Mi historia con mi cuñado comenzó hace unos años, aunque la verdad es que se remonta a cuando yo tenía 15 años, suspiraba con el día en el que comenzaran a crecer mis pechos y tuviera de una vez a tener cuerpo de mujer. Por aquellos días en mi casa hubo una autentica revolución cuando mi hermana Solana que por aquel entonces tenía 18 años, dijo que tenía novio... para mis padres la verdad fue un trauma que su "niña" fuera con un chico, ella por lo general era obediente y responsable, pero en aquella ocasión Solana estaba dispuesta a todo por seguir con el, por lo que mis padres se que quedar callados.
Lo conocí a los días... se llamaba Rodrigo, mi hermana me lo presentó un día que nos vieron con mis amigas por el parque, la verdad es que me gustó mucho, era un chico encantador, guapo y cuando me dio dos besos y me guiñó el ojo me puse colorada como un tomate. Rodri era un chico de 1 90 grandote, potente, se notaba que pasaba mucho tiempo en el gym, con pelo castaño y con una mirada que te hacía sonrojar, desde el primer momento supe que me iba a caer bien y la verdad no me equivoqué.
Desde aquel día me apegué a ellos, me encantaba ir con ellos a todos los sitios, la verdad es que a Ro no le molestaba y si le molestaba a mi nunca me dió esa impresión, el me trataba como a una niña, se metía conmigo y me hacia rabiar, para mi se convirtió en el hermano que nunca tuve y fue imposible no enamorarme de el como una tonta...
Seguramente era un enamoramiento de niña, el típico enamoramiento de tu profesor, el amigo de tu hermano o cualquier adulto al que admiras... era el típico enamoramiento platónico pero al fin y al cabo me sentía enamorada. La verdad es que nunca hubiera intentado seducirle, mi hermana era lo mas importante para mi en este mundo y valoraba lo que tenía con ella por encima de cualquier otra cosa.
Lo que mas me angustiaba era no poder contarle como me sentía en ese momento a mi hermana... mientras aprovechaba cualquier momento para estar al lado de Rodrigo, nos hacíamos cosquillas, estaba todo el día subida en su cuello y a menudo me hacia rabiar mordisqueando en la nuca produciéndome unos escalofríos maravillosos que yo intentaba disimular.
Mi hermana nunca sospecho nada de lo que podía estar sintiendo por Rodrigo, ella al igual que el, me veía como una niña... realmente era una niña, con 15 años mi cuerpo al contrario que el cuerpo de mis amigas, todavía no se había desarrollado y continuaba siendo mas niña que mujer.
Toda esta situación no paso de largo para la mayoría de mis amigas, que al contrario que mi hermana, veían como se me iluminaban los ojos cuando lo veía y en mas de una ocasión no dudaban en comentarlo..
· Mucho tiempo pasas tu con el novio de tu hermana, jajaja
· Que dices!!! estas loca? Es mi cuñado...
· Ya ya, cosas mas raras se han visto... ademas tiene su morbillo, yo ya me lo montaría con el...jajajajaja
La verdad que hubiera dado lo que fuera por saber que pasaba por la cabeza de Rodrigo, quería saber si solo era cariño lo que sentía hacia mi, ese cariño que se siente con una hermana pequeña, o por lo contrario había algo mas...a pesar de saber que era algo imposible, me resultaba muy difícil dejar de fantasear con todo lo que a él le rodeaba. A menudo intentaba pintarme y ponerme muy sexy con el único objetivo de que el se fijara en mi, pero la verdad es que por mucho que lo intentaba, su mirada nunca dibujaba otra sonrisa que no fuera de amistad y cariño, seguramente porque mi cuerpo todavía no se había formado y había muy poco en lo que fijarse... eso me frustraba bastante.
Hubo un día que todo lo que aun me quedaba de niña quedó atrás... yo tenía 15 años, uno de nuestros profesores se había puesto enfermo y volví a casa una hora antes del instituto, me puse cómoda y a pesar de ser un maravilloso día de primavera, empecé a estudiar ya que los exámenes finales estaban a la vuelta de la esquina. No llevaba ni 10 minutos cuando escuché que alguien abría la puerta de casa, las voces eran de Rodrigo y Solana.. dí un salto de mi silla y corrí a esconderme dentro del armario de mi habitación, mi intención era vengarme de Rodrigo por los sustos que a menudo me daba, tenia por costumbre esconderse y sorprenderme con algún sustito y casi me hacían salirse el corazón de su sitio, esa iba a ser mi oportunidad...
Me escondí en el armario de mi habitación, a la espera de que pasaran por ahí y poderle dar el susto de su vida, pero la verdad es que nadie pasó, durante varios minutos esperé y esperé, hasta que por fin escuché unas risas seguidas de silencios al segundo los vi entrar en la habitación de Solana, esta frente a la mía y desde mi armario entreabierto, pude ver como los dos estaban de pié frente a su cama, los dos besándose en ropa interior, Rodrigo soltaba el sujetador mientras los pechos de mi hermana quedaban desnudos frente a el,,, dios mio!!! y yo escondida en el armario!!
No podía salir... ahora era imposible, mientras permanecía observando el espectáculo, Rodrigo sujetaba los bonitos y grandes pechos de mi hermana con sus manos, mientras introducía sus pezones en la boca mordisqueando y lamiendo una y otra vez con sus labios, Solana se arqueaba hacia atrás dejándose hacer mientras cerraba los ojos disfrutando de cada mamada. Mis ojos se habían clavado en aquella escena, realmente Solana era preciosa, tenia unos pechos firmes y grandes, su piel era delicada y sus curvas eran muy bonitas, sus inmensos ojos verdes eran alucinantes y no me extrañaba lo mas mínimo que Rodrigo no se fijara para nada en mi, teniendo a Solana como su novia.
Podía escuchar los latidos de mi corazón que por aquel entonces ya latía con fuerza, tanta fuerza que pensé que podrían escucharlo desde la otra habitación
Mi respiración comenzó a acelerarse al ritmo de mi corazón cuando mi hermana se agachó y a la vez que lo hacía bajaba sus calzoncillos e introducía su pija en la boca, era la primera vez que lo veía, era grande, duro y permanecía en erección mirando al techo, recuerdo que lo primero que pensé fue que -como era posible que algo así pudiera entrar en un lugar tan estrecho como mi... cuando Solana lo introdujo en su boca, Rodrigo lanzó un suspiro ahogado y sus manos se aferraron a la cabeza de mi hermana, guiándola mientras ella lo saboreaba y lo recorría con su lengua , los sujetaba con la mano derecha mientras su lengua lo recorría acariciando el glande muy despacio, de una forma muy dulce y tras unos instantes lo introducía muy despacio en la boca y comenzaba a aspirar con fuerza...
Sentía como la excitación se apoderaba de mi cuerpo, que me estaba pasando? No podía dejar de mirarlos... estaban tumbados en la cama e Rodrigo hundía su lengua en el conchita de mi hermana, Solana gemía una y otra vez con la respiración entrecortada... mientras, sus manos se aferraban con fuerza las sábanas, los labios de Rodrigo se hundían en lo mas intimo de su ser, el rostro de mi hermana era la viva imagen de la lujuria, sus ojos inyectados por el deseo la hacían muy diferente a la Solana que yo conocía, esa chica comedida y tierna que nunca había roto un plato.
