Hola, soy Juli y este es mi primer relato. Antes de arrancar a contar mis historias sexuales quiero hacer una presentación sobre mi. Tengo 22 años y soy una chica a la que le encanta el sexo. He hecho muchísimas cosas en la cama (y en otros lugares) para mi corta edad. Necesito sexo todo el tiempo, soy adicta. Desde que mi primer novio, Nico, me quitó la virginidad ya hace mucho tiempo (no creo que este permitido poner la edad jeje) no pude parar más. Con el di mis primeros pasos y fui nutriéndome en experiencia. Pasé en un corto tiempo a ser una nenita de papá, a estarle rogando a mi novio que me de la lechita en la boca para tragármela toda. Luego de terminar nuestra relación, me destapé en el sentido de empezar a estar con muchos chicos (hasta ese entonces solo había tenido sexo con el) que serán los protagonistas de los relatos que iré escribiendo.
Físicamente, los chicos me dicen que estoy terrible jajaja. Soy bajita, alrededor de 1.60, y flaca, pero con un cuerpo bien trabajado ya que estudio educación física. Tez blanca, pelo castaño oscuro y ojos marrones. Mi fuerte son mis pechos, sin dudas, y en segundo lugar mi cintura. Mis tetas son muy grandes y muy bien formados, la locura de mis chicos que nunca se cansan de chupármelos, mordérmelos, acabarlos y hasta alguna que otra vez derramar champagne en ellas para luego tomarlo de ahi. Mi cintura es bien chiquita y me la viven elogiando, mientras que de cola y piernas he mejorado notablemente desde que empecé la carrera, el ejercicio me ha ayudado. Muchas veces, en el ultimo tiempo, estando en cuatro varios de mis machos han susurrado en medio de gemidos "ooohhhhh que culazo mi amor", o frases por el estilo.
Hecha mi presentación, voy a pasar a contar mi primer relato. No voy a hacerlo cronológicamente, pero en cada uno de ellos aclararé el tiempo y contexto. En este caso voy a relatar cuando me enfiesté con un stripper:
Esto ocurrió mientras estaba aun con mi segundo novio, Jesús. Inicié una relación al poco tiempo de cortar con Nico, para darle celos, y por una u otra circunstancia, terminé estando casi dos años con el, lo que no me impidió para nada tener sexo con todo lo que se me cruzaba, a diferencia de mi anterior noviazgo donde siempre fui fiel.
Salí con dos amigas a un boliche donde solo pueden entrar mujeres, una novedad que se había puesto de moda en mi ciudad. Los únicos hombres que hay adentro son strippers todos marcados que, sumado al alcohol, vuelven locas a las mujeres. Era la primera vez que iba y no iba a ser la ultima.
Cuando arrancó el show de strippers con mis amigas y junto al resto del publico, comenzamos a gritar y a animar. Yo presté atención especialmente a uno: Era un ropero que se partía sólito, estaba todo marcado y además se le podía apreciar un buen bulto por encima del boxer. Debo admitir que mientras veía humedecí un poco mi bombachita, así que empece a tomar para juntar valor y animarme a más.
Luego de que termina el show, los chicos bajan del escenario y andan caminando por ahí, entre medio de las mujeres. Estaba bailando junto a Romina y Andrea, cuando veo que el stripper que yo había fichado anteriormente, estaba conversando con una mina que se lo quería garchar todo, pero no estaba muy buena. Lo tocaba, lo abrazaba, le decía cosas al oído, pero a el se lo notaba incomodo, por lo que vi que ese era mi momento y decidí sacar la trolita que hay en mi. Lo empecé a mirar fijamente hasta que cruzamos mirada y le sonreí levemente. Acto seguido, me mordí el labio inferior y en 10 segundos lo tenía bailando conmigo, ante la cara de odio de la otra mina que desapareció. Se me pegó, pasó su mano por mi cintura y me empezó a hablar al oído:
- Como te llamas?
