Mi Amigo De La Infancia Me Coge Duro Parte 3.
Con el Sello de Placer y Morbo…
Hola ha todos gente porongueros, soy un chico con deseos de compartir mis historias y las de personas cerca a mí, con ustedes…. este como todos mis relatos esta hecho para ustedes para su disfrute, pero he de aclarar ciertas cosas, muchas de estas historias no son de mi autoría, otras si otras si lo son, otras fantasías que he tenidos yo o alguien cerca a mí, que me lo ha confesado, otras son reales pero no mías, relatos de otras personas que me lo confiesas y al final logro convencerlos de que me dejen publicarlos, claro con nombres y lugares diferentes para proteger su identidad, por este motivo es que no digo quien es quien, cual es mío o cual no, cual es real y cual no lo es, pienso que lo hace más interesante y hace pensar a la gente, son muchas las historias que tengo pero poco el tiempo para contar, espero que las que puedo publicar sean de su agrado, sin más que decir disfrútenlo.
Después de lo que había pasado, me encontraba más que adolorida, no quería ver a mas nadie, y que nadie me viera mi novio quiso venir a verme pero le dije que estaba mal y que quiera descansar, que me disculpara, el al final tampoco fue que insistió mucho, punto menos para Aarón. No volví a ver a Lucas por unos días estaba muy dolorida como ya dije, pero sobre todo enojada, me había roto la colita sin contemplación y me había dejado muy lastimada. Con mi madre fue otra cosa, pues me era difícil decirle que estaba mal porque bueno me habían dado una cogida de muerte, y me dolía mi culito y mi conchita, como nunca, eso no serviría, si decía que estaba en mis días ella sospecharía, ya que ella lo sabía, en fin, al final mi madre poco a poco al ver mi cara de verdadero malestar me dejo en paz sin tanta preguntar, y me aceptaba todos mis caprichos, lo cuales no eran mucho por cierto, solo no salir lo mas que pudiera de mi cuarto, específicamente de mi cama. Al ya sexto día de sufrimiento llego Lucas a casa y mi mama sin avisarme lo hizo pasar ya que era amigo de la familia, y mis padres lo querían tanto, ella no vio problema con dejarlo entrar sin avisarme, ¿y porque me tendría que avisar? Seguro pensó mi madre, jamás yo había tenido problemas con él, y como decirle que ahora tenía un problema serio con él. Yo estaba en mi pieza acostada y golpearon la puerta y mi sorpresa fue muy grande, y si lo que ustedes piensan, al escuchar que era él, me dijo el muy bastardo.
--¡Hola! ¿Puedo pasar? tu mama me dijo que estabas enfermita y pase a verte. No lo creía, que me dijera eso, si él era el culpable de mi situación.
Yo me arregle lo más rápido posible y lo hice pasar junto a él entro mi mamá, de la que salvo, porque yo estaba que le gritaba y le decía que fue por cogerme por el culo, suerte, para mí también que no dije eso, cuando vi que mi Madre apareció, las palabras se atragantaron en m boca.
--¡¿Hay si Lucas Querido, de repente se vino ha sentir mal, pobre no?! -Decía mi madre
--Hay si Madre -Dijo Lucas mirando a mi madre, luego me miro a mi.
--¿Que te duele Maru puedo hacer algo por vos?
--Solo estoy algo mal. -No sabía que decir.
--Bueno me voy amor te quedas con Lucas. -Dijo mi madre, yo sentí miedo.
--Pero… pero a dóndes vas.
--Tengo que salir Lucas me la cuidas. -Dijo mi madre inocente, Lucas asintió.
--Por supuesto. -Dijo él. Eso me izo erizar la piel, me dio miedo, pero si lo admito también me éxito. Claro en el momento no lo admitiría. El me miro y sonrió. Y cuando mi madre se fue el dijo. --Ya en serio como estas.
--¡No, estoy bien tu que crees maldito! ¿Cómo hiciste para que mi madre nos dejara solo?