No pude evitarlo... mis dedos comenzaron a rozar muy despacio mi húmedo conchita, era la primera vez que lo hacía y sentí un gusto maravilloso, nadie me había enseñado pero actué casi por instinto, mis dedos anular y corazón entraron por debajo del pantalón y comenzaron a rozar el clítoris, lo sentía hinchado y cada roce me hacía estremecer de placer, sentía mis pequeñas tetitas tersas y con la otra mano comencé a pellizcar los duros pezones.
Mientras en la habitación de al lado a escasos 5 metros, Rodrigo esta apunto de penetrar a mi hermana, ella acariciaba muy dulcemente su espalda mientras abría todo lo que le era posible las piernas, sus manos se aferraban a su culo atrayendo hacia ella, haciéndole saber con sus movimientos de caderas que estaba preparada para recibirlo, el roza su coñito con su larga y potente pija, se resiste a penetrarla haciéndola sufrir, Solana suplica....
· Te deseo... lo necesito, no puedo mas. Mi amor entra en mi...
Sus palabras son una pura súplica, ella se encuentra con las piernas abiertas con las rodillas encogidas mientras....en ese instante, con una fuerte embestida Rodrigo la penetra con fuerza, Solana lanza un fuerte gemido y el comienza a moverse muy despacio dentro de ella. Observo como los músculos de su culo se tensan una y otra vez con cada movimiento, solana levanta los pies y los entrelaza al rededor de su cintura facilitándole los movimientos, sus manos lo rozan dulcemente. Me excita muchísimo mirar como mi hermana respira de forma entrecortada mientras lo recibe... mi dedo entra en mi, siento la presión de las paredes de mi vagina virgen presionando mi dedo corazón, lo introduzco con miedo, pero entra sin problemas... mientras en la otra habitación los gemidos de Solana se han tornado a pequeños gritos ahogados,.
Las manos de Solana se aferran con fuerza a las sábanas mientras comienza a moverse con pequeñas sacudidas, observo su rostro sobre la almohada disfrutando plenamente el momento, introduciendo los dedos de Rodrigo en su boca mientras, los chupeteaba sin parar...
· Sigue mi amor, sigue no pares, me viene... ya ya... ahh ahhh ahhhhh
Sus caderas suben y bajan intentando aplacar el deseo, sus manos arañan su espalda y tu cabeza comienza a dar golpes a un lado y a otro de la almohada mientras, su boca entreabierta no dejaba de gemir,
Estaba en el interior del armario, respirando con dificultad, había tenido mi primer orgasmo, era la primera vez que me masturbaba y lo había hecho mientras veía a mi hermana y mi cuñado haciendo el amor, no era lo que yo hubiera imaginado pero con el tiempo pude comprobar que eso no era lo mas raro que me iba a pasar...
Aquel día quedó grabado en mi memoria , con el tiempo me gusto eso de masturbarme, era una experiencia muy excitante y siempre me gustaba recordar en mis sueños mas húmedos las imágenes que había vivido en aquella habitación...me excitaba cuando su duro pene entraba una y otra vez penetrándola, me gustaba recordar como Solana se estremecía y se aferraba a él... todos esos recuerdos me acompañaban en mis momentos húmedos y solitarios...
Tres años mas tarde y cuando yo ya tenía los 18, hubo una gran polémica en casa, mi hermana estaba empeñada en ir de vacaciones con Rodrigo, pero mis padres no les dejaban, de siempre han sido bastante rectos con todo lo que a los horarios y a los viajes con chicos se refiere, así que la única solución para que pudieran ir era que fuera yo con ellos de "carabina" la verdad es que yo estaba encantada, no solo me iba a ir una semana de vacaciones sino que también iba a poder disfrutar de la compañía de Rodrigo a mi manera...
Me compre un bikini de cordones naranja y negro que me quedaba perfecto... mientras me cambiaba en el probador de la tienda, observaba en el espejo como mi cuerpo había cambiado estos últimos años... ya no era la chica delgaducha y plana de hace dos años, ahora mis pechos habían crecido, no eran tan grandes como los de Solana pero eran bonitos y firmes con una talla 90 , tenían unos pezones rosados y pequeños que tendían a endurecerse con el frío y eso me hacía enrojecer en mas de una ocasión, soy delgada y mis caderas son ligeramente anchas lo suficiente para desatar las mas bajas pasiones de los compañeros de mi clase, durante el último año varios chicos en el instituto habían intentado tener coger conmigo, La verdad es que me había ganado fama de estrecha en el instituto, cosa que a mi me importaba un comino.
La fecha de salida era el 15 de Agosto, salimos para Lobos con el Renault Clio de mi cuñado, Rodrigo había comprado una tienda de campaña con dos compartimentos, y en poco mas de 2 horas nos plantamos allí... el problema era encontrar camping con plazas libres, la mayoría estaban repletos en pleno mes de Agosto, tras varios intentos fallidos, encontramos plaza , era un camping bastante normal.
Ese primer día en el camping después de cenar, nos marchamos a la tienda pronto, la verdad es que el lugar donde estaba la tienda era bastante oscuro y a mi me daba bastante miedo eso de quedarme sola en una de las habitaciones... le dije a Sol que me daba miedo eso de dormir sola, ella lo entendió y se lo comentó a Rodrigo, cuando se lo dijo su cara era un poema, pero el pobre no pudo decir otra cosa que si, así que accedió a que durmiera en la misma habitación. Entramos primero nosotras a ponernos los pijamas mientras el quedo fuera esperando con cara de resignado, nos pusimos el pijama y tras un par de minutos invitamos a Rodrigo a que entrara... su mirada volvió a quedar fijada durante un par de segundos en mi por segunda vez en el mismo día, mi pijama era ajustado, me di cuenta que mis pequeños pezones estaban duros y se habían marcado muy claramente en la camiseta, no pude evitar ruborizarme y cambiar de posición de forma disimulada, me había excitado sentir como la mirada de mi cuñado se había vuelto lasciva por un segundo.
Me costó dormir, estábamos sobre unas esterillas pero el suelo estaba bastante duro y no estaba acostumbrada a nada que no fuera mi cama, estuvimos un rato de charla y enredando con las linternas, disfrutábamos de esos primeros momentos fuera de casa y hacíamos planes para el otro día, después de estar mas de una hora de cháchara, caí dormida... a eso de las 2 me desperté al sentir movimiento a mi lado, por lo general tengo un sueño muy ligero y me despierto con una mosca que pase, estaba oscuro y tarde un poco a que mis pupilas se acostumbraran a la oscuridad, sentía como alguien se movía a mi lado, justo donde estaba mi hermana, cuando pude vislumbrar a través de la oscuridad vi a Solana como se movía con ligeros movimientos acompasados mientras Rodrigo introducía sus manos por dentro de su saco... recorría con sus dedos su coñito, mientras ella subía y bajaba las caderas al compás de sus caricias, ella intentaba contener la respiración con gemidos ahogados, sus hermosos pechos se hinchaban y deshinchaban una y otra vez mientras el saco solo alcanzaba a cubrir parte de las caderas.