- Julieta
- Que lindo nombre, casi tanto como vos
- Ay, gracias, vos también sos muy lindo
- Que te gusta de mi?
- Que estas todo marcadito
Y con una mano comencé a acariciarle sus abdominales mientras levantaba la cabeza (me llevaba como 30 cms) y lo miraba con mi mejor cara de putita viciosa. Nos quedamos viendo por un rato:
- Che, Juli, ya conoces la parte de arriba?
- No, no, nunca fui
- Querés que te muestre?
- Me encantaría, mostrame todo
Me agarró de la mano y me llevó hacia la escalera, donde había personal de seguridad y no pasaban todos. Llegamos arriba y era un espacio grande, con reservados cubiertos por cortinas, pero solo a los costados, con unos sillones gigantes. No estaba segura de que íbamos a hacer, pero si su intención era garcharme, tendría una nueva experiencia de exhibicionismo, ya que a pesar de que estaban todas las luces apagadas, se podía ver debido a la luz de provenía de abajo del boliche.
- Te gusta?
- Que es esto?
- Son reservados, para que las chicas del publico puedan conocer mejor a los strippers. Nos podemos ir a sentar en uno de esos sillones, son re cómodos
- Bueno, dale, vamos.
En los metros que caminamos, pude observar hacia otros reservados que estaban ocupados y efectivamente: En uno, dos strippers comenzaban a desvestir una mina, en otro se podía apreciar como hacían un 69 y en el otro que llegue a ver, me quedé helada: Una conocida mía, que en sus redes sociales demostraba ser la mejor y mas fiel novia del mundo, colgada del cuello y con sus piernas enroscadas en la espalda de un stripper, siendo cogida en el aire como si se acabara el mundo. Por suerte estaba tan concentrada en lo suyo que ni miro por donde pasé. Llegamos y nos sentamos, había bebidas ya servidas.
- Tenias razón, es re cómodo el sillón
- Viste, linda?
- Yo te dije mi nombre pero vos no el tuyo
- Franco
No tenia ganas de esperar más, ya sabía para que estaba ahi arriba y quería gozar ya.
- Y decime, Franco. Me trajiste acá para seguirme hablando boludeces o me vas a hacer algo más?
Sin decirme nada, se abalanzó sobre mi y me comió la boca. Empecé a meter lengua como loca y el respondía de la misma manera. En medio de los besos me mando la mano de una a la concha, por encima de la tanga, y empezó a masajear.
- Te voy a garchar, puta, eso te voy a hacer
- AHHHHHHH, AHHHHHHH, TOCAME, TOCAME
Se paró del sillón y me levantó de un tirón. Estaba siendo violento (en el buen sentido) y eso me ponía mas loca. Me encanta ser sumisa de mi macho de turno.
- Sacate todo, hija de puta
- Aaaaayyy, sacaaaame amooooorr
- Sos la mejor puta que pasó por acá, sabes?
- La mejor no sé, pero la más puta seguro
Me sacó el vestido que tenia puesto y los zapatos, el ya estaba prácticamente en bolas desde el show, solo se saco unas botas que traía puestas y quedó en bóxer, mientras que yo en tanga y corpiño. Me aprisionó contra el y me apoyó toda, mientras nos dábamos un beso de lengua profundo. En medio de eso, me desabrochó el corpiño y libero mis pechos, para al toque bajar a chuparlos.
- Que tetona sos, por Dios. Mira lo que son estas tetas loco, son perfectas
- Mi novio dice que son lo mejor que tengo
- Ahhhhhhhhh encima tenes novio, pendeja puta
- Ayy si, pero vos sos muy lindo y no me pude resistir
- Deja de ponerme esa carita de nena que me volás la cabeza
- Soy una nena, mi amor
- Cuantos añitos tenés?
- 18, recién cumplidos
- AAAAAAHHH PERO SOS UNA BEBA
- Vos?
- 34 amor
Esa conversación nos calentó más a los dos, a mi, porque me encantan los tipos mas grandes, de mucha diferencia de edad, son mi debilidad, y el, por la cara que puso, seguro lo mismo con las pendejas.
