Muy buen insomnio para todos los que están leyendo ésto en el momento de ser lanzado y bienvenido a todo aquel que gratamente haya entrado a mi post.
Ëste es mi primer relato, no sólo en Poringa, sino es el primer relato de contenido sexual que realizo en mi corta vida de escritor amateur. Todo lo relatado a continuación es verdad, el protagonista soy yo y refleja muchos de mis miedos de hace años, hoy ya mucho más trabajados y con ganas de ser explorados, pero que en aquel momento significaron algo crucial para mí, pero tan excitante a la vez que nunca pude olvidarlo. Espero que lo disfruten,
Era una tarde normal, en mi vida rutinaria de adolescente maduro, transitando ya mis veinticortos años (en éste momento tengo 26), en la cual siempre se repetían las mismas tareas, con una cadencia casi somnolienta, a pesar de estar siempre ocupado, con la cabeza ocupada. Yo era un chico bastante vergonzoso de sí mismo, mucho porque crecí viendo la industria porno y acomplejándome por el tamaño de mi pija... Y también porque escondía una silenciosa atracción por las pijas... Sobretodo las que eran más grandes que las mías; más allá, siempre me gustaron las mujeres. Un cuerpo femenino es una obra de arte de por sí, con tantos cambios en la geografías, mesetas, colinas, declives y llegado al caso y de la mano de un buen amante, ríos y lagos de placer. Nunca terminaba de entender esta contradicción constante, de salir y pasármela cogiendo con mi novia como si no hubiera un mañana, a masturbarme sólo en mi casa encerrado unas cuatro o cinco veces diarias viendo pijas ponerse erectas, acabar o siemplemente, ver la imponente rigidez del privilegio genético.
Tan en silencio guardaba todo esto, que cada vez se hacía más presente a mis adentros. Una de mis tantas tareas semanales era ir a practicar natación, deporte el cual yo amo con completa profundidad, pero que me traía aparejado un problema de la misma envergadura (nunca antes mejor utilizada en un texto mío esta palabra): el tan amado y temido vestuario.
Enfrentarme a una habitación llena de hombres desnudos bañándose era una situación que ponía mis pelos de punta por varios motivos... Evitaba exhibirme en las duchas, por lo que siempre me bañaba con mi malla puesta. Además, temía porque se notara las fugaces erecciones que me podían aparecer si mis ojos se ponían lo suficientemente curiosos como para no poder resistir empezar a mirar a mis alrededores... No veía caras, ni cuerpos, ni músculos... Sólo me llamaba la atención sexualmente esa parte en especial...
La última vez que estuve en un gimnasio y también tristemente, la última vez que practiqué natación, todo lo que temía ocultar, salió a la luz estrepitosamente... Mientras terminaba ya de cambiarme y me alistaba para volver a mi hogar a cenar con mi familia, mi mirada se posó fijamente sobre el muchacho que se estaba bañando delante mío... No miraba su manera de enjabonarse, ni mucho menos podía percibir el ruido del agua cayendo por la ducha... Solo podía mirar y admirar desde su espalda, una silueta bastante gorda que asomaba casi por sobre su rodilla y se balanceaba conforme él se duchaba... No puedo ni imaginar la cara que tendría, porque no pensé en más, no recordé más, no supe más que esa pija que estaba por delante de mí y que parecía algo desmesurado... Volví a la realidad en el momento que este chico dio la vuelta y me encontró mirándole la verga fijamente, sin importar que me haya estado hablando... No pude contener ni la vergüenza, ni la erección que me provocó haber visto tan de cerca, mi fetiche más silencioso. Por suerte y gracias a la vida, mañana retomo natación, con las ideas claras listas para sumergirme tanto al agua, como a mis próximos pensamientos libres de prejuicio en el vestuario.
Muchas gracias por leer!! Todo comentario, crítica, idea, puntos, abrazos, besos, propuestas para cuentos, fantasía y demases productos de su imaginación, serán recibidos a ojos bien abiertos!! Muchas gracias de verdad por llegar hasta acá!!!