Mi corazón comenzó a latir con fuerza a la vista de aquella escena, los miraba extasiada sin que ellos se percataran de nada, no me atrevía a mover ni un solo músculo de mi cuerpo, en pocos minutos mi boca se había resecado por las excitación, sentía mi sexo húmedo y cálido, necesitaba aplacar todo el fuego que me estaba quemando por dentro, pero... no podía, no me atrevía a moverme... si en esos momentos lo hacía, ellos se darían de cuenta, mientras... a escasos centímetros,
No había pasado ni 10 segundos cuando Solana se recuesta sobre Rodrigo y levantando el saco sujeta su polla con la mano un la introduce en su boca, estaba completamente erguida e hinchada, podían apreciarse las venas sobresaliendo y el capullo rojizo en su plena madurez, Solana lo introducía en su boca a la vez que lo sujetaba con la mano, parecía una autentica experta , me fascinaba ver a aquella chica dulce y delicada comportándose como una autentica profesional del sexo, su lengua acariciaba el glande y poco a poco la introducía en la boca aspirándola y haciéndola desaparecer una y otra vez. A Rodrigo le costaba muchísimo no gemir, respiraba aceleradamente mientras mi hermana no dejaba de comérsela...
En ese instante no puedo evitar mover mi mano hacia el interior de mis muslos, me atreví porque ellos estaban demasiado entusiasmados... mis dedos se colaron entre mis braguitas y acarician mi húmedo coñito, un escalofrío recorre mi espalda al poder sentir la dulce presión de mis dedos en el, se empapan con los cálidos fluidos mientras rozan mi hinchado clítoris. Intento contener la respiración, intento no moverme, solo mis dedos en el interior del saco acarician mi sexo una y otra vez, mientras... observo.
Rodrigo comienza a gemir y a ser arrastrado por el clímax, mi hermana no deja de introducir su pene en la boca y ahora lo mueve arriba y abajo con su mano mientras, saborea el semen que sale a pequeños chorros....ver a Rodrigo me hace enloquecer, la excitación recorre mi cuerpo en pequeñas oleadas y comienzo a convulsionar con pequeños espasmos, intentando contener todas las ganas de gritar y de moverme, tras unos segundos todo ha pasado, ellos hablan entre risas por lo bajo, Solana le dice que es una locura lo que acaban de hacer, pero no saben toda la verdad...
Tras ese primer día vinieron otros, cada noche practicaban un nuevo juego de tocamientos y caricias, cada día un poco mas atrevido, cada día un poco mas lejos... mientras, permanecía allí mirando en la oscuridad, jugueteando con mi cuerpo y deseando en lo mas hondo de mi ser yo la que estuviera ahí disfrutando de Rodrigo.
Era el penúltimo día de las vacaciones, era lunes y decidimos ir a mas hacia la laguna ya que sería seguramente el día que menos gente habría, hacía calor me puse una camiseta de tirantes y un pantalón corto, a a mucho eso de montarse en las atracciones así que mientras ella veía la actuación de los loros yo me montaba con Rodrigo en el tutuki splast. Dio la casualidad de que cuando nosotros subíamos, una barca caía y golpeo el agua llegando hasta nosotros una ola que nos empapó por completo, la forma de mis pechitos y mis pezones se distinguían perfectamente a través de la empapada camiseta, Rodrigo no pudo evitar clavar la mirada mientras la lujuria comenzaba a llenar sus ojos...
Cuando nos encontramos a Solana y me vio así.... me dijo que parecía tonta, que a quien se le ocurría montarse ahí con una camiseta blanca, que ahora se me marcaba todo... Me daba rabia que fuera precisamente ella, la que me criticara por eso, la dulce Solana que nunca había roto un plato y a la que cada noche la escuchaba gemir como una autentica puta, mientras yo me hacía la dormida, la la verdad es que me daba muchísima rabia que fuera precisamente ella la que se metiera conmigo por lo de la camiseta, me daban ganas de decirle cuatro cosas.... pero no dije nada y volvimos al camping enfadados y después de cenar me marche antes a la tienda.
La verdad es que no se porque estaba mas enfadada si por lo que había pasado o por sentirme muy frustrada de no poder tener a Rodrigo, lo deseaba mas de lo que nunca había deseado a nadie y toda esa situación había llegado a desquiciarme.
La verdad es que me dio un poco de miedo eso de ir a la tienda sola, pero después de haberme marchado enfadada mi orgullo me impedía volver. Una vez en la tienda me puse el pijama y me metí en el saco, en vez de acostarme en mi sitio, me coloqué al otro extremo de donde habitualmente dormía, pasaron los minutos y al poco llegaron ellos, Rodrigo se tumbó en medio de las dos y yo como siempre me hice la dormida, los escuchaba que susurraban algo, Solana le decía que no tenia ganas esa noche y tras unos instantes de charla todos quedamos dormidos.
Estaba cansada y esa noche también quede dormida enseguida, lo hice durante dos horas y a eso de la 1 de la madrugada me desperté sobresaltada...
casi por instinto gire la cabeza hacia el lugar donde se encontraba Rodrigo, en un primer instante apenas podía distinguir a verlo, pero pasados unos segundos mis pupilas fueron aclarándose y pude observar la escena... Rodrigo se estaba masturbando, su saco subía y bajaba a gran velocidad mientras permanecía con los ojos cerrados respirando con gran dificultad, me quede observando su rostro extasiada, lo miraba con los ojos abiertos como platos sin poder retirar mi mirada de aquel rostro embriagado por el placer, permanecía mirando a la vez que soñaba con sus caricias, imaginaba que estaba sobre mi penetrándome, verlo masturbarse me estaba excitando muchísimo...
Cada vez el interior del saco se movía mas rápido, hasta que que en un instante y sin que yo lo esperara el abrió los ojos... yo los cerré tan rápido como pude y permanecí con los ojos cerrados y el corazón latiendo con tanta fuerza que pensé que llegaría a oírlo... había una calma tensa, durante unos segundos permanecí con los ojos cerrados pero en mi interior sabia que me había visto y tras un minuto volví a abrirlos, Rodrigo me miraba sin decir ni una sola palabra, mis ojos se clavaron en los suyos y así permanecimos durante mucho tiempo, de repente se acerco un poco mas a mi nos encontrábamos a escasos 30cm, su mano se acerco a mi y se introdujo por el interior de la camiseta de mi pijama.
El primer roce me hizo estremecer y sentí como toda la piel se erizada con ese primer contacto, mis pechitos se endurecieron y un suspiro ahogado salio de lo mas profundo de mi... sentí el tacto suave de sus manos recorriendo poco a poco cada rincón de mi cuerpo, cerré los ojos mientras las yemas de sus dedos me rozaban subiendo , por el estomago y llegando poco después a mis hinchados pechos... bufff quería morirme, mi respiración cada vez era mas acelerada, me resultaba trabajo no gemir como una loca, comencé a sentir como si sexo comenzaba a humedecerse mas y mas...abrí los ojos por un instante y pude ver su rostro, era la viva imagen del deseo, sentía como presionaba ligeramente mis pechos, los acariciaba, pellizcaba mis pezones y rozaba las aureolas, en mi interior deseaba que saltara sobre mi y que me penetrara una y otra vez, necesitaba sentirlo en mi, sentir como su polla se sumergía una y otra vez en mi coñito virgen, pero sabía que a pesar de estar completamente fuera de si no podíamos...
