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Compendio II
😅
Debí haberme visto bien tonta, con mi colita al aire y apoyada en el respaldo de la cama.
Y más todavía, si él teniendo su cosota hinchada y más que lista para entrar a la acción, le pedía que tomara el consolador que me compró.
😕
Pero me estaba poniendo al día con él y quería mostrarle las cosas que hago con Lara y más que nada, lo que fantaseo con hacerle yo a Sandy.
Y es que una de las cosas que más ha ido acostumbrándose mi marido de mí es que me encanta pretender que soy otras personas.
😓
Él dice que deben ser como inseguridades mías, por tener un papá tan penca (o ineficiente, para que me entiendan bien), pero que en el fondo, no debería tenerlas, porque él ya me encuentra una mujer espectacular…
Aunque claro, igual me calienta bastante que otras mujeres quieran estar con él y que él, para variar, no se dé cuenta o que le guste yo tanto, tanto, que ni siquiera se interese por mirar…
😅
Pero no me quiero desviar tanto de lo que pasó esa noche.
Lo más lindo es que él igual estaba preocupado por mí, porque al final de cuentas, al día siguiente (jueves) Lara igual me iba a hacer la cola (y dejar con ganas de más otra vez 😕 ) y él no quería que me lastimara o me exigiera demasiado.
Y a todo esto, ya estaba un poquito manchada con el camisón rosadito y bien desarreglada, porque uno de los colgantes me dejaba más de media pechuga afuera.
Pero aun así, dispuesta para cederle mi cola de una manera espectacular.
😕
Y lo peor, fue tener que chupetear el consolador de caucho, porque lógico que él no lo iba a lamer por mí.
Y más tonta me sentía, porque teniendo su pene tan cerquita de mí, que lejos, tiene un mejor sabor y que estaba ya muy parado, me iba a meter este otro de goma.
A lo mejor, la única ventaja es que como no está apegado al cuerpo de mi marido, una lo puede babosear mejor y tampoco te demoras más de medio minuto en dejarlo listo.
Pero hasta en eso, la de mi marido es mejor, porque por mucho que le chupetee tras hacerme el amor, igual queda mojadita y cuando la mete, no necesita lubricarme demasiado.
😬 😊
Eso sí, me encantó bastante la manera en que él me miraba, porque yo trataba de ser lo más sensual posible para demostrarle mi gusto por chupar su pene y obvio que besaba la puntita del consolador, diciéndole con mis ojitos que me gustaba más el suyo.
Y se lo pasé, para que me lo metiera…
😫 😩 😲
Ahora, otra cosa es este consolador comparado con el de Lara, porque este es mucho más gordito y se parece bastante, bastante al que tiene mi marido para hacer pipí.
A lo mejor, no es tan largo como el otro, pero la gracia que tiene es que cuando me mete la puntita, también me pasa a llevar como un nervio que tengo en la colita de una manera muy pero muy agradable.
🤤
Si me preguntan, no sé describir la sensación, pero es como entre una cosquilla y como que me rasca la cola.
También le he preguntado a Liz si le pasa y dice que sí, que antes, con su otro novio, también le daba la cola a veces, pero de enviciarse con el sexo anal, ha sido con mi marido.
Y es que es increíble la manera en que todavía te puede sacar orgasmos, ya sea amasándote los pechos o metiéndotela por detrás, cuando una misma cree que ya no te quedan ganas para nada y por eso, le buscamos bastante por el día, porque igual nos hace sentir muy bien, aunque él se preocupa de que almorcemos, que la ropa esté limpia y más que todo, que las peques no se queden solas ni aburridas.
😓
Pero otra vez, me estoy yendo por las ramas.
Me la empezó a forzar y se sentía de lo mejor: la cola me ardía tremendamente y la fuerza que él le ponía era mucho mayor a la que le pone Lara.
Incluso, comparada a cuando él me penetra para “rematarme”, es más suave y delicado, pero ahora era una fuerza imparable que avanzaba dentro de mí.
Y yo, suspiraba tremendamente, porque se sentía enorme y qué manera tiene para ensancharme.
😩 😩 😩
Hasta las piernas se me doblaban con su avance y llegaba un punto que cerraba los ojos tan fuerte, que me hacía lagrimear.
Y no paraba, forcejeándola más que al fondo y yo, prácticamente babeando del gustazo que me estaba dando.
Y cuando la metió hasta el final… ¡UFFF!
😲 😲 😲
Para más remate, me dijo que me veía muy sensual con la cara y los pechos apegados a la pared y eso ya me tenía chorreando bastante.
Y entonces, la empezó a sacar.
😮 😮 😮
Me sentía como una jeringa por dentro, porque quedaba con un tremendo vacío cuando iba saliendo.
Y cuando me la volvía enterrar, era para volverme loca, porque esa fuerza era tremenda.
😓
Claro, yo no me daba cuenta cómo la cara se me arrastraba por la pared, subiendo y bajando, ni de lo excitadísimo que estaban mis pechos.
Pero ahí le fui contando por qué igual me preocupa el vecino de Lara cuando me marcho.
