Por problemas que tuvo mi tío en el trabajo se fue a vivir a nuestra casa, antes de eso lo veía cada 3 o 5 meses no lo veía mucho, por ese motivo fue un poquito más complicado convivir todo el día con él. Mi hermana y mi papá trataban aún menos con él, mi papá salía fueras por el trabajo y mi hermana salía a la escuela y bueno yo no estudiaba, mi mamá es ama de casa.
Mi papá es abogado y muchas veces sale a otras ciudades, lo veo pocas veces. Todo era muy normal yo despertaba tarde y el desayuno ya estaba listo, la mayoría de veces o todas desayunaba solo, porque mi tío y mi mamá desayunaban temprano juntos, mi papá y mi hermana desayunaban aún más temprano para ir al colegio y al trabajo.
En mi familia todos tenemos buen cuerpo, tenemos gimnasio en casa no es de lujo pero sirve para los ejercicios básicos, los únicos que no tienen buen cuerpo es mi papá por su trabajo y mi tío que jamás ha ido a un gimnasio.
Mi mamá con la presencia de mi tío era reservada, ya no usaba sus camisones pegados en las mañanas o si usaba eran unos camisones que no eran pegados y eran largos. Pero en una mañana cuando salí de mi cuarto para desayunar vi a mi mamá (yisela) con un camisón pequeño, demasiado pequeño.
-hijo, ¿has visto alguno de mis camisones?
-no mamá ¿porque?
-lo que pasa es que no encuentro uno.
-¿y los demás?
-sucios y rotos
-¿rotos?
-si supongo que por viejos
La verdad es que me encantaba ver a mi mama en ese camisón, ya tenía bastantes meses sin verla así por mi tío, siempre desayuno en el comedor pero ese día decidí desayunar en la sala mientras mi mamá limpiaba un poco la sala para ver sus piernas, debes en cuando le podía ver el inicio de sus nalgas.
Los próximos días cuando despertaba mi mamá estaba con camisones igual de pequeños, apenas y se agachaba y se le veía su calzón. Decidí despertarme más temprano solo para ver como actuaba mi tío me daba muchísima curiosidad. Y así fue puse mi alarma y salí mi mamá se sorprendió al verme temprano ya que nunca hacia eso, lo que vi fue muy normal un señor muy respetuoso con una dama que casi mostraba la cola. Fue hasta casi 4 días después que mi tío empezaba a ver a mi mamá un poco más, hasta llegar al punto en que a mi tío (Luis) se le caían los cubiertos y mi mamá muy amablemente los levantaba y mi tío no perdía detalle de nada.
En ese momento me di cuenta del tipo de hombre que era (eso creía yo) por lo que en lugar de pasarme la mayoría del tiempo con mis amigos o en mi cuarto decidí prestarle más atención a él durante el día.
Una semana observando lo que hacía mi tío me di cuenta que cuando mi mamá hace la comida (a las 12 casi siempre) mi tío llegaba y le pegaba su “paquete” a las nalgas de mi mamá, ella se quitaba pero mi tío insistía hasta que casi se daba por vencida y lo dejaba, o que cuando mi mamá iba al gimnasio y se subía a la caminadora mi tío usaba la bici que estaba justo atrás de la caminadora, se le quedaba viendo todo ese rato lo que era bastante normal debido al tamaño de nalgas que tiene mi madre pero cuando mi tío se baja de la bici se le podía notar muy claramente su paquete bien marcado.
Pero nada fue tan grave como el lunes cuando regrese a casa después de salir con mis amigos.
Después de desayunar me di un baño, tenía planeado salir a jugar futbol con unos amigos en unas canchas que estaban atrás de mi casa, salí de casa como a las 10 en ocasiones después de un partido vamos a comer a casa de alguien o al centro comercial que está cerca del fraccionamiento.
Ya teníamos un par de horas jugando, en realidad era menos porque siempre platicamos al inicio y tardamos en empezar. En eso estábamos cuando el balón se bolo a mi casa, me brinque por el patio trasero ya que es una barda no muy alta no fue difícil además no es la primera vez, regrese el balón mientras yo fui a tomar agua a la cocina, apenas entre unos metros a la casa cuando escuche unos gritos, de inmediato me quede parado sin saber qué hacer, para enseguida correr para ver qué pasaba corrí un poco pero me detuve en seco hasta casi caerme, lo que vi fue a mi mamá con mi tío.
