Bueno, en 2 de mis posteos anteriores, tanto el primerodonde contaba cómo había conocido la página, como en el último, donde daba aentender el porqué de mis búsquedas hacía referencia a una misma persona.
Una persona que me toco conocer en uno de mis últimos laburos antes derecibirme.
Salvo en los 2 primeros años de carrera, donde únicamente me metí de lleno coneso, en los 3 y medio restantes trabaje mientras estudiaba.
Primero fue en un local de ropa, después pase a trabajar como secretaria en unconsultorio y luego de esos dos, conseguí el último trabajo, que fue derecepcionista de un bar.
Este con respecto a los otros dos, teníala ventaja de , no ser todos los días y de ser en un horario, 19 a 00-01, queme permitía cursar y estudiar durante el día.
Otras de las ventajas era que estaba a cuadras del depto donde vivía en eseentonces, y finalmente me regalo también esta experiencia que voy a contar quelos dos anteriores no.
El bar no era ni estilo bar de estos nuevos, todos iguales , los famosos decerveza artesanal ni esos bares clásicos de barrios donde se juntan siempre lasmismas personas.
Era un bar extraño, donde noches había espera y noches no había nadie, lo cualme venía bárbaro porque a las 11 como mucho ya estaba durmiendo en caso.
Lo que si había era un grupo de amigos, entre 35 y 45 años ellos, quereligiosamente todos los jueves de 20 a 23 se juntaban ahí, en la misma mesa.
Rara era la vez que faltaba uno de los 5.
Mi primer encuentro con ellos, fue mi primer jueves de laburo.
Primer día, primeras mesas , los nervios normales de lo nuevo y ahí noscruzamos y empezó todo.
Cuando empezaron a llegar ahí fui yo a querer ubicarlos u ofrecerles barra,promos o demás, a lo cual, lo que recibí fueron risas y un “sos nueva no?”.
Me explicaron un poco el ritual que venían llevando a cabo desde hacía 7 añosen esa misma mesa.
El primer mes fue bastante pesado y me toco pagar el derecho de piso de sernueva.
Bromas, palos, indirectas, risas ,chistes y alguna que otra situación paraincomodarme que terminaba siempre en risas para salir de la situación.
Nunca nada serio, ni no soportable, y menos que menos en un nivel de acoso, alfin y al cabo era su lugar y su humor.
Con el paso del tiempo fui aprendiendo como sobrellevar la situación.
Frente a algún palo acerca de alguna vestimenta mía o demás, salía rápido delpaso retrucando por ejemplo que no seenterara la mujer, lo cual , obviamente generaba risas en el resto del grupo yun cambio en el objetivo de los chistes.
Mes a mes la onda mejoraba, y ya incluso alguna que otra vez me habían permitidoestar sentada con ellos compartiendo alguna anécdota.
Para ser claros, 5 hombres ,4 de elloscasados, otro de novio, más grandes, y con una piba más chica que les seguía eljuego ,claramente era una combinación explosiva.
Si bien ninguno había aclarado sus intenciones que pasara algo , alguna queotra mirada palito o chiste hacían notar que ante la mínima oportunidad…
Vale aclarar otra cosa, si bien jamás ni con ellos ni con nadie me dedique aprovocar , ni generar expectativas ni similares, si me prendía a jugar la situación.
Siempre controlada, siempre sabiendo hasta donde y siempre con las cosas enclaro.
Un jueves, de Julio la cosa iba a cambiar.
Entre a trabajar en uno de los días mas frios de ese año, con una inminentetormenta en el cielo y con el único consuelo que, a pesar de que me iba a mojaren breve iba a estar de nuevo en mi departamento durmiendo, era claro que nadieiba a ir al bar con esa noche.
Llegue, 18:50 ya de noche, vestida con unos zapatones de plataforma marrones que me sumaban unos 6 centímetrospor lo menos, una calza negra de vestir brillante, camisa y suéter blancos ,camperita de cuero negra , con su respectiva bufanda bordo y gorro de lana .
