Maratón de sexo nocturno

Bueno, como muchos de ustedes sabrán porque siguen mis shouts, anoche un chonguito que conozco hace años me llamó para pasar una noche de garche a pleno. La novia trabaja de enfermera en una clinica en capital y tenía guardia de 20 a 8, así que teníamos toda la casa para nosotros.

Pero basta de vueltas, vamos al grano. Me mandó un remis para que me pase a buscar por mi casa (ya arrancamos bien, jeje), cuando llego me estaba esperando con la cena lista y un par de cervezas, que no es tan romántico como un champagne, pero a mi me encanta, asi que se la dejé pasar, jaja.

Después de la cena empezamos ahi mismo en el comedor con la previa, hasta que en un momento se detiene y me dice que tiene una sorpresa para mi, entonces se va al cuarto y vuelve con un collar de perro (nada de esos collares de cuero que venden en los sex shop), con la cadena y todo, me dice: compré en una veterinaria para que te sientas más perra. Ahí ya me empecé a mojar en serio, jaja.
Cuestión que me puso el collar y me hizo poner en cuatro patas, me paseó un poco por el departamento y me terminó llevando al cuarto. Una vez ahi, tirando de la cadena hizo que mi cara quede a centímetros de su pene, entonces me dice: a ver como la perrita lame el hueso?. Y ahi nomás empecé a petearlo con muchas ganas.

Después de un rato me hace subir a la cama y sin sacarme el collar me empieza a cojer en 4 tirando de la cadena, no les puedo explicar lo caliente que me ponía esa situación, para que se den una idea acabé como tres veces en cinco minutos.

Empezamos a cambiar de posición hasta que me dice que no aguanta más y entonces la saca y me pide que abra la boca, me acaba todo en la lengua y me ordena que no me la trague y que ponga un shout en poringa contándolo (por eso el shout que algunos de ustedes habrán visto anoche).

Al rato ya recuperados volvimos a coger, pero ésta vez la que manejo todo fui yo, lo cabalgué de espaldas y de frente hasta que lo hice acabar adentro de mi conchita.

Y como después de tanto garche habíamos transpirado mucho, nos metimos en la ducha y adivinen qué? siiii, salió el tercer polvazo, jajaja.

Obviamente después de eso nos terminamos durmiendo, ya eran las 4:30 de la madrugada. A las seis y media me depierta y me dice que me levante porque tenía que ir a buscar a la novia al trabajo.
Y como tuvo la gentileza de llevarme con el auto hasta mi casa, le hice un pete cuando llegamos, jeje.