Como ya conté antes en algun relato, Griselda comenzó sus fantasías de trio con su primita de 18 años, quien le mandaba fotos supereroticas, como suelen hacer muchas pendejas.
Sucedió que una noche de verano, los tíos de Grisela salían y le dijeron si podia quedarse con la prima. Ella sugirió que viniera a dormir a casa para comer unas pizzas y quedarse a dormir.
Había un cuarto listo para los huéspedes (que yo usaba mas bien de depósito de cosas) y la jovencita -a quien llamaré Mariana- rapidamente aceptó la invitación.
Vino como a las 7 de la tarde con su shorcito y remera que dejaba ver sus pechos grandes para los 18 años recien cumplidos.
Muy divertidos los tres cenamos sobre la mesa ratona unas pizzas y cervezas.
"que bien la paso con ustedes, no me aburro", fue lo primero que dijo, mientras oíamos musica y tomabamos cervezas.
Marianita sentada en el piso y Grisela y yo en el sillón del living charlabamos animadamente acerca de su futuro de estudiante universitaria y de todo lo que para una joven que termina el secundario significa.
"Ay, prima, que lindo la paso con ustedes"
Griselda, medio en joda, le dijo "decile a Marcelo que nos saque unas fotitos como primitas, jajjajja"
Ni lerda ni perezosa, Mariana me dijo "salí, dejame con mi prima" y se sentó a su lado haciendo moínes para las fotos. Sacando pechito y fingiendo piquitos con Grisela. Vi brillarle los ojos a mi chica y supuse que no terminaría alli.
"A ver, Mariana, tetita con tetita"
Yo tomaba fotos con el celular y les decía como ponerse.
Mi cabeza volaba al ver esas poses casi lésbicas.
Los pezones de ambas se erectaban y se notaba dentro de sus remeras.
"Te animas, Griselda, a subirte la remera?", tiré
"Ay primo, que zarpado" dijo Mariana levantandole la remera a Gri, que quedó en corpiño.
Y ella, sin mediar palabra, le levantó la remera a la piba, que tenía un hermoso cuerpo y hermosas tetas dentro de su sosten.
"basta, chicas, que me voy a calentar"
"Dale que te gusta" dijeron casi al unísono.
Griselda acarició las tetas de Mariana y ella se puso seria. Se dejaba tocar y yo sacaba fotos.
"Podes desprenderlo, prima, asi tiito mira todo"
El morbo de Griselda y mio iba en aumento.
Le desprendió el corpiño dejando salir unas tetas enormes y duras, con pezones pequeños.
El silencio ocupó todo el lugar, las tetas de Mariana y mi cara de deseo.
Me acerqué y Griselda se levantó para sentarse frente nuestro y ver como le acariciaba las tetas a su prima.
Indicame que hago Gri, le dije, es tu prima.
Y ella me indicó.
"acariciaselas mas, como me haces a mi"
"Besalas"
"Mordele los pezoncitos", dijo mientras se quitaba el corpiño y se acariciaba los pezones con pequeños pellizcos.
Mariana gozaba y gemía. "Ay, Marcelo, qe lindo que es esto", y comenzó a acariciarme la pija por encima del pantalón. Yo baje los pantalones y el slip. Sabía las intenciones y le dije si quería probarla. Sin darme cuenta, Griselda se había desnudado totalmente y se acariciaba el clítoris cuando Mariana se abalanzó sobre mi pija para chuparla
"Asi, Mariana, sos muy buena chupadora"
Griselda se masturbaba furiosamente mientras miraba como su prima me la chupaba y me miraba arrodillada frente a mi.
Mi espectáculo no podía ser mejor. Mariana chupandomela mientras miraba a mi chica masturbarse. "asi se la chupas vos prima?" le pregunto. Griselda callaba y se metía los dedos mientras yo estaba en el cielo.
"Te voy a acabar pendeja", le dije y ella siguio como si nada hubiera dicho, con toda mi verga en su boca. Griselda acabó casi al unísono con mi chorro de leche que se derramó integro en la boca de su prima y ella tragó con placer mientras me miraba.
