emociones de a poco se va trasluciendo en el rostro y tanto a ella como a mi se nos veía tristes.
En una fiesta de 15 de la hija de unos amigos/parientes nos volvimos a encontrar con la pareja q inicio todo esto.
Sin buscarnos coincidimos luego de bailaren el salón en una mesa. Patricia y Ernesto mi mujer y yo.
Sentados exhaustos por el baile, tómanoslo q encontramos sobre la mesa.
Ernesto vio los ojos de Cris y advirtió algo q acercándose a mi oído me preguntó.
_Hey les sucede algo? Siguen con el rollo de la otra vez? Ya pasó mucho tiempo déjame decirte q mas allá de las apariencias Cris no la pasó tan mal…
_Lo se, le contesté, lo se. Es muy largo de contar…hubo mas después de eso y descubrimos cosas q jamás pensamos que nos iban a suceder.
Ernesto se me quedo mirando esperando saber todo lo q había acontecido y yo necesitaba desahogarme y le solté todo.
Los ojos de el estaban inyectados en sangre por la increíble revelación.
Si fuese x el se la cogía ahí nomas.
_Finalicé confesando que no sabía hacer.
_Hagamos algo Ale vengan el sábado acaso, preparamos algo rico y luego lo charlamos entre los 4.
Al regreso a casa, en el auto rompí el silencio diciendo:
_Te ves triste Cris.
_Si, apenas respondió. Hay momentos en que vuelve toda la lujuria mal entendida q tengo corriendo en mi cabeza…sino fuese x las drogas no se q haría.
A veces, dijo entre sollozos, me olvido de tomar una pastilla y vivo un infierno.
Solo mi respeto hacia ti me contiene de cometer cualquier locura.
Ella trabaja en la administración de una fabrica.
Convive con compañeros profesionales, pero en el piso de abajo son todos obreros; debía cuidarla de esa amenaza latente en su propio trabajo.
_Si tu quieres podemos hablar del tema e ir soltando de a poco, lo podemos hablar con el siquiatra también, lo q no podemos hacer es vivir como lo estamos haciendo.
Ella asintió con cierto gesto desvergüenza.
Al otro día no tomó sus píldoras apropósito; no se q habrá entendido de lo hablado pero era evidente q su sentimiento de ser humillada luchaba por salir a mostrarse de inmediato.
Ese día salió vestida con un traje negro ceñido a su silueta, pelo recogido y sus habituales lentes q usaba para leer…tal vez el único detalle q a simple vista delataba sus 50 y picos de años.
Desayuno a las apuradas y salió mas temprano q lo habitual.
La entrada para los profesionales era alas 9.30, la de los obreros 7.30.
Llegó y se dirigió derecho al sector fabril. Entre el ruido ensordecedor de las maquinas buscó al capataz.
Pedro un sesentón de buen porte y una seriedad absoluta le hizo señas para q pasara al cuarto armado para poder hablar sin los molesto ruidos de las maquinas, cerró la puerta y le dijo:
_Ahora si Sra. Cristina, en q puedo ayudarla.
_Mi mujer mencionó un reporte de tareas de años anteriores…q lo necesitaba con urgencia, ella se ofreció a ayudarlo a buscar.
Dicho esto retiró su saco y quedo con una camisa blanca con un escote impresionante 3 botones desabrochados como descuido lo hacía desubicado para esa hora, para ese lugar y en esa circunstancia.
Pedro no podía sacarle la vista de encima.
La seriedad llegó al final cuando en un juego de miradas de Pedro a los senos de mi mujer, Cristina al bulto turgente de la bragueta de Pedro y este comenzando a bajarse lentamente el cierre para darle el tiempo a ella a q se exprese ante tal situación para evitar un malentendido.
Continuó hasta el final, la mirada y los latidos de Cristina se transformaban, los ojos se abrían para acaparar todo el espectáculo y el corazón drenaba adrenalina q la iba a llevar a cometer otra vez una locura; locura que necesitaba.
Había resistido x meses, pero el monstruo no estaba muerto, solo adormecido x las drogas de su terapeuta.
De los pantalones del viejo capataz salió un miembro descomunal tal vez ensanchado x la hembra q tenía enfrente y alarga abstinencia de sexo debido a su larga viudez.
El movimiento de Cristina fue instintivo; cayó de rodillas ante el capataz.
Tomó con sus 2 manos el pene y comenzó acariciarlo con sus uñas pintadas de un rojo brillante, si era posible el tamaño del pene aumentó al eructársele aún mas ante el paso de las uñas portado el falo.
La muy perra sabía lo q estaba haciendo, pero Pedro no podía esperar mas.