Me tiró en el sillón de un empujón, me abrió las piernas y me sacó la tanga. Me empezó a pegar una chupada de concha descomunal, pocas veces me la habian chupado tan bien. Cuando terminó, subió lamiéndome la pelvis, la panza, chupandome un rato las tetas, besándome el cuello para finalmente llegar a mi boca y fundirnos en un beso caliente.
Se paro y yo quede sentada, dando mi cara contra su pija. Lo mire y le comí el abdomen, empecé a darle besos y estaba todo durito, me fascinaba. Con una mano le arañaba el pecho y con la otra le apretaba el culo. Ese cuerpo tallado a mano me estaba volviendo loca, si me hubiese pedido casamiento en ese momento le decía que si, sin dudar. Lo único que quería era a esa bola de músculos para mi sólita.
Le saque el bóxer y saltó una muy buena chota. No era una bestia de esas que apenas entran en la boca, pero estaba muy bien. Similar a la de mi primer novio, que es la que más acostumbra estoy a comer.
Le pase la punta de la lengua haciendo circulitos por su glande y luego me la metí. Empecé con una mamada suave y luego fui subiendo el ritmo hasta que empecé a sentir gustito salado en la boca. Eso era señal de que lo estaba excitando mucho y si seguía, iba a acabar, cosa que aun no quería que hiciera.
Me la saque de la boca y de un saltito me puse en 4 en el sillón, dando la cola hacia él. No pasaron ni dos segundos y la sentí en la concha. La metió hasta el fondo y empezó a bombear fuerte. Fueron minutos de puro goce y gemidos de ambas partes:
- AAAAAAAHHHHHH AAAAAAHHHHH AHHHHHH SIIII SIIIII AYYYY DALEEEE AAAAAAHHHHH
- TOMA PUTA, TOMAAAAAAAAA
- AY SI AMOR DAME DAME DAME
- AHHHHHHGGGGG PERO QUE PEDAZO DE ORTO QUE TENES BEBITA
- CULIAMMEEEEE CULIAMMEEEE AAAAAYYYY
Mientras me la ponía en cuatro me di el primer acabon, pero seguí como si nada, quería más. Luego de un rato así, salió y ahora el se sentó en el sillón
- Chupamela
Me acosté de costado en el sillón y puse manos a la obra. Esta es mi posición preferida para mamar porque me la puedo meter toda en la boca. Efectivamente, me entró toda. La mantenía unos cuantos segundos en mi boca, conteniendo la respiración, mientras el deliraba, y después seguía con el pete que aceleraba o frenaba de ritmo para no hacerlo acabar.
En eso siento que suena como una alarma en la mesita del reservado:
- Amor, apuremos que nos están corriendo, hay otras bebas necesitadas que quieren usar el sillón
A mi se me paró el corazón pensando en que iba a aparecer alguien en el reservado y yo estaba en bolas, haciendo el amor con un stripper. Me dispuse a pararme para cambiarme e irme:
- Ah ok entonces vamJSHEODKDHSUSBDBSJSSB
ME METIO LA PIJA EN LA BOCA PARA HACERME CALLAR
- Ni loca te vas de acá sin que terminemos esto, putita hermosa
- Pero mira si viene alguGFKFUEJSAKDVJSSJABAJSBA
OTRA VEZ, EL HIJO DE PUTA ME ESTABA HACIENDO COMER PIJA DE PREPO
Y debo admitir que me encantaba.... Trate de sacármela de la boca para decirle que nos vayamos pero no podía, me tenia agarrada de los pelos y presionaba hacia abajo, no habia forma de que pudiese liberarme de esa chota así que seguí chupando hasta que el solo, con un tirón de pelo, me llevó hasta su cara y me besó.