Y la cosa no terminó allí.
Pero será en el próximo relato
Sucedió que una noche de verano, los tíos de Grisela salían y le dijeron si podia quedarse con la prima. Ella sugirió que viniera a dormir a casa para comer unas pizzas y quedarse a dormir.
Había un cuarto listo para los huéspedes (que yo usaba mas bien de depósito de cosas) y la jovencita -a quien llamaré Mariana- rapidamente aceptó la invitación.
Vino como a las 7 de la tarde con su shorcito y remera que dejaba ver sus pechos grandes para los 18 años recien cumplidos.
Muy divertidos los tres cenamos sobre la mesa ratona unas pizzas y cervezas.
"que bien la paso con ustedes, no me aburro", fue lo primero que dijo, mientras oíamos musica y tomabamos cervezas.
Marianita sentada en el piso y Grisela y yo en el sillón del living charlabamos animadamente acerca de su futuro de estudiante universitaria y de todo lo que para una joven que termina el secundario significa.
"Ay, prima, que lindo la paso con ustedes"
Griselda, medio en joda, le dijo "decile a Marcelo que nos saque unas fotitos como primitas, jajjajja"
Ni lerda ni perezosa, Mariana me dijo "salí, dejame con mi prima" y se sentó a su lado haciendo moínes para las fotos. Sacando pechito y fingiendo piquitos con Grisela. Vi brillarle los ojos a mi chica y supuse que no terminaría alli.
"A ver, Mariana, tetita con tetita"
Yo tomaba fotos con el celular y les decía como ponerse.
Mi cabeza volaba al ver esas poses casi lésbicas.
Los pezones de ambas se erectaban y se notaba dentro de sus remeras.
"Te animas, Griselda, a subirte la remera?", tiré
"Ay primo, que zarpado" dijo Mariana levantandole la remera a Gri, que quedó en corpiño.
Y ella, sin mediar palabra, le levantó la remera a la piba, que tenía un hermoso cuerpo y hermosas tetas dentro de su sosten.
"basta, chicas, que me voy a calentar"
"Dale que te gusta" dijeron casi al unísono.
Griselda acarició las tetas de Mariana y ella se puso seria. Se dejaba tocar y yo sacaba fotos.
"Podes desprenderlo, prima, asi tiito mira todo"
El morbo de Griselda y mio iba en aumento.
Le desprendió el corpiño dejando salir unas tetas enormes y duras, con pezones pequeños.
El silencio ocupó todo el lugar, las tetas de Mariana y mi cara de deseo.
Me acerqué y Griselda se levantó para sentarse frente nuestro y ver como le acariciaba las tetas a su prima.
Indicame que hago Gri, le dije, es tu prima.
Y ella me indicó.
"acariciaselas mas, como me haces a mi"
"Besalas"
"Mordele los pezoncitos", dijo mientras se quitaba el corpiño y se acariciaba los pezones con pequeños pellizcos.
Mariana gozaba y gemía. "Ay, Marcelo, qe lindo que es esto", y comenzó a acariciarme la pija por encima del pantalón. Yo baje los pantalones y el slip. Sabía las intenciones y le dije si quería probarla. Sin darme cuenta, Griselda se había desnudado totalmente y se acariciaba el clítoris cuando Mariana se abalanzó sobre mi pija para chuparla
"Asi, Mariana, sos muy buena chupadora"
Griselda se masturbaba furiosamente mientras miraba como su prima me la chupaba y me miraba arrodillada frente a mi.
Mi espectáculo no podía ser mejor. Mariana chupandomela mientras miraba a mi chica masturbarse. "asi se la chupas vos prima?" le pregunto. Griselda callaba y se metía los dedos mientras yo estaba en el cielo.
"Te voy a acabar pendeja", le dije y ella siguio como si nada hubiera dicho, con toda mi verga en su boca. Griselda acabó casi al unísono con mi chorro de leche que se derramó integro en la boca de su prima y ella tragó con placer mientras me miraba.
Y la cosa no terminó allí.
Pero será en el próximo relato
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