Romina y yo camino al infierno 4
Cuando nos despedimos del jefe y bajábamos por el ascensor Romi me dijo que se moría de calentura, igual yo le conteste. Me pidió que buscara algún baño y me aliviara sino no le iba a servir a la noche e iba a necesitar ayuda. Me mordió el oído y dijo por ejemplo de Oscar. Salimos del ascensor y me fui directo al baño, pareció que hacía pis por la facilidad con que acabe. En casa Romi se quedo con el vestido puesto solo se puso una batita encima, la nena parecía no querer dormirse por nada del mundo. Salimos prácticamente corriendo al cuarto ni bien se durmió, Romi se acostó con el vestido solo levantándoselo y dejando su conchita al aire.
- Ponete un forro y veni, así aguantas más. – Me desnude de inmediato y me acomodé sobre Romi, estaba jugosisima.
- Te gusto lo de hoy..., eh perra?
- Que calentura por favorrr..., cuando salí de la oficina solo con el vestido, me sentí más puta que si estuviera desnuda, sentía las miradas de los muchachos que me cogían..., me los hubiera garchado a todos ahí nomás..., te sigo contando....
- Si...!!!, por favor...!!
- Muy bien cerdito..., me sentía como en un tubo, veía como si estuviera dentro de un túnel cuando me presento a los gerentes..., pensaba en como serían sus pijas..., pero sobre todo Carlos el de marketing..., esos brazos peludos..., me hubiera gustado que me cogiera ahí nomás..., debe ser un bruto...
Me quede duro para aguantarme sin correrme.
- Pasame el teléfono, dijo Romi, así lo hice. Me hizo señas que no hiciera ruido.
- Hola jefe..., que debut..., no puedo más de la calentura..., espera que pongo el altavoz así escucha el cornudo también....
- Me alegra que te gustara y solo fue la bienvenida..., imagínate lo que te espera...
- Sos un perverso..., me encanta..., sabes que te quería pedir también..., bueno necesitamos algo de plata..., hace dos meses que el cornudo no trabaja.... – le mande un viaje bien a fondo y ella me miro divertida.
- El presi quedo muy contento con los dos..., ya tenés hecho un depósito por el doble de lo que habíamos hablado..., lo único que a tu marido no le va a pagar nada..., dijo que viéndolo se dio cuenta que le hacemos un favor dejándolo estar ahí..., así que agradezca..., me escuchaste cornudito...,
- Si señor...
- Y que te parece?
- Bien como todo lo que ud disponga...
Estallaron las risas del jefe y de Romi a ambos lados de la línea, igual Romi estaba clavada y gozaba como una perra.
- Otra cosa..., jefecito..., me preocupa eso de calentarlos nada más a los gerentes..., Carlos me encantaría que me recoja...
- Podes cogerte a quien quieras de la empresa..., hasta los que barren..., pero quise decirte que no te sientas obligada con nadie..., sos mi secretaria..., de nadie más..., mañana te dan la tarjeta para que puedas retirar plata..., te vamos a abrir otra cuenta para gastos de ropa o lo que necesites, besitos y te espero mañana.
- Jefe..., me puedo poner el vestido calado transparente pero negro...?
El jefe se rió..., - si mi putita lo que quieras..., mañana el presidente va a querer conocerte más profundamente..., le hable mucho de vos..., no me vas a hacer quedar mal no...?
Me quede quieto sobre Romi para no acabar, ella estaba acabando. Contesto como pudo.
- No jefe..., no... quedate tranquilo...
Cortamos la comunicación. Romi me miraba con cara de perra.
- Estamos yendo cada vez más lejos amor..., no tendríamos que parar...?
- Vos queres parar...?
- Todas las pijas de la empresa..., y después comérmelas....
- Que puta que sos....!!!
- Y a vos te encanta perro sucio..., aguanta más... quedate quieto...
Romi volvía a tener otro orgasmo hacía mucho que no la sentía tan caliente.
- Estoy recuperando el tiempo perdido...., que rico..., hasta los de limpieza me puedo comer..., - dijo poniendo su peor voz de puta. No veo la hora de que Carlos me coja... no te gustaría invitarlo el fin de semana a casa....?
- Pero amor no los vamos a hacer desfilar por la casa...
- Siento que ese hombre tiene algo especial..., es salvaje..., lo note en su mirada..., casi acabo..., semidesnuda y como me miro...
- Pero amor la nena es grande ya...
- Le encanta ir con sus primas..., el sábado lo invitamos..., si no me coge antes en la oficina..., me metió el dedo en el culo y me empezo a coger con el.
- Podes acabar..., cornudo..., maricon..., que le mostras el culo de tu esposa al presidente de la empresa....,
Acabe mordiendo la almohada para ahogar un grito era un placer mezclado con mucha angustia. Nos quedamos abrazados y volvimos a llorar, mezcla de sensaciones. En que hogar íbamos a poder criar a dos criaturas. Tendríamos que encerrarnos pense. Estamos locos
Romina y yo camino al infierno 5
Nos levantamos a la mañana siguiente, temprano para desayunar tranquilos, en realidad teníamos que llegar a las 10 de la mañana, no nos querían temprano. Igual me habían aclarado que Romi iba a estar un rato pero que yo me tenía que quedar hasta las 18 hs. y ese sería mi horario. Romi me propuso darnos un baño juntos, hacía mucho que no lo hacíamos, teníamos bastante tiempo, Romi se fue primera a la ducha, cuando entre al baño me detuve mirándola, era realmente una mujer hermosa y con unas curvas impresionantes. Entre con ella a la bañera, tenía el pelo enjabonado y los ojos cerrados, me sonrío y me beso, la acaricie un largo rato besándonos. Romi agarró mi miembro con la mano llena de champú y jugaba con el, sin presionarla demasiado, ella hablo:
- No te entusiasmes demasiado que en un ratito tenemos que ir a trabajar, y por ese tiempo dejo de ser tuya..., soy una especie de puta de lujo..., no?, ese sería mi trabajo?.