Mi mamá estaba de rodillas en el sillón de la sala, apoyando sus manos en el respaldo y mi tío Luis de perfil por lo que no me veían, mi mamá estaba en ropa interior mientras mi tío le daba tremendas nalgadas supongo que le decía algo porque se le acercaba a su oído pero no escuchaba palabra alguna. Cada que mi tío le decía algo mi mamá gritaba “nooo” y después otra nalgada.
Tras cada que mi mamá se negaba venia una nalgada a un más fuerte, yo estando a unos 6 metros podía ver su nalga roja.
-por favor ya no.
-entonces acepta mi trato, yo sé que tú quieres deja atrás tus modales
-¿y mi esposo qué? Mis hijos!
-jaja tu esposo nunca esta y tus hijos entenderán que una mujer como tu necesita de...
-¡no!
-como quieras. Luis se quitó el cinturón lentamente mientras mi mamá lo veía con sus hermosos ojos bien abiertos, su cara cambio ahora era de espanto antes trataba de mantener la calma o eso parecía.
Cuando se quitó por completo el cinturón tomo los dos extremos con la mano derecha y le soltó un golpe, mi mamá en cambio soltó un ruido, era un grito ahogado.
-¡está bien! Pero para por favor. Mi tío no dijo nada solo se puso el cinturón y se fue. Apenas vi que se iba me fui al jardín, vi que ya no estaban mis amigos y salí de la casa, no volví enseguida a la casa primero fui a caminar por el fraccionamiento. Cuando regrese a casa estaba mi tío en la sala.
-¿y mi mamá?
-bañándose. Me lo dijo con una pequeña sonrisa, una sonrisa de tranquilidad y felicidad.
Mi mamá en las mañanas ya siempre usaba camisones cortos, mi tío siempre la veía aunque yo estaba presente, eso me ponía a pensar como era cuando yo no estaba. Durante el día mi mamá usaba shorts, leggings, faldas, etc. cosa que usaba pocas veces pero de un tiempo en adelante siempre usaba esas cosas y eran bastante provocativas, llegaba a sentirme mal porque yo veía a mi madre con otros ojos y me excitaba verla mientras andaba por la casa.
Era un martes cuando en la comida mi papá nos dio una noticia (muy común) nos dijo que tenía un caso importante y no estaría por dos semanas como mínimo, por lo general cuando sale por bastantes días son casos de asunto penal. Esa misma noche se fue, lo único malo es que yo tendría que llevar a mi hermana a la escuela y levantarme temprano porque según esto los taxis no son muy confiables pero bueno me tenía que levantar a las 7:30.
A la noche siguiente desperté porque tenía que ir al baño y hasta me dolía el vientre, rápidamente fui al baño, sentí un gran alivio que hasta me quede sentado mientras seguía sentado escuche unos ruidos lo que hizo que prestara atención, salí del baño sin jalar la palanca del retrete, el cuarto de mis papás está casi al lado del baño y de ahí venían los ruidos, pegue mi cara a la puerta. Escuchaba el movimiento de la cama era un ruido constante, en ocasiones se escuchaba un gemido me quede como menso 5 minutos sin moverme solo escuchando no pensaba nada, sentía mis manos frías con un poco de sudor, no lo podía creer mi mamá estaba con alguien en su cuarto rápidamente pensé en mi tío.
Con mis pies descalzos subí las escaleras y vi que la puerta del cuarto de mi tío estaba abierta entre, con la poca luz que llegaba de la ventana pude ver un poco la cama estaba vacía, mi tío Luis no estaba baje las escaleras y me metí a mi cuarto tarde un poco en dormir no podía creer lo que pasaba, por mi mente pasaban mil ideas de cómo y porque pasaba eso.
En la mañana después de llevar a Karen a la escuela me dispuse a buscar cámaras de vigilancia o espías, eran caras pero por suerte tenía dinero en mi cuenta de banco cada semana mi papá me depositaba un poquito pero casi no ocupaba el dinero, después de buscar y buscar me encontré con unas cámaras pequeñas, grababan video, audio tenían visión nocturna y el video lo mandaba directo a una computadora, eran perfectas.
Necesitaba una para el cuarto de mamá, para la sala, cocina y otra para el cuarto de mi tío, me puse en contacto y por comprar 4 cámaras me hicieron un pequeño descuento, hice una transferencia y mis regalitos llegarían en 24 o 48 horas.
