Les presentamos a Marcela, la otra protagonista de esta hermosa historia de sexo, infidelidad, incesto y orgías espontaneas. Pasen por la primera parte, por la segunda y por la presentación de Gaby. Espero que les guste marcelita.
Hola a todos, soy Marcela. Hermana de Gaby la otra protagonista de la historia y amiga del dueño de esta cuenta y creador de todo esto que nos tiene caliente a todos.
Soy la nena chiquita de una familia numerosa pero que de temprana edad se dedicó a calentar todas las pijas que se le cruzaba.
Recuerdo que empecé con un primo. Él ya tenía unos 18 años y yo apenas unos 14 añitos. Si, así como lo leen, a los 14 añitos comencé a sentir deseo por los hombre y más de una vez despertaba por las noches con mi conchita virgen mojada y una sensación de cosquilleo que dejaba mis piernitas temblando.
Comenzaba a mirar pelis porno a escondidas y me calentaba tanto ver esas pijas grandes y venosas. Pero también me gustaba ver como dos mujeres se chupaban las conchas.
Luego empecé a espiar a mis hermanas como llevaban chicos a la casa para cogérselos. Yo miraba como más de una vez Gaby le saltaba en la verga a Claudio y la dejaba en la cama toda mojada de ese líquido blanco y pegajoso que le salía de la pija a Clau.
Obviamente que yo no sabía que era semen, pero veía que la puta de mi hermana amaba tragárselo y pasárselo por toda la cara.
Mi primo solía venir a mi casa y yo sentía deseo de que me toque. Al principio se hacia el pelotudo, pero después tomo confianza y metía sus manos en mis partes más íntimas y yo moría de deseo, me producía ese cosquilleo hermoso en el vientre que me daban ganas de cogerlo. Pero obvio que no sabía cómo hacerlo, me daba vergüenza, un poco de miedo y además era mi primo.
Aunque el hijo de puta me deba unas manoseadas terribles. Obvio que me dejaba y me hacia la nena inocente que no se daba cuenta. Y se empezó a hacer más frecuente que mi primo me toque la cola, la concha o me agarre las tetas que ya a los 14 comenzaban a crecer mucho.
Fue hasta que un día Claudio me encontró con mi primo que me tenía agarrada del culo. Y cómo fue? Se lo describo para que se les pare la pija y se les moje la concha.
Era chiquita como les venía contando, entonces yo cada vez que venía mi primo a casa me ponía calcitas ajustaditas que me paraban mi colita redondita. Era una púber con las hormonas dándome vueltas por la argolla y vivía caliente, y sobre todo porque todos los fines de semana la tenía a alguna de mis hermanas cogiendo en la habitación con algún macho. Como creen que no me iba a calentar desde pendeja, si en mi entorno se sexo se practicó siempre libremente.
Era una tarde de calorcito en la ciudad y mi primo estaba sentada en el sillón y yo fui y me pare frente a el tapándole la televisión.
Tenía un shorsito de Lycra rosa muy ajustadito, se me subía y se me veían el comienzo de mis cachetitos del culo. Y de frente para que contarles no? Jaja
Se podía ver mi papito virgen bien marcadito. Pude ver q mi primo se agarró la chota al ver a su primita chiquita así, rubiecita y piel blanquita diciéndole:
-Primo, me acompañas a comprar?
Mi primo se enderezo en el sillón y me tomo de la cintura para que me acerque a el y poso sus manos en mi cola. Su cara estaba en mi pelvis que sentía un cosquilleo hermoso. El me aprieta la colita y me dice:
-Y xq no vas sola? Estoy mirando el partido primita
-No voy sola porque los chicos me dicen cosas y me da vergüenza (con voz de nena haciendo pucherito)
-Y también primita, mira lo cortito que es este shorsito, los chicos te ven muy linda y ya no sos una nena
-Te parezco linda primo?
Ahí mi primo me apretó más la cola y comenzó a besar mi pancita y mi vientre y yo me mordía los labios del placer. Yo le agarre la cabeza y lo acariciaba. Mi concha estaba mojadisima, sentía húmeda la entre pierna.
De golpe siento que Claudio habla de atrás y dice:
-Que cariñosos los primos jaja
Se rio y se sentó al lado de mi primo y yo quede asustada, porque creí que le iba a decir algo a mis hermanas y me moría de vergüenza.
Claudio le pregunto a mi primo como iba el partido y el sin soltarme apoyo la espalda en el respaldar e hizo q me siente sobre su falda mientras ellos miraban el partido.