Había una mezcla de cosas en lo que Romina decía estaba enojada y también caliente, algo molesta con la situación también. Yo no supe que contestarle, pense un largo rato y le aclare que yo podía trabajar en cualquier cosa, que si le molestaba volvería a trabajar con la moto de fletero o cualquier cosa, en realidad trataba de conseguir un trabajo mejor, pero no tenía problemas en volver a trabajar con la moto, nos arreglaríamos con menos dinero.
- No hace falta mi amor..., me voy a comer tantas pijas..., me parece..., y encima estoy embarazada..., no te de vergüenza...? –su tono había cambiado sonaba más emputecida y jugaba de nuevo con su mano por mi pija.- Como haces para que te guste tanto ser cornudo...? Hiciste algún curso...? –Sonreía mientras hablaba.- quedate tranquilo por vos voy a hacer de todo. Hoy lo voy a conocer a fondo al presidente..., es un hombre extraño. Pense que estaría más cuidado, esta como un poco dejado..., esa barriga que se le adivina..., me recuerda al vecino ¿te acordas...? –se puso de rodillas y jugueteo un poco con su lengua por mi miembro pero manteniéndome lejos del orgasmo.- Mira cuando este arrodillada así delante del gordo bigotudo ese... –me miro a los ojos arrodillada a mi pies.- Debe tener un olor a sucio en la pija..., igual se la voy a limpiar con la lenguita dijo mientras se pasaba la lengua provocándome. –La ayude a incorporarse y nos besamos y acariciamos un rato más. Terminamos de bañarnos despertamos a la nena, desayunamos y después de dejarla en el jardín fuimos a tomar el tren. Romi vestía así nomás, por lo que no teníamos problemas y viajamos tranquis en tres, llevaba el vestido en una bolsa con unos zapatos de tacón y todo el resto del arreglo.
Cuando llegamos al trabajo nos dieron unas tarjetas para ingresar, todo era muy raro en seguridad nos informaron que la señora Romina y dijeron el apellido tenía asignado un camarín personal, que podía acompañarla. Entramos al lugar era realmente un camarín habían dejado ya un montón de ropas y zapatos. Había de todo para que Romi se vistiera, toda ropa al estilo caliente que habitualmente usaba. Romi miraba sin dar crédito, tenía un baño anexado al lugar, realmente era todo muy imponente, paso un hombre de seguridad y nos mostró un intercomunicador por el que Romi podía hablar con el jefe. Nos dijo que teníamos que informarle al jefe que ya habíamos llegado, nos anunciamos como el hombre nos indico para saludarlo, el jefe le dijo que ni bien se cambiara fuera a su oficina que le iba a dar unos sobres para repartir en la oficina, a mi me esperaba ya en su oficina que tenía que llevarle una medicación al presidente. La bese a Romi y fui hacia la oficina del jefe, me dio los buenos días y me indico una bandeja con un vaso de agua y una pastilla, que había en su escritorio.
- Es una pastilla de viagra para el señor presidente, le gusta tomarla para eventos especiales..., llévesela por favor. –me sentí revuelto y caliente, tomé el ascensor, me anuncie con la secretaria que me indico pasar, el presidente me esperaba.
Pase amigo..., mi medicación..., le agradezco, dijo sonriéndome con cara de maldad.- no me he cuidado mucho en mi vida y me gusta cumplir cuando tengo algún encuentro con una señora tan importante. Y más si esta embarazada..., puede irse y vuelva en un rato con su mujer... –me parecía todo demasiado, era institucionalizar mi estado, perder cualquier tipo de posibilidad de decisión, esto no está bien me dije vamos a ponerle fin a esta situación. Baje del ascensor dispuesto a finalizar esta estúpida situación. La vi a Romi en un escritorio dejando un sobre junto a uno de los chicos empleados estaba con el vestido negro sin ropa interior, mi pija dio un salto y así se quedo dura como una piedra, todos le sonreían y le hacían algún comentario por lo linda que se veía. Fue hacia el que parecía más desenvuelto de todos, la miro sonriéndole, que lindo corte tenés..., refiriéndose a la línea de pelo pubico que se veía por el vestido. Romi sonrió divertida, vino hacia mi y me beso diciéndome que había terminado con los sobres que podía pasar a ver al presidente. Caminamos despacio al ascensor, todas las miradas estaban en el culo de Romi.
Romina y yo camino al infierno 6
Entramos en el ascensor era solo un piso hasta la oficina del presidente que estaba en el piso superior. Detuve el ascensor y la mire a Romi.
- Amor tenemos que parar, esto es demasiado, no nos va a hacer bien a ninguno de los dos. –Mientras tanto Romi se puso de rodillas y jugaba con su cara por mi entrepierna. No en serio te digo..., sentí que su mano libero mi pija y la sentí jugando con su lenguita en mi miembro. Tenía los ojos cerrados y me sentía caliente como pocas veces.
- Queres que nos vayamos...?, Dijo Romi haciendo una pausa en la felación.
- No se..., y la sentí que se la metía hasta la garganta, después la sentí ponerse de pie, acciono el ascensor y cuando me di cuenta la puerta del ascensor estaba abriéndose en el piso de arriba, Romi sonreía divertida y la secretaria del presidente miraba ruborizada mi pija fuera del pantalón, atine a guardarla en seguida y me puse más colorado de lo que estaba por la calentura, Romi ya había bajado del ascensor, se acercaba hacia la secretaria.
