Una paja espontánea -en el bus-.

UNA PAJA ESPONTÁNEA

A eso de las tres y cuarto de la tarde, el camión iba prácticamente vacío. La mayoria de los estudiants regresaban en el de las dos y los trabajadores en el de las cuatro,así que esa ruta estaba casí desierta a esas horas. A mí por cuestiones de papeleo se me había hecho tarde y por eso no alcancé a irme en uno más temprano. Cuando el camión se detuvo ví que una chica también de la misma universidad se acercaba para subirse en esa ruta.

La universidad estaba a las afueras de la ciudad y no había mucho tránsito por aquel rumbo. Desde la universidad al centro se hacía aproximadamente 30 minutos. La ciudad es pequeña y comunmente vienen estudiantes de otros pueblos aledaños a estudiar sus carreras acá.
Yo me senté casí al fondo unas dos o tres filas adelante del final, la chica se sentó una fila adelante pero en la hilera de enfrente. De pronto me puse los audifonos y le subí al volumen como acostumbraba en aquella epoca. El camionero decidío que era momento de pisar el acelerador y comenzar la ruta.

En el tramo lento y lleno de baches ví que la chica no estaba de mal ver, se veía bonita vestida de blanco seguro estudiaba enfermería o medicina, traia una blusa relativamente apretada y el busto se movía natural con el movimiento del camión, tenía buen tamaño de pechos y se veía que tenía buenas piernas. Estaba mirando esto cuando ella volteo y me descubrío mirandola, yo sólo disimule y volteé un poco a otro lado. Ví que ella me miró mucho entonces, me pusé algo nervioso.
Seguía una zona más bachienta aún, era realmente incómodo ir en el camión por esos lugares. Pero para mí fue de lo mejor, a la chica se le movían los pechos mucho y daban una imagen muy sensual, sin darme cuenta ya tenía el pene a media erección, en ese punto en el que alcanza algo de volumen pero no esta del todo tieso. Ella volteó y me miro de nuevo, me había descubierto por segunda ocasión, pero esta vez sonrío y bajó un poco la mirada como mirando si le veía las tetas. Esto me excitó.

Luego ella volteada hacia afuera, desabotono la blusa un poco y abrio el cuello, como si tuviera calor. En realidad si hacia calor, así que la imagen pintaba para algo normal, pero de repente se le cayó un lapiz labial y se agacho para juntarlo. Pero no lo hizo de cualquier manera, sino de una totalmente provocativa, primero giró para quedar frente a mí, luego se agacho y antes de agarrar el lápiz se le escurrío un poco, ella me miró y sonrío yo veía el escote que me estaba mostrando, se le alcanzaba a ver el brassiere en color blanco y parte de las bubis, se miraba hasta el fondo del brassiere allí donde algunos tienen una especie de segurito entre pecho y pecho, yo estaba muy excitado con la imagen pero actuaba casual, ella algo disgustada "porque yo no prestaba tanta atención", así agachada se miró el escote y luego me sonrío mordiendose los labíos. Yo solo la miré y me pase la lengua un poco, mirandola fijamente a los ojos. Ella se reincorporo y se sentó normal, cómo muy formal.

Luego el camión se salío al acotamiento y el chofer se detuvo del todo.

-Ahorita vuelvo, no me tardo voy por mi comida.

Nos dijo bajando rápidamente a una tienda que estaba a lado de la avenida. La chica sonrío y volteo a verme. Sin decir nada se puso de pie y se puso frente a mi indicandome que me moviera al otro asiento para ella sentarse junto a mí. Yo tímidamente lo hicé y me quité los audifonos.
-Hola, le dije.

-Hola. Me dijo mientras me miraba a los ojos y se mordia los labios, luego me miro a los labios y se acercó un poco más. ¿te gustó lo que viste? Me preguntó.

-Eh... pues, no sé que dices. Le dije sin atinar otra cosa que decir.

-Cuando se me calló el lápiz, ¿te gusto?

-Eh, bueno... Y sentí que puso su mano en mi entrepierna subiendo lentamente mientras miraba al frente y sonreia, yo empecé a sonrojarme sintiendo el cosquilleo de su mano subiendo hacía mi pelvís, ella volteo y me miró. Luego ya tenía la mano encima de mi pene a un ladito de la bragueta.
-Mmm estas duro. Eso me gusta me dijo.