La tomó violentamente de los pelos y empujó la cabeza de Cris contra su pija.
Solo entro hasta la mitad, ella buscó laminera de hacer lugar intentando q el glande penetrase su garganta, al menos un momento hasta q sus pulmones solicitasen aire.
No fue necesario un gran esfuerzo. El ahogo llegó seguido del derrame de una cantidad importantísima de semen volcado directamente en la profundidad de la garganta de mi esposa.
_Perdón Sra. Cristina, perdón balbuceo el anciano medio tambaleando luego de la brutal descarga.
Cristina apenas pudo saborear el gusto del líquido, no había pasado x su lengua.
Algunas gotas quedaban en su garganta hizo volver hacia su buche para experimentar el sabor de esa leche.
Le desagrado bastante, sabía agria, amarga…era lo q ella buscaba, que no fuese dulce ni rica, ella debía beberla peno le gustaba; así funcionaba su placer.
Se levantó y se retiró acomodándose sustraje.
_Por favor Pedro, hágame llegar el reporte q le solicité.
_Si Sra., lo q usted mande.
El viejo quedo apoyado en un mueble luego del sismo que había significado el desenfreno de su jefa.
El resto del día no fue sencillo para ella, no le había bastado pero fue consciente q se había ido al diablo con roya hecho. En breve todo el personal sabría de lo ocurrido, ella esperaba nadie le creyera al anciano.
El hecho no era hacerlo con cualquiera sino q la situación la abrumara en su decencia, q la humillación sea desbastadora.
Y yo en ese escandalo era fundamental, necesitaba ver q yo la pasase realmente mal por las cosas q ella era perpetrada.
Pensó todo el día.
_Hola Ale, como estas?
_Todo ok respondí dándole un beso en la frente.
_estuve pensando, quizás si nos hiciéramos una escapada x mes esta saciaría todo lo q me pasa. Lo mantendríamos controlado y solo nos arriesgaríamos una vez cada tanto.
No me pareció mala idea y además con tarde no verla así haría lo q me pidiera.
_Q tienes pensado Cris? Interrogué…
_Salgamos con el auto y vemos, te parece?
Salimos del barrio y nos adentramos ellas orillas de una villa q solo se veían los carros de los cartoneros.
La verdad es q me moría de miedo…eran launa de la mañana, la noche es oscura cerrada.
De pronto un estruendo en el parabrisas me hizo maniobrar bruscamente y detuvo el auto.
5 muchachos nos rodearon de inmediato.
Nos vaciaron todo, uno el mas grandote dijo:
_Ustedes quédense con todo, yo me los llevo a ellos. A punta de pistola atravesamos un callejón q en el fondo estaban de fiesta una veintena de personas. La cumbia se escuchaba a todo volumen.
Fui sentado en una silla y atado a ella.
A Cristina le indicaron casi amablemente se sentara en la cama.
Apareció otro muchachón al cual el primero le dijo: quédate acá vigilando ya vengo.
A los 10’ apareció nuevamente.
Desnúdate le dijo a Cris.
Ella realmente se la veía asustada esta vez, en sus ojos se dejaba ver q se había mandado una cagada importante.
Podemos arreglarlo con dinero dijo.
Un cachetazo voló hacia la cara de Cris.
_Q DIJE?!! Mencionó con voz de pocos amigos.
Cris llorando amargamente con sus manos sobre el rostro se puso de pie y temblando se sacaba su camisa, su pollera sus zapatos….
_Toda puta, toda, en pelotas te quiero y boca abajo.
No quedaba otra q obedecer.
_Primero te voy a probar yo.
Sacó la verga negra morcillos y en unos pocos movimientos comenzó a romperle el culo.
Si bien iba tranquilo la entrada en decole produjo un dolor importante. El villero se tomó su tiempo.
Acabó y se quedo un rato mas con toda la estaca dentro del ojete de mi esposa.
_te meto bien la leche adentro para q neos queje nadie.
El comentario sorprendió tanto a ella como a mi…pensé q ahí se terminaba todo.
Se levantó y dijo:
_Pasa!!, son $150 si le acabas en la boca$200 si acabas adentro, 20 minutos, la queras vestida de Sra. o así esta ok?...
Me incliné en la silla para perfilar mi vista hacia fuera…solo vi 6 personas, pero la cola continuaba…
Los días iban pasando como así las semanas y los meses.
La cuestión entre Cristina y yo mejoraban gracias al psiquiatra q la trataba y a las drogas q le suministraba.
Estas la dejaban media auto en algunos momentos.