--La verdad no hice nada solo le dije que como estaba y ella dijo que iba ha salir y te cuidare.
--Si claro. -Yo estaba muy caliente de estar con él solo en mi cuarto.
Sin darme cuenta el me agarro más fuerte que nunca por la mano, yo sentí miedo.
--¡Hijo de puta culpa tuya estoy así me duele mi colita!
Bueno perdón pero bájale a los insultos.
--¡Bájale nada, me duele mucho! ¿Acaso quieres ver cómo me la dejaste? Quise parar pero ya era demasiado tarde, vi como se dibujaba una enorme sonrisa en su cara
--Si claro para eso vine. -Nos reímos mucho. --Hey te traje esto. -Dijo sacando de su bolsillo una rema.
--¿Que es?
--Es una crema para tu colita.
--Hna. -Solo eso dije.
Fue cuando escuche que mi mama salía, escuchaba su auto arrancar, me levante de la cama y para sorpresa de mi amigo yo solo llevaba puesta una tanguita blanca tan chiquita como la que llevaba cuando él me cogió. Ya apropósito pase por su lado mostrándole mi linda y aun dolorida colita. El me tomo de a cintura y me lanzo otra vez contra la cama, pensé que me cogería hay, cuando gire lo vi que se levanto y dije, nada listo se baja los pantalones y me coge otra vez por la cola, y yo de puta se lo dejo.
--Que… que me vas a hacer. -Dije con miedo y excitación el me sonrió.
--Voy a currar tu colita. -Dijo ansia muy tranquila.
Y con la misma me bajo mi panty y me abrió mas las piernas yo no decía nada, me estremecí cuando sentí el frio de la crema en mi cola, escurriéndose entre mis nalgas llegado a mi concha pasando y por mi colita, el empezó sin decir nada a acariciar mi ano, mi circular agujero, en donde sus carisias mi me relajaban y me clamaban el ardor, pero la picazón por sos toques eran aun mayor, el empezó a meter sus dedo índice, y luego lo sacaba, estaba lubricando mi colita, la crema olía a manzana, el olor era agradable, pero en ese momento, eso era lo que menos prestaba atención, yo solo pensaba en lo que estaba disfrutando.
--Mmmmnnnnn…. Haaa, haaaaaaa…. haaaaa…. Hoooooooo.
No podía evitar gemir era una cosa de locos, era increíble, la sensación, de el dedo meñique, pasaba para los demás, incluso uno en una que metió de a dos y le daba vuelta y eso lejos de dolerme ho molestarme me excitaba, me estaba viniendo, era una locura, el no me había cogido, no me había metido su cosota, y ya me estaba viniendo, pero la final el saco sus dedo y me puso mi pantys.
--Listo creo que así ya no te dolerá. -Yo no sabía que pensar ho decir. Por un rato permanecí, con la cada en una almohada, sin saber que pensar, que decir y mucho menso que sentir.
--Ha… eso es todo. -Dije la final.
--¿Quieres otra cosa? -Pregunto el maldito.
--Yo no sé.
--Bueno tal vez yo lo sé. -Dijo de forma arrogante…. Sin dudarlo me agarro fuerte de la cintura y me dijo. --No puedo dejar de desearte sos hermosa me pasaría el día cogiéndote no sé cómo tu novio no lo hace… seguro es una marica.
Me hiso girar y me pego hacia él con gran facilidad, él era muy fuerte. Comenzó a besarme los labios después mis tetitas y en un instante lo tenía entre mis piernas chupándome maravillosamente la conchita.
--Haaaaa…. Haaaaaa…. Haaaa… Mmnmnnn… haaaaa…. Dios que rico si así rico Haaaaaaaaaaaaa.
Me hacia estremecer. Me puso a mil la chupada que me dio y le baje el pantalón le saque el bóxer y sin que me lo pidiera y sin necesidad porque tenía su pija muy parada empecé a chupársela.