Lo primero con lo que me encontré al llegar, fue al dueño diciéndome “estásloca cyn ni hubieras venido, si queres anda”.
Era tentadora la propuesta pero al ya estar ahí elegí quedarme un rato.
Estuvimos charlando un buen rato con el dueño, y cuando ya me estaba por ir,uno de los 5 valientes llego al bar.
Entro, saludo a ambos y se dirigió a su mesa de siempre, empezó a pavear con elteléfono y cada tanto relojeaba la puerta esperando a sus compañeros.
10, 15 minutos pasaron y ningún valiente acudía, se lo notaba mas preocupado,miraba el teléfono, mandaba mensajes, llamaba.
Me acerque a preguntarle si iba a tomar algo y de paso cargarlo con la situación.
“Son todos unos pollerudos, se quedaron cuchareando con las señoras seguro,unas gotitas y ya no vienen” decía en una mezcla de risa y bronca.
Me fui y le traje una birra, lo mínimo que se podía hacer para con un cliente así.
“Me vas a dejar tomándola solo?” escuche mientras me retiraba.
“No, me voy a buscar la mía” para seguirle el juego.
De hecho fue lo que paso, me senté con el acompañarlo.
Si bien éramos dos conocidos, la situación era rara, estaba cambiada, nunca habíamoscoincidido mano y mano, y en los 10 primeros minutos se hizo notar.
No falto el gran abanico de preguntas clásicas, esas que nos aburren a todos,que como había sido el dia, que que tal el laburo y demás.
Pasado ese tiempo de acostumbramiento a la situación empezó a aflorar lointeresante.
“Mira si me vieran tomando una birra mano a mano con vos, se mueren estos hdps”
“Por que” le preguntaba yo entre risas, “Y viste como son las cosas, somoshombres cyn, y vos estas buenísima, imagínate que cosas hablamos”.
“Cuales” salió de mi boca, con un tono de alguien más que interesada porconocer acerca del tema.
“Noo no puedo, son cosas privadas nuestras”, entendiendo por donde venía lamano.
La curiosidad , es de los motores más importantes que mueven a una persona, yeso aquel cuarentón que estaba conmigo charlando lo había entendido a la perfección.
Enseguida se dio cuenta , de que me moría por saber las cosas que hablaban demi, y obviamente supo aprovecharlo.
La charla viro enseguida para ese lado, como si fuera una película empezó arelatarme cada situación en la cual habían hecho algún comentario sobre mipersona.
Era increíble, sabia prácticamente día por día que ropa había usado, entreotras cosas.
“Te acordas el día que trajiste un jean clarito?”
“¿No mucho, cuando?”.
“Y , hará 2 meses, ese día nos mataste a todos loca, te juroque no podíamos dejar de hablar de esa cola”
Muchas veces en situaciones asi, en las cuales estamos demasiados interesados ymetidos en tema, perdemos la capacidad de análisis y coherencia.
Eso me paso a mi , cuando acto seguido pregunte.
“ Y nunca apostaron quien me cogía primero o algo así?”
Silencio total, claramente el venía manejando la situación mejor que yo y no habíallegado a ese nivel de decir cualquier cosa desde el inconsciente.
Entre risas me dijo “y vos cuantas veces lo pensaste?”
“no yo nunca”, ya está, no era creíble y no había vuelta atrás, había abierto esapuerta.
Por primera vez desde hacía mucho tiempo estaba en una situación , difícil demanejar, y que para esa altura ya no quería manejar, quería que se diera lo quese tuviera que dar.
“Mira, apostar quien te cogía primero no, nunca apostamos ni lo pensamos, pero es una linda idea, más si voy a ser yoese “
La charla siguió, en otros términos, con otros temas.
Mirándose fijo a los ojos y esperando que la situación explotara.
“Que hora es?” Pregunto el.
“Once menos veinte “le conteste yo
“Que rápido paso el tiempo, ya en un rato tengo que andar por casa”
“Ay pendeja pendeja” suspiraba y me miraba.