Les dejo los links para los otros relatos
http://www.poringa.net/posts/relatos/3028052/Cuando-la-tension-sexual-esta-para-todos-en-el-aire.html
http://www.poringa.net/posts/relatos/3030459/A-veces-es-mejor-no-golpear-antes-de-entrar-dedicado.html
http://www.poringa.net/posts/relatos/3031931/Mirando-a-mi-otro-yo-soft.html
Ëste es mi primer relato, no sólo en Poringa, sino es el primer relato de contenido sexual que realizo en mi corta vida de escritor amateur. Todo lo relatado a continuación es verdad, el protagonista soy yo y refleja muchos de mis miedos de hace años, hoy ya mucho más trabajados y con ganas de ser explorados, pero que en aquel momento significaron algo crucial para mí, pero tan excitante a la vez que nunca pude olvidarlo. Espero que lo disfruten,
Era una tarde normal, en mi vida rutinaria de adolescente maduro, transitando ya mis veinticortos años (en éste momento tengo 26), en la cual siempre se repetían las mismas tareas, con una cadencia casi somnolienta, a pesar de estar siempre ocupado, con la cabeza ocupada. Yo era un chico bastante vergonzoso de sí mismo, mucho porque crecí viendo la industria porno y acomplejándome por el tamaño de mi pija... Y también porque escondía una silenciosa atracción por las pijas... Sobretodo las que eran más grandes que las mías; más allá, siempre me gustaron las mujeres. Un cuerpo femenino es una obra de arte de por sí, con tantos cambios en la geografías, mesetas, colinas, declives y llegado al caso y de la mano de un buen amante, ríos y lagos de placer. Nunca terminaba de entender esta contradicción constante, de salir y pasármela cogiendo con mi novia como si no hubiera un mañana, a masturbarme sólo en mi casa encerrado unas cuatro o cinco veces diarias viendo pijas ponerse erectas, acabar o siemplemente, ver la imponente rigidez del privilegio genético.
Tan en silencio guardaba todo esto, que cada vez se hacía más presente a mis adentros. Una de mis tantas tareas semanales era ir a practicar natación, deporte el cual yo amo con completa profundidad, pero que me traía aparejado un problema de la misma envergadura (nunca antes mejor utilizada en un texto mío esta palabra): el tan amado y temido vestuario.
Enfrentarme a una habitación llena de hombres desnudos bañándose era una situación que ponía mis pelos de punta por varios motivos... Evitaba exhibirme en las duchas, por lo que siempre me bañaba con mi malla puesta. Además, temía porque se notara las fugaces erecciones que me podían aparecer si mis ojos se ponían lo suficientemente curiosos como para no poder resistir empezar a mirar a mis alrededores... No veía caras, ni cuerpos, ni músculos... Sólo me llamaba la atención sexualmente esa parte en especial...
La última vez que estuve en un gimnasio y también tristemente, la última vez que practiqué natación, todo lo que temía ocultar, salió a la luz estrepitosamente... Mientras terminaba ya de cambiarme y me alistaba para volver a mi hogar a cenar con mi familia, mi mirada se posó fijamente sobre el muchacho que se estaba bañando delante mío... No miraba su manera de enjabonarse, ni mucho menos podía percibir el ruido del agua cayendo por la ducha... Solo podía mirar y admirar desde su espalda, una silueta bastante gorda que asomaba casi por sobre su rodilla y se balanceaba conforme él se duchaba... No puedo ni imaginar la cara que tendría, porque no pensé en más, no recordé más, no supe más que esa pija que estaba por delante de mí y que parecía algo desmesurado... Volví a la realidad en el momento que este chico dio la vuelta y me encontró mirándole la verga fijamente, sin importar que me haya estado hablando... No pude contener ni la vergüenza, ni la erección que me provocó haber visto tan de cerca, mi fetiche más silencioso. Por suerte y gracias a la vida, mañana retomo natación, con las ideas claras listas para sumergirme tanto al agua, como a mis próximos pensamientos libres de prejuicio en el vestuario.
Muchas gracias por leer!! Todo comentario, crítica, idea, puntos, abrazos, besos, propuestas para cuentos, fantasía y demases productos de su imaginación, serán recibidos a ojos bien abiertos!! Muchas gracias de verdad por llegar hasta acá!!!
Les dejo los links para los otros relatos
http://www.poringa.net/posts/relatos/3028052/Cuando-la-tension-sexual-esta-para-todos-en-el-aire.html
http://www.poringa.net/posts/relatos/3030459/A-veces-es-mejor-no-golpear-antes-de-entrar-dedicado.html
http://www.poringa.net/posts/relatos/3031931/Mirando-a-mi-otro-yo-soft.html
11 comentarios - La última vez que estuve en un vestuario.
Muy bueno!!
Gracias por compartir 👍