Amor y placer

Sus embestidas fueron aumentando de ritmo, mas fuerte, mas rudo, me tenia ensartada a su gusto y yo me le entregaba sin el menor pudor, lo atraje hacia mi con mis brazos, lo acaricie por la espalda y logré que me apachurrara bien con el peso de sus cuerpo, al mismo tiempo le rodee de nuevo con mis muslos y mis piernas por su cadera, con mis talones dando en su espalda exigiéndole que me la metiera mas y mas: ¡Oh mi vida, mi amor…Así cogeme mas, mucho, métemela toda! Él resoplaba mas y mas, parecía un potro cabalgándome, sus forma de meter su verga me hacia dar grititos, que rudo y delicioso era este tipo, sus respiración acelerada, sus besos, sus manos acariciando mi cuerpo, y su verga profanándome el coño me tenían en el mismo paraíso, hasta que por fin con grititos entrecortados le hice saber que me estaba llegando el orgasmo, me estaba viniendo y el aguantaba deliciosamente, termine y el nada, sus verga estaba como roca, me hizo dar vuelta y quede encima de el, como amazona empecé a moverme, sus verga me entraba y salía a cada brinco d mis nalgas sobre él, me empalaba una y otra vez hasta la base de su formidable tronco, sentía sus huevos en mi culo, me estremecía con sus verga en mi canal de amor, toda me llenaba, el se movió y prácticamente me levanto quedando el sentado y yo encima de el aun, se las arreglo muy bien para besarme, me mordisqueaba el cuello y mis tetas, sus mordiditas en mis pezones me los tenían extremadamente sensibles, mientras sus manos me apretaban y estrujaban mis nalgas con lujuria incontrolable, yo lo tomaba del rostro y lo besaba, sus lengua salía al encuentro de la mía, me seguí moviendo y le pasaba mis largas uñas por su velludo pecho, estaba yo arrobada con el, me le mecía y sentía como mi panocha engullía su verga una y otra vez, ninguno hablaba, parecíamos solo dos animales resoplando y gimiendo, me moví mas rotando mis caderas y contrayendo mi coño mordisqueándole con el perrito interior tratando de exprimir su rica verga y disfrutar ya de sus jugos, yo lo veía disfrutar conmigo, se estremecía con mis movimientos, de pronto me contuvo, yo sabia que estaba a punto de venirse, pero el no se dejo vencer, me dio vuelta de nuevo quedando sobre mi una vez mas, se movió y tomando mis piernas se las puso en sus hombros, y de nuevo a cogerme mas, en esta posición sus metidas me llagaban a la matriz, me tenia enfebrecida y yo gemía como lloriqueando de placer y de gusto, me chupo los deditos d mis pies sin dejar de cogerme, de pronto lo sentí acelerar sus ritmo, fascinada me deje hacer, me vine una vez mas y como si esto fuera lo que el esperaba me dejo ir su leche hasta el fondo de mi coñito contraído, yo estaba transpirando suavemente pero el escurría en sudor, entonces dejo caer todo su cuerpazo en mi, sin dejar de meter y sacar su verga en mi estrecho canal y vaciando todo el licor de sus testículos , así sin dejar de moverse hasta que quedo agotado encima de mi, jadeando y suspirando de su tremenda descarga de leche en mi coño, lo sentí temblar mientras me dejaba hasta la ultima gota, mientras yo lo acariciaba por su espalda empapada en sudor, le pase mis manos entre los cabellos por la nuca y le susurré lo rico que me cogia, quedó como desmayado encima de mi, se movió para no dejarme caer todo su peso y me siguió acariciando, me besaba y yo le respondía igual, su verga perdió la erección y al sacármela sentí su leche escurrir en mi vagina por el canal entre mis nalgas hasta llegar a mi culo y a las sabanas de mi cama, yo me moví y quede mas encima de el, lo bese en los labios, le pase mi lengua por el cuello y por el pecho probando el sabor de su sudor, creo que este sabor me calentó de nuevo, seguí por su vientre musculoso y llegue a su flácida verga, cubierta con su leche y mis jugos, sin decirle nada ,me acomode y se la bese primero, luego me la metí en la boca y empecé a succionársela suavecito, su verga pareció cobrar vida, se fue irguiendo nuevamente, metí dos dedos míos en mi ensopada raja y saque parte de sus mecos, le unte la verga y volví a mamársela, lo quería reanimar y lo hice, su verga adquirió de nuevo dureza, me separe de el y lo vi

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con su tronco vibrando de nuevo, me levante y fui al baño y al caminar sentí escurrir su leche entre mis muslos, que delicia, mi idea era otra, pero como no lo esperaba no estaba preparada para lo que seguía, ya en el sanitario me lave muy bien el recto con una jeringuilla de agua que tengo precisamente para tal efecto, repetí la operación varias veces hasta que el agua me salio transparente, no quería que mi cama quedara manchada de mi, me seque cuidadosamente, regrese a la recamara y lo vi

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cómodamente acostado, su verga aun tiesa, me acomode en mi tocador, me maquille para el, me puse mi perfume favorito con olor a flores de vainilla y me vestí con un negligé negro para resaltar el color de mi piel, creo que lo que vio le gusto, al voltear mi rostro se había transformado, mis labios rojos por el labial y mis ojos con sombras me hacían ver como una mujer tremendamente puta, me fui hacia el y así como estaba me subí sobre sus piernas, le tome la verga en mis manos y se la masturbe un rato, luego moviéndome sobre el, de pie en su rostro baje mi coño hasta su boca, yo en cuclillas y el comiéndome la panochita que estaba al alcance de su rostro, de su boca, me levante y empecé a bailar y mover mis nalgas cadenciosamente sobre la cama, estando el debajo de mi el panorama de mi coño y mis nalgas era suyo totalmente, hasta entonces me hablo: ¡ Que rica puta eres Daniela!!!

