Estoy seguro que alguna vez pensaste lo mismo que yo pensé hace tiempo: Si, aceptaría dinero por coger.
Es tan fácil que no se lo imaginan, solo basta saber donde encontrar los clientes que uno aceptaría. Las chicas que se prostituyen suelen pararse en una esquina o caminar y pescar alguno, en el caso de los hombres, es muy similar.
Obviamente no les va a funcionar pararse en una esquina, y mucho menos ofreciendo servicios sexuales a las mujeres que caminan por la calle porque lo más seguro es que eso no termine bien.
Mi única condición como prostituto es, que solo acepto clientes femeninas, y es tan solo porque soy heterosexual.
Paso entonces a contarles los puntos claves para encontrar clientas de lujo, esos lugares son los bingos, los clubes de danza, bachata y salsa, sobre todo en las fiestas donde hay muchas, pero muchas señoras mayores.
La media de edad de las buenas clientas ronda entre los 50 y 70, mujeres muy necesitada de cariño carnal y con dinero para costearlo.
Yo tengo 34 años, voy al gimnasio regularmente, me mantengo atletico, mido 1.80 y vivo siempre con ganas de coger.... y si me pagan, mejor.
Mi primer clienta fue Carlita, 56 años, viuda, con dos hijos que viven muy lejos de ella. La conocí en una discoteca de salsa en la que estuve de camarero por dos fines de semana. Ella es pelirroja, 1,60m, un culo grande pero hermoso, sin mucho pecho, un poco narigona, pero muy linda sonrisa.
Desde la barra se veía el cuerpo de Carlita, bailaba como una mina de 20 años. Desde que entró a la discoteca me venía directo a pedir un Gin Tonic a mi, al tercero me decía que no se lo cargue mucho, y le respondí que no se preocupe, que si estaba muy borracho la llevaba hasta su casa. Yo esperaba una sonrisa, pero en vez de eso se puso seria, se me acercó y me dijo: NO TE PASES, TENGO 56 AÑOS Y UN HIJO DE TU EDAD.
Se fue de la barra y yo me quedé avergonzado en la barra, pensando la cagada que me había mandado... no sabía en ese momento que era viuda y llegué a pensar que si llegaba a ser la mujer de uno de los jefes o algo estaba al horno.
Al terminar la noche en la discoteca, empezaron a subir las luces y a bajar la musica, yo acomodando todo en la barra para el día siguiente y por empezar a limpiar. Cuando voy a una de las mesas me encuentro a Carlita que se estaba cambiando los zapatos de baile, me acerco y le digo: Pasaste una linda noche?
Ella se da vuelta, me mira primero los pies, sube la mirada hasta mi cara y me dice: Me faltaría un buen polvo y creo que estaría satisfecha, sales pronto?
Sonriendo le digo que sí, que me esperase 20 minutos y ya estaba listo para irme, así que fui apurado a ordenar todo y casi sin demorar ya estaba listo.
Cuando salimos vamos hacia el coche de ella, un BMW serie 3 gris precioso, me da las llave del coche y me pide que conduzca. Sin titubear agarro las llaves, nos subimos, lo enciendo y le pregunto donde vivía. Ella pone su dirección en el gps y me pregunta si me había lavado, a lo que respondí que no, ya que había salido apurado, entonces saca de la guantera un paquete de pañuelos humedos.
Me acerco a ella y le empiezo a besar el cuello.... me agarra de una mano y me la lleva a toda su entrepierna, que estaba muy caliente. Ella gemía y me pregunta al oído cuanto le cobraba. Le dije que no pensaba cobrarle, que a mi me re calentaba ella y le quería hacer de todo.
Me pidió que le cobre, porque si no no le interesaba. Y me dijo: mejor piensalo mientras te hago una buena mamada, porque hace rato quiero tener un pene en mi boca, me lo prestas un poco.
Me abrió los pantalones, me saco la chota, me la limpió con el pañuelo humedo con olor a menta, me la sopló, abrió toda la boca y se la metió entera, empezando a succionar como una profesional.
Por 50 euros soy tuyo toda la noche! Le dije... y mientras ella chupaba y con la boca llena me decía ... Más, te voy a pagar más.... Se la sacaba de la boca y me decía: Te la voy a chupar, quiero que vos me la chupes a mi y que me hagas el culo. Por eso te voy a pagar al final de la noche, y esto termina esta misma noche.
Fuimos a la casa de ella, mientras conducía me la tocaba y me preguntaba acerca de mi edad, de mi trabajo...y mientras me preguntaba me hacía una paja.. Era imposible responderle cualquier pregunta.
La casa era un chalet precioso, con entrada de garage hasta adentro de la casa. Ella vivía sola, entramos y me dijo que me ponga cómodo, me señaló una barra con bebidas que tenía, con un arsenal para una buena fiesta, y me pidió que prepare algo rico para los dos y que suba a la habitación de arriba.
En la barra preparé una piña colada, bien cargada de ron de coco, y un vaso con ron miel para lamerla entera.... Subo las escaleras y veo una habitación con unas luces de velador encendidas... Desde adentro me pide que espere, que todavía no entre.... que se quería preparar un poco.
Esperé unos minutos, escuché que ponía música y en un momento me dice: Ven, entra, pero entra en calzoncillos... Algo que ya había hecho antes que me lo pidiese.