Avísele al presidente que esta la secretaria del jefe con su marido. La secretaria nos anuncio y dijo:
Puede pasar, puso cara de enojo y fingió seguir escribiendo.
Entramos a la oficina caminando uno al lado del otro, el presidente estaba parado mirando por la ventana hacia el río, giro la cabeza hacia nosotros sonriendo, me indico con un gesto de su mano que me quedara parado donde estaba, Romi avanzaba hacia él, llegó a su lado y tomándola de la cintura la puso junto a él mirando al río.
Me encanta la vista desde acá. Por eso compramos estas oficinas, me hacen sentir libre, mientras hablaba su mano derecha había empezado a acariciar el culo de Romi sobre el vestido, sobándolo lentamente y con detenimiento, luego lo tomo del borde y lo fue levantando mientras seguía hablando de lo hermoso de la vista y demás. Se alejo de Romi y fue hacia el escritorio sentándose, Romi quedo parada con el culo al aire no hizo el menor gesto de cubrirse, el presidente comento que era una lastima que no fuera su secretaria. La tomo a Romi de la mano y corrió su sillón hacia un costado quedando de frente a mí, la sentó a Romi sobre sus muslos y empezó a acariciarle suavemente su conchita, metía sus dedos y jugueteaba con la entrepierna de Romi que me miraba de frente. Que mojadita que está, parece que le gusto pasearse delante de tanto muchacho joven, esta bien calentita. Romi cerró sus ojos concentrándose en el juego de las manos del presidente. Este la hizo levantarse y le indico que se arrodillara entre sus piernas giro el sillón para que la viera yo de costado a Romi, esta ya jugaba con sus manos en la bragueta del jefe, saco el miembro de este que estaba bien duro, tomo su pelo y lo paso hacia el otro lado para que yo pudiera verle bien la cara y empezó a chuparle la pija la presidente con mucho detenimiento, un rato jugaba con la lengua, otro la chupaba metiéndosela profundamente pero siempre me miraba de a ratos. Su culo estaba al aire, me hubiera gustado acercarme a acariciarlo. El jefe así como estaba en el sillón, la ayudo a pararse y la acomodo con ambas piernas al costado de las suyas. Romi se fue acomodando despacito, la cabeza de la pija del jefe desapareció entre los labios de Romi hasta que toda la pija la siguió, el jefe le bajo el vestido liberando sus pechos y se entretenía en chuparlos como si estuviera tomando la teta. Romi empezó a cabalgarlo lentamente haciendo movimientos con sus caderas, los dos empezaron a gemir bastante fuerte, a diferencia de muchas otras veces nadie hablaba. Estuvieron un largo rato así hasta que romi mordió el hombro del presidente que justo había cerrado sus ojos y echado su cabeza hacia atrás por lo que supuse que había acabado. Romi se quedo clavada en su pija todavía un rato bastante largo, después se puso de pie despacito, la pija del presidente parecía estar aún dura, sería seguramente la medicación que había tomado, se puso de pie y la puso de rodillas a romi delante de él, le saco el vestido y le dio su pija para que la limpiara, romi se entretuvo golosa como es. Al rato y ante mi sorpresa el presidente la separo de él, su pija había perdido algo de dureza. La ayudo a ponerse de pie y le indico que había un baño al lado, que podía pasar a limpiarse, inclusive podía ducharse si quería.
- Me voy a duchar pero me voy a dejar sin lavar la conchita porque me gusta que me quede llenita después que me la llenan..., que lastima que no puedas seguir...
Paso al baño y se empezó a duchar, yo quede parado en el mismo lugar que había tenido desde que entre el presidente había guardado su pija y miraba de nuevo por el ventanal. Al rato salió Romi con el pelo mojado, se acerco despacio hasta el y lo abrazo desde atrás mordiéndole el cuello, se giro y vino hacia mi, el presidente ni se movió, seguía ensimismado. Romi me tomo la mano y salimos de la oficina del presidente, bajamos en el ascensor, ella fue a su camarín a cambiarse, me pidió que la acompañara hasta la calle. Salimos y nos despedimos en la puerta, me dijo que tenía ganas de verlo a Oscar que había pasado mucho tiempo. Me miro a los ojos.
Igual no va a pasar nada que no quieras..., quiero que sepa que estoy embarazada..., no se hay algo en el que me satisface más que el resto..., no te enojas?, dijo mirándome con cara de perversa..., igual va a ser solo para mi..., sonrió perversamente, me apretó el bulto sobre el pantalón delante de la gente y se fue hacia el subte.
Romina y yo camino al infierno 7
Esperaba ansioso el momento de llegar a casa, la note a Romi rara al salir de la oficina, era obvio que algo le estaba pasando por dentro, siempre teníamos ese tipo de comunicación en que sabíamos cuando algo le estaba pasando al otro. Cuando entre en casa la vi a Romi desde la cocina, estaba con la nena en el jardín arreglándolo mientras la nena jugaba. Me cambié la ropa, prepare el mate y salí al jardín cuando lo tuve listo. Romi me dio un beso muy amoroso y me abrazó, la nena vino corriendo y se prendió de mis pantalones. Antes de que Romi dijera nada le dije que me daba cuenta que no tenía ganas de seguir trabajando, que seguramente una cosa era que jugáramos y que yo fuera el empleado y ella me visitara o tuviera relaciones con el jefe y otra distinta era que le pagaran como si fuera una puta, era obvio que no le gustaba, Romi me miro con lagrimas en los ojos, me pregunto como sabía que eso quería decirme, hace mucho que nos conocemos, le asegure. Romi me dijo que después de tomar unos mates iba a llamarlo al jefe.