- Terminemos esto, acostate boca arriba y abrí las piernas
Hice lo que mi macho me ordeno y se me tiró encima. Que sensación hermosa. Yo, con mi metro sesenta y mi cuerpito chiquito, tenia encima a una mole de músculos de 1.90 m dispuesto a abusar de mi.
Me la metió por la concha y empezó a bombear a ritmo medio, yo volaba. Mi cabeza estaba contra el apoya brazos del sillón y la de el quedaba mas alta, por lo que tenia de frente su pecho. Empece a sacar la mejor lengua y a lamerlo: POR DIOOOOOOS, ERA UNA TABLAAAAA. Le lamia el pecho, lo mordia, le chupaba los pezones, mientras su pija entraba y salia de mi conchita. Yo estaba en mi salsa, y fue entonces cuando me sorprendió. De la nada, sin previo aviso, pegó un brinco y en una fracción de segundo se agachó encima mio, metiéndome la pija en la boca. Yo me quede sin reacción y solo abrí bien grandes los ojos. A los dos o tres segundos, sentí el primer chorro de semen caliente dar en mi paladar, seguido de otro igual y uno mas cortito, que me inundaron la boca. Estoy acostumbrada a tragar siempre, con Nico cada vez que cogíamos su leche terminaba en mi estomago, así que no tuve drama en pasarla toda como si fuese agua.
- Aaaaaaaahhhhhhhhhh siiiiiii, toma mi leche pendeja
Me la saque de la boca y se la abrí sacando la lengua, con una sonrisa, para mostrarle que no había quedado nada. Le agarre la pija y se la exprimí para sacar los restos de leche. Con la punta de un dedo saque un poco y la puse sobre mis pezones. Lo mire, la sonreí y le di un pico. Me levante y me puse el corpiño arriba de la leche, mientras el me observaba. Me puse la bombacha, el vestido, agarre mi cartera y mientras me iba, le tire un besito acompañado de: "Un placer, bombón"
- Sos una locura pendeja
Camine hacia la escalera, baje y estaban mis amigas esperándome:
- Jajajajaja que putaaaaaaaaaa
- jajaja como estuvooooo??
- Ay chicas, no saben, fue una locura. Estoy exhausta. Como me cogiooooooo.....
- Ay boluda, me da lastima Jesús
- No pasa nada, no se va a enterar....
Por supuesto, nos fuimos del boliche y el resto de la noche estuvo dedicado exclusivamente a contarles a mis amigas detalle por detalle de ese polvo fantástico.
Físicamente, los chicos me dicen que estoy terrible jajaja. Soy bajita, alrededor de 1.60, y flaca, pero con un cuerpo bien trabajado ya que estudio educación física. Tez blanca, pelo castaño oscuro y ojos marrones. Mi fuerte son mis pechos, sin dudas, y en segundo lugar mi cintura. Mis tetas son muy grandes y muy bien formados, la locura de mis chicos que nunca se cansan de chupármelos, mordérmelos, acabarlos y hasta alguna que otra vez derramar champagne en ellas para luego tomarlo de ahi. Mi cintura es bien chiquita y me la viven elogiando, mientras que de cola y piernas he mejorado notablemente desde que empecé la carrera, el ejercicio me ha ayudado. Muchas veces, en el ultimo tiempo, estando en cuatro varios de mis machos han susurrado en medio de gemidos "ooohhhhh que culazo mi amor", o frases por el estilo.
Hecha mi presentación, voy a pasar a contar mi primer relato. No voy a hacerlo cronológicamente, pero en cada uno de ellos aclararé el tiempo y contexto. En este caso voy a relatar cuando me enfiesté con un stripper:
Esto ocurrió mientras estaba aun con mi segundo novio, Jesús. Inicié una relación al poco tiempo de cortar con Nico, para darle celos, y por una u otra circunstancia, terminé estando casi dos años con el, lo que no me impidió para nada tener sexo con todo lo que se me cruzaba, a diferencia de mi anterior noviazgo donde siempre fui fiel.