Por primera vez sentí una pija dura en mi cuerpo. Mi primo estaba re caliente y yo igual. Y Claudio al lado como si nada pasara. Empecé a moverme despacito y mi primo empujaba su verga en mi colita. Sin darnos cuenta, termine con la espalda apoyada en mi primito y mientras el mentía una mano en mi concha y la otra apretaba mis tetas, hasta que Claudio nos miró y dijo:
-Están calientes no? Jaja no te vas a coger a tu primita
-Bueno pero mira lo que es la pendeja, encima me busca, mírale el orto que tiene
Claudio se paró y note que su pija estaba parada también y me agarro de la mano y me hizo pararme. Me giro para que le dé la espalda y comenzó a tocarme el culo y la concha. Y podía verlo a mi primo sentado con la pija dura que se la acariciaba por encima del pantalón. En un rato también se paró y quede paradita con mis trencitas rubias entre los dos que me manoseaban toda, sus manos recorrían mi cuerpo, yo paraba la cola y abría las piernas, estaba casi en punta de pie para que ellos me toque toda, las tetas, la concha, el culo, las piernas, toda manoseada por dos chicos mayores que yo.
Esa tarde conocí lo que era el semen, porque mi primera vez fue chuparme dos pijas, tan chiquita y con tantas ganas de coger. Yo no sabía cómo era así que mi primo y Clau me enseñaron. Ellos dos se sentaron con sus pijas al aire y yo me arrodille para agarrarle las pijas, apoyaba mi cabeza sobre sus piernas y observabas esa pijas duras y con su cabeza coloraditas. Los pajeaba hasta que me anime a chuparlas. Me acorde de las veces que miraba a mi hermana chuparle la pija a Claudio, así que comencé con él, la lamia como un heladito, me la metía en la boquita y a él lo ponía muy caliente tener una pendejita rubia de trencitas chupándole la chota. Me pregunto si quería leche y supe que era mi momento, me pidió que le haga la paja más rápido mientras se la chupo y como buena nena lo hice, para luego de un ratito sentir chorro de semen caliente en mi cara que me hizo largar un grito de placer, abrí mi boca para tragar lo más que pueda y Claudio gemía muy fuerte de placer. Y lo mismo hice con mi primo, ambos me dejaron toda la cara bañada en leche.
Así fueron mis primeras experiencias con pijas que tuve, me hacia la nena para que me den una buena manoseada de orto y me dejen bien calentita.
Fui creciendo y también mis tetas, pase a ser la nenita rubia de buen culo y tetas grandes que todos se querían coger en el barrio, en el colegio, en el boliche o donde fuera sentía la mirada de los hombres que me la querían dar.
Comenzamos a compartir machos con mis hermanas, sobre todo con Gaby que aparece en estes relato. Claudio solia sacar la pija de la concha de mi hermana para venir a donde estaba yo y meterla en la mía. Solíamos pasar fines de semanas enteros cogiendo.
Tengo millones de historias sexuales, casi me es imposible enumerarlas para contarlas, hice cosas muy locas, muy jugadas, muy pervertidas. Algunas tal vez me arrepiento, pero en ese momento la concha me lo pedía.
Como por ejemplo esa vez que sali al boliche con una amiga y su novio. Mi amiga se emborracho demasiado y volvimos a dejarla para que duerma y su novio me la dio toda en el auto de regreso a mi casa. Terminamos los dos juntos durmiendo después de coger en mi cama y despertamos cuando mi amiga lo llamo a su novio que estaba desnudo en mis sabanas con la verga dura porque le estaba dando una chupada terrible, me volvió a llenar de leche esa mañana. Después me sentí mal pero la cogida que me dio, no me la saca nadie.
Me gusta vestirme con ropa ajustada, realmente no voy a ser nada modesta, tengo una buena cintura, un buen culo gordo y parado, tetas grandes y una boca de petera que todo hombre elogia.
Estuve de novia mucho tiempo, no hasta hace mucho. Mi novio se fue amoldando a mis apetitos sexuales. Tenía una buena pija, sé que sus amigos vieron varios videos míos chupándole la verga o fotos mías en bolas.
Pero lo mejor que hizo fue aceptar hacer un trio con mi amigo Claudio. Como lo conocía y le tenía confianza, acepto que me lo garche frente a él. Fue hermoso despertar con mi novio y mi mejor amigo en la cama, yo en el medio de ellos dos.
No sé qué más contarles, ya que tengo miles de historias como les dije. Podrían preguntar y yo les contesto, o mi hermana o Clau.