Así lo hizo, el jefe no se sorprendió en lo más mínimo, dijo que justamente habían estado hablando con el presidente y que ambos tuvieron la sensación que no iba a seguir, inmediatamente le aseguro que les gustaría que yo siguiera trabajando, no por mi capacidad sino por lo que representaba, el vinculo de conexión con ella. Romi le dijo que iba a hablar conmigo y que mañana yo pasaría por la oficina a hablar el tema si me interesaba.
Hablamos con Romi, ella me aseguro que le agradaría que yo siguiera trabajando, que era una situación muy excitante, se acerco y abrazándome me beso. El tema quedo ahí hasta que nos acostamos. Me acomode sobre Romi que estaba desnudita sobre la cama. Se la acomode despacito. Romi habló:
- Esta bueno esto de que sigas trabajando..., todos me conocen..., los gerentes..., los empleados..., te van a tratar muy bien..., te vas a llenar de amigos...
- Siempre la misma perra, eh? Y le mande un viaje bien a fondo.
- Tenés que mejorar un poco el sueldo..., que te bastardeen esta bien..., pero que te paguen un poco más..., - los dos estabamos muy calientes nos gustaba la situación era un poco como recuperar la situación que teníamos. Romi me metió un dedo en el culo y me dijo que no me moviera me dejo clavado sobre ella, sentía mi pija latir todo el tiempo.
- Que caliente estás..., te gusta perro..., donde voy a conseguir un cornudo como vos...? – Me seguía teniendo sin moverme sobre ella, me sentía muy cerca del orgasmo pero trataba de aguantar, Romi empezo a cogerme con el dedo lo que me hizo explotar, Romi también tuvo su orgasmo mientras nos besamos, dormimos abrazados.
El día siguiente fui a la oficina a hablar con el jefe, me recibieron en la oficina del presidente. El jefe habló primero.
- Bueno le queremos proponer que siga trabajando como cadete..., obviamente sabemos cual es su situación y por eso le vamos a pagar bastante más..., como se dará cuenta no es por ud, nos gusta esto de tenerlo de empleado conociendo la hermosa familia que tiene. – Mi pija reacciono inmediatamente, por suerte estaba sentado y no se dieron cuenta. Es decir que el suyo es un trabajo familiar, dijo el presidente y los dos rieron de la ocurrencia. El sueldo que me propusieron era bastante más de lo que se pagaba en gral. en el mercado. Finalmente les dije que estaba de acuerdo y que me parecía bien. El jefe volvió a hablar:
- Podemos entender que esta de acuerdo en todo?, quiero decir..., bueno ud ya sabe...
- Me parece que la situación queda bien clara. – Me empezaba a sentir molesto, estaba por mandarlos al carajo en ese mismo instante. El presidente parecía conocer mi estado y dijo.
- No perdamos tiempo entonces, vaya ud. a verlo al señor Carlos que le va a entregar unos papeles para que lleve a firmar, es un gusto tenerlo en la empresa, dijo dándome la mano y sonriendo.
En la oficina del tal Carlos que era el que le había encantado a Romi, este me dio unos papeles y me aseguro que se alegraba de verme. Me pregunto por Romi y me hizo un comentario sobre lo hermosa que era, que tenía que cuidar bien a una mujer así. Me pareció un tipo agradable.
Cuando llegué a casa Romi estaba contenta, de que hubiera aceptado el trabajo, me beso y se alegro mucho. Esa noche volvimos a hacer el amor muy calientes de nuevo. Yo hable.
- Sabes que Carlos me comento que sos muy hermosa... – Romi gimió bien fuerte.- me dijo que te tengo que cuidar bien... – la clave violentamente sobre la cama, le daba bien duro, me sentía muy lejos del orgasmo por lo que le daba muy violentamente, me olvide que estaba embarazada, en realidad parecía que nada me importaba, Romi no hablaba, me salí de ella y la gire sobre la cama, Romi solo gemía no decía nada, le puse una almohada bajo la pelvis, me dedique a chuparle el culo un rato largo y tomando el aceite de la mesa de luz se lo lubrique bien, le acomode mi cabeza en la entrada y se la deje ir de a poco, Romi empezó a tener un orgasmo, hacia una eternidad que no me dejaba penetrarla por el culo, pero ahora gozaba como una perra. Y a diferencia de lo que siempre pasaba no decía nada. Yo me sentía raro, le empecé a hablar yo:
- Es muy parecido al de tu mamá tu culito..., - espere a ver la reacción y me di cuenta que estaba caliente como hacía mucho no lo estaba- no lo tiene tan roto como vos..., el jefe se lo estreno..., algún día quizás sea mi turno..., no...? – Romi no hablaba para nada, me parecía que estaba teniendo una cadena de orgasmos encadenados, yo le di un largo rato por el culo, nunca lo había disfrutado tanto, le di bien duro hasta que explote bien al fondo de su culo, me quede un largo rato tendido sobre ella hasta que sentí mi pija salir sola y me acosté boca arriba a su lado, temía cual sería su reacción, Romi se giro y me dio un hermoso beso y se fue hacia el baño a lavarse, yo me sentí molesto por los comentarios que había hecho sobre la madre, me quise disculpar cuando Romi vino, pero me hizo un gesto de callar se acomodo sobre mi pecho y se quedo dormida, los dos dormimos muy felices.
