Somos una pareja de chicas ( Paula y quien escribe Lucía) y hace más o menos 4 años entramos en este mundo swinger. Nuestras experiencias son pocas pero casi en su totalidad muy buenas. Vale aclarar que este relato no se trata de nuestra primera vez.
Aquí les dejamos el primer encuentro con Adrian y Martina. Ellos eran una pareja joven como nosotras. Buscando una chica para ella. Martina ya tenía experiencias con chicas pero no estando con él y el objetivo era que ella disfrutará por lo q el encuentro sería Soft.
Hicimos un grupo en WhatsApp para charlar los cuatro y mandarnos fotos. Siempre dejamos claro lo q queremos y esta vez no fue la excepción. Solo interactuamos con la chica, si el chico quiere participar lo hace con su pareja o eso al menos era lo q en principio teníamos planeado.
Él siempre focalizado en ella y que quería q ella disfrutará y que le Sacáramos las ganas de estar con una chica o q la dejáramos con más ganas.
En las fotos ella era muy linda súper femenina, con un pelo largo como nos gusta a nosotras y con una cola que parecía brasileña. Él físico culturista y muy lindo de cara. Con esa descripción no hace falta agregar más nada.
Charlamos durante algunos días. Conversaciones y fotos totalmente subidas de tono. Ella no podía más y nosotras tampoco. Él pedía que la "atragantáramos a concha" después nos íbamos a dar cuenta porque.
Llego el día del encuentro. Al verlos nos llevamos una pequeña sorpresa ella era muy alta casi de la altura de Paula con un vestido negro y blanco, corto con medias también a tono que le quedaba muy lindo. Era hermosa y para rematar llevaba puesto un perfume q no hacía más q aumentar nuestras ganas de desnudarla.
Él una cara dulce y un cuerpo precioso como ya lo habíamos visto en la foto. Educados y con muy buena onda
Fuimos a comer a un lugar que quedaba justo en frente al edificio de la rusa y el danés (otro capítulo aparte). Charlamos y las ganas iban creciendo. Decidimos ir a su apartamento.
Con paula nos mirábamos y sabíamos lo que cada una estaba pensado. La íbamos a pasar muy bien.
Llegamos a su apartamento cerca de la medianoche un monoambiente muy lindo. Pusieron música y ella comenzó a sambar. Estaba un poco callada y nerviosa. Ese momento antes de romper el hielo no es fácil para nadie. Yo le dije que se quedara tranquila y la toque en la espalda. Ella sonrió nerviosa. Y me miró con las ganas más lindas del mundo. Las ganas de experimentar.
Comencé a besarla, lo hacía muy bien metía su lengua en mi boca y me demostraba con ansias sus deseos acumulados. Paula se acercó y comenzó a besarla de la misma manera. La temperatura del ambiente comenzaba a subir
Ella en el medio. Paula delante y yo detrás. La cola que mostraba en las fotos no era tan linda como la que yo besaba en ese momento.
La recorríamos las dos con besos y caricias y ella extasiada disfrutaba como la devorábamos.
Él miraba sentado muy cerca. Nos decía q la besaramos y le preguntaba si le gustaba.
La desvestimos y ella hizo lo mismo con nosotras. Entre besos, caricias y mordiscos nos metimos en la cama.
Sus gemidos aumentaban cada vez más. Con Paula la recorrimos entera pero las ganas que tenía ella de hacernos sexo oral eran evidentes. Ahora entendíamos la expresión del novio.
Comenzó a chupársela a Paula. La recorría con su lengua mojada en todas direcciones. Paula arqueaba su espalda tratando de no gemir pero el momento era intenso.
Martina: te gusta como t la chupo?
Pau: si me encanta
Martina: no sabes las ganas q tenía de tener tu concha en mi boca
Pau: chupala toda entonces
Mientras martina le hacía sexo oral a Paula que estaba sentada encima de ella yo hacía lo mismo con ella. Su vagina rosadita estaba toda mojada y me pedía por favor que la hiciera acabar de una vez, que no aguantaba las ganas.
Martina: hija de puta como la chupas! Me vas hacer acabar ya
Yo: acábate toda dale! Quiero escucharte gemir
La hice desear mientras escuchaba como Paula se acaba y le inundaba la boca con su sabor.
Comienzo a meterle los deditos a Martina y el novio me dice algo q ya habíamos hablado por chat pero nunca pensé que lo iba hacer. Fisting. Ella nos había dicho de su "capacidad" pero nos había parecido un poco guarra y la habíamos dejado por ahí.
