Buenas poringuer@s, les quiero contar algo que me paso en mi laburo...
Todo comenzó una tarde común, yo en el mostrador con la notebook armando un pedido para los proveedores, la gente que pasa y saluda, la música, y entre todo eso la veo entrar, radiante, hermosa, una mujer de unos 35 años, flaquita, rubia, sin grandes curvas pero llevaba un jogging que le marcaba la tanga en ese culo manzanita y unos pechos pequeños pero que estuve un par de segundos mirándolos.
Yo ni bien entra me paro y le digo -"Hola, como estas?"
Ella -"Hola, bien vos? ando buscando..."
Hace su compra, me paga y cuando le doy el vuelto noté como se rozaron nuestros dedos, mientras miraba sus ojos celestes y se me puso la piel de gallina.
Así paso durante varios días, ella entraba, me compraba y con su sonrisa y su mirada provocadora se iba, dejándome tan excitado que no veía la hora de cerrar y masturbarme pensando en ese cuerpo tan perfecto. Todo seguía normal, aunque se notaba la tensión sexual cada vez que entraba, hasta que un día...
Llegó la hora del cierre así que baje la persiana, puse la puerta y cuando entro y cierro la puerta siento que la golpean, al abrir y asomarme la veo, ahí parada, de noche, preguntándome si podía pasar que necesitaba comprar, ahí mismo dije "Esta es mi oportunidad". La hago pasar e inmediatamente después de que entre cierro la puerta de la persiana.
-"Gracias por abrirme, me olvide de comprar un perfume"
-"No pasa nada, cual querés?"
-"No se como se llama, es el que tengo puesto" y mueve su cabeza, dándome lugar para que le huela el cuello, ahí yo ya estaba super nervioso, me acerco para olerle el cuello y su perfume casi que me da vuelta la cabeza, estaba cada vez mas excitado y con ganas de tirarla en el mostrador y hacerle todo lo que le vengo queriendo hacer desde la primera vez que la vi. Bueno, al acercarme no pude evitar hacer contacto primero con mi nariz, y después con mis labios, provocando una respiración profunda que expresaba todo lo que me estaba conteniendo. Al ver que no se negó apoyé mi mano en su cintura, tenia una camisa blanca, y al no oponerse sabía que todo iba por le buen camino y le comí la boca. Para mi sorpresa, paso de estar muy tranquila y sin reacción a darme un beso tan apasionado que sentía su lengua larga moverse en mi boca y la mía en la boca de ella. Automáticamente tire al piso lo que había en el mostrador y la senté, le abrí la camisa casi con desesperación, prácticamente le arranco el corpiño y veo esas tetas chiquitas pero hermosas, tal cual me las imagine, con unos pezones en punta que no me aguante de chupárselos con fuerza. Ella me saca la remera, me abre el cinturón y me mete la mano en el pantalón hasta agarrarme la pija, que para ese momento ya estaba mas dura que un poste de metal. Me dice -"Apa, la tenías bien guardada...", se baja del mostrador, se arrodilla y sin perder un segundo se metió toda la cabeza de mi pija en su boca, chupándomela con gran energía, y dándome uno de los mejores placeres que existen. Cuando siento que estoy por acabar (aunque admito que moría por llenare la boca de leche) la levanto, le saco los pantalones y la bombacha, la subo otra vez al mostrador y abriéndola de piernas bajo y se la empiezo a chupar, tenía un clítoris perfecto, era grande y yo jugaba con mi lengua, se lo succionaba, hasta se lo mordía y ella gemía de placer. Mientras con una mano subía el volumen de la música para que la gente que pasaba por afuera no escuche lo que estaba pasando, con la otra le empece a meter un dedo, después dos, cada vez mas rápido y profundo