Salí con dos amigas a un boliche donde solo pueden entrar mujeres, una novedad que se había puesto de moda en mi ciudad. Los únicos hombres que hay adentro son strippers todos marcados que, sumado al alcohol, vuelven locas a las mujeres. Era la primera vez que iba y no iba a ser la ultima.
Cuando arrancó el show de strippers con mis amigas y junto al resto del publico, comenzamos a gritar y a animar. Yo presté atención especialmente a uno: Era un ropero que se partía sólito, estaba todo marcado y además se le podía apreciar un buen bulto por encima del boxer. Debo admitir que mientras veía humedecí un poco mi bombachita, así que empece a tomar para juntar valor y animarme a más.
Luego de que termina el show, los chicos bajan del escenario y andan caminando por ahí, entre medio de las mujeres. Estaba bailando junto a Romina y Andrea, cuando veo que el stripper que yo había fichado anteriormente, estaba conversando con una mina que se lo quería garchar todo, pero no estaba muy buena. Lo tocaba, lo abrazaba, le decía cosas al oído, pero a el se lo notaba incomodo, por lo que vi que ese era mi momento y decidí sacar la trolita que hay en mi. Lo empecé a mirar fijamente hasta que cruzamos mirada y le sonreí levemente. Acto seguido, me mordí el labio inferior y en 10 segundos lo tenía bailando conmigo, ante la cara de odio de la otra mina que desapareció. Se me pegó, pasó su mano por mi cintura y me empezó a hablar al oído:
- Como te llamas?
- Julieta
- Que lindo nombre, casi tanto como vos
- Ay, gracias, vos también sos muy lindo
- Que te gusta de mi?
- Que estas todo marcadito
Y con una mano comencé a acariciarle sus abdominales mientras levantaba la cabeza (me llevaba como 30 cms) y lo miraba con mi mejor cara de putita viciosa. Nos quedamos viendo por un rato:
- Che, Juli, ya conoces la parte de arriba?
- No, no, nunca fui
- Querés que te muestre?
- Me encantaría, mostrame todo
Me agarró de la mano y me llevó hacia la escalera, donde había personal de seguridad y no pasaban todos. Llegamos arriba y era un espacio grande, con reservados cubiertos por cortinas, pero solo a los costados, con unos sillones gigantes. No estaba segura de que íbamos a hacer, pero si su intención era garcharme, tendría una nueva experiencia de exhibicionismo, ya que a pesar de que estaban todas las luces apagadas, se podía ver debido a la luz de provenía de abajo del boliche.
- Te gusta?
- Que es esto?
- Son reservados, para que las chicas del publico puedan conocer mejor a los strippers. Nos podemos ir a sentar en uno de esos sillones, son re cómodos
- Bueno, dale, vamos.
En los metros que caminamos, pude observar hacia otros reservados que estaban ocupados y efectivamente: En uno, dos strippers comenzaban a desvestir una mina, en otro se podía apreciar como hacían un 69 y en el otro que llegue a ver, me quedé helada: Una conocida mía, que en sus redes sociales demostraba ser la mejor y mas fiel novia del mundo, colgada del cuello y con sus piernas enroscadas en la espalda de un stripper, siendo cogida en el aire como si se acabara el mundo. Por suerte estaba tan concentrada en lo suyo que ni miro por donde pasé. Llegamos y nos sentamos, había bebidas ya servidas.
- Tenias razón, es re cómodo el sillón
- Viste, linda?
- Yo te dije mi nombre pero vos no el tuyo
- Franco
No tenia ganas de esperar más, ya sabía para que estaba ahi arriba y quería gozar ya.
- Y decime, Franco. Me trajiste acá para seguirme hablando boludeces o me vas a hacer algo más?
Sin decirme nada, se abalanzó sobre mi y me comió la boca. Empecé a meter lengua como loca y el respondía de la misma manera. En medio de los besos me mando la mano de una a la concha, por encima de la tanga, y empezó a masajear.