Les aseguro q en el momento no lo es. La satisfacción en su cara me decía que era justo lo q necesitaba. Su vagina se empezó abrir. Le metí dos... tres... cuatro dedos hasta q todo mi puño entro en ella.
Él me decía lo que hacer y ella gemia.
Adrian: viste como come esa conchita
Yo: me encanta, mírale la cara de gozada q tiene
Adrian: move los dedos, abri y cerra la mano vas a ver cómo se acaba toda.
Martina: más fuerte! Quiero q la metas bien adentro
La hice acabar 1... 2... 3... veces hasta q perdí la cuenta. Ella gemia sin apartar su boca de la vagina de Paula que también gozaba. Era sexo, sexo fuerte con ganas contenidas.
Las tijeras fueron incontables. Frotar mi vagina sobre la de ella, me hacía sentir con su humedad lo rico q la estaba pasando
Martina: cogeme! Dale!
Yo: te gustan q t cojan fuerte?
Martina: si me encanta. Estoy toda mojada no lo sentis?
Yo: si, quiero q me des nalgadas para cogerte fuerte
Las ganas q el novio nos había dicho no eran de mentira. Durante toda la noche sin parar (solo para unas duchitas) nos comió las conchas a las dos. Fue insaciable hasta el punto de olvidarse de su novio. El cuál en un momento se durmió mientras miraba ( pobre a todo esto debían ser las 6am como para no dormirse)
Ella se acercó e intentó animarlo para que se una a la fiesta pero el no lo consiguió.
Fue al baño y cuando volvió algo más animado tuvo sexo con ella mientras nosotras los mirábamos.
Fue un momento extraño e incomodo para nosotras y luego de observarlos dimos por terminado el encuentro.
En la mañana ( es decir dos horas después) nos escriben que la habían pasado muy bien y q él se disculpaba por haberse dormido y que ahora le estaban dando su castigo. Enviando un video de ellos teniendo sexo. Martina de espalda y él entrando y saliendo de ella con una pija deliciosa mientras se escuchaban los gemidos de ambos.
Para nosotras había sido una de las mejores experiencia y sabíamos q para ella también. Fue una química especial de esas que se necesitan para amanecer en una cama con dos extraños después de estar toda la noche teniendo sexo. Otro encuentro era necesario para q él la pasara mejor y si en este hubo química en el segundo fue de alquilar balcones... pero ese me lo guardo para el próximo relato.
Aquí les dejamos el primer encuentro con Adrian y Martina. Ellos eran una pareja joven como nosotras. Buscando una chica para ella. Martina ya tenía experiencias con chicas pero no estando con él y el objetivo era que ella disfrutará por lo q el encuentro sería Soft.
Hicimos un grupo en WhatsApp para charlar los cuatro y mandarnos fotos. Siempre dejamos claro lo q queremos y esta vez no fue la excepción. Solo interactuamos con la chica, si el chico quiere participar lo hace con su pareja o eso al menos era lo q en principio teníamos planeado.
Él siempre focalizado en ella y que quería q ella disfrutará y que le Sacáramos las ganas de estar con una chica o q la dejáramos con más ganas.
En las fotos ella era muy linda súper femenina, con un pelo largo como nos gusta a nosotras y con una cola que parecía brasileña. Él físico culturista y muy lindo de cara. Con esa descripción no hace falta agregar más nada.
Charlamos durante algunos días. Conversaciones y fotos totalmente subidas de tono. Ella no podía más y nosotras tampoco. Él pedía que la "atragantáramos a concha" después nos íbamos a dar cuenta porque.
Llego el día del encuentro. Al verlos nos llevamos una pequeña sorpresa ella era muy alta casi de la altura de Paula con un vestido negro y blanco, corto con medias también a tono que le quedaba muy lindo. Era hermosa y para rematar llevaba puesto un perfume q no hacía más q aumentar nuestras ganas de desnudarla.
Él una cara dulce y un cuerpo precioso como ya lo habíamos visto en la foto. Educados y con muy buena onda
Fuimos a comer a un lugar que quedaba justo en frente al edificio de la rusa y el danés (otro capítulo aparte). Charlamos y las ganas iban creciendo. Decidimos ir a su apartamento.
Con paula nos mirábamos y sabíamos lo que cada una estaba pensado. La íbamos a pasar muy bien.
Llegamos a su apartamento cerca de la medianoche un monoambiente muy lindo. Pusieron música y ella comenzó a sambar. Estaba un poco callada y nerviosa. Ese momento antes de romper el hielo no es fácil para nadie. Yo le dije que se quedara tranquila y la toque en la espalda. Ella sonrió nerviosa. Y me miró con las ganas más lindas del mundo. Las ganas de experimentar.