A mi humilde interpretación de ese momento, el se moría de ganas de hacerme aupa y morir en un telo conmigo, pero tenia muy presente el hecho de volver a sucasa.
Se le notaba, ese debate interno que le impedía poner primera y arrancar.
“Bueno me voy, si queres te alcanzo”
Tras la atenta mirada del dueño, que aprobaba la situación desde el fondo delbar, acompañando con un pásenla lindo, salimos.
Corrimos media cuadra bajo la lluvia ,como 2 nenes, donde estaba estacionado elauto.
Entro el, entre yo, nos miramos y rápido prendió el auto.
“Donde vivís” me pregunto, entre dudas el.
No lo podía creer, aun ahí, conmigo sentada , y seamos sinceros, totalmenteentregada en el auto no había definido la situación.
Le di mi dirección, rápido hicimos las 4 cuadras hasta el lugar.
Llegamos hasta la puerta , tras un silencio incomodo, le dije un gracias adri,le di un beso en la mejilla y me tire para abrir la puerta.
No podía hacer otra cosa, si bien tenía ganas, tenía que respetar su decisión.
Hasta que una mano en mi pierna y un “para” frenaron mi acción.
Rápidamente me busco la boca, la que obviamente encontró.
No hacía falta decir más nada, había elegido finalmente.
“Donde hay un telo por acá, hace mil años que no voy a un telo”
“No tengo idea , yo tampoco, pero vamos a mi depto, si queres”
“No, te quiero coger en un telo”
Enseguida saco su celular y me lo dio, “busca ahí en google maps”
Y en ese momento si, el ya había perdido su racionalidad después de tanto.
“Yerbal y Rojas” ahí encontré uno le comente.
“Fíjate que dicen en el grupo”
Quien iba a decir que eso iba a ser unantes y un después.
Entre al wp y encontré ese grupo, me puse a leer , los últimos mensajes todasdisculpas por no haber ido.
Le entre a leer todos.
Se reia, se enojaba, y seguía firme manejando hacia la dirección que le había dicho.
“Mandales un mensaje”
“Que les pongo?”
“Que son todos unos pollerudos… no mejor, mandales un audio, decile que losextrañaste”
Ni lo dude, “hola chicos, que paso que no vinieron, los extrañe hoy”
Enseguida, ese grupo muerto lleno de excusas exploto.
Teorías de un lado, teorías del otro.
Estaban los que ponían “ que grande te la vas a coger” vs los “gordo te va aretar tu mujer”
No pude, la situación me me gano.
Estar ahí leyendo lo que ponían me genero un grado de calentura y excitaciónque nunca había pensado.
“Mándales una fotito no?” mientras su ego explotaba.
Enseguida lo hice, foto sonriendo en su auto.
Seguían las teorías, ya estábamos 3-1 a favor de que todo era una joda.
Llegamos a telo, y antes de entrar a la habitación me dijo,” hagámoslo creíble.”
Y enseguida entendí que tenia que ir a posar.
Levantando ambos brazos, en la puerta de esa habitación vi como el flash se activaba.
Entramos, el teléfono seguía siendo la vedette, me hizo a upa, fuimos al primersillón que encontramos.
Me sentó encima de el, bien dejándome en claro como estaba da caliente.
Me dio de nuevo el celular, cual madre le da el suyo al hijo para que se calle.
Llovían los mensajes, que aquel 3-1 a favor de que era una joda, pasamos rápidamentea todo tipo de comentarios felicitándolo.
A mí, mientras tanto ese me volvía loca.
Tan loca que apenas había notado que el tenía ya su mano adentro de mi calza yme estaba dele tocar con sus dedos.
No dio para más, el teléfono quedo a un costado.
Me acostó en ese sillón, hizo rápidamente volar ambos zapatos, y empezó a bajarla calza.
Sin perder el tiempo la hizo volar por ahí y rápidamente llevo su cabeza entremis piernas.
Faltaba la tanga, la cual saco con mucha paciencia y movimientos lentos.