Tras unos minutos su mano comenzó a bajar, deseaba que llegara a mi coñito, necesitaba sentir sus caricias, necesitaba saber como era los dedos de un hombre jugando con el por vez primera... todo mi cuerpo se estremeció cuando rozo mi clítoris, un espasmo de placer comenzó a recorrerme, no pude evitar seguir a sus dedos con movimientos de mis caderas. Por un instante paró y su dedo corazón comenzó a introducirse en mi vagina, al principio lancé un gemido, mas de impresión que de dolor, lo sentía entrar muy despacio mientras las paredes de mi vagina presionaban su dedo con fuerza.
Estaba chorreando, casi me sentía avergonzada de sentirme así, sus dedos empapados con mis fluidos resbalaban una y otra vez en mi, jugaban con mis labios vaginales y presionaban sobre mi clítoris... no podía dejar de abrir las caderas mientras mi mano se posa sobre la suya a la vez que presionaba intentando aplacar el deseo que me comía por dentro.
Tras unos instantes mi respiración se torno en gemidos, gemidos sordos que a duras penas podía reprimir, cerré los ojos y comencé dejarme llevar por un maravilloso orgasmo, comenzó a recorrer mi cuerpo con pequeños espasmos que fueron en aumento por segundos, hasta que perdí por completo el control. Cuando volví a la realidad, mi corazón seguía latiendo con fuerza abrí los ojos y lo vi mirándome, me sentí avergonzada y no pude decir nada, tras unos instantes me volví sobre mi misma y a pesar de no pegar ojo en toda la noche, permanecí inmóvil recordando lo que había sucedido.
El día siguiente era el último, yo ya estaba despierta cuando Solana se levantó, se que Rodrigo no había dormido mucho, lo había escuchado dar vueltas una y otra vez a lo largo de la noche, la verdad es que me hubiera gustado saber que le pasaba por la cabeza en esos instantes... quería saber si se arrepentía de lo que había pasado, ojala hubiera cruzado unas palabras con el la pasada noche... pero la verdad es que me encontraba demasiado avergonzada para poder hablar.
Solana se levantó y marcho a los baños a darse una ducha, yo permanecí inmóvil haciéndome la dormida dentro de mi saco, sabía que estábamos solos los dos pero no me atrevía a mirar, mi cuerpo temblaba solo con la idea de que el podía estar pensando lo mismo que yo. No habían trascurrido ni dos minutos desde que mi hermana salió por la puerta, cuando pude sentir como Rodrigo se movía, el corazón comenzó a latir con fuerza de nuevo al sentir que estaba sobre mi, apartó el saco de dormir y dejó mi cuerpo al descubierto... no dije ni una sola palabra cuando bajó mis braguitas de encaje rosas y las dejó a medio quitar sobre las rodillas, al segundo comencé a sentir como su lengua se hundía en mi culito y comenzaba a recorrerlo, era una sensación nueva y maravillosa enseguida mis caderas comenzaron a acompañarlo con leves movimientos acompasados, muslos comenzaron a abrirse facilitando el trabajo de su cálida lengua. Poco a poco comenzó a recorrerme por completo, moviéndose desde mi ano, recorriendo mis húmedos labios y terminando en el clítoris que por aquel momento ya se encontraba hinchado y con la sensibilidad a flor de piel.
Levanté las caderas facilitando sus movimientos y colocando el culito en pompa, mientras su maravillosa lengua no dejaba de recorrer hasta el ultimo de los rincones mas ocultos de mi sexo, mi respiración que hasta entonces había sido ahogada y silenciosa, se había convertido en gemidos de autentico placer, no podía pensar en otra cosa mas que en lo que en ese instante estaba sintiendo, me resultaba imposible dejar de mover las caderas al compás de aquellas lamidas...
Me encontraba apunto de caramelo cuando sus labios abandonaron mi coñito, sentí su cuerpo sobre mi mientras mientras sus suaves manos se colaban por el interior de mi pijama y llegaban hasta mis pechos, me encantó volver a sentir como sus manos los cubrían y acariciaban muy despacio mientras pellizcaba mis duros pezones. En ese instante mi boca habló, fue una autentica súplica...
· Necesito sentirte... hazme tuya por favor...
El acercó a mi coñito su hinchado pene, lo rozaba y se impregnaba con mis fluidos, lo rozaba con su punta una y otra vez, necesitaba sentir como me llenaba por dentro, necesitaba sentir la presión de su polla en mi, necesitaba sentir como por vez primera un hombre estaba dentro de mi... como si estuviera leyendo mi mente, la punta de su pene se posó en mi vagina y comenzó a presionar, al principio la sentí como entraba la punta solamente, pero poco a poco fue entrando... mi himen iba dejando de ofrecer resistencia a la vez que un dolor agudo me hacía estremecer... de pronto una fuerte sacudida hizo que todo su sexo entrara en mi por completo, mis manos se aferraron con fuerza al saco de dormir mientras, un grito de dolor se escuchó en la estancia al sentir como mi inocencia quedaba desgarrada por completo.
Rodrigo se detuvo, se detuvo mientras su polla estaba dentro de mi, sentia como me llenaba por completo y tras unos instantes inmóvil comencé a sentir el movimiento, comencé a sentir como la presión de su polla rozaba una y otra vez las paredes de mi vagina. Casi sin darme cuenta el dolor ha dejado paso al placer, sus manos sujetan mis caderas firmemente mientras sus embestidas vuelven a hacerme gemir de placer...
· No pares, por favor no pares...
· Te siento, no pares siguee, siguee
· ahhh ahhh ahhhh
En en interior de la tienda los gemidos de ambos se mezclan con el ruido de su cuerpo chocando contra mi culo, siento como todo su cuerpo se tensa, siento sus manos aferrándose a mi con fuerza, mientras Rodrigo lanza un grito de placer tras varias fuertes embestidas, su cálido semen me llena por completo... es una sensación maravillosa, una sensación que me atrapa y me hace alcanzar un maravilloso orgasmo, mientras Rodrigo sigue entrando en mi una y otra vez, todo mi cuerpo comienza a convulsionar mientras mi cabeza se apoya sobre la almohada y mis manos se aferran fuertemente al saco, durante unos segundos todo mi cuerpo me abandona, durante unos instantes el placer ha sido mi única acompañante...
Durante un minuto permanece dentro de mi inmóvil, sigue sobre mi mientras yo sigo tumbada boca a bajo, sus manos se han posado sobre las mías y puedo sentir como su corazón late con fuerza sobre mi espalda... es en ese instante cuando tras nuestra se escucha como alguien llora de forma ahogada... es Solana!!!
CONTINUARA !!!