--Enséñame a chupártela porque ahora soy tu putita, voy a hacer todo lo que me pidas. Yo estaba decidida, hay lo había hecho, esto era una locura, pero el placer que sentía no lo podía perder. -El sonrió.
--Bueno de momento lo haces bien putita. -Me dijo él, y yo estaba orgullosa.
Comencé a lamerle la cabezota y a pajearlo con mis dos manos porque con una sola me era imposible. Cada vez lograba meter más de su pija en mi boca, ya no solo tenía su cabeza, sino también una parte de su tronco, en momento me faltaba el aire, pero me concentraba en respirar solo pro la nariz. En un momento como la primera vez que se la chupe me dij.
--No, no… hacerlo más despacio, tus dientes me raspan y me lastiman proba con tus labios y tu lengua, como chupando una chupeta recuerda, chupar no rasgar.
Parece que fui mejorando porque empezó a jadear y respirar cada vez más fuerte. En todo momento que chupaba su pija Lucas jugueteo con mi conchita sacando los jugos de ella y poniéndolos en mi anito el cual también recibía la atención necesaria. Deje de chuparle la pija solo para decirle, casi en suplica.
--Cógeme por favor. -Poniendo toda mi cara de putita le dije. --Por favor te lo suplico cógeme de nuevo por favor.
Me tiro de espaldas en la cama se puso encima mío y me penetro primero lentamente y luego más rápido para luego hacerlo nuevamente lento.
--Haaa, haaaaaaaaaaaaaa, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, haaaaaaa, haaaaaaa, haaaaaa, ha, ha, ha, ha, Haaaaaaaa.
El me tomo de la cintura después de una buen rato y me hiso girar, para así yo quedara boca arriba y me pare para sentarme arriba.
--Haaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa. -Exclamé cuando sentí la inmensidad de su polla dentro de mí, era simplemente enorme.
Suyo cuando vi el espectáculo era hermoso era una pija realmente larga y gorda y comencé a bajar y metí esa cosa en mi conchita y empecé a cogerlo sin parar, a mi ritmo no pudo aguantarse mucho y me termino adentro logrando arrancarme un orgasmo maravilloso.
--Haaaaaa, ha, haaaaa, ha, ha, haaaaa, ha, haaaaa, ha, ha, ha, ha, ha, haaaaaaa, ha, ha, haaaaa. -Gemíamos los dos. --Ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha.
Me quede ahí tirada sobre su pecho con la pija en mi conchita y nuestros jugos saliendo de mi interior me chorreaban tanto a mí como a él, a mi no importaba que me acabara adentro, tenia rato usando pastillas. Como si nunca hubiese cogido en su vida esa pijota tenia vida propia porque no se bajaba ni un poquito la sentía todavía totalmente parada en mi interior. Me corrí para sacarla y note que así era, se lo hice saber a Lucas y el me dijo.
--¿Vos pensáis que terminamos? no señorita, debemos enseñarle a ese culito que no se tiene que cerrar vamos a cogerlo hoy de nuevo. -Yo aterrada, de sentir eso otra vez dije.
--No, no, no, no por el culito no, el no quiere, y no va a querer mas. -Pero en mi cabeza rogaba que no me hiciera caso ya me había transformado en su putita. --Por favor Lucas no por la cola. -Hace unos días lo había calentado más.
--Nada de eso, se que te gusto así que cállate, ¿Qué acaso no eres mi putita?
Esas eran las palabras claves me puso boca abajo y aprovechando los juguitos que todavía tenía mi conchita los empezó a poner en mi colita junto con sus dedos los que hacían un muy buen trabajo, me empezó ha arrancar gemidos muy fácil.
--Mmmmnnn…. Haaaaa…. Hoooo... Mmnnnnn
--Viste putita que si te gusta. -Decía el confiado.