Llegaron en un día y medio yo mismo fui por ellas no quería que llegaran a casa y las recibiera mi mamá o alguien más.
Para poner las cámaras le dije a mi mamá que deberíamos ir a comer a un restaurante y hasta le di un poco de dinero para que se animara y acepto al día siguiente íbamos a comer los cuatro yo había ido con un amigo y supuestamente iba a llegar al restaurante pero no llegue, a donde llegue fui a la casa le puse unas excusas a mi mamá del porque no podría llegar a comer.
Fue fácil esconder las cámaras las ponía en las esquinas de la ventana donde estaba la cortina y no se podían ver, las configure y en una hora y media ya las tenía puestas.
Esa noche cuando todos estaban dormidos encendí mi computador, tenía ganas de espiar por las cámaras, mi mamá estaba frente a su espejo quitándose el poco maquillaje que usa, salió al baño por lo que mejor puse el seguro de la puerta, cuando regreso a su cuarto se empezó a quitar su ropa, estaba en ropa interior usaba un bóxer cachetero muy juvenil, mi madre no usa tangas (he visto su cajón de ropa) se sentó en la cama y se quitó su bóxer y se puso una tanga, yo me quede con la boca abierta era obvio que mi información no estaba al día, tenía una erección tremenda, mi mamá se acostó bocabajo en ese momento me quite la ropa para masturbarme sus nalgas eran grandiosas, estaba súper atento viendo que pasaba cuando la puerta se abrió y entro mi tío Luis.
Los dos se empezaron besar apasionadamente, mientras se tocaban mi mama se sentó en las piernas de mi tío apenas se sentó en sus piernas ella se empezó a mover, movía sus caderas lentamente pero de una forma seguramente delicioso, mi tío claro que no perdía el tiempo le estaba tocando sus tetas, que digo tocando se las aplastaba, era delicioso ver las tetas grandes de mi mamá ser aplastadas por unas manos relativamente grandes, mi mamá se paró y se quitó el bra dejando sus tetas desnudas se volvió a sentar en sus piernas como toda una putita, mi tío le aplastaba sus pezones, rodeados de una aureola hermosa bastante grande.
Mi mamá le saco el pene para masturbarlo lentamente, mi tío por su parte quito a mi mamá y la puso de rodillas en el piso era obvio lo que buscaba y mi mamá lo entendió abrió su boca para que entrara el pene que tanto esperaba, lo lambia desde los huevos hasta el glande, se lo metía totalmente a la boca así duro un par de minutos, cuando mi mamá se paró vi sus rodillas rojas y callo a la cama, mi tío le había dado un empujón fuerte, la jalo de un brazo hasta que la cabeza de mi madre quedo a la orilla de la cama, mi tío metió su pene a la boca se lo metía hasta adentro y no tardo en sacarlo y meterlo rápidamente, mi mamá tocia solo para escupir saliva pero eso no le importaba a mi tío ya que seguía metiendo el pene en su boca a gran velocidad.
Ver a si a mi mamá me ponía loquísimo era una puta sumisa, la puta más sucia que entregaba el culo al hermano de su esposo y hacia lo que él quería, estaba llena de baba con un pito en su boca, la mujer que algún día fue decente ya no existía.
Mi tío la tomo del cabello y la puso en cuatro, la penetro bruscamente y jalaba su cabello mi mamá no gemía gritaba y pedía más no sé qué le pasaba, cuando tenía sexo con mi papá apenas y escuchaba el ruido de la cama, con mi tío escuchaba los gritos de mi mamá hasta mi cuarto y los golpes de las caderas de mi papá con las nalgas de mi madre.
Tuve un orgasmo impresionante y ya ni me interesaba saber que más pasaba, yo ya estaba satisfecho y sabía que mi mamá era una tremenda zorra.
En la mañana cuando lleve a mi hermana a la prepa me dijo.
-Vaya noche que se dio mi mamá en la noche. Yo me quede paralizado no creía que ella estaba enterada de la situación.
-¿Qué? – ¿no te diste cuenta de lo que paso en la noche? Mi mamá lo disfruto a lo grande que envidia, además hace unos días que mi mamá siempre le toca el paquete a mi tío, como no te das cuenta de nada.
-sí, si lo sé pero no creía que tú estabas enterada. –Tengo solo 18 años pero no soy mensa. Adiós bobo nos vemos en la tarde.