QUE PASARA CON SOLANA ???
RODRIGO DEJA A SOLANA, POR MICOL ???
LA LLEGADA DE UN NUEVO PERSONAJE, CAMBIARA EL SENTIDO DE LA HISTORIA,,,
A ESPERAR !!!
Lo conocí a los días... se llamaba Rodrigo, mi hermana me lo presentó un día que nos vieron con mis amigas por el parque, la verdad es que me gustó mucho, era un chico encantador, guapo y cuando me dio dos besos y me guiñó el ojo me puse colorada como un tomate. Rodri era un chico de 1 90 grandote, potente, se notaba que pasaba mucho tiempo en el gym, con pelo castaño y con una mirada que te hacía sonrojar, desde el primer momento supe que me iba a caer bien y la verdad no me equivoqué.
Desde aquel día me apegué a ellos, me encantaba ir con ellos a todos los sitios, la verdad es que a Ro no le molestaba y si le molestaba a mi nunca me dió esa impresión, el me trataba como a una niña, se metía conmigo y me hacia rabiar, para mi se convirtió en el hermano que nunca tuve y fue imposible no enamorarme de el como una tonta...
Seguramente era un enamoramiento de niña, el típico enamoramiento de tu profesor, el amigo de tu hermano o cualquier adulto al que admiras... era el típico enamoramiento platónico pero al fin y al cabo me sentía enamorada. La verdad es que nunca hubiera intentado seducirle, mi hermana era lo mas importante para mi en este mundo y valoraba lo que tenía con ella por encima de cualquier otra cosa.
Lo que mas me angustiaba era no poder contarle como me sentía en ese momento a mi hermana... mientras aprovechaba cualquier momento para estar al lado de Rodrigo, nos hacíamos cosquillas, estaba todo el día subida en su cuello y a menudo me hacia rabiar mordisqueando en la nuca produciéndome unos escalofríos maravillosos que yo intentaba disimular.
Mi hermana nunca sospecho nada de lo que podía estar sintiendo por Rodrigo, ella al igual que el, me veía como una niña... realmente era una niña, con 15 años mi cuerpo al contrario que el cuerpo de mis amigas, todavía no se había desarrollado y continuaba siendo mas niña que mujer.
Toda esta situación no paso de largo para la mayoría de mis amigas, que al contrario que mi hermana, veían como se me iluminaban los ojos cuando lo veía y en mas de una ocasión no dudaban en comentarlo..
· Mucho tiempo pasas tu con el novio de tu hermana, jajaja
· Que dices!!! estas loca? Es mi cuñado...
· Ya ya, cosas mas raras se han visto... ademas tiene su morbillo, yo ya me lo montaría con el...jajajajaja
La verdad que hubiera dado lo que fuera por saber que pasaba por la cabeza de Rodrigo, quería saber si solo era cariño lo que sentía hacia mi, ese cariño que se siente con una hermana pequeña, o por lo contrario había algo mas...a pesar de saber que era algo imposible, me resultaba muy difícil dejar de fantasear con todo lo que a él le rodeaba. A menudo intentaba pintarme y ponerme muy sexy con el único objetivo de que el se fijara en mi, pero la verdad es que por mucho que lo intentaba, su mirada nunca dibujaba otra sonrisa que no fuera de amistad y cariño, seguramente porque mi cuerpo todavía no se había formado y había muy poco en lo que fijarse... eso me frustraba bastante.
Hubo un día que todo lo que aun me quedaba de niña quedó atrás... yo tenía 15 años, uno de nuestros profesores se había puesto enfermo y volví a casa una hora antes del instituto, me puse cómoda y a pesar de ser un maravilloso día de primavera, empecé a estudiar ya que los exámenes finales estaban a la vuelta de la esquina. No llevaba ni 10 minutos cuando escuché que alguien abría la puerta de casa, las voces eran de Rodrigo y Solana.. dí un salto de mi silla y corrí a esconderme dentro del armario de mi habitación, mi intención era vengarme de Rodrigo por los sustos que a menudo me daba, tenia por costumbre esconderse y sorprenderme con algún sustito y casi me hacían salirse el corazón de su sitio, esa iba a ser mi oportunidad...
Me escondí en el armario de mi habitación, a la espera de que pasaran por ahí y poderle dar el susto de su vida, pero la verdad es que nadie pasó, durante varios minutos esperé y esperé, hasta que por fin escuché unas risas seguidas de silencios al segundo los vi entrar en la habitación de Solana, esta frente a la mía y desde mi armario entreabierto, pude ver como los dos estaban de pié frente a su cama, los dos besándose en ropa interior, Rodrigo soltaba el sujetador mientras los pechos de mi hermana quedaban desnudos frente a el,,, dios mio!!! y yo escondida en el armario!!
No podía salir... ahora era imposible, mientras permanecía observando el espectáculo, Rodrigo sujetaba los bonitos y grandes pechos de mi hermana con sus manos, mientras introducía sus pezones en la boca mordisqueando y lamiendo una y otra vez con sus labios, Solana se arqueaba hacia atrás dejándose hacer mientras cerraba los ojos disfrutando de cada mamada. Mis ojos se habían clavado en aquella escena, realmente Solana era preciosa, tenia unos pechos firmes y grandes, su piel era delicada y sus curvas eran muy bonitas, sus inmensos ojos verdes eran alucinantes y no me extrañaba lo mas mínimo que Rodrigo no se fijara para nada en mi, teniendo a Solana como su novia.
Podía escuchar los latidos de mi corazón que por aquel entonces ya latía con fuerza, tanta fuerza que pensé que podrían escucharlo desde la otra habitación
Mi respiración comenzó a acelerarse al ritmo de mi corazón cuando mi hermana se agachó y a la vez que lo hacía bajaba sus calzoncillos e introducía su pija en la boca, era la primera vez que lo veía, era grande, duro y permanecía en erección mirando al techo, recuerdo que lo primero que pensé fue que -como era posible que algo así pudiera entrar en un lugar tan estrecho como mi... cuando Solana lo introdujo en su boca, Rodrigo lanzó un suspiro ahogado y sus manos se aferraron a la cabeza de mi hermana, guiándola mientras ella lo saboreaba y lo recorría con su lengua , los sujetaba con la mano derecha mientras su lengua lo recorría acariciando el glande muy despacio, de una forma muy dulce y tras unos instantes lo introducía muy despacio en la boca y comenzaba a aspirar con fuerza...
Sentía como la excitación se apoderaba de mi cuerpo, que me estaba pasando? No podía dejar de mirarlos... estaban tumbados en la cama e Rodrigo hundía su lengua en el conchita de mi hermana, Solana gemía una y otra vez con la respiración entrecortada... mientras, sus manos se aferraban con fuerza las sábanas, los labios de Rodrigo se hundían en lo mas intimo de su ser, el rostro de mi hermana era la viva imagen de la lujuria, sus ojos inyectados por el deseo la hacían muy diferente a la Solana que yo conocía, esa chica comedida y tierna que nunca había roto un plato.