Cuando ya entraron tres dedos coloco una almohada bajo mi panza para que se levantara más aún mi colita, y apunto a mi anito. Yo le dije con la mayor firmeza que podía.
--¡Cógeme el culito por favor con esa pijita!
Indudablemente las palabras causaron el efecto deseado porque me introdujo eses cabezón haciendo menos esfuerzos que la vez anterior pero no sin dificultad y comenzó a empujar para que entrara el resto. Lo hizo despacio para después moverse más rápido ese monstruo entraba y salía de mi culito sin miramientos y me causaba el placer más hermoso de mi vida, sentía como me rompía todo por dentro pero me encantaba y no lo disimulaba.
--¡Más mi amor cógeme la colita que es tuya solo tuya! hay Siiiiii haaaa, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, si rico ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, Haaaaaaaaaaaaaaaaaa. -Termine acabando y sentía mi cola llena de su semen caliente eso fue riquísimo. Era todo disfrute de mi parte.
En un momento paro y yo pensé que se había cansado pero no me dio vuelta me coloco la almohada bajo mi colita para que se levantara bien.
--Quiero verte esa cara hermosa mientras te cojo ese culo precioso.
Me penetro nuevamente y empezó a moverse rápidamente como si el mirarme le dieran más energías y la posición en la que estábamos con mis piernas en sus hombros parecía que lograba que entrara completamente toda esa pija.
--Ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, haaaaaaaaaaaaaaaaaaaay Dios Haaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa.
Me cogió tan bien que me hizo acabar otra vez y al sentir mis gritos de placer termino adentro de la colita otra vez, junto conmigo, yo pensé que ya no le quedaba lechita porque en la primera acabada salió muchísima, y en la otras mucho mas, pero me lleno mi interior con bastante cantidad. Quedamos ahí tirados y él no quería sacar su pija de mi culito me decía que le gustaba mucho que lo dejara un rato mas y a mí también me gustaba demasiado. Después de eso, me volví su puta, era una lucra era la lujuria y excitación constante. Me coge casi todos los días y me seguirá cogiendo.
Continuara…
Con el Sello de Placer y Morbo…
Hola ha todos gente porongueros, soy un chico con deseos de compartir mis historias y las de personas cerca a mí, con ustedes…. este como todos mis relatos esta hecho para ustedes para su disfrute, pero he de aclarar ciertas cosas, muchas de estas historias no son de mi autoría, otras si otras si lo son, otras fantasías que he tenidos yo o alguien cerca a mí, que me lo ha confesado, otras son reales pero no mías, relatos de otras personas que me lo confiesas y al final logro convencerlos de que me dejen publicarlos, claro con nombres y lugares diferentes para proteger su identidad, por este motivo es que no digo quien es quien, cual es mío o cual no, cual es real y cual no lo es, pienso que lo hace más interesante y hace pensar a la gente, son muchas las historias que tengo pero poco el tiempo para contar, espero que las que puedo publicar sean de su agrado, sin más que decir disfrútenlo.
Después de lo que había pasado, me encontraba más que adolorida, no quería ver a mas nadie, y que nadie me viera mi novio quiso venir a verme pero le dije que estaba mal y que quiera descansar, que me disculpara, el al final tampoco fue que insistió mucho, punto menos para Aarón. No volví a ver a Lucas por unos días estaba muy dolorida como ya dije, pero sobre todo enojada, me había roto la colita sin contemplación y me había dejado muy lastimada. Con mi madre fue otra cosa, pues me era difícil decirle que estaba mal porque bueno me habían dado una cogida de muerte, y me dolía mi culito y mi conchita, como nunca, eso no serviría, si decía que estaba en mis días ella sospecharía, ya que ella lo sabía, en fin, al final mi madre poco a poco al ver mi cara de verdadero malestar me dejo en paz sin tanta preguntar, y me aceptaba todos mis caprichos, lo cuales no eran mucho por cierto, solo no salir lo mas que pudiera de mi cuarto, específicamente de mi cama. Al ya sexto día de sufrimiento llego Lucas a casa y mi mama sin avisarme lo hizo pasar ya que era amigo de la familia, y mis padres lo querían tanto, ella no vio problema con dejarlo entrar sin avisarme, ¿y porque me tendría que avisar? Seguro pensó mi madre, jamás yo había tenido problemas con él, y como decirle que ahora tenía un problema serio con él. Yo estaba en mi pieza acostada y golpearon la puerta y mi sorpresa fue muy grande, y si lo que ustedes piensan, al escuchar que era él, me dijo el muy bastardo.