Cuando nos despedimos del jefe y bajábamos por el ascensor Romi me dijo que se moría de calentura, igual yo le conteste. Me pidió que buscara algún baño y me aliviara sino no le iba a servir a la noche e iba a necesitar ayuda. Me mordió el oído y dijo por ejemplo de Oscar. Salimos del ascensor y me fui directo al baño, pareció que hacía pis por la facilidad con que acabe. En casa Romi se quedo con el vestido puesto solo se puso una batita encima, la nena parecía no querer dormirse por nada del mundo. Salimos prácticamente corriendo al cuarto ni bien se durmió, Romi se acostó con el vestido solo levantándoselo y dejando su conchita al aire.
- Ponete un forro y veni, así aguantas más. – Me desnude de inmediato y me acomodé sobre Romi, estaba jugosisima.
- Te gusto lo de hoy..., eh perra?
- Que calentura por favorrr..., cuando salí de la oficina solo con el vestido, me sentí más puta que si estuviera desnuda, sentía las miradas de los muchachos que me cogían..., me los hubiera garchado a todos ahí nomás..., te sigo contando....
- Si...!!!, por favor...!!
- Muy bien cerdito..., me sentía como en un tubo, veía como si estuviera dentro de un túnel cuando me presento a los gerentes..., pensaba en como serían sus pijas..., pero sobre todo Carlos el de marketing..., esos brazos peludos..., me hubiera gustado que me cogiera ahí nomás..., debe ser un bruto...
Me quede duro para aguantarme sin correrme.
- Pasame el teléfono, dijo Romi, así lo hice. Me hizo señas que no hiciera ruido.
- Hola jefe..., que debut..., no puedo más de la calentura..., espera que pongo el altavoz así escucha el cornudo también....
- Me alegra que te gustara y solo fue la bienvenida..., imagínate lo que te espera...
- Sos un perverso..., me encanta..., sabes que te quería pedir también..., bueno necesitamos algo de plata..., hace dos meses que el cornudo no trabaja.... – le mande un viaje bien a fondo y ella me miro divertida.
- El presi quedo muy contento con los dos..., ya tenés hecho un depósito por el doble de lo que habíamos hablado..., lo único que a tu marido no le va a pagar nada..., dijo que viéndolo se dio cuenta que le hacemos un favor dejándolo estar ahí..., así que agradezca..., me escuchaste cornudito...,
- Si señor...
- Y que te parece?
- Bien como todo lo que ud disponga...
Estallaron las risas del jefe y de Romi a ambos lados de la línea, igual Romi estaba clavada y gozaba como una perra.
- Otra cosa..., jefecito..., me preocupa eso de calentarlos nada más a los gerentes..., Carlos me encantaría que me recoja...
- Podes cogerte a quien quieras de la empresa..., hasta los que barren..., pero quise decirte que no te sientas obligada con nadie..., sos mi secretaria..., de nadie más..., mañana te dan la tarjeta para que puedas retirar plata..., te vamos a abrir otra cuenta para gastos de ropa o lo que necesites, besitos y te espero mañana.
- Jefe..., me puedo poner el vestido calado transparente pero negro...?
El jefe se rió..., - si mi putita lo que quieras..., mañana el presidente va a querer conocerte más profundamente..., le hable mucho de vos..., no me vas a hacer quedar mal no...?
Me quede quieto sobre Romi para no acabar, ella estaba acabando. Contesto como pudo.
- No jefe..., no... quedate tranquilo...
Cortamos la comunicación. Romi me miraba con cara de perra.
- Estamos yendo cada vez más lejos amor..., no tendríamos que parar...?
- Vos queres parar...?
- Todas las pijas de la empresa..., y después comérmelas....
- Que puta que sos....!!!
- Y a vos te encanta perro sucio..., aguanta más... quedate quieto...
Romi volvía a tener otro orgasmo hacía mucho que no la sentía tan caliente.
- Estoy recuperando el tiempo perdido...., que rico..., hasta los de limpieza me puedo comer..., - dijo poniendo su peor voz de puta. No veo la hora de que Carlos me coja... no te gustaría invitarlo el fin de semana a casa....?
- Pero amor no los vamos a hacer desfilar por la casa...
- Siento que ese hombre tiene algo especial..., es salvaje..., lo note en su mirada..., casi acabo..., semidesnuda y como me miro...
- Pero amor la nena es grande ya...
- Le encanta ir con sus primas..., el sábado lo invitamos..., si no me coge antes en la oficina..., me metió el dedo en el culo y me empezo a coger con el.
- Podes acabar..., cornudo..., maricon..., que le mostras el culo de tu esposa al presidente de la empresa....,
Acabe mordiendo la almohada para ahogar un grito era un placer mezclado con mucha angustia. Nos quedamos abrazados y volvimos a llorar, mezcla de sensaciones. En que hogar íbamos a poder criar a dos criaturas. Tendríamos que encerrarnos pense. Estamos locos
Romina y yo camino al infierno 5
Nos levantamos a la mañana siguiente, temprano para desayunar tranquilos, en realidad teníamos que llegar a las 10 de la mañana, no nos querían temprano. Igual me habían aclarado que Romi iba a estar un rato pero que yo me tenía que quedar hasta las 18 hs. y ese sería mi horario. Romi me propuso darnos un baño juntos, hacía mucho que no lo hacíamos, teníamos bastante tiempo, Romi se fue primera a la ducha, cuando entre al baño me detuve mirándola, era realmente una mujer hermosa y con unas curvas impresionantes. Entre con ella a la bañera, tenía el pelo enjabonado y los ojos cerrados, me sonrío y me beso, la acaricie un largo rato besándonos. Romi agarró mi miembro con la mano llena de champú y jugaba con el, sin presionarla demasiado, ella hablo:
- No te entusiasmes demasiado que en un ratito tenemos que ir a trabajar, y por ese tiempo dejo de ser tuya..., soy una especie de puta de lujo..., no?, ese sería mi trabajo?.
