Soy lesbiana, me encantan las chicas, si bien mi primeraexperiencia fue como todas (o por lo menos la mayoría de las chicas) con unnoviecito de secundaria, noté que mi atracción por los hombres no llevaba a sermás que una amistad.
Siempre me vi rodeada de hombres, (tengo muchos hermanos, yellos muchos amigos) siempre logre una buena química como pares. Uno de mismejores amigos es Nacho, con quien nos conocemos desde niños.
Ellos saben de mis gustos en chicas y yo de lo de ellos,aunque para Nacho fue algo raro tener a una amiga lesbiana, que según él “tuvieramás levante” que muchos chicos guapos. Cuando me mude con mi novia él siemprenos visitaba y en varias oportunidades se quedo a dormir en el sofá.
Una tarde como muchas recibí una llamada de él
- ¿Como estas tortita? ¿Estás sola? Necesito contartealgo.
- Hola, estoy sola y me estoy por duchar pasa en20 minutos que estoy
A los 10 minutos de la llamada sonó el timbre de mi puerta,yo aún estaba a medio vestir y el cuerpo húmedo. Me pongo una remera y salgo,cuando llego a la puerta era Nacho.
Le abro la puerta y su mirada se poso directamente en mispechos, ya que con la humedad de mi cuerpo y que no tenia ropa interior se mepego al cuerpo, mostrando mis pezones que se encontraban duritos.
-Pasa (le dije indicando hacia el comedor) que apurado estaste dije 20 minutos y no hace ni 10, espero que sea algo realmente importante loque tenes para decir. Me voy a vestir espérame q ya vuelvo
Sin mirar a Nacho me dirigí al dormitorio para podermeterminar de vestir, y como es mi costumbre dejé la puerta abierta y comencé acambiarme. Me saco la remera quedando solamente con una pequeña tanga blanca, ycuando voy a buscar q ponerme veo a Nacho parado en el umbral de la puerta ynote q en su pantalón se notaba una gran erección, la cual él la estabaaumentando tocándose por encima de su pantalón.
- ¿Qué haces acá? (fue lo primero que atiné adecir) Por que no me esperas en la cocina hasta que me terminé de vestir.
- Me encantas, me excite de solo verte.
Dio un paso dentro del dormitorio y cerró la puerta detrásde él. Se acercó a mi tocándose y aumentando su erección, un gran suspiro salióde mi boca y mis ojos no se apartaban de su pantalón, hacia mucho tiempo que noveía un pene de verdad tan de cerca.
- Sabes que me gustan las mujeres (fue mi reacción)y sabes que no engañaría jamás a Lucía.
- He soñado muchas noches con que tu boca quedellena de mi semen después de haberte hecho mía en todas las posiciones.
Mi corazón se aceleraba con cada paso que el daba más cercade mí, era una mezcla entre atracción, miedo y excitación. Me tomo por un brazoy me tiró sobre la cama, quedando con mis piernas abiertas de par en par. Él sesubió sobre mí y en ese momento sentí lo abultado de su pantalón golpeandosobre mi ropa interior, en ese momento noté que a pesar de todo estaba muyexcitada y mojada,
Su mano se metió en mi pequeña tanga y metió sus dedos de unsolo golpe, haciéndome quejar y mojarme más.
- Nacho, ¿qué haces?
- Quiero cogerte, quiero que sientas a un hombreadentro como nunca lo sentiste
Sin más desprendió su pantalón y en una fuerte envestida metiótodo su miembro dentro de mí, sentí una mezcla entre dolor y placer que meencantó. Realmente me gustaba, hacia mucho que no me sentía tan llena y contanto placer y me acople a sus movimientos, mis caderas se comenzaron a mover alcompás de su cuerpo y mis manos agarraban fuertemente mis pechos que estaban agitándosecomo nunca.
Comencé a gritar de placer y mi excitación estaba a punto dellegar a su máximo, cuando de mi boca salió, - quiero por atrás- los ojos denacho se llenaron de lujuria y en un solo movimiento me encontraba en la posiciónde perrito agarrando mis nalgas con las manos pidiéndole que me la metiera.
Sentí como entraba en mi estrecha cola, y el placer llegó alinstante, tuve un super orgasmo, de esos que te hacen temblar hasta el último rincóndel cuerpo, caí tendida en la cama mientras Nacho seguía metiéndose como loco,me tomo por el pelo y me gritaba:
- Sos la tortita más puta que conozco, como teentra toda bebota, no sabes las veces que soñé con tenerte así, y todas lasveces que me masturbé pensando en vos y tu noviecita cogiendo.
En ese momento saco su pene de mí y comenzó a masturbarsemientras con su otra mano me tomaba por el pelo, dejo todo su semen en mi caracomo un jardinero regando su mas preciada flor. En ese momento sentí un ruido ymiré hacia la puerta del dormitorio, con lágrimas en los ojos estaba mi bellaLucía mirando toda la escena.