- Te voy a garchar, puta, eso te voy a hacer
- AHHHHHHH, AHHHHHHH, TOCAME, TOCAME
Se paró del sillón y me levantó de un tirón. Estaba siendo violento (en el buen sentido) y eso me ponía mas loca. Me encanta ser sumisa de mi macho de turno.
- Sacate todo, hija de puta
- Aaaaayyy, sacaaaame amooooorr
- Sos la mejor puta que pasó por acá, sabes?
- La mejor no sé, pero la más puta seguro
Me sacó el vestido que tenia puesto y los zapatos, el ya estaba prácticamente en bolas desde el show, solo se saco unas botas que traía puestas y quedó en bóxer, mientras que yo en tanga y corpiño. Me aprisionó contra el y me apoyó toda, mientras nos dábamos un beso de lengua profundo. En medio de eso, me desabrochó el corpiño y libero mis pechos, para al toque bajar a chuparlos.
- Que tetona sos, por Dios. Mira lo que son estas tetas loco, son perfectas
- Mi novio dice que son lo mejor que tengo
- Ahhhhhhhhh encima tenes novio, pendeja puta
- Ayy si, pero vos sos muy lindo y no me pude resistir
- Deja de ponerme esa carita de nena que me volás la cabeza
- Soy una nena, mi amor
- Cuantos añitos tenés?
- 18, recién cumplidos
- AAAAAAHHH PERO SOS UNA BEBA
- Vos?
- 34 amor
Esa conversación nos calentó más a los dos, a mi, porque me encantan los tipos mas grandes, de mucha diferencia de edad, son mi debilidad, y el, por la cara que puso, seguro lo mismo con las pendejas.
Me tiró en el sillón de un empujón, me abrió las piernas y me sacó la tanga. Me empezó a pegar una chupada de concha descomunal, pocas veces me la habian chupado tan bien. Cuando terminó, subió lamiéndome la pelvis, la panza, chupandome un rato las tetas, besándome el cuello para finalmente llegar a mi boca y fundirnos en un beso caliente.
Se paro y yo quede sentada, dando mi cara contra su pija. Lo mire y le comí el abdomen, empecé a darle besos y estaba todo durito, me fascinaba. Con una mano le arañaba el pecho y con la otra le apretaba el culo. Ese cuerpo tallado a mano me estaba volviendo loca, si me hubiese pedido casamiento en ese momento le decía que si, sin dudar. Lo único que quería era a esa bola de músculos para mi sólita.
Le saque el bóxer y saltó una muy buena chota. No era una bestia de esas que apenas entran en la boca, pero estaba muy bien. Similar a la de mi primer novio, que es la que más acostumbra estoy a comer.
Le pase la punta de la lengua haciendo circulitos por su glande y luego me la metí. Empecé con una mamada suave y luego fui subiendo el ritmo hasta que empecé a sentir gustito salado en la boca. Eso era señal de que lo estaba excitando mucho y si seguía, iba a acabar, cosa que aun no quería que hiciera.
Me la saque de la boca y de un saltito me puse en 4 en el sillón, dando la cola hacia él. No pasaron ni dos segundos y la sentí en la concha. La metió hasta el fondo y empezó a bombear fuerte. Fueron minutos de puro goce y gemidos de ambas partes:
- AAAAAAAHHHHHH AAAAAAHHHHH AHHHHHH SIIII SIIIII AYYYY DALEEEE AAAAAAHHHHH
- TOMA PUTA, TOMAAAAAAAAA
- AY SI AMOR DAME DAME DAME
- AHHHHHHGGGGG PERO QUE PEDAZO DE ORTO QUE TENES BEBITA
- CULIAMMEEEEE CULIAMMEEEE AAAAAYYYY
Mientras me la ponía en cuatro me di el primer acabon, pero seguí como si nada, quería más. Luego de un rato así, salió y ahora el se sentó en el sillón
- Chupamela
Me acosté de costado en el sillón y puse manos a la obra. Esta es mi posición preferida para mamar porque me la puedo meter toda en la boca. Efectivamente, me entró toda. La mantenía unos cuantos segundos en mi boca, conteniendo la respiración, mientras el deliraba, y después seguía con el pete que aceleraba o frenaba de ritmo para no hacerlo acabar.
