You are now viewing Poringa in Spanish.
Switch to English

Las aventuras de mi madrastra, en el mini-super

Me llamo Alfonso, tengo 21 años, vivo con mi madrastra y su hija, actualmente no estudio y ocupo mi tiempo en divertirme o salir a beber con mis amigos, y ver porno en Internet y para comenzar a entrar en el relato, les diré que desde hace unos dos años, comencé a tener fantasías con mi madrastra, y eso, fue a raíz de que la vi desnuda y pues con el paso de los meses, dichas fantasías, fueron acrecentándose, supongo que esto se debe a mi edad y que además, como les decía, paso mucho tiempo viendo pornografía en Internet, en especial de mujeres maduras, pues bien, en este relato y varios mas que pienso subir, les contare algunas aventuras y fantasías que e tenido, y es que mi madrastra de nombre wendy, a pesar de sus 40 años, esta todavía de muy buen ver, lo que mas me gusta de ella son sus nalgas, las tiene todavía algo paraditas y bastante grandes y aunado a eso es poseedora de unas piernas bastante bien torneadas, y ni que decir de sus pechos, son dos melones grandes y aun bien formados, es toda una exquisitez, toda una milf,

Pues bien, resulta que un sábado, amanecí en casa de un amigo, la noche anterior habíamos ido a una fiesta, así que tenia una cruda tremenda, pero no me la pude curar con mi amigo, por que sus padres no tardaban en llegar, así que tuve que despedirme y salí rumbo a mi casa y justo antes de llegar, decidí hacer una parada en un mini súper, que esta frente a la unidad donde vivo, para comprar un cuartito de tequila, y un refresco, entre al mini súper, tome un refresco y cuando me disponía a ir hacia la caja a pedir el tequila, escuche una voz que se parecía a la de mi madrastra, de momento no pensé que fuera ella, pero aun así, me escondí entre los estantes, tratando de mirar a la entrada y para mi sorpresa, era ella,  no se me ocurrió que podía hacer en el mini súper tan temprano, y además con quien hablaba, así que me quede parado unos instantes, entre los anaqueles y me di cuenta, que venia hablando por teléfono, pero para mi alivio, no se fue hacia donde yo estaba, únicamente se quedo parada en la fila, con el celular en la mano, pensé que mi suerte no podía ser peor, no quería que me viera comprando alcohol, así que me espere, la fila avanzaba lentamente y para serles sincero, desde donde estaba, podía verla perfectamente, se había puesto un pantalón pescador, pero este era de una tela muy delgada, lo que hacia que cayera perfectamente, remarcando bastante sus formas, la verdad, se le veían unas nalgotas bien ricas y los suecos que llevaba, hacia que sus pantorrillas se le vieran muy bien y de arriba se había puesto una playera de tirantes, haciendo que sus pechos se vieran muy bien, pasados unos segundos, me di cuenta, que no solo yo la miraba, en lo que ella estaba formada, habían llegado tres tipos que se habían puesto tras de ella, llevaban unas cervezas y claro, no tardaron en fijarse en ella, los tres no despegaban la mirada de sus nalgas, inclusive habían retrocedido un poco, para tener una mejor vista de ella, mientras que mi madrastra, no dejaba de mandar mensajes en el celular, pero de pronto, sucedió algo que llamo mi atención y fue que ella volteo hacia donde ellos estaban, los miro unos instantes y para mi sorpresa, les brindo una sonrisa, y se volvió a voltear, aquellos tres hombres se miraron entre ellos, supongo se les hizo raro que les sonriera, pero eso dio pie a que continuaran viéndola, inclusive lo comenzaron a hacer ya de forma mas descarada, mirando fijamente sus nalgas, mientras hacían ademanes con las manos, y se reían, pero sucedió algo que me puso aún mas caliente, cuando wendy llego a la caja, pidió una recarga y la muy puta se inclino un poco, recargándose en el mostrador y claro, eso hizo que sus nalgas lucieran aun mas y claro, los tres hombres se quedaron boquiabiertos ante tal espectáculo, y no era para menos, tener un culo como el de mi madrastra tan cerca, no era cosa de todos los días, wendy comenzó a dictarle los números de su celular y el chico comenzó a teclearlos, pero Wendy hizo algo que llamo la atención mía y de los tres hombres, ya que mientras esperaba, comenzó a flexionar sus piernas, como si estuviera impaciente y eso provoco que sus nalgas, comenzaran a brincotear de una forma muy morbosa, los tres hombres no creían que mi madrastra les estuviera dando tan buen espectáculo, los segundos pasaban y ella no dejaba de mover sus piernas, y los tres hombres no dejaban de verla y para nuestra suerte, de pronto el chico le dijo,

- señora se trabo el sistema, espereme unos segundos, 

wendy al escuchar eso, se enderezo, junto sus piernas y exclamo,

- hayyy…no sea así, llevo prisa,

Pensé que en ese momento, se había terminado todo, que ella se iba a salir molesta, o algo así, pero no, la suerte seguía de nuestro lado, ya que cuando se enderezo, la delgada tela del pantalón, se le metió entre las nalgas, provocando que se le marcaran aun mas y aunado a eso, la forma en que había parado provoco que el pantalón se le pegara a las piernas, remarcando perfectamente sus formas, 
a esas alturas los tres hombres ya estaban babeando, inclusive uno saco discretamente su celular y le tomo algunas fotos, mi madrastra se quedo así unos segundos, hasta que el chico de la caja le dijo, 

- ya esta, repítame sus números, por favor, 

y una vez mas, mi madrastra se volvió a empinar frente a los tres hombres, en esta ocasión no se movió, solo le dio los números, se quedo así unos segundos, pago y se volvió a enderezar, le dio las gracias y sin decir mas, salio del mini súper, y en cuanto ella se fue, los tres hombres comenzaron a reír y escuche que decían que era toda una puta y que hacía mucho que no veían unas nalgas tan ricas, y demás cosas morbosas, y yo claro, también me había calentado bastante, ya que no pensé que mi madrastra fuera así de exhibicionista, 

el resto de la tarde no pude apartar la imagen de sus nalgas rebotando de mi mente y comencé a pensar en todas las formas en que podría disfrutarla, y claro esas aventuras las iré subiendo,

continuara…

1 comentarios - Las aventuras de mi madrastra, en el mini-super

Zaratustra99
Muy buen relato. Espero la continuación !