Yo la miré a los ojos mientras ella se acercaba a mí, de pronto estabamos tan cerca que nos dimos un beso. Ella seguía agarrandome el pene encima del pantalón y ya se me estaba poniendo todo tieso.

-Sácatelo, me dijo- te quiero masturbar.

Yo sólo la miré y volteé hacia afuera, ví que no venian carros ni nadie, el chofer seguía en la tienda. Abrí el botón del pantalón y ella me bajo la bragueta y metío la mano, lo tocó encima de mi ropa interior. Pude sentir sus manos mientras me tocaba desde la glande hasta la base del pene.

-Estas rico...

-Tú... tambi. No me dejó terminar para cuando me dio un beso de lengua muy apasionada mientras seguía agarrandome el pene, pero ahora la sentía con más fuerza pues ya no estaba el jeans de por medio. Luego del beso, me bajo la truza y asomó el pene lentamente, ella miraba y se mordío los labios en un gesto muy sensual.

-Mmmmm - fue lo único qu dijo y me bajó la truza más el pene se movío un poco resorteando algo, se veía algo lubricado, como no tengo hecha la circuncisión se veía la capulla puesta pero estaba muy duro, ella puso su mano en el capullo y bajo estirando el cuero, yo sentía como se estiraba hacía abajo en un ligero dolor pero su tacto era placentero.

-Síi dejáme jalártela- me dijo con una voz grave y baja.

-Oohh siguele- le dije yo.

-Mmm que macho, quiero ver tu leche. Me decía mietras miraba hacía abajo a ver mi pene tieso

meintras estaba en sus manos. Mmmm que rico duriiito. Mmm que bueno nene.

-oh si siguele, le decía yo con la voz entrecortada.

-Más rápido papi, quieres más rápido? Me decia mientras me miraba a los ojos.

Luego me soltó el pene y sólo me dio un beso.

-¿Quieres más? Me preguntó mientras veía mi pene.

-Sí... dame más.

-¿Seguro? Me preguntó juguetonoa mientras ponía sólo el dedo índice en la cabeza del pene, presionando.

-Siiii nena. Más es todo tuyo.

-Mmmmm bueno, lo quiero. Me dijo mientras agarraba con toda la mano el pene con mucha firmeza y me daba de a tres estirones y luego aflojaba, tres estirones y aflojaba, otros tres y aflojaba y luego siguio con la rutina de jalar y jalar... Estaba pasandolo riquisimo.

Aquí yo me animé y le sobe un pecho mientras le daba un beso. Sus pechos eran blandos, de buen tamaño sentí el borde de su brassiere en mi tacto, muy sensual. Ella mientras empezaba a hacerme los movimientos de una buena masturbación lentamente y alternaba a un ritmo más rápido.

Vimos que venía el camionero yo quise subirme el pantalón y dejar allí todo, algo decepcionado. Pero ella no, ella siguío.

-Disimula. ¿Ya mero acabas, no?

-Bueno... sí pero si nos ven.

-Disimula hasta que te corras, no se subirá nadie ahora.

El camionero se subío y acomodó sus cosas una bolsa con una torta y un refresco, sintonizo la radio y espejeo, luego puso en marcha el camión.

Ella aminoró el ritmo agarrando fuerte el pene y moviendolo lento, miraba solo al frente y no decía nada, disimulaba muy bien. A mi el hecho de ir en el camión con el chofer y ella masturbandome de esa manera, me tenía excitadisimo. Sentí que el semen empezaba a subir y moví un poco la pelvis ella notó el movimiento y me miró de reojo sonrío y apretó con más fuerza el pene, luego lo aflojo pero aumento el ritmo yo allí exploté.

Salieron tres chorros salpicando el respaldo del asiento de enfrente, dí un pequeño salto en mi asiento y el chofer volteo por el retrovisor pero creo que no sospecho nada, tuve un último chorrito que escurrío en su mano, ella sólo se lamío el dedo me miró y se fue a su lugar.

Desde su lugar sólo volteo y me guiño un ojo, yo ya estaba guardandome el pene en el pantalón y limpiando con un pedazo de servilleta algo del escurridero que hicimos.

El camión se detuvo en una esquina ella tomó sus cosas se puso de pie y pidio la bajada, me miró de nuevo, sonrio y me dijo. Hasta luego, estuviste bien.

J.R. 2015