Creí haber escuchado salir de la boca de mi hermana un qué envidia, se refería a mi mamá, ¿escuche bien?
Pasaron dos días en los que mi mamá y mi tío no tenían sexo pero eso sí, en el día se tornaban muy íntimos, mi mamá se acostaba sobre mi tío, iban de compras en el carro de mi padre pero era mi tío quien siempre lo utilizaba, se albureaban, se hacían “cosquillas” e inclusive mi mamá se llegó a sentar en las piernas de mi tío.
Otra cosa que cambio fue la confianza entre mi tío y mi hermana. Un día ella llego a la sala donde él y yo veíamos tele. –tío Luis, en la escuela me caí me duele mucho mis pompis al sentarme creo que se me hizo un moretón gigante. –ay pobrecita mmm porque no vas con tu mamá? Será mejor que ella te revise, ya le comente pero me dijo que ya se me quitara el dolor, no me hizo caso. –ya veo pero no creo que sea buena idea que yo te ponga una pomada o te revise en esa parte te puede incomo… -no, no tío si vengo contigo es porque tengo confianza. Mi hermanita linda no había dejado ni terminar de hablar a mi tío, enseguida mi tío entro en confianza al igual que mi hermana, apenas mi tío dijo está bien ella se levantó su faldita escolar y le mostro las nalgas. –no, no hermosa será mejor que vayamos a mi cuarto. Lo digo viéndome a mi claro que querían privacidad, Luis tomo a Daniela de la mano y se fueron.
Lo que no sabían era que yo podía ver todo, me fui a mi cuarto para ver qué pasaba. Mi hermana se subió a la cama y se levantó su falda, quedando su calzoncito al aire libre, por lo que veía el moretón si era algo grande pero para exagerar tanto. Luis le palpaba las nalgas preguntándole a la ves donde le dolía. –aaay ahí me duele más. – ¿aquí? –uuuf no mucho mmm. – ¿entonces te duele más debajo de tu calzón? –mmm si tío, ¿ya me vas a poner la pomada? Para que me ayudes a quitarme mi ropa interior –no, ¿no cómo crees? No puedes estar aquí desnuda. – ¿entonces me pongo tanga? –¿tu usas? –Tengo algunas pero nadie sabe, puedes ir por una a mi cuarto –¿En dónde están? –en el cajón de mi ropa interior está en el closet, pero están hasta el fondo, quizás debas quitar lo demás primero. –ok ya regreso.
Luis fue al cuarto de Daniela y busco en varios cajones hasta que encontró el de la ropa interior, saco un par de prenda para poder llegar al fondo, no le importaba desacomodar todo cuando llego a las tangas saco todas las prendas y se puso a verlas y se fue con una en la mano, volvió a guardar los calzones y se fue.
-¿Esta está bien? –si la que sea. Dijo sin voltear a verla, solo se intentó quitar el calzón que tenía puesto pero sin pararse. Lo que me pareció algo tonto como pretendía quitarse la ropa interior y ponerse su dichosa tanga sin moverse y sin esfuerzo, rápidamente Luis le dio su ayuda la cual Daniela acepto.
Mi tío tomo con sus dos manos el calzón de mi hermana y se lo quito de una sola ves tirándolo al piso, después tomo la tanga y se la puso lentamente como disfrutando el momento, al igual que yo lo hacía de cierta forma. Fue entonces que pude ver que linda tanga le había puesto, una tanga blanca de hilo dental, con un lindo moñito atrás color negro como si adornara un valioso regalo el cual sería sus nalgas.
Se veía muy hermosa mi hermana, acostada en una cama con su uniforme escolar con tanga esperando a que le sobaran el culo. Luis fue por una crema y se la puso en donde estaba el moretón. –aay, está muy fría. Mi tío respondió a esto echándole vapor cliente de su boca por lo que se acercó bastante a su nalga con su boca, le volvió a poner crema ahora en ambas nalgas, sus nalgas estaban a completa disposición de mi tío, empezó con masajes suaves tocando solo lo necesario y con las yemas de los dedos y así fue por dos minutos o menos pero mejor fui al baño, no tarde ni 5 minutos y ahora veía a mi tío dándole un masaje con gran firmeza sobre ambas nalgas, con ambas manos empezaba el masaje en la pierna haciendo presión y subiendo hasta la nalgas cuando llegaba a las nalgas mi hermana se quejaba un poco por el dolor pero no se quitaba, el masaje se ponía más interesante y yo lo notaba con la erección que tenía.