No pude evitarlo... mis dedos comenzaron a rozar muy despacio mi húmedo conchita, era la primera vez que lo hacía y sentí un gusto maravilloso, nadie me había enseñado pero actué casi por instinto, mis dedos anular y corazón entraron por debajo del pantalón y comenzaron a rozar el clítoris, lo sentía hinchado y cada roce me hacía estremecer de placer, sentía mis pequeñas tetitas tersas y con la otra mano comencé a pellizcar los duros pezones.
Mientras en la habitación de al lado a escasos 5 metros, Rodrigo esta apunto de penetrar a mi hermana, ella acariciaba muy dulcemente su espalda mientras abría todo lo que le era posible las piernas, sus manos se aferraban a su culo atrayendo hacia ella, haciéndole saber con sus movimientos de caderas que estaba preparada para recibirlo, el roza su coñito con su larga y potente pija, se resiste a penetrarla haciéndola sufrir, Solana suplica....
· Te deseo... lo necesito, no puedo mas. Mi amor entra en mi...
Sus palabras son una pura súplica, ella se encuentra con las piernas abiertas con las rodillas encogidas mientras....en ese instante, con una fuerte embestida Rodrigo la penetra con fuerza, Solana lanza un fuerte gemido y el comienza a moverse muy despacio dentro de ella. Observo como los músculos de su culo se tensan una y otra vez con cada movimiento, solana levanta los pies y los entrelaza al rededor de su cintura facilitándole los movimientos, sus manos lo rozan dulcemente. Me excita muchísimo mirar como mi hermana respira de forma entrecortada mientras lo recibe... mi dedo entra en mi, siento la presión de las paredes de mi vagina virgen presionando mi dedo corazón, lo introduzco con miedo, pero entra sin problemas... mientras en la otra habitación los gemidos de Solana se han tornado a pequeños gritos ahogados,.
Las manos de Solana se aferran con fuerza a las sábanas mientras comienza a moverse con pequeñas sacudidas, observo su rostro sobre la almohada disfrutando plenamente el momento, introduciendo los dedos de Rodrigo en su boca mientras, los chupeteaba sin parar...
· Sigue mi amor, sigue no pares, me viene... ya ya... ahh ahhh ahhhhh
Sus caderas suben y bajan intentando aplacar el deseo, sus manos arañan su espalda y tu cabeza comienza a dar golpes a un lado y a otro de la almohada mientras, su boca entreabierta no dejaba de gemir,
Estaba en el interior del armario, respirando con dificultad, había tenido mi primer orgasmo, era la primera vez que me masturbaba y lo había hecho mientras veía a mi hermana y mi cuñado haciendo el amor, no era lo que yo hubiera imaginado pero con el tiempo pude comprobar que eso no era lo mas raro que me iba a pasar...
Aquel día quedó grabado en mi memoria , con el tiempo me gusto eso de masturbarme, era una experiencia muy excitante y siempre me gustaba recordar en mis sueños mas húmedos las imágenes que había vivido en aquella habitación...me excitaba cuando su duro pene entraba una y otra vez penetrándola, me gustaba recordar como Solana se estremecía y se aferraba a él... todos esos recuerdos me acompañaban en mis momentos húmedos y solitarios...
Tres años mas tarde y cuando yo ya tenía los 18, hubo una gran polémica en casa, mi hermana estaba empeñada en ir de vacaciones con Rodrigo, pero mis padres no les dejaban, de siempre han sido bastante rectos con todo lo que a los horarios y a los viajes con chicos se refiere, así que la única solución para que pudieran ir era que fuera yo con ellos de "carabina" la verdad es que yo estaba encantada, no solo me iba a ir una semana de vacaciones sino que también iba a poder disfrutar de la compañía de Rodrigo a mi manera...
Me compre un bikini de cordones naranja y negro que me quedaba perfecto... mientras me cambiaba en el probador de la tienda, observaba en el espejo como mi cuerpo había cambiado estos últimos años... ya no era la chica delgaducha y plana de hace dos años, ahora mis pechos habían crecido, no eran tan grandes como los de Solana pero eran bonitos y firmes con una talla 90 , tenían unos pezones rosados y pequeños que tendían a endurecerse con el frío y eso me hacía enrojecer en mas de una ocasión, soy delgada y mis caderas son ligeramente anchas lo suficiente para desatar las mas bajas pasiones de los compañeros de mi clase, durante el último año varios chicos en el instituto habían intentado tener coger conmigo, La verdad es que me había ganado fama de estrecha en el instituto, cosa que a mi me importaba un comino.
La fecha de salida era el 15 de Agosto, salimos para Lobos con el Renault Clio de mi cuñado, Rodrigo había comprado una tienda de campaña con dos compartimentos, y en poco mas de 2 horas nos plantamos allí... el problema era encontrar camping con plazas libres, la mayoría estaban repletos en pleno mes de Agosto, tras varios intentos fallidos, encontramos plaza , era un camping bastante normal.
Ese primer día en el camping después de cenar, nos marchamos a la tienda pronto, la verdad es que el lugar donde estaba la tienda era bastante oscuro y a mi me daba bastante miedo eso de quedarme sola en una de las habitaciones... le dije a Sol que me daba miedo eso de dormir sola, ella lo entendió y se lo comentó a Rodrigo, cuando se lo dijo su cara era un poema, pero el pobre no pudo decir otra cosa que si, así que accedió a que durmiera en la misma habitación. Entramos primero nosotras a ponernos los pijamas mientras el quedo fuera esperando con cara de resignado, nos pusimos el pijama y tras un par de minutos invitamos a Rodrigo a que entrara... su mirada volvió a quedar fijada durante un par de segundos en mi por segunda vez en el mismo día, mi pijama era ajustado, me di cuenta que mis pequeños pezones estaban duros y se habían marcado muy claramente en la camiseta, no pude evitar ruborizarme y cambiar de posición de forma disimulada, me había excitado sentir como la mirada de mi cuñado se había vuelto lasciva por un segundo.
Me costó dormir, estábamos sobre unas esterillas pero el suelo estaba bastante duro y no estaba acostumbrada a nada que no fuera mi cama, estuvimos un rato de charla y enredando con las linternas, disfrutábamos de esos primeros momentos fuera de casa y hacíamos planes para el otro día, después de estar mas de una hora de cháchara, caí dormida... a eso de las 2 me desperté al sentir movimiento a mi lado, por lo general tengo un sueño muy ligero y me despierto con una mosca que pase, estaba oscuro y tarde un poco a que mis pupilas se acostumbraran a la oscuridad, sentía como alguien se movía a mi lado, justo donde estaba mi hermana, cuando pude vislumbrar a través de la oscuridad vi a Solana como se movía con ligeros movimientos acompasados mientras Rodrigo introducía sus manos por dentro de su saco... recorría con sus dedos su coñito, mientras ella subía y bajaba las caderas al compás de sus caricias, ella intentaba contener la respiración con gemidos ahogados, sus hermosos pechos se hinchaban y deshinchaban una y otra vez mientras el saco solo alcanzaba a cubrir parte de las caderas.