Comencé a besarla, lo hacía muy bien metía su lengua en mi boca y me demostraba con ansias sus deseos acumulados. Paula se acercó y comenzó a besarla de la misma manera. La temperatura del ambiente comenzaba a subir
Ella en el medio. Paula delante y yo detrás. La cola que mostraba en las fotos no era tan linda como la que yo besaba en ese momento.
La recorríamos las dos con besos y caricias y ella extasiada disfrutaba como la devorábamos.
Él miraba sentado muy cerca. Nos decía q la besaramos y le preguntaba si le gustaba.
La desvestimos y ella hizo lo mismo con nosotras. Entre besos, caricias y mordiscos nos metimos en la cama.
Sus gemidos aumentaban cada vez más. Con Paula la recorrimos entera pero las ganas que tenía ella de hacernos sexo oral eran evidentes. Ahora entendíamos la expresión del novio.
Comenzó a chupársela a Paula. La recorría con su lengua mojada en todas direcciones. Paula arqueaba su espalda tratando de no gemir pero el momento era intenso.
Martina: te gusta como t la chupo?
Pau: si me encanta
Martina: no sabes las ganas q tenía de tener tu concha en mi boca
Pau: chupala toda entonces
Mientras martina le hacía sexo oral a Paula que estaba sentada encima de ella yo hacía lo mismo con ella. Su vagina rosadita estaba toda mojada y me pedía por favor que la hiciera acabar de una vez, que no aguantaba las ganas.
Martina: hija de puta como la chupas! Me vas hacer acabar ya
Yo: acábate toda dale! Quiero escucharte gemir
La hice desear mientras escuchaba como Paula se acaba y le inundaba la boca con su sabor.
Comienzo a meterle los deditos a Martina y el novio me dice algo q ya habíamos hablado por chat pero nunca pensé que lo iba hacer. Fisting. Ella nos había dicho de su "capacidad" pero nos había parecido un poco guarra y la habíamos dejado por ahí.
Les aseguro q en el momento no lo es. La satisfacción en su cara me decía que era justo lo q necesitaba. Su vagina se empezó abrir. Le metí dos... tres... cuatro dedos hasta q todo mi puño entro en ella.
Él me decía lo que hacer y ella gemia.
Adrian: viste como come esa conchita
Yo: me encanta, mírale la cara de gozada q tiene
Adrian: move los dedos, abri y cerra la mano vas a ver cómo se acaba toda.
Martina: más fuerte! Quiero q la metas bien adentro
La hice acabar 1... 2... 3... veces hasta q perdí la cuenta. Ella gemia sin apartar su boca de la vagina de Paula que también gozaba. Era sexo, sexo fuerte con ganas contenidas.
Las tijeras fueron incontables. Frotar mi vagina sobre la de ella, me hacía sentir con su humedad lo rico q la estaba pasando
Martina: cogeme! Dale!
Yo: te gustan q t cojan fuerte?
Martina: si me encanta. Estoy toda mojada no lo sentis?
Yo: si, quiero q me des nalgadas para cogerte fuerte
Las ganas q el novio nos había dicho no eran de mentira. Durante toda la noche sin parar (solo para unas duchitas) nos comió las conchas a las dos. Fue insaciable hasta el punto de olvidarse de su novio. El cuál en un momento se durmió mientras miraba ( pobre a todo esto debían ser las 6am como para no dormirse)
Ella se acercó e intentó animarlo para que se una a la fiesta pero el no lo consiguió.
Fue al baño y cuando volvió algo más animado tuvo sexo con ella mientras nosotras los mirábamos.
Fue un momento extraño e incomodo para nosotras y luego de observarlos dimos por terminado el encuentro.
En la mañana ( es decir dos horas después) nos escriben que la habían pasado muy bien y q él se disculpaba por haberse dormido y que ahora le estaban dando su castigo. Enviando un video de ellos teniendo sexo. Martina de espalda y él entrando y saliendo de ella con una pija deliciosa mientras se escuchaban los gemidos de ambos.
Para nosotras había sido una de las mejores experiencia y sabíamos q para ella también. Fue una química especial de esas que se necesitan para amanecer en una cama con dos extraños después de estar toda la noche teniendo sexo. Otro encuentro era necesario para q él la pasara mejor y si en este hubo química en el segundo fue de alquilar balcones... pero ese me lo guardo para el próximo relato.
3 comentarios - Experiencia fisting