Por la fuerza del “masaje” de mi tío las nalgas de Daniela se movían demasiado, en ocasiones sus dedos se perdían en medio de sus nalgas, no sé qué diablos le daba masaje entre ambas nalgas y aunque duraba poco me daba cierto coraje.
-ya termine hermosa. –Aah, casi me quedo dormida muchas gracias tío, me gustó mucho. –De nada si te duele más me dices. –claro, oye ¿me puedes llevar a mi cuarto? Mi tío la tomo en sus brazos y se la llevo cargando hasta llegar al cuarto de ella. Se quedó dormida hasta que llego la cena salió a comer.
Al terminar la cena ella le dijo algo que mi mamá ni hiso caso más que yo –tío, me voy a bañar ¿cuando salga puedo ir a tu cuarto? –si claro.
Espere a que se saliera de bañar, cuando lo hiso se fue a su cuarto ahí se secó un poco y dejo la toalla mojada en el piso para tomar una seca, se la puso y fue al cuarto de Luis. Yo no entendía bien que iba hacer desnuda salvo por una toalla que la cubría al cuarto de mi tío a las 11 de la noche.
-Hola Daniela ¿qué pasa? –solo quiero saber si aún se ve muy mal el moretón. –Yo creo que si solo han pasado una hora, tardara un par de días en quitarse –mmm bueno –pero si quieres te pongo pomada quizás eso junto con un buen masaje ayude en algo. –sí, si ayuda. Se quitó la toalla y se acostó, estaba completamente desnuda sobre la cama de Luis, el no dijo nada enseguida le puso la crema y empezó el masaje esta ves empezó con fuerza, agarraba sus nalgas con ambas manos y las apretaba.
Estuve viendo por 10 minutos más, después de una buena paja y manchar el monitor con semen me fui a dormir. Desperté temprano eran como las 8:00 0 7:30 vi la cámara del cuarto de Luis y ahí estaba mi hermanita desnuda dormida junto a mi tío. Como era sábado mi mamá aún no se despertaba pero si se enteraba que Daniela se había dormido en el cuarto de mi tío en esas condiciones seguro la mataría. No supe que hacer a esa hora y me volví a dormir después de ir al baño.
Cuando desperté ya estaban los 3 en el comedor comiendo, me senté a comer y el resto del día paso con normalidad, si así se puede decir, mi madre seguía de cariñosa con mi tío frente a mí y Daniela pero ni uno de los dos decíamos una palabra ni cuando nos sentamos a ver una película en la noche y mi mamá se sentó durante toda la película en las piernas de mi tío, a mitad de la película mi mamá fue por una cobija para ellos, se sentó en él y se cobijaron, si bien ellos no estaban justo delante de mí los podía ver solo haciendo un pequeño esfuerzo, cuando giraba los ojos para verlos solo veía moverse la cobija porque aunque estuviera todo obscuro el brillo de la tele ayudaba para ver que se movía un poco la cobija.
Esa noche cuando todos nos fuimos a dormir no tenía ganas de ver a mi madre tener sexo con mi tío, el hermano de su esposo, no sé porque no tenía ganas pero estaba muy seguro que iban a tener un buen sexo, durante toda la película se estuvieron tocando, solo esperaban la hora para que la película terminara y mandarnos a dormir.
Cuando desperté me quede un momento acostado, pensando en lo difícil que había sido esa semana, ver a mi madre ser penetrada por tu tío, ver a tu hermana de 19 años enseñando el culo, durmiendo con tu tío el amante de tu madre. A pesar de ser testigo de cómo mi familia podría quedar destruida cuando mi padre se enterase de esto yo me excitaba en pensar e imaginar a mi madre ser penetrada y humillada por mi tío, me excitaban las nalgas de mi linda hermana, ser manoseadas por mi tío, me encantaban sus morenas nalgas, con esa sonrisa tan bella de ella y su cabello largo hasta las nalgas.
Cuando salí de mi cuarto, había pasado una media hora desde que me desperté, como de costumbre fui a la cocina para ver que había para desayunar, mi tío estaba en el comedor sentado de lado viendo hacia la cocina, estaba congelado que ni me saludo porque no me volteo a ver, cuando entre a la cocina vi a mi madre con un Baby Doll, si con uno de esos que no te tapan nada.
