Con permiso de mi esposo 3

Ahí estaba yo con tres chicos, con mi conchita abierta , con solo una remera tapando mi total desnudez, sentadita a upa de quien me había cojido como los dioses, ellos hablaban del partido como si yo no estuviera, pero si estaba las manos de mi amante me acariciaban las piernas y su boca comenzo a besar mi cuello yo me dejaba pero cuando intento llevar su mano a mi entrepierna lo detuve, pero me beso con mas fuerza lo que detuvo mi poca oposicion no veia a sus amigos pero estaba segura de que me estaban observando, de pronto de deja de besarme y yo le pido que me lleve a la habitacion y me sonrie y me dice que este tranquila que me queria cojer ahí adelante de sus amigos que me deje hacer y que disfrute, me saca la remera y me deja totalmente desnuda, veo a sus amigos y estaban con sus pijas afuera y totalmente duras, me ordena chuparlas yo me niego, pero su insistencia y mi calentura me llevaron a cumplir esa orden se la chupe primero al que tenia mas cerca, luego al otro mientras el primero me tocaba las tetas hasta casi hacerme doler, luego mi amante me ordena sentarme sobre, obedezco y logro una penetracion total, quedando mis tetas totalmente pegada a su cuerpo, me olvide de todo y me puse a gozar, solo sentia como una lengua jugaba con mi cola la cual en la posicion que estaba quedaba muy ofrecida a tal actividad, luego de varios minutos note como algo mas gordo y consistente estaba intentando ingresar por mi cola, mi amante me tumba un poco mas para que a su amigo la tarea le resultara mas sencilla, poco a poco fue logrando vencer la resistencia de mi orificio mas pequeño, hasta lograr invadir por completo mi cuerpo, era mi primer doble penetracion y si bien es cierto que me dolia un poco lo estaba disfrutando, cuando logre llegar al orgasmo grite como una perra y segui gritando por casi una hora mas en la que fui sometida por essos tres jovencitos que parecia que nunca se les terminaban la ganas de poseerme, cuando uno de ellos acababa de inmediato estaba el otro preparado para tomar su lugar, perdi la conciencia de cuantas veces logre llegar, pero si supe que desde ese momento nada sería igual en mi vida y en mi matrimonio...