--¡Hola! ¿Puedo pasar? tu mama me dijo que estabas enfermita y pase a verte. No lo creía, que me dijera eso, si él era el culpable de mi situación.
Yo me arregle lo más rápido posible y lo hice pasar junto a él entro mi mamá, de la que salvo, porque yo estaba que le gritaba y le decía que fue por cogerme por el culo, suerte, para mí también que no dije eso, cuando vi que mi Madre apareció, las palabras se atragantaron en m boca.
--¡¿Hay si Lucas Querido, de repente se vino ha sentir mal, pobre no?! -Decía mi madre
--Hay si Madre -Dijo Lucas mirando a mi madre, luego me miro a mi.
--¿Que te duele Maru puedo hacer algo por vos?
--Solo estoy algo mal. -No sabía que decir.
--Bueno me voy amor te quedas con Lucas. -Dijo mi madre, yo sentí miedo.
--Pero… pero a dóndes vas.
--Tengo que salir Lucas me la cuidas. -Dijo mi madre inocente, Lucas asintió.
--Por supuesto. -Dijo él. Eso me izo erizar la piel, me dio miedo, pero si lo admito también me éxito. Claro en el momento no lo admitiría. El me miro y sonrió. Y cuando mi madre se fue el dijo. --Ya en serio como estas.
--¡No, estoy bien tu que crees maldito! ¿Cómo hiciste para que mi madre nos dejara solo?
--La verdad no hice nada solo le dije que como estaba y ella dijo que iba ha salir y te cuidare.
--Si claro. -Yo estaba muy caliente de estar con él solo en mi cuarto.
Sin darme cuenta el me agarro más fuerte que nunca por la mano, yo sentí miedo.
--¡Hijo de puta culpa tuya estoy así me duele mi colita!
Bueno perdón pero bájale a los insultos.
--¡Bájale nada, me duele mucho! ¿Acaso quieres ver cómo me la dejaste? Quise parar pero ya era demasiado tarde, vi como se dibujaba una enorme sonrisa en su cara
--Si claro para eso vine. -Nos reímos mucho. --Hey te traje esto. -Dijo sacando de su bolsillo una rema.
--¿Que es?
--Es una crema para tu colita.
--Hna. -Solo eso dije.
Fue cuando escuche que mi mama salía, escuchaba su auto arrancar, me levante de la cama y para sorpresa de mi amigo yo solo llevaba puesta una tanguita blanca tan chiquita como la que llevaba cuando él me cogió. Ya apropósito pase por su lado mostrándole mi linda y aun dolorida colita. El me tomo de a cintura y me lanzo otra vez contra la cama, pensé que me cogería hay, cuando gire lo vi que se levanto y dije, nada listo se baja los pantalones y me coge otra vez por la cola, y yo de puta se lo dejo.
--Que… que me vas a hacer. -Dije con miedo y excitación el me sonrió.
--Voy a currar tu colita. -Dijo ansia muy tranquila.
Y con la misma me bajo mi panty y me abrió mas las piernas yo no decía nada, me estremecí cuando sentí el frio de la crema en mi cola, escurriéndose entre mis nalgas llegado a mi concha pasando y por mi colita, el empezó sin decir nada a acariciar mi ano, mi circular agujero, en donde sus carisias mi me relajaban y me clamaban el ardor, pero la picazón por sos toques eran aun mayor, el empezó a meter sus dedo índice, y luego lo sacaba, estaba lubricando mi colita, la crema olía a manzana, el olor era agradable, pero en ese momento, eso era lo que menos prestaba atención, yo solo pensaba en lo que estaba disfrutando.