-Si mi vida, eso soy …una puta…tu puta!!! Fernando hizo el intento por levantarse, pero yo se lo impedí poniéndole mi pie en el rostro, al tiempo que le ordene:-Chupame el pie, soy tu puta, chupame toda!!! El lo hizo y chupo mis dedos, luego me di vuelta y quede de espalda a el así como estaba, entonces me fui agachando mostrándole mi panochita y la raja entre mis nalgas ofreciéndole mi culito: ¡Chupame mas…chupame el coño y el culo…

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es todo tuyo!!!! El se levanto un poco para quedar a mi altura y sentí sus manos atrapando mis nalgas y de inmediato su lengua en mi coño y tratando de entrar en mi ano, que delicia, me separó las nalgas con fuerza y me distendió el ano, sentí su lengua hurgar entre los pliegues de mi culito, me sentí arder, sin dejarlo mas me levante y me baje de la cama, poniéndome a su lado, me acomode como las perras y le dije: Desflórame el culo mi vida!!! Es todo tuyo!!! No se hablo mas, el se levantó y me rodeo, se me quedo viendo un poco, como salvaje me arranco mi bata rompiéndola, yo gemí de este trato, no me importaba que rompiera mi bata, lo que deseaba es que me rompiera por el ano, se ensalivo dos dedos y me unto el fruncido culito, me metió un dedo y suspire, se levanto hacia mi tocador, regreso con algo de crema, me unto y acto seguido me guió su enorme verga ya crecida al máximo, abrió mis nalgas y quedo expuesta la rosita de mi ano, me dirigió su verga, me empujo una vez, me dolió, me empujo mas, su cabeza se baria paso, yo me estaba apretando del esfínter, quería que me doliera y que el sintiera lo estrecha que yo estaba, me empecé a mover d Ela cadera para hacerlo fallar, pero entonces me atrapo de las nalgas y con dos sonoras nalgadas me sentí inflamar: O te quedas quieta puta o te reviento las nalgas a madrazos…! Me dijo amenazante y desesperado…eso es lo que yo quería, escucharlo así, en brama, como fiera, me doblegue y entonces me hizo sentir el rigor de su verga, me acomodo, me soltó dos nalgadas mas, terribles, me dolió todo, me lastimo, y entonces de un solo empujón y aprovechando la lubricación d Ela crema untada en mi ano me la metió toda! Sentí morirme Del dolor tan repentino e intenso, me mordí los labios, y no pude mas y grite! El se movió y me la saco hasta casi la punta, para volver a meterla de un tiron nuevamente, así una y otra vez, me sentí morir del dolor, que bruto, que animal, no es que tuviera yo el culo virgen, la noche anterior el y los otros chico me lo cogieron, o tal vez lo tenia yo adolorido por eso, el caso es que mis ojos se llenaron de lagrimas, me empezó a culear así, de perrito como me tenia, a veces se detenía y me daba sonoras nalgadas que me estremecían del dolor, no lo hacia suave, eran golpes con la palma abierta, yo sentía arder mis nalgas, y mi culo distendido al máximo sufría al recibir integra su verga una y otra y otra vez, machacándome el ano, su verga entraba y salía a su antojo, me daba piquetes despacio y luego me la metía al fondo, me jalaba de la cadera, me abría y distendía mis nalgas, yo no sabia que hacer, si llorar o disfrutar, era un bruto maldito bien hecho, pero me estaba disfrutando, me cogia mas y mas, su verga me hormo el ano y ahora el dolor se hizo placer, que rico me estaba culeando, así es como yo lo deseaba, así me encantaba que me dejaran ardida y adolorida, y el lo estaba haciendo de maravilla, largo rato me tuvo así, una y otra vez me nalgueaba y me hundía hasta el fondo su verga, mi culo ya no pudo y se venció, era solo una funda suave de tejido caliente que contenía con gran trabajo esa enorme y deliciosa verga, las volutas carnosas de mi recto me decían el ardor que me producía la fricción de su verga en mi culo, no aguante mas, me moví como perra frenéticamente saliendo con mis nalgas al encuentro de sus embestidas, entonces el se detuvo y dejo que yo me moviera, solo me tomaba por mis carnosas nalgas y me guayaba, pero yo era quien se movía, así le di el culo nuevamente, no menos de media hora me estuvo culeando, yo no se si me ardía o me mataba, solo me entregaba a ese tipo, entonces me tomo por el cabello y me empezó a dar jalones mientras me hundía su verga con furia, me dolía y al tiempo me gustaba, nunca había yo sentido esto, me jalaba fuerte, mi cabeza iba hacia atrás, mis piernas temblaban, me arqueaba prácticamente con sus tirones en mi pelo, mis piernas no apuntaron mas y se me vencieron, me abr quedando despatarrada como rana, el me fue encima y me culeó con mas furia, yo sollocé del suplicio placentero, que paradoja me estaba culeando y me hacia doler y gozar al mismo tiempo, por fin con una ultima serie de embestidas rápidas y profundas me inundo el culo de su leche, que maravilla y que cogida me había dado, me desensarto, y mi culo me dijo lo adolorido que estaba, me moví y me quede como de lado, lo vi

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Sonreír y venir con su rostro hacia el mío, mis ojitos llorosos le decían lo que me había hecho, pero mi sonrisita de puta le dijo lo que había gozado, nos besamos de nuevo, se levanto para ir al baño y yo quede hecha un guiñapo…casi al salir de la habitación me dijo amenazante…

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-Aun no se acaba esto para ti putita!!!!! Yo me estremecí pues no sabia que se le había ocurrido…