Yo en tanto, me desprendía la camisa y volaba ese corpiño
Con una delicadeza y gran técnica empezó a chuparme la concha , sin duda de lasmejores veces que me lo habían hecho.
Luego freno, y se reincorporo para darme un beso, no antes de dejarme bienclavados 2 dedos ahí abajo.
Luego de ese beso empezó a bajar de nuevo, paso por mi cuello y llego a mistetas, posteriormente volvió ahí, ahí abajo, donde esos 2 dedos no paraban deentrar y salir.
Me la volvió a chupar, nunca dejando de entrar y salir con sus dedos, lo que mehizo retorcerme, no podía estar quieta.
Eso lo calentaba aun mas, y por ende, lo hacia ser mejor.
En medio de eso, se desprendio el jean y como pudo la saco.
Sin darme cuenta, cambio sus dedos por su pija, y me empezó a coger fuertecontra ese sillón.
Sin sacarme la pija, me abrazo por atrás con uno de sus brazos y me levanto,caminamos unos pasos hacia la cama.
El empezó a sacarse la remera, mientras yo, ya sentada en esa cama, leterminaba de sacar el jean y el bóxer.
Quede de frente a su pija, no podía no probarla, enseguida escuche un suspirode su parte, y rápidamente su mano que acompañaba mi cabeza.
“Cuanto hacia que no me la chupaban” exclamo, mientras apretaba y apretaba micabeza contra el.
La saco y me la paso toda por la cara, lo disfrutaba tanto yo como el.
Acto seguido , se la tiro para atrás y me dejo los huevos a disposición.
“Dale un poquito” con gusto lo hice.
Volvió la pija a mi boca, y después de cogérmela haciendo fuerza con sus dosmanos en mi cabeza contra el , me levanto de una mano, me dio un beso y me diovuelta.
Un leve empujón contra la cama, y empezó a cogerme así, de espaldas, con losbrazos apoyados en la cama.
Acto seguido se acostó atrás mío, quedando ambos de costado. Ahí conocíPoringa.
Mientras me cogía en esa posición, soltó “Algún día vas a aparecer en Poringa”
“Que es eso?” “Una página , donde se pueden subir fotos de pareja”.
El tema quedo ahí, se tiro encima mío y empezó a cogerme fuerte contra la cama.
Era mi turno, por eso rotamos, y me tocaba a mi estar arriba.
Como nunca me senté encima y subía y bajaba abarcando el mayor trayectoposible.
No lo convencía del todo, no tener el control no era algo que disfrutaba, porlo que rápidamente pase de nuevo a estar en 4.
Y ahí empujo y empujo hasta que no di mas.
Tenia muchas ganas de acabar, y sin aguantarme llegue a ese orgasmo, con el ahí,adentro mío.
No me interrumpió el momento, me dejo disfrutarlo, con el ahí.
Una vez que termine, no tuve respiro.
Ahí estaba de nuevo, arrodillada , con el de costado a mi.
Me junto todo el pelo atrás, mientras lo sostenia con una mano, me empujaba lacabeza para que mi boca llegara de costado a chupársela.
Con la otra se tocaba.
Cuando llego el momento se puso de frente a mi, y acomodándome la cabeza tiro “cerra los ojitos”
Acto seguido empezó a acabar, muy preocupado para que toda mi cara recibieraalgo.
Termino de acabar y llevo la pija a mi boca de nuevo.
“Ahora estas para una fotito” entre risas, cosa que, si hubiera pasado, no mehubiera opuesto.
“Sos divina cyn” mientras la situación se terminaba.
Asi termino, mientras yo me bañaba el se ponía lo mas presentable posible.
Me llevo a casa, nos despedimos.
Y no fue hasta el otro jueves que nos vimos de vuelta, no para sexo, si para larutina del bar.
Donde, por mutuo acuerdo, nos encagarmos de hacerles creer que habían caído enla broma.
Sembramos esa duda, lo que fue suficiente para seguir pasándola bien, sin ningúntipo de certezas para con ellos.