Había una mezcla de cosas en lo que Romina decía estaba enojada y también caliente, algo molesta con la situación también. Yo no supe que contestarle, pense un largo rato y le aclare que yo podía trabajar en cualquier cosa, que si le molestaba volvería a trabajar con la moto de fletero o cualquier cosa, en realidad trataba de conseguir un trabajo mejor, pero no tenía problemas en volver a trabajar con la moto, nos arreglaríamos con menos dinero.
- No hace falta mi amor..., me voy a comer tantas pijas..., me parece..., y encima estoy embarazada..., no te de vergüenza...? –su tono había cambiado sonaba más emputecida y jugaba de nuevo con su mano por mi pija.- Como haces para que te guste tanto ser cornudo...? Hiciste algún curso...? –Sonreía mientras hablaba.- quedate tranquilo por vos voy a hacer de todo. Hoy lo voy a conocer a fondo al presidente..., es un hombre extraño. Pense que estaría más cuidado, esta como un poco dejado..., esa barriga que se le adivina..., me recuerda al vecino ¿te acordas...? –se puso de rodillas y jugueteo un poco con su lengua por mi miembro pero manteniéndome lejos del orgasmo.- Mira cuando este arrodillada así delante del gordo bigotudo ese... –me miro a los ojos arrodillada a mi pies.- Debe tener un olor a sucio en la pija..., igual se la voy a limpiar con la lenguita dijo mientras se pasaba la lengua provocándome. –La ayude a incorporarse y nos besamos y acariciamos un rato más. Terminamos de bañarnos despertamos a la nena, desayunamos y después de dejarla en el jardín fuimos a tomar el tren. Romi vestía así nomás, por lo que no teníamos problemas y viajamos tranquis en tres, llevaba el vestido en una bolsa con unos zapatos de tacón y todo el resto del arreglo.
Cuando llegamos al trabajo nos dieron unas tarjetas para ingresar, todo era muy raro en seguridad nos informaron que la señora Romina y dijeron el apellido tenía asignado un camarín personal, que podía acompañarla. Entramos al lugar era realmente un camarín habían dejado ya un montón de ropas y zapatos. Había de todo para que Romi se vistiera, toda ropa al estilo caliente que habitualmente usaba. Romi miraba sin dar crédito, tenía un baño anexado al lugar, realmente era todo muy imponente, paso un hombre de seguridad y nos mostró un intercomunicador por el que Romi podía hablar con el jefe. Nos dijo que teníamos que informarle al jefe que ya habíamos llegado, nos anunciamos como el hombre nos indico para saludarlo, el jefe le dijo que ni bien se cambiara fuera a su oficina que le iba a dar unos sobres para repartir en la oficina, a mi me esperaba ya en su oficina que tenía que llevarle una medicación al presidente. La bese a Romi y fui hacia la oficina del jefe, me dio los buenos días y me indico una bandeja con un vaso de agua y una pastilla, que había en su escritorio.
- Es una pastilla de viagra para el señor presidente, le gusta tomarla para eventos especiales..., llévesela por favor. –me sentí revuelto y caliente, tomé el ascensor, me anuncie con la secretaria que me indico pasar, el presidente me esperaba.
Pase amigo..., mi medicación..., le agradezco, dijo sonriéndome con cara de maldad.- no me he cuidado mucho en mi vida y me gusta cumplir cuando tengo algún encuentro con una señora tan importante. Y más si esta embarazada..., puede irse y vuelva en un rato con su mujer... –me parecía todo demasiado, era institucionalizar mi estado, perder cualquier tipo de posibilidad de decisión, esto no está bien me dije vamos a ponerle fin a esta situación. Baje del ascensor dispuesto a finalizar esta estúpida situación. La vi a Romi en un escritorio dejando un sobre junto a uno de los chicos empleados estaba con el vestido negro sin ropa interior, mi pija dio un salto y así se quedo dura como una piedra, todos le sonreían y le hacían algún comentario por lo linda que se veía. Fue hacia el que parecía más desenvuelto de todos, la miro sonriéndole, que lindo corte tenés..., refiriéndose a la línea de pelo pubico que se veía por el vestido. Romi sonrió divertida, vino hacia mi y me beso diciéndome que había terminado con los sobres que podía pasar a ver al presidente. Caminamos despacio al ascensor, todas las miradas estaban en el culo de Romi.
Romina y yo camino al infierno 6
Entramos en el ascensor era solo un piso hasta la oficina del presidente que estaba en el piso superior. Detuve el ascensor y la mire a Romi.
- Amor tenemos que parar, esto es demasiado, no nos va a hacer bien a ninguno de los dos. –Mientras tanto Romi se puso de rodillas y jugaba con su cara por mi entrepierna. No en serio te digo..., sentí que su mano libero mi pija y la sentí jugando con su lenguita en mi miembro. Tenía los ojos cerrados y me sentía caliente como pocas veces.
- Queres que nos vayamos...?, Dijo Romi haciendo una pausa en la felación.
- No se..., y la sentí que se la metía hasta la garganta, después la sentí ponerse de pie, acciono el ascensor y cuando me di cuenta la puerta del ascensor estaba abriéndose en el piso de arriba, Romi sonreía divertida y la secretaria del presidente miraba ruborizada mi pija fuera del pantalón, atine a guardarla en seguida y me puse más colorado de lo que estaba por la calentura, Romi ya había bajado del ascensor, se acercaba hacia la secretaria.