Espero que les haya gustado y la historia continua, con mucho sexo y mas gente que se suma a esta orgia que no termina nunca.
Hola a todos, soy Marcela. Hermana de Gaby la otra protagonista de la historia y amiga del dueño de esta cuenta y creador de todo esto que nos tiene caliente a todos.
Soy la nena chiquita de una familia numerosa pero que de temprana edad se dedicó a calentar todas las pijas que se le cruzaba.
Recuerdo que empecé con un primo. Él ya tenía unos 18 años y yo apenas unos 14 añitos. Si, así como lo leen, a los 14 añitos comencé a sentir deseo por los hombre y más de una vez despertaba por las noches con mi conchita virgen mojada y una sensación de cosquilleo que dejaba mis piernitas temblando.
Comenzaba a mirar pelis porno a escondidas y me calentaba tanto ver esas pijas grandes y venosas. Pero también me gustaba ver como dos mujeres se chupaban las conchas.
Luego empecé a espiar a mis hermanas como llevaban chicos a la casa para cogérselos. Yo miraba como más de una vez Gaby le saltaba en la verga a Claudio y la dejaba en la cama toda mojada de ese líquido blanco y pegajoso que le salía de la pija a Clau.
Obviamente que yo no sabía que era semen, pero veía que la puta de mi hermana amaba tragárselo y pasárselo por toda la cara.
Mi primo solía venir a mi casa y yo sentía deseo de que me toque. Al principio se hacia el pelotudo, pero después tomo confianza y metía sus manos en mis partes más íntimas y yo moría de deseo, me producía ese cosquilleo hermoso en el vientre que me daban ganas de cogerlo. Pero obvio que no sabía cómo hacerlo, me daba vergüenza, un poco de miedo y además era mi primo.
Aunque el hijo de puta me deba unas manoseadas terribles. Obvio que me dejaba y me hacia la nena inocente que no se daba cuenta. Y se empezó a hacer más frecuente que mi primo me toque la cola, la concha o me agarre las tetas que ya a los 14 comenzaban a crecer mucho.
Fue hasta que un día Claudio me encontró con mi primo que me tenía agarrada del culo. Y cómo fue? Se lo describo para que se les pare la pija y se les moje la concha.
Era chiquita como les venía contando, entonces yo cada vez que venía mi primo a casa me ponía calcitas ajustaditas que me paraban mi colita redondita. Era una púber con las hormonas dándome vueltas por la argolla y vivía caliente, y sobre todo porque todos los fines de semana la tenía a alguna de mis hermanas cogiendo en la habitación con algún macho. Como creen que no me iba a calentar desde pendeja, si en mi entorno se sexo se practicó siempre libremente.
Era una tarde de calorcito en la ciudad y mi primo estaba sentada en el sillón y yo fui y me pare frente a el tapándole la televisión.
Tenía un shorsito de Lycra rosa muy ajustadito, se me subía y se me veían el comienzo de mis cachetitos del culo. Y de frente para que contarles no? Jaja
Se podía ver mi papito virgen bien marcadito. Pude ver q mi primo se agarró la chota al ver a su primita chiquita así, rubiecita y piel blanquita diciéndole:
-Primo, me acompañas a comprar?
Mi primo se enderezo en el sillón y me tomo de la cintura para que me acerque a el y poso sus manos en mi cola. Su cara estaba en mi pelvis que sentía un cosquilleo hermoso. El me aprieta la colita y me dice:
-Y xq no vas sola? Estoy mirando el partido primita
-No voy sola porque los chicos me dicen cosas y me da vergüenza (con voz de nena haciendo pucherito)
-Y también primita, mira lo cortito que es este shorsito, los chicos te ven muy linda y ya no sos una nena
-Te parezco linda primo?
Ahí mi primo me apretó más la cola y comenzó a besar mi pancita y mi vientre y yo me mordía los labios del placer. Yo le agarre la cabeza y lo acariciaba. Mi concha estaba mojadisima, sentía húmeda la entre pierna.
De golpe siento que Claudio habla de atrás y dice:
-Que cariñosos los primos jaja
Se rio y se sentó al lado de mi primo y yo quede asustada, porque creí que le iba a decir algo a mis hermanas y me moría de vergüenza.
Claudio le pregunto a mi primo como iba el partido y el sin soltarme apoyo la espalda en el respaldar e hizo q me siente sobre su falda mientras ellos miraban el partido.
