Dia de semana en casa

Esto paso hace unos diez días, un miércoles en el que me quede en casa. Desde entonces, cada vez que me acuerdo de la situación se me pone como una piedra.

Este, como todos mis relatos, es sobre una experiencia real y haré lo mejor que pueda para transmitirles como se sintió cada momento.

Me desperté con la alegría de saber que tenia todo el día para mi solo. No tenia que ir a laburar a así que me dispuse a disfrutar de una jornada de ocio absoluto en el confort de mi hogar.

Me levante, prepare un café, unas tostadas, arme uno y me dispuse a dar unas vueltas en internet. No mucho tiempo después me encontraba en P! chequeando un mensaje que me había llegado el día anterior de un contacto que tengo desde hace un tiempo. Es un flaco con el que intercambiamos algunos mensajes a raíz de un una experiencia que compartí y que, si bien nunca nos vimos, a veces me encuentro fantaseando con su propuesta. Tiene 23 años y el se describe como "putito, sumiso, tranquilo y obediente".y cada vez que me escribe se ofrece a venir, hacerme muchos masajes, mimarme y obedecer cualquier cosa que le pida. Hasta un día jodiendo le pregunte si me lavaría los platos y me dijo que si.

Si bien nuestros mensajes nunca fueron mucho mas allá, confieso mas de una vez me quede bastante caliente imaginándome la situación. No desde el punto de vista de humillarlo y ese rollo, si no tener a alguien dispuesto a hacerme masajes y mimarme de la forma que yo se lo pida sin decir nada.

Mire su perfil, algunas fotos y de pronto la posibilidad se volvió mas cercana. 1,70, flaquito, no muy masculino sin ser afeminado y sin un pelo en el cuerpo. Era mi día off, mi día fuera del radar. Toda la gente que conozco estaba en el trabajo así que ese día era para mi y nadie mas. Le pregunte que andaba haciendo.

Me quedo mirando distintos videos durante un rato hasta que me llega su respuesta. Me dice que está en su casa, no tiene facultad y que sus viejos vuelven a la tarde. Charlamos un rato, intercambiamos un par de fotos y yo para este punto estoy bastante caliente. El pibe parece copado, centrado y con muchas ganas hacerme masajes así que decido invitarlo a mi casa donde podemos estar sin que moleste nadie. "Ducha y voy!" fue su respuesta.

Serían las onde y diez de la mañana cuando me llega un mensaje suyo diciendo que había llegado y bajo a abrirle. Yo estaba super de entre casa. Jogging bultero, remera, buzo y así baje a abrirle. A esa hora no hay nadie abajo y el portero no aparece hasta pasado el mediodía así que estaba seguro. Abro la puerta de abajo y lo veo. Pibe normal que se cuida, se arregla y vestido con su ondita. Me cae bien.

Lo noto nervioso, esto me calienta aun más y el jogging no iba a hacer nada por ocultarlo, así que lo saludo como si nos conociésemos de toda la vida y lo invito a pasar. En el ascensor le pregunto como anda, que onda la facultad y tenemos la conversación mas trivial del mundo pero sirve para distender un poco.

De regreso en mi depto tomamos un te, ponemos música, fumamos y hablamos de mil boludeces mientras nos vamos relajando. El no toma ninguna iniciativa en la charla, simplemente responde lo que le pregunto y poco mas. Ya de entrada estaba clara su actitud sumisa y servicial. Esto me descoloco un poco al principio pero decidí relajarme y dejarme llevar por la situación.

Poco después me encuentro sentado en el sofá, con el jogging enroscado en un tobillo y las piernas separadas mientras el me come la pija con unas ganas conmovedoras. Se lo notaba con poca experiencia pero le ponía todo el entusiasmo del mundo. Se ponía a mil cada vez que le decía lo que tenia que hacer. Cada indicación que le daba lo ponía mas loquito y yo ni les cuento. Así lo tuve un buen rato. Estaba encantado. Chupándome solo la cabeza, después toda entera como si fuese un helado, después hasta el fondo, los huevos, todo.

Estoy con la pija a mil, toda babeada, viendo como aparece y desaparece dentro de su boca con cada movimiento de su cabeza. A medida que voy subiendo, sube el ritmo el también y cuando estoy con los huevos a punto de estallar me pregunta si "le voy a dar lechita?". Escuchar esa frase estallo mi calentura y le respondo agarrándolo fuerte de la nuca y haciendo fuerza para que mi pija le llegue bien profundo. Me sacudo de pies a cabeza con cada lechazo que le suelto adentro de su boca a lo que el responde con un gemido cada vez fuerte. No se cuantos chorros le solté, pero quede en las nubes.