Avísele al presidente que esta la secretaria del jefe con su marido. La secretaria nos anuncio y dijo:
Puede pasar, puso cara de enojo y fingió seguir escribiendo.
Entramos a la oficina caminando uno al lado del otro, el presidente estaba parado mirando por la ventana hacia el río, giro la cabeza hacia nosotros sonriendo, me indico con un gesto de su mano que me quedara parado donde estaba, Romi avanzaba hacia él, llegó a su lado y tomándola de la cintura la puso junto a él mirando al río.
Me encanta la vista desde acá. Por eso compramos estas oficinas, me hacen sentir libre, mientras hablaba su mano derecha había empezado a acariciar el culo de Romi sobre el vestido, sobándolo lentamente y con detenimiento, luego lo tomo del borde y lo fue levantando mientras seguía hablando de lo hermoso de la vista y demás. Se alejo de Romi y fue hacia el escritorio sentándose, Romi quedo parada con el culo al aire no hizo el menor gesto de cubrirse, el presidente comento que era una lastima que no fuera su secretaria. La tomo a Romi de la mano y corrió su sillón hacia un costado quedando de frente a mí, la sentó a Romi sobre sus muslos y empezó a acariciarle suavemente su conchita, metía sus dedos y jugueteaba con la entrepierna de Romi que me miraba de frente. Que mojadita que está, parece que le gusto pasearse delante de tanto muchacho joven, esta bien calentita. Romi cerró sus ojos concentrándose en el juego de las manos del presidente. Este la hizo levantarse y le indico que se arrodillara entre sus piernas giro el sillón para que la viera yo de costado a Romi, esta ya jugaba con sus manos en la bragueta del jefe, saco el miembro de este que estaba bien duro, tomo su pelo y lo paso hacia el otro lado para que yo pudiera verle bien la cara y empezó a chuparle la pija la presidente con mucho detenimiento, un rato jugaba con la lengua, otro la chupaba metiéndosela profundamente pero siempre me miraba de a ratos. Su culo estaba al aire, me hubiera gustado acercarme a acariciarlo. El jefe así como estaba en el sillón, la ayudo a pararse y la acomodo con ambas piernas al costado de las suyas. Romi se fue acomodando despacito, la cabeza de la pija del jefe desapareció entre los labios de Romi hasta que toda la pija la siguió, el jefe le bajo el vestido liberando sus pechos y se entretenía en chuparlos como si estuviera tomando la teta. Romi empezó a cabalgarlo lentamente haciendo movimientos con sus caderas, los dos empezaron a gemir bastante fuerte, a diferencia de muchas otras veces nadie hablaba. Estuvieron un largo rato así hasta que romi mordió el hombro del presidente que justo había cerrado sus ojos y echado su cabeza hacia atrás por lo que supuse que había acabado. Romi se quedo clavada en su pija todavía un rato bastante largo, después se puso de pie despacito, la pija del presidente parecía estar aún dura, sería seguramente la medicación que había tomado, se puso de pie y la puso de rodillas a romi delante de él, le saco el vestido y le dio su pija para que la limpiara, romi se entretuvo golosa como es. Al rato y ante mi sorpresa el presidente la separo de él, su pija había perdido algo de dureza. La ayudo a ponerse de pie y le indico que había un baño al lado, que podía pasar a limpiarse, inclusive podía ducharse si quería.
- Me voy a duchar pero me voy a dejar sin lavar la conchita porque me gusta que me quede llenita después que me la llenan..., que lastima que no puedas seguir...
Paso al baño y se empezó a duchar, yo quede parado en el mismo lugar que había tenido desde que entre el presidente había guardado su pija y miraba de nuevo por el ventanal. Al rato salió Romi con el pelo mojado, se acerco despacio hasta el y lo abrazo desde atrás mordiéndole el cuello, se giro y vino hacia mi, el presidente ni se movió, seguía ensimismado. Romi me tomo la mano y salimos de la oficina del presidente, bajamos en el ascensor, ella fue a su camarín a cambiarse, me pidió que la acompañara hasta la calle. Salimos y nos despedimos en la puerta, me dijo que tenía ganas de verlo a Oscar que había pasado mucho tiempo. Me miro a los ojos.
Igual no va a pasar nada que no quieras..., quiero que sepa que estoy embarazada..., no se hay algo en el que me satisface más que el resto..., no te enojas?, dijo mirándome con cara de perversa..., igual va a ser solo para mi..., sonrió perversamente, me apretó el bulto sobre el pantalón delante de la gente y se fue hacia el subte.
Romina y yo camino al infierno 7
Esperaba ansioso el momento de llegar a casa, la note a Romi rara al salir de la oficina, era obvio que algo le estaba pasando por dentro, siempre teníamos ese tipo de comunicación en que sabíamos cuando algo le estaba pasando al otro. Cuando entre en casa la vi a Romi desde la cocina, estaba con la nena en el jardín arreglándolo mientras la nena jugaba. Me cambié la ropa, prepare el mate y salí al jardín cuando lo tuve listo. Romi me dio un beso muy amoroso y me abrazó, la nena vino corriendo y se prendió de mis pantalones. Antes de que Romi dijera nada le dije que me daba cuenta que no tenía ganas de seguir trabajando, que seguramente una cosa era que jugáramos y que yo fuera el empleado y ella me visitara o tuviera relaciones con el jefe y otra distinta era que le pagaran como si fuera una puta, era obvio que no le gustaba, Romi me miro con lagrimas en los ojos, me pregunto como sabía que eso quería decirme, hace mucho que nos conocemos, le asegure. Romi me dijo que después de tomar unos mates iba a llamarlo al jefe.