--Mmmmnnnnn…. Haaa, haaaaaaa…. haaaaa…. Hoooooooo.
No podía evitar gemir era una cosa de locos, era increíble, la sensación, de el dedo meñique, pasaba para los demás, incluso uno en una que metió de a dos y le daba vuelta y eso lejos de dolerme ho molestarme me excitaba, me estaba viniendo, era una locura, el no me había cogido, no me había metido su cosota, y ya me estaba viniendo, pero la final el saco sus dedo y me puso mi pantys.
--Listo creo que así ya no te dolerá. -Yo no sabía que pensar ho decir. Por un rato permanecí, con la cada en una almohada, sin saber que pensar, que decir y mucho menso que sentir.
--Ha… eso es todo. -Dije la final.
--¿Quieres otra cosa? -Pregunto el maldito.
--Yo no sé.
--Bueno tal vez yo lo sé. -Dijo de forma arrogante…. Sin dudarlo me agarro fuerte de la cintura y me dijo. --No puedo dejar de desearte sos hermosa me pasaría el día cogiéndote no sé cómo tu novio no lo hace… seguro es una marica.
Me hiso girar y me pego hacia él con gran facilidad, él era muy fuerte. Comenzó a besarme los labios después mis tetitas y en un instante lo tenía entre mis piernas chupándome maravillosamente la conchita.
--Haaaaa…. Haaaaaa…. Haaaa… Mmnmnnn… haaaaa…. Dios que rico si así rico Haaaaaaaaaaaaa.
Me hacia estremecer. Me puso a mil la chupada que me dio y le baje el pantalón le saque el bóxer y sin que me lo pidiera y sin necesidad porque tenía su pija muy parada empecé a chupársela.
--Enséñame a chupártela porque ahora soy tu putita, voy a hacer todo lo que me pidas. Yo estaba decidida, hay lo había hecho, esto era una locura, pero el placer que sentía no lo podía perder. -El sonrió.
--Bueno de momento lo haces bien putita. -Me dijo él, y yo estaba orgullosa.
Comencé a lamerle la cabezota y a pajearlo con mis dos manos porque con una sola me era imposible. Cada vez lograba meter más de su pija en mi boca, ya no solo tenía su cabeza, sino también una parte de su tronco, en momento me faltaba el aire, pero me concentraba en respirar solo pro la nariz. En un momento como la primera vez que se la chupe me dij.
--No, no… hacerlo más despacio, tus dientes me raspan y me lastiman proba con tus labios y tu lengua, como chupando una chupeta recuerda, chupar no rasgar.
Parece que fui mejorando porque empezó a jadear y respirar cada vez más fuerte. En todo momento que chupaba su pija Lucas jugueteo con mi conchita sacando los jugos de ella y poniéndolos en mi anito el cual también recibía la atención necesaria. Deje de chuparle la pija solo para decirle, casi en suplica.
--Cógeme por favor. -Poniendo toda mi cara de putita le dije. --Por favor te lo suplico cógeme de nuevo por favor.
Me tiro de espaldas en la cama se puso encima mío y me penetro primero lentamente y luego más rápido para luego hacerlo nuevamente lento.
--Haaa, haaaaaaaaaaaaaa, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, haaaaaaa, haaaaaaa, haaaaaa, ha, ha, ha, ha, Haaaaaaaa.
El me tomo de la cintura después de una buen rato y me hiso girar, para así yo quedara boca arriba y me pare para sentarme arriba.
--Haaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa. -Exclamé cuando sentí la inmensidad de su polla dentro de mí, era simplemente enorme.