Vuelvo en mi y veo como me la sigue chupando, limpiando cada gota. No iba a parar hasta que yo se lo ordene así que la seguimos un ratito mas mientras la chupaba despacito. Le ofrezco si quiere pasar al baño y le digo donde queda. Se levanta y mientras yo me quedo unos momentos ahí tendido, disfrutando.

Escucho correr el agua mientras me pongo solo un calzón y enfilo para mi cuarto. Me acuesto boca abajo sobre mi cama y cuando escucho que se abre la puerta del baño le digo: "acá estoy".

Le veo entrar en mi habitación y le digo que es momento de los masajes. Solo me dijo "Si", pero la forma en que lo hizo me calentó muchísimo. Se lo notaba entregado y dispuesto a hacer cualquier cosa que le pidiese. Nadie nos esperaba en ningún lado así que lo iba a aprovechar al máximo.

Le digo donde tengo la crema para los masajes, cierro los ojos y me dispongo a seguir disfrutando. Escucho como se pone la crema y momentos después siento sus manos apoyándose tímidamente sobre mi espalda. Me pregunta si lo esta haciendo bien y le digo que ponga un poco mas de peso sobre sus manos y así comenzó a masajearme toda la espalda.

Estuvimos un rato así hasta que le digo que siga con mis piernas. Lentamente baja por mi pierna izquierda, echando mas crema hasta llegar a mi pie. Se toma su tiempo ahí, después pasa al otro para terminar subiendo por mi pierna derecha. Como decirles que para este entonces yo ya volvía a estar al palo, con la pija presionando contra el colchón mientras su manitos suben por mi pierna. Me hervía el cuerpo.

Caigo en la cuenta de que el flaco sigue vestido, salvo por las zapatillas y la campera, tal cual vino de la calle y me siento un poco expuesto. No se. Así que le digo que se quede en calzones y, ni lento ni perezoso, a los 10 segundos estamos los dos vestidos solo con nuestros boxers.

Al retomar su tarea, lo hace apoyando sus manos de nuevo en mi espalda y sin pensarlo le digo que me saque el calzoncillo. Momentos después me descubro levantando la cola para que el flaco me baje el calzón y me volví loco. La sensación de estar acostado boca abajo levantando el culo para que otro pibe me saque la ropa interior fue algo completamente nuevo para mi. Ahora que lo pienso mas detenidamente, me sentí siempre muy cómodo porque podía experimentar cosas nuevas manteniendo un rol dominante. No se si me explico o por ahí es demasiado personal.

Mis calzoncillos vuelan, lo escucho ponerse nuevamente crema en las manos y sin demorarse un segundo lo siento masajeandome el culo con una entrega total. Era raro porque el flaco transmitía una vibra super sumisa, que nunca había sentido en otra persona en toda mi vida. Era extraño pero muy excitante, no les voy a mentir.

Lo tuve un buen rato masajeandome y encremandome todo. No se cuanto estuvimos pero en un momento le digo que me chupe la pija. Yo seguía acostado boca abajo, con las piernas medio separadas y la pija muy dura asomándose, apoyada contra el colchón. Cuando sentí el tacto de su lengua con la cabeza de mi pija me tuve que controlar para no irme en seco. Por favor! Que calentura.

De esta manera me chupa la pija, los huevos y me pasa la lengua por toooooda la zona. Estoy acostado, con las piernas separadas y levantando el culo, como muchas minas que han estado en esta misma cama, pero esta vez es a mi a quien le juguetean en la cola. Siento su lengua deslizándose por toda mi raya y hundirse bien adentro de mis nalgas. Lo siento lamerme el culo como si fuese un manjar y yo estoy a punto de explotar.

Le digo que se acueste al lado mio, boca abajo, y cuando lo hace me incorporo y comienzo a masajearle el culo a el, por sobre su boxer. Estamos los dos en llamas. La calentura que tenemos se siente en el aire y tengo que hacer algo antes de volverme loco. Le pongo un almohadón abajo para que le quede el culito parado, Le bajo el calzón por la mitad hasta dejar sus nalgas al descubierto y se las separo. Tiene un ojete chiquito, lindo, lampiño o depilado y muy apetecible.

Sin mucho preámbulo me subo arriba de el, me pongo un preservativo, le tiro abundante crema en el ano y comienzo a untarsela con mi pija. Voy jugandole en el culo a medida que voy aplicando mas presión hasta que en una de esas entra la cabeza de una. Lo escucho soltar esa clase de gemido, mitad placer mitad dolor, super cachondo y comienzo a bombearlo despacito. Solo con la cabeza de la pija, entrando y saliendo.