Mi corazón comenzó a latir con fuerza a la vista de aquella escena, los miraba extasiada sin que ellos se percataran de nada, no me atrevía a mover ni un solo músculo de mi cuerpo, en pocos minutos mi boca se había resecado por las excitación, sentía mi sexo húmedo y cálido, necesitaba aplacar todo el fuego que me estaba quemando por dentro, pero... no podía, no me atrevía a moverme... si en esos momentos lo hacía, ellos se darían de cuenta, mientras... a escasos centímetros,
No había pasado ni 10 segundos cuando Solana se recuesta sobre Rodrigo y levantando el saco sujeta su polla con la mano un la introduce en su boca, estaba completamente erguida e hinchada, podían apreciarse las venas sobresaliendo y el capullo rojizo en su plena madurez, Solana lo introducía en su boca a la vez que lo sujetaba con la mano, parecía una autentica experta , me fascinaba ver a aquella chica dulce y delicada comportándose como una autentica profesional del sexo, su lengua acariciaba el glande y poco a poco la introducía en la boca aspirándola y haciéndola desaparecer una y otra vez. A Rodrigo le costaba muchísimo no gemir, respiraba aceleradamente mientras mi hermana no dejaba de comérsela...
En ese instante no puedo evitar mover mi mano hacia el interior de mis muslos, me atreví porque ellos estaban demasiado entusiasmados... mis dedos se colaron entre mis braguitas y acarician mi húmedo coñito, un escalofrío recorre mi espalda al poder sentir la dulce presión de mis dedos en el, se empapan con los cálidos fluidos mientras rozan mi hinchado clítoris. Intento contener la respiración, intento no moverme, solo mis dedos en el interior del saco acarician mi sexo una y otra vez, mientras... observo.
Rodrigo comienza a gemir y a ser arrastrado por el clímax, mi hermana no deja de introducir su pene en la boca y ahora lo mueve arriba y abajo con su mano mientras, saborea el semen que sale a pequeños chorros....ver a Rodrigo me hace enloquecer, la excitación recorre mi cuerpo en pequeñas oleadas y comienzo a convulsionar con pequeños espasmos, intentando contener todas las ganas de gritar y de moverme, tras unos segundos todo ha pasado, ellos hablan entre risas por lo bajo, Solana le dice que es una locura lo que acaban de hacer, pero no saben toda la verdad...
Tras ese primer día vinieron otros, cada noche practicaban un nuevo juego de tocamientos y caricias, cada día un poco mas atrevido, cada día un poco mas lejos... mientras, permanecía allí mirando en la oscuridad, jugueteando con mi cuerpo y deseando en lo mas hondo de mi ser yo la que estuviera ahí disfrutando de Rodrigo.
Era el penúltimo día de las vacaciones, era lunes y decidimos ir a mas hacia la laguna ya que sería seguramente el día que menos gente habría, hacía calor me puse una camiseta de tirantes y un pantalón corto, a a mucho eso de montarse en las atracciones así que mientras ella veía la actuación de los loros yo me montaba con Rodrigo en el tutuki splast. Dio la casualidad de que cuando nosotros subíamos, una barca caía y golpeo el agua llegando hasta nosotros una ola que nos empapó por completo, la forma de mis pechitos y mis pezones se distinguían perfectamente a través de la empapada camiseta, Rodrigo no pudo evitar clavar la mirada mientras la lujuria comenzaba a llenar sus ojos...
Cuando nos encontramos a Solana y me vio así.... me dijo que parecía tonta, que a quien se le ocurría montarse ahí con una camiseta blanca, que ahora se me marcaba todo... Me daba rabia que fuera precisamente ella, la que me criticara por eso, la dulce Solana que nunca había roto un plato y a la que cada noche la escuchaba gemir como una autentica puta, mientras yo me hacía la dormida, la la verdad es que me daba muchísima rabia que fuera precisamente ella la que se metiera conmigo por lo de la camiseta, me daban ganas de decirle cuatro cosas.... pero no dije nada y volvimos al camping enfadados y después de cenar me marche antes a la tienda.
La verdad es que no se porque estaba mas enfadada si por lo que había pasado o por sentirme muy frustrada de no poder tener a Rodrigo, lo deseaba mas de lo que nunca había deseado a nadie y toda esa situación había llegado a desquiciarme.
La verdad es que me dio un poco de miedo eso de ir a la tienda sola, pero después de haberme marchado enfadada mi orgullo me impedía volver. Una vez en la tienda me puse el pijama y me metí en el saco, en vez de acostarme en mi sitio, me coloqué al otro extremo de donde habitualmente dormía, pasaron los minutos y al poco llegaron ellos, Rodrigo se tumbó en medio de las dos y yo como siempre me hice la dormida, los escuchaba que susurraban algo, Solana le decía que no tenia ganas esa noche y tras unos instantes de charla todos quedamos dormidos.
Estaba cansada y esa noche también quede dormida enseguida, lo hice durante dos horas y a eso de la 1 de la madrugada me desperté sobresaltada...
casi por instinto gire la cabeza hacia el lugar donde se encontraba Rodrigo, en un primer instante apenas podía distinguir a verlo, pero pasados unos segundos mis pupilas fueron aclarándose y pude observar la escena... Rodrigo se estaba masturbando, su saco subía y bajaba a gran velocidad mientras permanecía con los ojos cerrados respirando con gran dificultad, me quede observando su rostro extasiada, lo miraba con los ojos abiertos como platos sin poder retirar mi mirada de aquel rostro embriagado por el placer, permanecía mirando a la vez que soñaba con sus caricias, imaginaba que estaba sobre mi penetrándome, verlo masturbarse me estaba excitando muchísimo...
Cada vez el interior del saco se movía mas rápido, hasta que que en un instante y sin que yo lo esperara el abrió los ojos... yo los cerré tan rápido como pude y permanecí con los ojos cerrados y el corazón latiendo con tanta fuerza que pensé que llegaría a oírlo... había una calma tensa, durante unos segundos permanecí con los ojos cerrados pero en mi interior sabia que me había visto y tras un minuto volví a abrirlos, Rodrigo me miraba sin decir ni una sola palabra, mis ojos se clavaron en los suyos y así permanecimos durante mucho tiempo, de repente se acerco un poco mas a mi nos encontrábamos a escasos 30cm, su mano se acerco a mi y se introdujo por el interior de la camiseta de mi pijama.
El primer roce me hizo estremecer y sentí como toda la piel se erizada con ese primer contacto, mis pechitos se endurecieron y un suspiro ahogado salio de lo mas profundo de mi... sentí el tacto suave de sus manos recorriendo poco a poco cada rincón de mi cuerpo, cerré los ojos mientras las yemas de sus dedos me rozaban subiendo , por el estomago y llegando poco después a mis hinchados pechos... bufff quería morirme, mi respiración cada vez era mas acelerada, me resultaba trabajo no gemir como una loca, comencé a sentir como si sexo comenzaba a humedecerse mas y mas...abrí los ojos por un instante y pude ver su rostro, era la viva imagen del deseo, sentía como presionaba ligeramente mis pechos, los acariciaba, pellizcaba mis pezones y rozaba las aureolas, en mi interior deseaba que saltara sobre mi y que me penetrara una y otra vez, necesitaba sentirlo en mi, sentir como su polla se sumergía una y otra vez en mi coñito virgen, pero sabía que a pesar de estar completamente fuera de si no podíamos...