mientras se la chupaba con euforia hasta que siento que me clava los dedos en los hombros, contrae fuertemente todos los músculos de su cuerpo y sentía como su concha me empujaba los dedos para afuera, para largar un grito mientras se tapaba la boca y me mojaba toda la mano con sus fluidos, que bajaban las gotas hasta el codo. Luego de sacarle los dedos se la seguí chupando, hasta que empezó a gemir de vuelta y la misma situación se repitió tres veces, hasta que ya con las piernas temblando me hizo subir y me dijo "Metemela". Imagínense como estaba yo, volando de calentura, sentía que si no le metía la pija me iba a explotar, necesitaba sentir esa concha rosada con mi pija y así fue, se la metí despacio, aunque ella ya tenia la concha tan dilatada por los orgasmos, y yo quise ver hasta donde le entraba y para mi sorpresa le entró casi toda. No pense que una mujer con un cuerpo tan chiquito se iba a bancar de una mis 23cm de pija gruesa pero así fue, y pasamos a tener un sexo desaforado, estábamos volando los dos, yo tocaba el cielo con las manos teniéndola ahí sentada en el mostrador abierta de piernas y yo cogiéndola a toda máquina mientras con la mano le frotaba el clítoris. Al rato cambiamos de posición, ella se paro, se dio vuelta y me la cogí de atrás, agarrándola de las tetas, aunque al rato volvimos a la primer posición, ella en el mostrador y yo parado cogiéndola de frente, y después de hacerla acabar dos veces mas con la pija sentí que era mi turno, le dije "Voy a acabar" y automáticamente se bajo del mostrador y se arrodilló adelante mío, chupándomela como toda una profesional hasta que no aguante mas y le descargue toda la leche en su boca, sintiendo el mayor placer que sentí en mi vida. Al terminar ella se levanta y después de tragarse hasta la ultima gota me da un beso tan apasionado que me volví a excitar, ya tenía la pija parada de vuelta!! Mi primer reacción fue agarrarla y darla vuelta para cogérmela otra vez, ella se da vuelta y cuando se la meto me dice "Para... por hoy ya esta, guardemos para la próxima..." Ella supo como dejarme re caliente.
Ese fue nuestro primer encuentro, si les gusta y tiene aceptación después les cuento mas...
Todo comenzó una tarde común, yo en el mostrador con la notebook armando un pedido para los proveedores, la gente que pasa y saluda, la música, y entre todo eso la veo entrar, radiante, hermosa, una mujer de unos 35 años, flaquita, rubia, sin grandes curvas pero llevaba un jogging que le marcaba la tanga en ese culo manzanita y unos pechos pequeños pero que estuve un par de segundos mirándolos.
Yo ni bien entra me paro y le digo -"Hola, como estas?"
Ella -"Hola, bien vos? ando buscando..."
Hace su compra, me paga y cuando le doy el vuelto noté como se rozaron nuestros dedos, mientras miraba sus ojos celestes y se me puso la piel de gallina.
Así paso durante varios días, ella entraba, me compraba y con su sonrisa y su mirada provocadora se iba, dejándome tan excitado que no veía la hora de cerrar y masturbarme pensando en ese cuerpo tan perfecto. Todo seguía normal, aunque se notaba la tensión sexual cada vez que entraba, hasta que un día...
Llegó la hora del cierre así que baje la persiana, puse la puerta y cuando entro y cierro la puerta siento que la golpean, al abrir y asomarme la veo, ahí parada, de noche, preguntándome si podía pasar que necesitaba comprar, ahí mismo dije "Esta es mi oportunidad". La hago pasar e inmediatamente después de que entre cierro la puerta de la persiana.
-"Gracias por abrirme, me olvide de comprar un perfume"
-"No pasa nada, cual querés?"