Suyo cuando vi el espectáculo era hermoso era una pija realmente larga y gorda y comencé a bajar y metí esa cosa en mi conchita y empecé a cogerlo sin parar, a mi ritmo no pudo aguantarse mucho y me termino adentro logrando arrancarme un orgasmo maravilloso.
--Haaaaaa, ha, haaaaa, ha, ha, haaaaa, ha, haaaaa, ha, ha, ha, ha, ha, haaaaaaa, ha, ha, haaaaa. -Gemíamos los dos. --Ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha.
Me quede ahí tirada sobre su pecho con la pija en mi conchita y nuestros jugos saliendo de mi interior me chorreaban tanto a mí como a él, a mi no importaba que me acabara adentro, tenia rato usando pastillas. Como si nunca hubiese cogido en su vida esa pijota tenia vida propia porque no se bajaba ni un poquito la sentía todavía totalmente parada en mi interior. Me corrí para sacarla y note que así era, se lo hice saber a Lucas y el me dijo.
--¿Vos pensáis que terminamos? no señorita, debemos enseñarle a ese culito que no se tiene que cerrar vamos a cogerlo hoy de nuevo. -Yo aterrada, de sentir eso otra vez dije.
--No, no, no, no por el culito no, el no quiere, y no va a querer mas. -Pero en mi cabeza rogaba que no me hiciera caso ya me había transformado en su putita. --Por favor Lucas no por la cola. -Hace unos días lo había calentado más.
--Nada de eso, se que te gusto así que cállate, ¿Qué acaso no eres mi putita?
Esas eran las palabras claves me puso boca abajo y aprovechando los juguitos que todavía tenía mi conchita los empezó a poner en mi colita junto con sus dedos los que hacían un muy buen trabajo, me empezó ha arrancar gemidos muy fácil.
--Mmmmnnn…. Haaaaa…. Hoooo... Mmnnnnn
--Viste putita que si te gusta. -Decía el confiado.
Cuando ya entraron tres dedos coloco una almohada bajo mi panza para que se levantara más aún mi colita, y apunto a mi anito. Yo le dije con la mayor firmeza que podía.
--¡Cógeme el culito por favor con esa pijita!
Indudablemente las palabras causaron el efecto deseado porque me introdujo eses cabezón haciendo menos esfuerzos que la vez anterior pero no sin dificultad y comenzó a empujar para que entrara el resto. Lo hizo despacio para después moverse más rápido ese monstruo entraba y salía de mi culito sin miramientos y me causaba el placer más hermoso de mi vida, sentía como me rompía todo por dentro pero me encantaba y no lo disimulaba.
--¡Más mi amor cógeme la colita que es tuya solo tuya! hay Siiiiii haaaa, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, si rico ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, Haaaaaaaaaaaaaaaaaa. -Termine acabando y sentía mi cola llena de su semen caliente eso fue riquísimo. Era todo disfrute de mi parte.
En un momento paro y yo pensé que se había cansado pero no me dio vuelta me coloco la almohada bajo mi colita para que se levantara bien.
--Quiero verte esa cara hermosa mientras te cojo ese culo precioso.
Me penetro nuevamente y empezó a moverse rápidamente como si el mirarme le dieran más energías y la posición en la que estábamos con mis piernas en sus hombros parecía que lograba que entrara completamente toda esa pija.
--Ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, haaaaaaaaaaaaaaaaaaaay Dios Haaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa.
Me cogió tan bien que me hizo acabar otra vez y al sentir mis gritos de placer termino adentro de la colita otra vez, junto conmigo, yo pensé que ya no le quedaba lechita porque en la primera acabada salió muchísima, y en la otras mucho mas, pero me lleno mi interior con bastante cantidad. Quedamos ahí tirados y él no quería sacar su pija de mi culito me decía que le gustaba mucho que lo dejara un rato mas y a mí también me gustaba demasiado. Después de eso, me volví su puta, era una lucra era la lujuria y excitación constante. Me coge casi todos los días y me seguirá cogiendo.
Continuara…
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