El:G
Ella: E
G[/size][/b]
Allí estaba yo, sentado en las escaleras en espera de aquella mujer. Nos habíamos estado hablando y escribiendo, pero seria esta la primera vez que nos veríamos en persona. Ansiedad, nervios, incertidumbre, eran solo algunos de los sentimientos que me dominaban.
Mi teléfono sonó, era ella, me puse de pie y logre verla a pocos metros. Como ya me había dicho, estaba con un amigo al que salude dando la mano antes de saludarla a ella, tomándome el tiempo necesario para besarla y acariciar disimuladamente su espalda y algo mas, mi pene endureció inmediatamente y me cubrí con mi abrigo, no sin antes hacerle notar lo que me provocaba, sabia que le gustaba provocarme eso.
Habíamos estado esperando una semana, podíamos esperar unos minutos mas, o eso creímos…
Fuimos abrazados hasta un bar, donde tomaríamos algo con su amigo antes de ir a un hotel. Sentado junto a ella de frente a su amigo comencé a acariciar su pierna al tiempo que veíamos la carta. Quería un gin tonic pero no aparecía, ellos propusieron una jarra de gancia con naranja a lo que respondi subiendo mi mano por su pierna, hasta ese caliente y húmedo rincón de su cuerpo que momentos mas tarde me proporcionaría tanto placer:
-lo que yo quiero beber no esta en la carta, por mi esta bien.
No faltaron indirectas de ese estilo durante el poco tiempo que estuvimos ahí.
Finalmente su amigo nos dejo solos y pudimos dejar de lado las indirectas para ir a la habitación
Ella: E
G
Allí estaba yo, sentado en las escaleras en espera de aquella mujer. Nos habíamos estado hablando y escribiendo, pero seria esta la primera vez que nos veríamos en persona. Ansiedad, nervios, incertidumbre, eran solo algunos de los sentimientos que me dominaban.
Mi teléfono sonó, era ella, me puse de pie y logre verla a pocos metros. Como ya me había dicho, estaba con un amigo al que salude dando la mano antes de saludarla a ella, tomándome el tiempo necesario para besarla y acariciar disimuladamente su espalda y algo mas, mi pene endureció inmediatamente y me cubrí con mi abrigo, no sin antes hacerle notar lo que me provocaba, sabia que le gustaba provocarme eso.
Habíamos estado esperando una semana, podíamos esperar unos minutos mas, o eso creímos…
Fuimos abrazados hasta un bar, donde tomaríamos algo con su amigo antes de ir a un hotel. Sentado junto a ella de frente a su amigo comencé a acariciar su pierna al tiempo que veíamos la carta. Quería un gin tonic pero no aparecía, ellos propusieron una jarra de gancia con naranja a lo que respondi subiendo mi mano por su pierna, hasta ese caliente y húmedo rincón de su cuerpo que momentos mas tarde me proporcionaría tanto placer:
-lo que yo quiero beber no esta en la carta, por mi esta bien.
No faltaron indirectas de ese estilo durante el poco tiempo que estuvimos ahí.
Finalmente su amigo nos dejo solos y pudimos dejar de lado las indirectas para ir a la habitación
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