Una persona que me toco conocer en uno de mis últimos laburos antes derecibirme.
Salvo en los 2 primeros años de carrera, donde únicamente me metí de lleno coneso, en los 3 y medio restantes trabaje mientras estudiaba.
Primero fue en un local de ropa, después pase a trabajar como secretaria en unconsultorio y luego de esos dos, conseguí el último trabajo, que fue derecepcionista de un bar.
Este con respecto a los otros dos, teníala ventaja de , no ser todos los días y de ser en un horario, 19 a 00-01, queme permitía cursar y estudiar durante el día.
Otras de las ventajas era que estaba a cuadras del depto donde vivía en eseentonces, y finalmente me regalo también esta experiencia que voy a contar quelos dos anteriores no.
El bar no era ni estilo bar de estos nuevos, todos iguales , los famosos decerveza artesanal ni esos bares clásicos de barrios donde se juntan siempre lasmismas personas.
Era un bar extraño, donde noches había espera y noches no había nadie, lo cualme venía bárbaro porque a las 11 como mucho ya estaba durmiendo en caso.
Lo que si había era un grupo de amigos, entre 35 y 45 años ellos, quereligiosamente todos los jueves de 20 a 23 se juntaban ahí, en la misma mesa.
Rara era la vez que faltaba uno de los 5.
Mi primer encuentro con ellos, fue mi primer jueves de laburo.
Primer día, primeras mesas , los nervios normales de lo nuevo y ahí noscruzamos y empezó todo.
Cuando empezaron a llegar ahí fui yo a querer ubicarlos u ofrecerles barra,promos o demás, a lo cual, lo que recibí fueron risas y un “sos nueva no?”.
Me explicaron un poco el ritual que venían llevando a cabo desde hacía 7 añosen esa misma mesa.
El primer mes fue bastante pesado y me toco pagar el derecho de piso de sernueva.
Bromas, palos, indirectas, risas ,chistes y alguna que otra situación paraincomodarme que terminaba siempre en risas para salir de la situación.
Nunca nada serio, ni no soportable, y menos que menos en un nivel de acoso, alfin y al cabo era su lugar y su humor.
Con el paso del tiempo fui aprendiendo como sobrellevar la situación.
Frente a algún palo acerca de alguna vestimenta mía o demás, salía rápido delpaso retrucando por ejemplo que no seenterara la mujer, lo cual , obviamente generaba risas en el resto del grupo yun cambio en el objetivo de los chistes.
Mes a mes la onda mejoraba, y ya incluso alguna que otra vez me habían permitidoestar sentada con ellos compartiendo alguna anécdota.
Para ser claros, 5 hombres ,4 de elloscasados, otro de novio, más grandes, y con una piba más chica que les seguía eljuego ,claramente era una combinación explosiva.
Si bien ninguno había aclarado sus intenciones que pasara algo , alguna queotra mirada palito o chiste hacían notar que ante la mínima oportunidad…
Vale aclarar otra cosa, si bien jamás ni con ellos ni con nadie me dedique aprovocar , ni generar expectativas ni similares, si me prendía a jugar la situación.
Siempre controlada, siempre sabiendo hasta donde y siempre con las cosas enclaro.
Un jueves, de Julio la cosa iba a cambiar.
Entre a trabajar en uno de los días mas frios de ese año, con una inminentetormenta en el cielo y con el único consuelo que, a pesar de que me iba a mojaren breve iba a estar de nuevo en mi departamento durmiendo, era claro que nadieiba a ir al bar con esa noche.
Llegue, 18:50 ya de noche, vestida con unos zapatones de plataforma marrones que me sumaban unos 6 centímetrospor lo menos, una calza negra de vestir brillante, camisa y suéter blancos ,camperita de cuero negra , con su respectiva bufanda bordo y gorro de lana .
Lo primero con lo que me encontré al llegar, fue al dueño diciéndome “estásloca cyn ni hubieras venido, si queres anda”.