En eso siento que suena como una alarma en la mesita del reservado:
- Amor, apuremos que nos están corriendo, hay otras bebas necesitadas que quieren usar el sillón
A mi se me paró el corazón pensando en que iba a aparecer alguien en el reservado y yo estaba en bolas, haciendo el amor con un stripper. Me dispuse a pararme para cambiarme e irme:
- Ah ok entonces vamJSHEODKDHSUSBDBSJSSB
ME METIO LA PIJA EN LA BOCA PARA HACERME CALLAR
- Ni loca te vas de acá sin que terminemos esto, putita hermosa
- Pero mira si viene alguGFKFUEJSAKDVJSSJABAJSBA
OTRA VEZ, EL HIJO DE PUTA ME ESTABA HACIENDO COMER PIJA DE PREPO
Y debo admitir que me encantaba.... Trate de sacármela de la boca para decirle que nos vayamos pero no podía, me tenia agarrada de los pelos y presionaba hacia abajo, no habia forma de que pudiese liberarme de esa chota así que seguí chupando hasta que el solo, con un tirón de pelo, me llevó hasta su cara y me besó.
- Terminemos esto, acostate boca arriba y abrí las piernas
Hice lo que mi macho me ordeno y se me tiró encima. Que sensación hermosa. Yo, con mi metro sesenta y mi cuerpito chiquito, tenia encima a una mole de músculos de 1.90 m dispuesto a abusar de mi.
Me la metió por la concha y empezó a bombear a ritmo medio, yo volaba. Mi cabeza estaba contra el apoya brazos del sillón y la de el quedaba mas alta, por lo que tenia de frente su pecho. Empece a sacar la mejor lengua y a lamerlo: POR DIOOOOOOS, ERA UNA TABLAAAAA. Le lamia el pecho, lo mordia, le chupaba los pezones, mientras su pija entraba y salia de mi conchita. Yo estaba en mi salsa, y fue entonces cuando me sorprendió. De la nada, sin previo aviso, pegó un brinco y en una fracción de segundo se agachó encima mio, metiéndome la pija en la boca. Yo me quede sin reacción y solo abrí bien grandes los ojos. A los dos o tres segundos, sentí el primer chorro de semen caliente dar en mi paladar, seguido de otro igual y uno mas cortito, que me inundaron la boca. Estoy acostumbrada a tragar siempre, con Nico cada vez que cogíamos su leche terminaba en mi estomago, así que no tuve drama en pasarla toda como si fuese agua.
- Aaaaaaaahhhhhhhhhh siiiiiii, toma mi leche pendeja
Me la saque de la boca y se la abrí sacando la lengua, con una sonrisa, para mostrarle que no había quedado nada. Le agarre la pija y se la exprimí para sacar los restos de leche. Con la punta de un dedo saque un poco y la puse sobre mis pezones. Lo mire, la sonreí y le di un pico. Me levante y me puse el corpiño arriba de la leche, mientras el me observaba. Me puse la bombacha, el vestido, agarre mi cartera y mientras me iba, le tire un besito acompañado de: "Un placer, bombón"
- Sos una locura pendeja
Camine hacia la escalera, baje y estaban mis amigas esperándome:
- Jajajajaja que putaaaaaaaaaa
- jajaja como estuvooooo??
- Ay chicas, no saben, fue una locura. Estoy exhausta. Como me cogiooooooo.....
- Ay boluda, me da lastima Jesús
- No pasa nada, no se va a enterar....
Por supuesto, nos fuimos del boliche y el resto de la noche estuvo dedicado exclusivamente a contarles a mis amigas detalle por detalle de ese polvo fantástico.
13 comentarios - Primer relato
Mido 1.86 soy grandote, tirando a rubio, ojos verdes. de Capital Federal.