Siempre me vi rodeada de hombres, (tengo muchos hermanos, yellos muchos amigos) siempre logre una buena química como pares. Uno de mismejores amigos es Nacho, con quien nos conocemos desde niños.
Ellos saben de mis gustos en chicas y yo de lo de ellos,aunque para Nacho fue algo raro tener a una amiga lesbiana, que según él “tuvieramás levante” que muchos chicos guapos. Cuando me mude con mi novia él siemprenos visitaba y en varias oportunidades se quedo a dormir en el sofá.
Una tarde como muchas recibí una llamada de él
- ¿Como estas tortita? ¿Estás sola? Necesito contartealgo.
- Hola, estoy sola y me estoy por duchar pasa en20 minutos que estoy
A los 10 minutos de la llamada sonó el timbre de mi puerta,yo aún estaba a medio vestir y el cuerpo húmedo. Me pongo una remera y salgo,cuando llego a la puerta era Nacho.
Le abro la puerta y su mirada se poso directamente en mispechos, ya que con la humedad de mi cuerpo y que no tenia ropa interior se mepego al cuerpo, mostrando mis pezones que se encontraban duritos.
-Pasa (le dije indicando hacia el comedor) que apurado estaste dije 20 minutos y no hace ni 10, espero que sea algo realmente importante loque tenes para decir. Me voy a vestir espérame q ya vuelvo
Sin mirar a Nacho me dirigí al dormitorio para podermeterminar de vestir, y como es mi costumbre dejé la puerta abierta y comencé acambiarme. Me saco la remera quedando solamente con una pequeña tanga blanca, ycuando voy a buscar q ponerme veo a Nacho parado en el umbral de la puerta ynote q en su pantalón se notaba una gran erección, la cual él la estabaaumentando tocándose por encima de su pantalón.
- ¿Qué haces acá? (fue lo primero que atiné adecir) Por que no me esperas en la cocina hasta que me terminé de vestir.
- Me encantas, me excite de solo verte.
Dio un paso dentro del dormitorio y cerró la puerta detrásde él. Se acercó a mi tocándose y aumentando su erección, un gran suspiro salióde mi boca y mis ojos no se apartaban de su pantalón, hacia mucho tiempo que noveía un pene de verdad tan de cerca.
- Sabes que me gustan las mujeres (fue mi reacción)y sabes que no engañaría jamás a Lucía.
- He soñado muchas noches con que tu boca quedellena de mi semen después de haberte hecho mía en todas las posiciones.
Mi corazón se aceleraba con cada paso que el daba más cercade mí, era una mezcla entre atracción, miedo y excitación. Me tomo por un brazoy me tiró sobre la cama, quedando con mis piernas abiertas de par en par. Él sesubió sobre mí y en ese momento sentí lo abultado de su pantalón golpeandosobre mi ropa interior, en ese momento noté que a pesar de todo estaba muyexcitada y mojada,
Su mano se metió en mi pequeña tanga y metió sus dedos de unsolo golpe, haciéndome quejar y mojarme más.
- Nacho, ¿qué haces?
- Quiero cogerte, quiero que sientas a un hombreadentro como nunca lo sentiste
Sin más desprendió su pantalón y en una fuerte envestida metiótodo su miembro dentro de mí, sentí una mezcla entre dolor y placer que meencantó. Realmente me gustaba, hacia mucho que no me sentía tan llena y contanto placer y me acople a sus movimientos, mis caderas se comenzaron a mover alcompás de su cuerpo y mis manos agarraban fuertemente mis pechos que estaban agitándosecomo nunca.
Comencé a gritar de placer y mi excitación estaba a punto dellegar a su máximo, cuando de mi boca salió, - quiero por atrás- los ojos denacho se llenaron de lujuria y en un solo movimiento me encontraba en la posiciónde perrito agarrando mis nalgas con las manos pidiéndole que me la metiera.
Sentí como entraba en mi estrecha cola, y el placer llegó alinstante, tuve un super orgasmo, de esos que te hacen temblar hasta el último rincóndel cuerpo, caí tendida en la cama mientras Nacho seguía metiéndose como loco,me tomo por el pelo y me gritaba:
- Sos la tortita más puta que conozco, como teentra toda bebota, no sabes las veces que soñé con tenerte así, y todas lasveces que me masturbé pensando en vos y tu noviecita cogiendo.
En ese momento saco su pene de mí y comenzó a masturbarsemientras con su otra mano me tomaba por el pelo, dejo todo su semen en mi caracomo un jardinero regando su mas preciada flor. En ese momento sentí un ruido ymiré hacia la puerta del dormitorio, con lágrimas en los ojos estaba mi bellaLucía mirando toda la escena.
1 comentarios - Mas que un amigo