Era tentadora la propuesta pero al ya estar ahí elegí quedarme un rato.
Estuvimos charlando un buen rato con el dueño, y cuando ya me estaba por ir,uno de los 5 valientes llego al bar.
Entro, saludo a ambos y se dirigió a su mesa de siempre, empezó a pavear con elteléfono y cada tanto relojeaba la puerta esperando a sus compañeros.
10, 15 minutos pasaron y ningún valiente acudía, se lo notaba mas preocupado,miraba el teléfono, mandaba mensajes, llamaba.
Me acerque a preguntarle si iba a tomar algo y de paso cargarlo con la situación.
“Son todos unos pollerudos, se quedaron cuchareando con las señoras seguro,unas gotitas y ya no vienen” decía en una mezcla de risa y bronca.
Me fui y le traje una birra, lo mínimo que se podía hacer para con un cliente así.
“Me vas a dejar tomándola solo?” escuche mientras me retiraba.
“No, me voy a buscar la mía” para seguirle el juego.
De hecho fue lo que paso, me senté con el acompañarlo.
Si bien éramos dos conocidos, la situación era rara, estaba cambiada, nunca habíamoscoincidido mano y mano, y en los 10 primeros minutos se hizo notar.
No falto el gran abanico de preguntas clásicas, esas que nos aburren a todos,que como había sido el dia, que que tal el laburo y demás.
Pasado ese tiempo de acostumbramiento a la situación empezó a aflorar lointeresante.
“Mira si me vieran tomando una birra mano a mano con vos, se mueren estos hdps”
“Por que” le preguntaba yo entre risas, “Y viste como son las cosas, somoshombres cyn, y vos estas buenísima, imagínate que cosas hablamos”.
“Cuales” salió de mi boca, con un tono de alguien más que interesada porconocer acerca del tema.
“Noo no puedo, son cosas privadas nuestras”, entendiendo por donde venía lamano.
La curiosidad , es de los motores más importantes que mueven a una persona, yeso aquel cuarentón que estaba conmigo charlando lo había entendido a la perfección.
Enseguida se dio cuenta , de que me moría por saber las cosas que hablaban demi, y obviamente supo aprovecharlo.
La charla viro enseguida para ese lado, como si fuera una película empezó arelatarme cada situación en la cual habían hecho algún comentario sobre mipersona.
Era increíble, sabia prácticamente día por día que ropa había usado, entreotras cosas.
“Te acordas el día que trajiste un jean clarito?”
“¿No mucho, cuando?”.
“Y , hará 2 meses, ese día nos mataste a todos loca, te juroque no podíamos dejar de hablar de esa cola”
Muchas veces en situaciones asi, en las cuales estamos demasiados interesados ymetidos en tema, perdemos la capacidad de análisis y coherencia.
Eso me paso a mi , cuando acto seguido pregunte.
“ Y nunca apostaron quien me cogía primero o algo así?”
Silencio total, claramente el venía manejando la situación mejor que yo y no habíallegado a ese nivel de decir cualquier cosa desde el inconsciente.
Entre risas me dijo “y vos cuantas veces lo pensaste?”
“no yo nunca”, ya está, no era creíble y no había vuelta atrás, había abierto esapuerta.
Por primera vez desde hacía mucho tiempo estaba en una situación , difícil demanejar, y que para esa altura ya no quería manejar, quería que se diera lo quese tuviera que dar.
“Mira, apostar quien te cogía primero no, nunca apostamos ni lo pensamos, pero es una linda idea, más si voy a ser yoese “
La charla siguió, en otros términos, con otros temas.
Mirándose fijo a los ojos y esperando que la situación explotara.
“Que hora es?” Pregunto el.
“Once menos veinte “le conteste yo
“Que rápido paso el tiempo, ya en un rato tengo que andar por casa”
“Ay pendeja pendeja” suspiraba y me miraba.
A mi humilde interpretación de ese momento, el se moría de ganas de hacerme aupa y morir en un telo conmigo, pero tenia muy presente el hecho de volver a sucasa.