Tras unos minutos su mano comenzó a bajar, deseaba que llegara a mi coñito, necesitaba sentir sus caricias, necesitaba saber como era los dedos de un hombre jugando con el por vez primera... todo mi cuerpo se estremeció cuando rozo mi clítoris, un espasmo de placer comenzó a recorrerme, no pude evitar seguir a sus dedos con movimientos de mis caderas. Por un instante paró y su dedo corazón comenzó a introducirse en mi vagina, al principio lancé un gemido, mas de impresión que de dolor, lo sentía entrar muy despacio mientras las paredes de mi vagina presionaban su dedo con fuerza.
Estaba chorreando, casi me sentía avergonzada de sentirme así, sus dedos empapados con mis fluidos resbalaban una y otra vez en mi, jugaban con mis labios vaginales y presionaban sobre mi clítoris... no podía dejar de abrir las caderas mientras mi mano se posa sobre la suya a la vez que presionaba intentando aplacar el deseo que me comía por dentro.
Tras unos instantes mi respiración se torno en gemidos, gemidos sordos que a duras penas podía reprimir, cerré los ojos y comencé dejarme llevar por un maravilloso orgasmo, comenzó a recorrer mi cuerpo con pequeños espasmos que fueron en aumento por segundos, hasta que perdí por completo el control. Cuando volví a la realidad, mi corazón seguía latiendo con fuerza abrí los ojos y lo vi mirándome, me sentí avergonzada y no pude decir nada, tras unos instantes me volví sobre mi misma y a pesar de no pegar ojo en toda la noche, permanecí inmóvil recordando lo que había sucedido.
El día siguiente era el último, yo ya estaba despierta cuando Solana se levantó, se que Rodrigo no había dormido mucho, lo había escuchado dar vueltas una y otra vez a lo largo de la noche, la verdad es que me hubiera gustado saber que le pasaba por la cabeza en esos instantes... quería saber si se arrepentía de lo que había pasado, ojala hubiera cruzado unas palabras con el la pasada noche... pero la verdad es que me encontraba demasiado avergonzada para poder hablar.
Solana se levantó y marcho a los baños a darse una ducha, yo permanecí inmóvil haciéndome la dormida dentro de mi saco, sabía que estábamos solos los dos pero no me atrevía a mirar, mi cuerpo temblaba solo con la idea de que el podía estar pensando lo mismo que yo. No habían trascurrido ni dos minutos desde que mi hermana salió por la puerta, cuando pude sentir como Rodrigo se movía, el corazón comenzó a latir con fuerza de nuevo al sentir que estaba sobre mi, apartó el saco de dormir y dejó mi cuerpo al descubierto... no dije ni una sola palabra cuando bajó mis braguitas de encaje rosas y las dejó a medio quitar sobre las rodillas, al segundo comencé a sentir como su lengua se hundía en mi culito y comenzaba a recorrerlo, era una sensación nueva y maravillosa enseguida mis caderas comenzaron a acompañarlo con leves movimientos acompasados, muslos comenzaron a abrirse facilitando el trabajo de su cálida lengua. Poco a poco comenzó a recorrerme por completo, moviéndose desde mi ano, recorriendo mis húmedos labios y terminando en el clítoris que por aquel momento ya se encontraba hinchado y con la sensibilidad a flor de piel.
Levanté las caderas facilitando sus movimientos y colocando el culito en pompa, mientras su maravillosa lengua no dejaba de recorrer hasta el ultimo de los rincones mas ocultos de mi sexo, mi respiración que hasta entonces había sido ahogada y silenciosa, se había convertido en gemidos de autentico placer, no podía pensar en otra cosa mas que en lo que en ese instante estaba sintiendo, me resultaba imposible dejar de mover las caderas al compás de aquellas lamidas...
Me encontraba apunto de caramelo cuando sus labios abandonaron mi coñito, sentí su cuerpo sobre mi mientras mientras sus suaves manos se colaban por el interior de mi pijama y llegaban hasta mis pechos, me encantó volver a sentir como sus manos los cubrían y acariciaban muy despacio mientras pellizcaba mis duros pezones. En ese instante mi boca habló, fue una autentica súplica...
· Necesito sentirte... hazme tuya por favor...
El acercó a mi coñito su hinchado pene, lo rozaba y se impregnaba con mis fluidos, lo rozaba con su punta una y otra vez, necesitaba sentir como me llenaba por dentro, necesitaba sentir la presión de su polla en mi, necesitaba sentir como por vez primera un hombre estaba dentro de mi... como si estuviera leyendo mi mente, la punta de su pene se posó en mi vagina y comenzó a presionar, al principio la sentí como entraba la punta solamente, pero poco a poco fue entrando... mi himen iba dejando de ofrecer resistencia a la vez que un dolor agudo me hacía estremecer... de pronto una fuerte sacudida hizo que todo su sexo entrara en mi por completo, mis manos se aferraron con fuerza al saco de dormir mientras, un grito de dolor se escuchó en la estancia al sentir como mi inocencia quedaba desgarrada por completo.
Rodrigo se detuvo, se detuvo mientras su polla estaba dentro de mi, sentia como me llenaba por completo y tras unos instantes inmóvil comencé a sentir el movimiento, comencé a sentir como la presión de su polla rozaba una y otra vez las paredes de mi vagina. Casi sin darme cuenta el dolor ha dejado paso al placer, sus manos sujetan mis caderas firmemente mientras sus embestidas vuelven a hacerme gemir de placer...
· No pares, por favor no pares...
· Te siento, no pares siguee, siguee
· ahhh ahhh ahhhh
En en interior de la tienda los gemidos de ambos se mezclan con el ruido de su cuerpo chocando contra mi culo, siento como todo su cuerpo se tensa, siento sus manos aferrándose a mi con fuerza, mientras Rodrigo lanza un grito de placer tras varias fuertes embestidas, su cálido semen me llena por completo... es una sensación maravillosa, una sensación que me atrapa y me hace alcanzar un maravilloso orgasmo, mientras Rodrigo sigue entrando en mi una y otra vez, todo mi cuerpo comienza a convulsionar mientras mi cabeza se apoya sobre la almohada y mis manos se aferran fuertemente al saco, durante unos segundos todo mi cuerpo me abandona, durante unos instantes el placer ha sido mi única acompañante...
Durante un minuto permanece dentro de mi inmóvil, sigue sobre mi mientras yo sigo tumbada boca a bajo, sus manos se han posado sobre las mías y puedo sentir como su corazón late con fuerza sobre mi espalda... es en ese instante cuando tras nuestra se escucha como alguien llora de forma ahogada... es Solana!!!
CONTINUARA !!!
QUE PASARA CON SOLANA ???
RODRIGO DEJA A SOLANA, POR MICOL ???
LA LLEGADA DE UN NUEVO PERSONAJE, CAMBIARA EL SENTIDO DE LA HISTORIA,,,
A ESPERAR !!!
5 comentarios - Micol, Solana Y Rodrigo (Parte 1)