Todo era muy tranquilo y estaba bien q así lo fuese después de la tormenta q tuvimos q atravesar.
Las lesiones anales y vaginales fueron con el tiempo y algunas pequeñas cirugías, sanando.
Teníamos sexo con sumo cuidado. Aburrido para mí y sobre todo para ella.
La falta de emociones de a poco se va trasluciendo en el rostro y tanto a ella como a mi se nos veía tristes.
En una fiesta de 15 de la hija de unos amigos/parientes nos volvimos a encontrar con la pareja q inicio todo esto.
Sin buscarnos coincidimos luego de bailaren el salón en una mesa. Patricia y Ernesto mi mujer y yo.
Sentados exhaustos por el baile, tómanoslo q encontramos sobre la mesa.
Ernesto vio los ojos de Cris y advirtió algo q acercándose a mi oído me preguntó.
_Hey les sucede algo? Siguen con el rollo de la otra vez? Ya pasó mucho tiempo déjame decirte q mas allá de las apariencias Cris no la pasó tan mal…
_Lo se, le contesté, lo se. Es muy largo de contar…hubo mas después de eso y descubrimos cosas q jamás pensamos que nos iban a suceder.
Ernesto se me quedo mirando esperando saber todo lo q había acontecido y yo necesitaba desahogarme y le solté todo.
Los ojos de el estaban inyectados en sangre por la increíble revelación.
Si fuese x el se la cogía ahí nomas.
_Finalicé confesando que no sabía hacer.
_Hagamos algo Ale vengan el sábado acaso, preparamos algo rico y luego lo charlamos entre los 4.
Al regreso a casa, en el auto rompí el silencio diciendo:
_Te ves triste Cris.
_Si, apenas respondió. Hay momentos en que vuelve toda la lujuria mal entendida q tengo corriendo en mi cabeza…sino fuese x las drogas no se q haría.
A veces, dijo entre sollozos, me olvido de tomar una pastilla y vivo un infierno.
Solo mi respeto hacia ti me contiene de cometer cualquier locura.
Ella trabaja en la administración de una fabrica.
Convive con compañeros profesionales, pero en el piso de abajo son todos obreros; debía cuidarla de esa amenaza latente en su propio trabajo.
_Si tu quieres podemos hablar del tema e ir soltando de a poco, lo podemos hablar con el siquiatra también, lo q no podemos hacer es vivir como lo estamos haciendo.
Ella asintió con cierto gesto desvergüenza.
Al otro día no tomó sus píldoras apropósito; no se q habrá entendido de lo hablado pero era evidente q su sentimiento de ser humillada luchaba por salir a mostrarse de inmediato.
Ese día salió vestida con un traje negro ceñido a su silueta, pelo recogido y sus habituales lentes q usaba para leer…tal vez el único detalle q a simple vista delataba sus 50 y picos de años.
Desayuno a las apuradas y salió mas temprano q lo habitual.
La entrada para los profesionales era alas 9.30, la de los obreros 7.30.
Llegó y se dirigió derecho al sector fabril. Entre el ruido ensordecedor de las maquinas buscó al capataz.
Pedro un sesentón de buen porte y una seriedad absoluta le hizo señas para q pasara al cuarto armado para poder hablar sin los molesto ruidos de las maquinas, cerró la puerta y le dijo:
_Ahora si Sra. Cristina, en q puedo ayudarla.
_Mi mujer mencionó un reporte de tareas de años anteriores…q lo necesitaba con urgencia, ella se ofreció a ayudarlo a buscar.
Dicho esto retiró su saco y quedo con una camisa blanca con un escote impresionante 3 botones desabrochados como descuido lo hacía desubicado para esa hora, para ese lugar y en esa circunstancia.
Pedro no podía sacarle la vista de encima.
La seriedad llegó al final cuando en un juego de miradas de Pedro a los senos de mi mujer, Cristina al bulto turgente de la bragueta de Pedro y este comenzando a bajarse lentamente el cierre para darle el tiempo a ella a q se exprese ante tal situación para evitar un malentendido.
Continuó hasta el final, la mirada y los latidos de Cristina se transformaban, los ojos se abrían para acaparar todo el espectáculo y el corazón drenaba adrenalina q la iba a llevar a cometer otra vez una locura; locura que necesitaba.
Había resistido x meses, pero el monstruo no estaba muerto, solo adormecido x las drogas de su terapeuta.
De los pantalones del viejo capataz salió un miembro descomunal tal vez ensanchado x la hembra q tenía enfrente y alarga abstinencia de sexo debido a su larga viudez.
El movimiento de Cristina fue instintivo; cayó de rodillas ante el capataz.