Se le notaba, ese debate interno que le impedía poner primera y arrancar.
“Bueno me voy, si queres te alcanzo”
Tras la atenta mirada del dueño, que aprobaba la situación desde el fondo delbar, acompañando con un pásenla lindo, salimos.
Corrimos media cuadra bajo la lluvia ,como 2 nenes, donde estaba estacionado elauto.
Entro el, entre yo, nos miramos y rápido prendió el auto.
“Donde vivís” me pregunto, entre dudas el.
No lo podía creer, aun ahí, conmigo sentada , y seamos sinceros, totalmenteentregada en el auto no había definido la situación.
Le di mi dirección, rápido hicimos las 4 cuadras hasta el lugar.
Llegamos hasta la puerta , tras un silencio incomodo, le dije un gracias adri,le di un beso en la mejilla y me tire para abrir la puerta.
No podía hacer otra cosa, si bien tenía ganas, tenía que respetar su decisión.
Hasta que una mano en mi pierna y un “para” frenaron mi acción.
Rápidamente me busco la boca, la que obviamente encontró.
No hacía falta decir más nada, había elegido finalmente.
“Donde hay un telo por acá, hace mil años que no voy a un telo”
“No tengo idea , yo tampoco, pero vamos a mi depto, si queres”
“No, te quiero coger en un telo”
Enseguida saco su celular y me lo dio, “busca ahí en google maps”
Y en ese momento si, el ya había perdido su racionalidad después de tanto.
“Yerbal y Rojas” ahí encontré uno le comente.
“Fíjate que dicen en el grupo”
Quien iba a decir que eso iba a ser unantes y un después.
Entre al wp y encontré ese grupo, me puse a leer , los últimos mensajes todasdisculpas por no haber ido.
Le entre a leer todos.
Se reia, se enojaba, y seguía firme manejando hacia la dirección que le había dicho.
“Mandales un mensaje”
“Que les pongo?”
“Que son todos unos pollerudos… no mejor, mandales un audio, decile que losextrañaste”
Ni lo dude, “hola chicos, que paso que no vinieron, los extrañe hoy”
Enseguida, ese grupo muerto lleno de excusas exploto.
Teorías de un lado, teorías del otro.
Estaban los que ponían “ que grande te la vas a coger” vs los “gordo te va aretar tu mujer”
No pude, la situación me me gano.
Estar ahí leyendo lo que ponían me genero un grado de calentura y excitaciónque nunca había pensado.
“Mándales una fotito no?” mientras su ego explotaba.
Enseguida lo hice, foto sonriendo en su auto.
Seguían las teorías, ya estábamos 3-1 a favor de que todo era una joda.
Llegamos a telo, y antes de entrar a la habitación me dijo,” hagámoslo creíble.”
Y enseguida entendí que tenia que ir a posar.
Levantando ambos brazos, en la puerta de esa habitación vi como el flash se activaba.
Entramos, el teléfono seguía siendo la vedette, me hizo a upa, fuimos al primersillón que encontramos.
Me sentó encima de el, bien dejándome en claro como estaba da caliente.
Me dio de nuevo el celular, cual madre le da el suyo al hijo para que se calle.
Llovían los mensajes, que aquel 3-1 a favor de que era una joda, pasamos rápidamentea todo tipo de comentarios felicitándolo.
A mí, mientras tanto ese me volvía loca.
Tan loca que apenas había notado que el tenía ya su mano adentro de mi calza yme estaba dele tocar con sus dedos.
No dio para más, el teléfono quedo a un costado.
Me acostó en ese sillón, hizo rápidamente volar ambos zapatos, y empezó a bajarla calza.
Sin perder el tiempo la hizo volar por ahí y rápidamente llevo su cabeza entremis piernas.
Faltaba la tanga, la cual saco con mucha paciencia y movimientos lentos.
Yo en tanto, me desprendía la camisa y volaba ese corpiño
Con una delicadeza y gran técnica empezó a chuparme la concha , sin duda de lasmejores veces que me lo habían hecho.