Si bien lo encuentro ya mas dilatado, cada vez que intento ir mas profundo le duele mucho así que lo levanto de las caderas, de manera que ahora quede en 4 patas, a ver si así entraba mejor. Al volver a entrar noto como me deslizo, si bien su culo me aprieta mucho la pija, con mucha mas facilidad. No llego a metersela entera pero si lo suficiente como para comenzar a bombearlo mejor. Gime, respira profundo, se queja y pide mas de una manera que me llena de morbo.

Vuelo de calentura, su culo me aprieta como un puño, comienzo a bombear como un salvaje, bien profundo, hasta que el flaco sale eyectado contra la pared con un alarido. Lo veo agarrarse el culo, con cara de dolor y esto me calienta aun mas, no les voy a mentir, pero me da un poco de culpa. Estoy con los huevos que exploto pero le digo de hacer una pausa para que pueda volver a relajarse.

Son casi las dos de la tarde así que caliento unas empanadas, comemos los dos en boxer pero ni siquiera hacer la digestión me baja la pija. Armamos un porrito de postre y cuando estamos los dos bien a gusto me lo llevo para la ducha.

Pongo el agua, me saco el boxer y el hace lo mismo. Estamos los dos parados frente a frente, con nuestras pijas muy cerca. No la tiene muy grande y esta medio dormida mientras que yo estoy que vuelo. Es la primera vez en mi vida que me meto a la ducha con otro flaco. Entramos los dos y le digo que me bañe.

Me enjabona todo, cada rincón, me pasa las manos por todos lados y yo estoy que no puedo mas. Lo tengo parado en frente, muy cerca, nuestras pijas a punto de rozarse así que lo agarro del culo y lo aprieto contra mi. Me da besos en el cuello mientras siento nuestras pijas presionándose. Nos refregamos todo hasta que lo vuelvo a tener de espaldas, con su culo apretándose contra mi. Yo ya estaba en otra dimensión así que así como estaba, desde atrás, le agarre la pija. Si bien he tenido algunas cuantas aventuras, esta es la primera vez que agarro una pija así. Nunca había pajeado a otro pero para cuando me doy cuenta, estoy masajeandole la pija como si fuese la mía.

Si bien ahora la tenia dura, no era muy grande. Así lo tuve un ratito hasta que le apoye la otra mano en la espalda y lo incline hacia adelante. Enjabone mi pija, su culito y se la apoye. Le jugué un poquito con la cabeza, lo puertee, se la metí un poquito pero por mas caliente que estaba no me lo iba a empomar sin forro. Lo di vuelta, lo puse de rodillas tratando de no caernos, lo agarre de la cabeza y, lisa y llanamente, comencé a cojerle la boca. Para tener mejor soporte apoyo una pierna en uno de los lados de la bañera de manera que ahora tengo un pie en el piso y otro en el borde. El entiende el mensaje y comienza a masajearme las bolas. Sin sacarle la pija de la boca, agarro su otra mano y me la llevo al culo.

Ahora tengo sus dos manos entre mis piernas mientras le bombeo la boca. Me manosea las bolas a la vez que juguetea en mi ano con un dedo. Le agarro "ese" dedo y lo guío para que me lo meta mas profundo. Ahora soy yo el que esta quieto y es el quien se mueve. Lleva su cabeza de atrás para adelante comiéndome la pija mientras me mete y saca su dedo en mi ano.

Siento como si fuese un calambre (placentero) atrás de la pija y le suelto lo que se sienten como si fuesen litros y litros de semen en su boca y toda la cara. Perdí la noción del tiempo pero sentí estuve eyaculando durante un buen rato.

Quede doblado, con las piernas temblando y los ojos para atrás. Quede como en trance y me llevo un ratito recuperar la noción de donde estaba. Si no fue el orgasmo mas potente de mi vida anda cerca.

Terminamos de bañarnos, nos vestimos y se fue para su casa. Me plantee decirle que se quede a ver si le terminaba de hacer la cola pero ya tenia ganas de estar solo. Jugue a la play, mas tarde me vi con amigos pero esa noche tuve que clavarme una super pajota deluxe antes de poder pegar un ojo.

Y al día siguiente, a laburar como si nada. Solo el y yo (y quien haya tenido la paciencia de leer hasta acá) sabemos lo que paso ese día. Es nuestro secreto.


Bueno, este es mi relato. Lo iré puliendo para mejorar la redacción y hacerlo mas conciso pero desde ya les agradezco la paciencia y buena onda.

Abrazo grande y que la pasen muy bien!