Por primera vez sentí una pija dura en mi cuerpo. Mi primo estaba re caliente y yo igual. Y Claudio al lado como si nada pasara. Empecé a moverme despacito y mi primo empujaba su verga en mi colita. Sin darnos cuenta, termine con la espalda apoyada en mi primito y mientras el mentía una mano en mi concha y la otra apretaba mis tetas, hasta que Claudio nos miró y dijo:
-Están calientes no? Jaja no te vas a coger a tu primita
-Bueno pero mira lo que es la pendeja, encima me busca, mírale el orto que tiene
Claudio se paró y note que su pija estaba parada también y me agarro de la mano y me hizo pararme. Me giro para que le dé la espalda y comenzó a tocarme el culo y la concha. Y podía verlo a mi primo sentado con la pija dura que se la acariciaba por encima del pantalón. En un rato también se paró y quede paradita con mis trencitas rubias entre los dos que me manoseaban toda, sus manos recorrían mi cuerpo, yo paraba la cola y abría las piernas, estaba casi en punta de pie para que ellos me toque toda, las tetas, la concha, el culo, las piernas, toda manoseada por dos chicos mayores que yo.
Esa tarde conocí lo que era el semen, porque mi primera vez fue chuparme dos pijas, tan chiquita y con tantas ganas de coger. Yo no sabía cómo era así que mi primo y Clau me enseñaron. Ellos dos se sentaron con sus pijas al aire y yo me arrodille para agarrarle las pijas, apoyaba mi cabeza sobre sus piernas y observabas esa pijas duras y con su cabeza coloraditas. Los pajeaba hasta que me anime a chuparlas. Me acorde de las veces que miraba a mi hermana chuparle la pija a Claudio, así que comencé con él, la lamia como un heladito, me la metía en la boquita y a él lo ponía muy caliente tener una pendejita rubia de trencitas chupándole la chota. Me pregunto si quería leche y supe que era mi momento, me pidió que le haga la paja más rápido mientras se la chupo y como buena nena lo hice, para luego de un ratito sentir chorro de semen caliente en mi cara que me hizo largar un grito de placer, abrí mi boca para tragar lo más que pueda y Claudio gemía muy fuerte de placer. Y lo mismo hice con mi primo, ambos me dejaron toda la cara bañada en leche.
Así fueron mis primeras experiencias con pijas que tuve, me hacia la nena para que me den una buena manoseada de orto y me dejen bien calentita.
Fui creciendo y también mis tetas, pase a ser la nenita rubia de buen culo y tetas grandes que todos se querían coger en el barrio, en el colegio, en el boliche o donde fuera sentía la mirada de los hombres que me la querían dar.
Comenzamos a compartir machos con mis hermanas, sobre todo con Gaby que aparece en estes relato. Claudio solia sacar la pija de la concha de mi hermana para venir a donde estaba yo y meterla en la mía. Solíamos pasar fines de semanas enteros cogiendo.
Tengo millones de historias sexuales, casi me es imposible enumerarlas para contarlas, hice cosas muy locas, muy jugadas, muy pervertidas. Algunas tal vez me arrepiento, pero en ese momento la concha me lo pedía.
Como por ejemplo esa vez que sali al boliche con una amiga y su novio. Mi amiga se emborracho demasiado y volvimos a dejarla para que duerma y su novio me la dio toda en el auto de regreso a mi casa. Terminamos los dos juntos durmiendo después de coger en mi cama y despertamos cuando mi amiga lo llamo a su novio que estaba desnudo en mis sabanas con la verga dura porque le estaba dando una chupada terrible, me volvió a llenar de leche esa mañana. Después me sentí mal pero la cogida que me dio, no me la saca nadie.
Me gusta vestirme con ropa ajustada, realmente no voy a ser nada modesta, tengo una buena cintura, un buen culo gordo y parado, tetas grandes y una boca de petera que todo hombre elogia.
Estuve de novia mucho tiempo, no hasta hace mucho. Mi novio se fue amoldando a mis apetitos sexuales. Tenía una buena pija, sé que sus amigos vieron varios videos míos chupándole la verga o fotos mías en bolas.
Pero lo mejor que hizo fue aceptar hacer un trio con mi amigo Claudio. Como lo conocía y le tenía confianza, acepto que me lo garche frente a él. Fue hermoso despertar con mi novio y mi mejor amigo en la cama, yo en el medio de ellos dos.
No sé qué más contarles, ya que tengo miles de historias como les dije. Podrían preguntar y yo les contesto, o mi hermana o Clau.
Espero que les haya gustado y la historia continua, con mucho sexo y mas gente que se suma a esta orgia que no termina nunca.
7 comentarios - Soy la puta de todos (presentación de Marcelita)