Tomó con sus 2 manos el pene y comenzó acariciarlo con sus uñas pintadas de un rojo brillante, si era posible el tamaño del pene aumentó al eructársele aún mas ante el paso de las uñas portado el falo.
La muy perra sabía lo q estaba haciendo, pero Pedro no podía esperar mas.
La tomó violentamente de los pelos y empujó la cabeza de Cris contra su pija.
Solo entro hasta la mitad, ella buscó laminera de hacer lugar intentando q el glande penetrase su garganta, al menos un momento hasta q sus pulmones solicitasen aire.
No fue necesario un gran esfuerzo. El ahogo llegó seguido del derrame de una cantidad importantísima de semen volcado directamente en la profundidad de la garganta de mi esposa.
_Perdón Sra. Cristina, perdón balbuceo el anciano medio tambaleando luego de la brutal descarga.
Cristina apenas pudo saborear el gusto del líquido, no había pasado x su lengua.
Algunas gotas quedaban en su garganta hizo volver hacia su buche para experimentar el sabor de esa leche.
Le desagrado bastante, sabía agria, amarga…era lo q ella buscaba, que no fuese dulce ni rica, ella debía beberla peno le gustaba; así funcionaba su placer.
Se levantó y se retiró acomodándose sustraje.
_Por favor Pedro, hágame llegar el reporte q le solicité.
_Si Sra., lo q usted mande.
El viejo quedo apoyado en un mueble luego del sismo que había significado el desenfreno de su jefa.
El resto del día no fue sencillo para ella, no le había bastado pero fue consciente q se había ido al diablo con roya hecho. En breve todo el personal sabría de lo ocurrido, ella esperaba nadie le creyera al anciano.
El hecho no era hacerlo con cualquiera sino q la situación la abrumara en su decencia, q la humillación sea desbastadora.
Y yo en ese escandalo era fundamental, necesitaba ver q yo la pasase realmente mal por las cosas q ella era perpetrada.
Pensó todo el día.
_Hola Ale, como estas?
_Todo ok respondí dándole un beso en la frente.
_estuve pensando, quizás si nos hiciéramos una escapada x mes esta saciaría todo lo q me pasa. Lo mantendríamos controlado y solo nos arriesgaríamos una vez cada tanto.
No me pareció mala idea y además con tarde no verla así haría lo q me pidiera.
_Q tienes pensado Cris? Interrogué…
_Salgamos con el auto y vemos, te parece?
Salimos del barrio y nos adentramos ellas orillas de una villa q solo se veían los carros de los cartoneros.
La verdad es q me moría de miedo…eran launa de la mañana, la noche es oscura cerrada.
De pronto un estruendo en el parabrisas me hizo maniobrar bruscamente y detuvo el auto.
5 muchachos nos rodearon de inmediato.
Nos vaciaron todo, uno el mas grandote dijo:
_Ustedes quédense con todo, yo me los llevo a ellos. A punta de pistola atravesamos un callejón q en el fondo estaban de fiesta una veintena de personas. La cumbia se escuchaba a todo volumen.
Fui sentado en una silla y atado a ella.
A Cristina le indicaron casi amablemente se sentara en la cama.
Apareció otro muchachón al cual el primero le dijo: quédate acá vigilando ya vengo.
A los 10’ apareció nuevamente.
Desnúdate le dijo a Cris.
Ella realmente se la veía asustada esta vez, en sus ojos se dejaba ver q se había mandado una cagada importante.
Podemos arreglarlo con dinero dijo.
Un cachetazo voló hacia la cara de Cris.
_Q DIJE?!! Mencionó con voz de pocos amigos.
Cris llorando amargamente con sus manos sobre el rostro se puso de pie y temblando se sacaba su camisa, su pollera sus zapatos….
_Toda puta, toda, en pelotas te quiero y boca abajo.
No quedaba otra q obedecer.
_Primero te voy a probar yo.
Sacó la verga negra morcillos y en unos pocos movimientos comenzó a romperle el culo.
Si bien iba tranquilo la entrada en decole produjo un dolor importante. El villero se tomó su tiempo.
Acabó y se quedo un rato mas con toda la estaca dentro del ojete de mi esposa.
_te meto bien la leche adentro para q neos queje nadie.
El comentario sorprendió tanto a ella como a mi…pensé q ahí se terminaba todo.
Se levantó y dijo:
_Pasa!!, son $150 si le acabas en la boca$200 si acabas adentro, 20 minutos, la queras vestida de Sra. o así esta ok?...
Me incliné en la silla para perfilar mi vista hacia fuera…solo vi 6 personas, pero la cola continuaba…
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