Luego freno, y se reincorporo para darme un beso, no antes de dejarme bienclavados 2 dedos ahí abajo.
Luego de ese beso empezó a bajar de nuevo, paso por mi cuello y llego a mistetas, posteriormente volvió ahí, ahí abajo, donde esos 2 dedos no paraban deentrar y salir.
Me la volvió a chupar, nunca dejando de entrar y salir con sus dedos, lo que mehizo retorcerme, no podía estar quieta.
Eso lo calentaba aun mas, y por ende, lo hacia ser mejor.
En medio de eso, se desprendio el jean y como pudo la saco.
Sin darme cuenta, cambio sus dedos por su pija, y me empezó a coger fuertecontra ese sillón.
Sin sacarme la pija, me abrazo por atrás con uno de sus brazos y me levanto,caminamos unos pasos hacia la cama.
El empezó a sacarse la remera, mientras yo, ya sentada en esa cama, leterminaba de sacar el jean y el bóxer.
Quede de frente a su pija, no podía no probarla, enseguida escuche un suspirode su parte, y rápidamente su mano que acompañaba mi cabeza.
“Cuanto hacia que no me la chupaban” exclamo, mientras apretaba y apretaba micabeza contra el.
La saco y me la paso toda por la cara, lo disfrutaba tanto yo como el.
Acto seguido , se la tiro para atrás y me dejo los huevos a disposición.
“Dale un poquito” con gusto lo hice.
Volvió la pija a mi boca, y después de cogérmela haciendo fuerza con sus dosmanos en mi cabeza contra el , me levanto de una mano, me dio un beso y me diovuelta.
Un leve empujón contra la cama, y empezó a cogerme así, de espaldas, con losbrazos apoyados en la cama.
Acto seguido se acostó atrás mío, quedando ambos de costado. Ahí conocíPoringa.
Mientras me cogía en esa posición, soltó “Algún día vas a aparecer en Poringa”
“Que es eso?” “Una página , donde se pueden subir fotos de pareja”.
El tema quedo ahí, se tiro encima mío y empezó a cogerme fuerte contra la cama.
Era mi turno, por eso rotamos, y me tocaba a mi estar arriba.
Como nunca me senté encima y subía y bajaba abarcando el mayor trayectoposible.
No lo convencía del todo, no tener el control no era algo que disfrutaba, porlo que rápidamente pase de nuevo a estar en 4.
Y ahí empujo y empujo hasta que no di mas.
Tenia muchas ganas de acabar, y sin aguantarme llegue a ese orgasmo, con el ahí,adentro mío.
No me interrumpió el momento, me dejo disfrutarlo, con el ahí.
Una vez que termine, no tuve respiro.
Ahí estaba de nuevo, arrodillada , con el de costado a mi.
Me junto todo el pelo atrás, mientras lo sostenia con una mano, me empujaba lacabeza para que mi boca llegara de costado a chupársela.
Con la otra se tocaba.
Cuando llego el momento se puso de frente a mi, y acomodándome la cabeza tiro “cerra los ojitos”
Acto seguido empezó a acabar, muy preocupado para que toda mi cara recibieraalgo.
Termino de acabar y llevo la pija a mi boca de nuevo.
“Ahora estas para una fotito” entre risas, cosa que, si hubiera pasado, no mehubiera opuesto.
“Sos divina cyn” mientras la situación se terminaba.
Asi termino, mientras yo me bañaba el se ponía lo mas presentable posible.
Me llevo a casa, nos despedimos.
Y no fue hasta el otro jueves que nos vimos de vuelta, no para sexo, si para larutina del bar.
Donde, por mutuo acuerdo, nos encagarmos de hacerles creer que habían caído enla broma.
Sembramos esa duda, lo que fue suficiente para seguir pasándola bien, sin ningúntipo de certezas para con ellos.
21 comentarios - “Sos divina cyn”
Espero tengas mas experiencias o anécdotas que quieras compartir.
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