Así lo hizo, el jefe no se sorprendió en lo más mínimo, dijo que justamente habían estado hablando con el presidente y que ambos tuvieron la sensación que no iba a seguir, inmediatamente le aseguro que les gustaría que yo siguiera trabajando, no por mi capacidad sino por lo que representaba, el vinculo de conexión con ella. Romi le dijo que iba a hablar conmigo y que mañana yo pasaría por la oficina a hablar el tema si me interesaba.
Hablamos con Romi, ella me aseguro que le agradaría que yo siguiera trabajando, que era una situación muy excitante, se acerco y abrazándome me beso. El tema quedo ahí hasta que nos acostamos. Me acomode sobre Romi que estaba desnudita sobre la cama. Se la acomode despacito. Romi habló:
- Esta bueno esto de que sigas trabajando..., todos me conocen..., los gerentes..., los empleados..., te van a tratar muy bien..., te vas a llenar de amigos...
- Siempre la misma perra, eh? Y le mande un viaje bien a fondo.
- Tenés que mejorar un poco el sueldo..., que te bastardeen esta bien..., pero que te paguen un poco más..., - los dos estabamos muy calientes nos gustaba la situación era un poco como recuperar la situación que teníamos. Romi me metió un dedo en el culo y me dijo que no me moviera me dejo clavado sobre ella, sentía mi pija latir todo el tiempo.
- Que caliente estás..., te gusta perro..., donde voy a conseguir un cornudo como vos...? – Me seguía teniendo sin moverme sobre ella, me sentía muy cerca del orgasmo pero trataba de aguantar, Romi empezo a cogerme con el dedo lo que me hizo explotar, Romi también tuvo su orgasmo mientras nos besamos, dormimos abrazados.
El día siguiente fui a la oficina a hablar con el jefe, me recibieron en la oficina del presidente. El jefe habló primero.
- Bueno le queremos proponer que siga trabajando como cadete..., obviamente sabemos cual es su situación y por eso le vamos a pagar bastante más..., como se dará cuenta no es por ud, nos gusta esto de tenerlo de empleado conociendo la hermosa familia que tiene. – Mi pija reacciono inmediatamente, por suerte estaba sentado y no se dieron cuenta. Es decir que el suyo es un trabajo familiar, dijo el presidente y los dos rieron de la ocurrencia. El sueldo que me propusieron era bastante más de lo que se pagaba en gral. en el mercado. Finalmente les dije que estaba de acuerdo y que me parecía bien. El jefe volvió a hablar:
- Podemos entender que esta de acuerdo en todo?, quiero decir..., bueno ud ya sabe...
- Me parece que la situación queda bien clara. – Me empezaba a sentir molesto, estaba por mandarlos al carajo en ese mismo instante. El presidente parecía conocer mi estado y dijo.
- No perdamos tiempo entonces, vaya ud. a verlo al señor Carlos que le va a entregar unos papeles para que lleve a firmar, es un gusto tenerlo en la empresa, dijo dándome la mano y sonriendo.
En la oficina del tal Carlos que era el que le había encantado a Romi, este me dio unos papeles y me aseguro que se alegraba de verme. Me pregunto por Romi y me hizo un comentario sobre lo hermosa que era, que tenía que cuidar bien a una mujer así. Me pareció un tipo agradable.
Cuando llegué a casa Romi estaba contenta, de que hubiera aceptado el trabajo, me beso y se alegro mucho. Esa noche volvimos a hacer el amor muy calientes de nuevo. Yo hable.
- Sabes que Carlos me comento que sos muy hermosa... – Romi gimió bien fuerte.- me dijo que te tengo que cuidar bien... – la clave violentamente sobre la cama, le daba bien duro, me sentía muy lejos del orgasmo por lo que le daba muy violentamente, me olvide que estaba embarazada, en realidad parecía que nada me importaba, Romi no hablaba, me salí de ella y la gire sobre la cama, Romi solo gemía no decía nada, le puse una almohada bajo la pelvis, me dedique a chuparle el culo un rato largo y tomando el aceite de la mesa de luz se lo lubrique bien, le acomode mi cabeza en la entrada y se la deje ir de a poco, Romi empezó a tener un orgasmo, hacia una eternidad que no me dejaba penetrarla por el culo, pero ahora gozaba como una perra. Y a diferencia de lo que siempre pasaba no decía nada. Yo me sentía raro, le empecé a hablar yo:
- Es muy parecido al de tu mamá tu culito..., - espere a ver la reacción y me di cuenta que estaba caliente como hacía mucho no lo estaba- no lo tiene tan roto como vos..., el jefe se lo estreno..., algún día quizás sea mi turno..., no...? – Romi no hablaba para nada, me parecía que estaba teniendo una cadena de orgasmos encadenados, yo le di un largo rato por el culo, nunca lo había disfrutado tanto, le di bien duro hasta que explote bien al fondo de su culo, me quede un largo rato tendido sobre ella hasta que sentí mi pija salir sola y me acosté boca arriba a su lado, temía cual sería su reacción, Romi se giro y me dio un hermoso beso y se fue hacia el baño a lavarse, yo me sentí molesto por los comentarios que había hecho sobre la madre, me quise disculpar cuando Romi vino, pero me hizo un gesto de callar se acomodo sobre mi pecho y se quedo dormida, los dos dormimos muy felices.
0 comentarios - Romina, mi perra cap 54 a 57