😕
No sé si ella escuchará lo mismo cuando yo se lo hago, pero cuando Lara se desboca con mi cola, apoyo la oreja tan fuerte en la pared, que hasta alcanzo a escuchar el otro lado.
Y estoy muy segura que se escucha un “tac, tac, tac” que no es el de su cama, porque es más metálico (La cama de Lara tiene respaldo de madera) y no va acompasado con el ritmo que Lara lleva mientras me rompe la cola.
Lo que me termina excitando, eso sí, es pensar que alguien más me está escuchando mientras me hacen gozar y eso mi marido lo sabe bastante bien…
😓
Lo único malo era que mientras le contaba eso a mi marido, mis pequeñitas, que están más grandes y están durmiendo solitas en sus cunitas, en el dormitorio de al lado (pero siempre, bien vigiladas por nosotros 😤 ), igual podían estar escuchando cómo la pervertida y putita de su mami era sometida por papi por la cola y que los jadeos que él me sacaba, lejos de ser de dolor, eran más de placer infinito por sentirlo adentro.
😲 😮 😲 😮
Hasta que llegó un momento en que él dijo “¡Esto es tonto!” y me sacó el consolador de golpe…
Sentí cómo caía en la cama y rebotaba y alcancé a ver un borrón rapidísimo que se ponía a mis espaldas…
😩 😖 😩 😖
Y como dicen, “Otra cosa es con guitarra…”, porque su pene, hinchado y caliente, es lejos mucho mejor.
Me sacó incluso un gritito de sorpresa, pero me la metió de repente y de golpe.
😩 😩 😩
Me parecía impresionante que la tuviera incluso más gorda que el consolador y que la estirada que me daba por los intestinos fuera así de tremenda.
Pero empezó a agarrar un ritmo impresionante, de una manera bastante rápida.
😫 😖 😫 😖
Yo me quejaba y me corría terriblemente, porque era como tener un tren entero rompiéndote la colita.
Y estaba tan, pero tan enviciada por la manera infatigable que me daba por la cola, que hasta lamía la pared, con la lengua afuera.
😋 😛 😋 😛
Y ya pueden imaginárselo: dándome bien duro, con su derecha ardiente, apretándome la pechuga y su izquierda, pervertida, metiéndose entre medio de mis piernas.
Y más encima, diciéndome cosas como que “soy su putita”, que “soy una viciosa” y que “¿Cómo puedo gozar tanto porque me da tan duro por la cola?”, por lo que yo no paraba para nada de chorrear.
😩 😍 😫 😍
Lara podrá decir lo mismo, pero me gusta más la manera que él me lo termina diciendo, como si fuera un secreto entre los dos.
Y ya ahí, dándome más duro, más duro y más duro y mi cola, ardiendo como un incendio y doliéndome un poco, pero no tanto para olvidar el placer y con él, apretándome cada metida más y más adentro.
😩 😖 😩 😖
Y voy sintiendo su respiración y trato de aguantar mi orgasmo…
Lo aguanto, lo aguanto, lo aguanto…
Y ¡Paff!, acabamos juntos…
💦 💦 💦 💦
Lo único que pienso en esos momentos es en toda la leche que me da por la cola, mientras que él, la llega a enterrar hasta casi con malicia, para llegar más adentro.
Quedamos cansados y medio muertos, pero es otra cosa sentir su cuerpo relajado sobre el mío.
☺️ 😊 ☺️ 😊
A lo mejor, es más pesado y más duro que el de Lara, pero es el que siempre me ha protegido y cuidado bastante.
Además, me sujeta suavemente de mi vientre y me ayuda a descansar, a pesar que está también, bien cansado.
Entonces, las palabras “duras” de que soy una putita y una pervertida, se transforman en tiernos “Te quiero” y “Eres la mujer que más me hace feliz”, junto con besitos en mi espalda y cariñitos con su cara, haciéndome sentir mucho más tranquila y feliz.
😆 😆 😆
Nos despegamos alrededor de la 1 y me rio, pensando que ni a cañones me levantaré antes de las 7.
Lo más gracioso fue que, como me apoyé en mi lado de la cama, sin querer manché mi cojín con nuestros jugos, por lo que él me tiene que pasar el suyo, para que yo pueda dormir.
😂
Pero lo más rico fue que nos acostamos de cucharita, con él, para variar, agarrándome de las pechugas y conversamos un ratito más, sobre mis problemas con Lara y más que nada, con esos sentimientos que tengo por mis amigas.
Él, como siempre ha sido conmigo, no me juzgó ni me hizo sentir que estuviera eso mal.
Al contrario, él escuchó todo con mucha atención y me dijo que no me preocupara tanto.
Que él sabe bien cómo soy y que yo sería incapaz de forzar a alguien a hacer algo que no quisiera.
Y después de darnos unos cuantos besitos, para asegurarme a mí misma que me gustan más los hombres que las mujeres, nos dormimos muy acaramelados, abrazándome muy rico por la espalda, como marido y mujer.
😉
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3 comentarios - Mis problemas con Lara (Final)