-"No se como se llama, es el que tengo puesto" y mueve su cabeza, dándome lugar para que le huela el cuello, ahí yo ya estaba super nervioso, me acerco para olerle el cuello y su perfume casi que me da vuelta la cabeza, estaba cada vez mas excitado y con ganas de tirarla en el mostrador y hacerle todo lo que le vengo queriendo hacer desde la primera vez que la vi. Bueno, al acercarme no pude evitar hacer contacto primero con mi nariz, y después con mis labios, provocando una respiración profunda que expresaba todo lo que me estaba conteniendo. Al ver que no se negó apoyé mi mano en su cintura, tenia una camisa blanca, y al no oponerse sabía que todo iba por le buen camino y le comí la boca. Para mi sorpresa, paso de estar muy tranquila y sin reacción a darme un beso tan apasionado que sentía su lengua larga moverse en mi boca y la mía en la boca de ella. Automáticamente tire al piso lo que había en el mostrador y la senté, le abrí la camisa casi con desesperación, prácticamente le arranco el corpiño y veo esas tetas chiquitas pero hermosas, tal cual me las imagine, con unos pezones en punta que no me aguante de chupárselos con fuerza. Ella me saca la remera, me abre el cinturón y me mete la mano en el pantalón hasta agarrarme la pija, que para ese momento ya estaba mas dura que un poste de metal. Me dice -"Apa, la tenías bien guardada...", se baja del mostrador, se arrodilla y sin perder un segundo se metió toda la cabeza de mi pija en su boca, chupándomela con gran energía, y dándome uno de los mejores placeres que existen. Cuando siento que estoy por acabar (aunque admito que moría por llenare la boca de leche) la levanto, le saco los pantalones y la bombacha, la subo otra vez al mostrador y abriéndola de piernas bajo y se la empiezo a chupar, tenía un clítoris perfecto, era grande y yo jugaba con mi lengua, se lo succionaba, hasta se lo mordía y ella gemía de placer. Mientras con una mano subía el volumen de la música para que la gente que pasaba por afuera no escuche lo que estaba pasando, con la otra le empece a meter un dedo, después dos, cada vez mas rápido y profundo mientras se la chupaba con euforia hasta que siento que me clava los dedos en los hombros, contrae fuertemente todos los músculos de su cuerpo y sentía como su concha me empujaba los dedos para afuera, para largar un grito mientras se tapaba la boca y me mojaba toda la mano con sus fluidos, que bajaban las gotas hasta el codo. Luego de sacarle los dedos se la seguí chupando, hasta que empezó a gemir de vuelta y la misma situación se repitió tres veces, hasta que ya con las piernas temblando me hizo subir y me dijo "Metemela". Imagínense como estaba yo, volando de calentura, sentía que si no le metía la pija me iba a explotar, necesitaba sentir esa concha rosada con mi pija y así fue, se la metí despacio, aunque ella ya tenia la concha tan dilatada por los orgasmos, y yo quise ver hasta donde le entraba y para mi sorpresa le entró casi toda. No pense que una mujer con un cuerpo tan chiquito se iba a bancar de una mis 23cm de pija gruesa pero así fue, y pasamos a tener un sexo desaforado, estábamos volando los dos, yo tocaba el cielo con las manos teniéndola ahí sentada en el mostrador abierta de piernas y yo cogiéndola a toda máquina mientras con la mano le frotaba el clítoris. Al rato cambiamos de posición, ella se paro, se dio vuelta y me la cogí de atrás, agarrándola de las tetas, aunque al rato volvimos a la primer posición, ella en el mostrador y yo parado cogiéndola de frente, y después de hacerla acabar dos veces mas con la pija sentí que era mi turno, le dije "Voy a acabar" y automáticamente se bajo del mostrador y se arrodilló adelante mío, chupándomela como toda una profesional hasta que no aguante mas y le descargue toda la leche en su boca, sintiendo el mayor placer que sentí en mi vida. Al terminar ella se levanta y después de tragarse hasta la ultima gota me da un beso tan apasionado que me volví a excitar, ya tenía la pija parada de vuelta!! Mi primer reacción fue agarrarla y darla vuelta para cogérmela otra vez, ella se da vuelta y cuando se la meto me dice "Para... por hoy ya esta, guardemos para la próxima..." Ella supo como dejarme re caliente.
Ese fue nuestro primer encuentro, si les gusta y tiene aceptación después les cuento mas...
11 comentarios - Me cogí a una clienta...