....Sigue en la segunda parte.
Es tan fácil que no se lo imaginan, solo basta saber donde encontrar los clientes que uno aceptaría. Las chicas que se prostituyen suelen pararse en una esquina o caminar y pescar alguno, en el caso de los hombres, es muy similar.
Obviamente no les va a funcionar pararse en una esquina, y mucho menos ofreciendo servicios sexuales a las mujeres que caminan por la calle porque lo más seguro es que eso no termine bien.
Mi única condición como prostituto es, que solo acepto clientes femeninas, y es tan solo porque soy heterosexual.
Paso entonces a contarles los puntos claves para encontrar clientas de lujo, esos lugares son los bingos, los clubes de danza, bachata y salsa, sobre todo en las fiestas donde hay muchas, pero muchas señoras mayores.
La media de edad de las buenas clientas ronda entre los 50 y 70, mujeres muy necesitada de cariño carnal y con dinero para costearlo.
Yo tengo 34 años, voy al gimnasio regularmente, me mantengo atletico, mido 1.80 y vivo siempre con ganas de coger.... y si me pagan, mejor.
Mi primer clienta fue Carlita, 56 años, viuda, con dos hijos que viven muy lejos de ella. La conocí en una discoteca de salsa en la que estuve de camarero por dos fines de semana. Ella es pelirroja, 1,60m, un culo grande pero hermoso, sin mucho pecho, un poco narigona, pero muy linda sonrisa.
Desde la barra se veía el cuerpo de Carlita, bailaba como una mina de 20 años. Desde que entró a la discoteca me venía directo a pedir un Gin Tonic a mi, al tercero me decía que no se lo cargue mucho, y le respondí que no se preocupe, que si estaba muy borracho la llevaba hasta su casa. Yo esperaba una sonrisa, pero en vez de eso se puso seria, se me acercó y me dijo: NO TE PASES, TENGO 56 AÑOS Y UN HIJO DE TU EDAD.
Se fue de la barra y yo me quedé avergonzado en la barra, pensando la cagada que me había mandado... no sabía en ese momento que era viuda y llegué a pensar que si llegaba a ser la mujer de uno de los jefes o algo estaba al horno.
Al terminar la noche en la discoteca, empezaron a subir las luces y a bajar la musica, yo acomodando todo en la barra para el día siguiente y por empezar a limpiar. Cuando voy a una de las mesas me encuentro a Carlita que se estaba cambiando los zapatos de baile, me acerco y le digo: Pasaste una linda noche?
Ella se da vuelta, me mira primero los pies, sube la mirada hasta mi cara y me dice: Me faltaría un buen polvo y creo que estaría satisfecha, sales pronto?
Sonriendo le digo que sí, que me esperase 20 minutos y ya estaba listo para irme, así que fui apurado a ordenar todo y casi sin demorar ya estaba listo.
Cuando salimos vamos hacia el coche de ella, un BMW serie 3 gris precioso, me da las llave del coche y me pide que conduzca. Sin titubear agarro las llaves, nos subimos, lo enciendo y le pregunto donde vivía. Ella pone su dirección en el gps y me pregunta si me había lavado, a lo que respondí que no, ya que había salido apurado, entonces saca de la guantera un paquete de pañuelos humedos.
Me acerco a ella y le empiezo a besar el cuello.... me agarra de una mano y me la lleva a toda su entrepierna, que estaba muy caliente. Ella gemía y me pregunta al oído cuanto le cobraba. Le dije que no pensaba cobrarle, que a mi me re calentaba ella y le quería hacer de todo.
Me pidió que le cobre, porque si no no le interesaba. Y me dijo: mejor piensalo mientras te hago una buena mamada, porque hace rato quiero tener un pene en mi boca, me lo prestas un poco.
Me abrió los pantalones, me saco la chota, me la limpió con el pañuelo humedo con olor a menta, me la sopló, abrió toda la boca y se la metió entera, empezando a succionar como una profesional.
Por 50 euros soy tuyo toda la noche! Le dije... y mientras ella chupaba y con la boca llena me decía ... Más, te voy a pagar más.... Se la sacaba de la boca y me decía: Te la voy a chupar, quiero que vos me la chupes a mi y que me hagas el culo. Por eso te voy a pagar al final de la noche, y esto termina esta misma noche.
Fuimos a la casa de ella, mientras conducía me la tocaba y me preguntaba acerca de mi edad, de mi trabajo...y mientras me preguntaba me hacía una paja.. Era imposible responderle cualquier pregunta.
La casa era un chalet precioso, con entrada de garage hasta adentro de la casa. Ella vivía sola, entramos y me dijo que me ponga cómodo, me señaló una barra con bebidas que tenía, con un arsenal para una buena fiesta, y me pidió que prepare algo rico para los dos y que suba a la habitación de arriba.
En la barra preparé una piña colada, bien cargada de ron de coco, y un vaso con ron miel para lamerla entera.... Subo las escaleras y veo una habitación con unas luces de velador encendidas... Desde adentro me pide que espere, que todavía no entre.... que se quería preparar un poco.
Esperé unos minutos, escuché que ponía música y en un momento me dice: Ven, entra, pero entra en calzoncillos... Algo que ya había hecho antes que me lo pidiese.
....Sigue en la segunda parte.
2 comentarios - Mi primer día como Prostituto (Parte 1)