-¿Qué diablos haces así vestida!? –¿no te gusta hijo? –no, ¡claro que no! Ponte algo decente que estas frente a Luis. –no me importa que no te guste, no me lo puse para enseñártelo a ti aparte que tiene de malo, él es parte de esta familia. – ¿y ya por eso te pones eso!? –qué te pasa, no tiene nada de malo, somos adultos, ¿crees que él no ha visto a otras mujeres? No me importa que no te guste como me visto no por eso voy a estar como las mujeres del oriente, todas tapadas! –¡Claro que ha visto a otras mujeres Te ha visto a ti! Eres una zo… Mi madre no me dejo terminar de hablar, me freno con una fuerte cachetada que hiso que mi cara se pusiera roja y me ardiera. Quizás lo hiso por miedo, sabía que si no me detenía yo seguiría hablando, hablando de cómo le es infiel a mi padre con su hermano y en su propia casa. Debo aceptar que se me salieron unas lágrimas, no por dolor si no porque mi madre jamás me había levantado una mano.
-Porque no agarras el carro y te vas a comer a otro lado, yo no hare comida para ti. Ni si quiera la volteé a ver solo fui por las llaves y me fui.
Regrese a casa hasta las 3, la mayor parte del tiempo me la pase conduciendo por la ciudad sin rumbo con una cerveza en mano, no pensaba muy claro y aun no lo hacía después de eso no sabía lo que pasaría. No quería entrar a la casa, cada vez mi familia tendía de un hilo más delgado para que todo se fuera al infierno yo no sabía si era capaz de contarle lo que pasaba a mi papá. No metí el carro a la cochera pensé que mi madre al verme me iba a correr de la casa de nuevo o íbamos a discutir así que deje el carro afuera para irme rápido en caso de que fuese necesario.
Estaba la casa sola, no escuchaba ni una tele, ni música, nada. Fui al cuarto de mi hermana para ver si mi mamá le había dicho algo de mí pero no la encontré, fui a mi cuarto a ver las cámaras, no estaba en la sala, cocina, comedor, gimnasio ni en el patio pero mi mamá si estaba en su cuarto, con una toalla en el cuerpo y con ropa en la cama, lo primero que pensé es que se iba de la casa, pero claro que no, no había ni una maleta y no era capaz de ir se así como así, siempre la había mantenido mi papá bueno nos mantiene a todos. No quería ver la cámara del cuarto de mi tío, me daba asco verlo y saber que él era el culpable de todo, y más asco el pensar que mi madre quedara embarazada de el, pero aun así vi la cámara.
Mi hermana estaba en 4 en la cama mientras mi tío le daba nalgadas, no muy fuertes como se las dio a mi madre pero lo suficientemente fuerte para que sus nalgas estuvieran rojas. Me enoje muchísimo, no era posible que ese animal le hiciera eso a mi hermanita, me pare apague el monitor y fui a la cocina por un cuchillo, me lo puse al lado de mi cintura dentro del pantalón por si las cosas se ponían muy feas, cuando estuve afuera del cuarto de Luis me quede un momento pensando si era lo correcto. Lo único que pensé era en ponerle un alto, sabía que mi mamá estaba fuera de control y me odiaría el resto de la vida por haber corrido a su amante, ella lo amaba tanto como para usar baby doll, como para sentarse en sus piernas. No me importo que me dejara de hablar, mi hermana seguro me daría las gracias o mi padre.
Abrí la puerta Luis estaba parado y mi hermana hincada frente a él chupándole el pene. –Maldito deja a mi hermana! –qué te pasa estúpido yo no hago nada, es ella la que me pidió esto. –Cállate no mientas. Mi hermana se paró y fue a taparse con una sábana. –sal de mi cuarto estúpido, ¿no te enseñaron a tocar antes de entrar? –hijo de puta. Me acerque a él, estaba por sacar el cuchillo cuando mi madre grito desde afuera del cuarto – ¡cállense los dos! –mamá, estaba dándole nalgadas a Daniela lo escuche, y ahora están desnudos mientras Daniela le chupaba el pene. –Cállate, ella es suficientemente grande para defenderse en caso de que no quiera algo. –tienes toda la razón, aparte ella se ofreció, al igual que me pidió que le diera un masaje en sus nalgas, ella fue la que se desnudó y se durmió aquí.
- ¡Ahora mismo llamare a mi padre para que le ponga fin a esto! –ándale llámalo, que esperas ¿crees que me da miedo que me corra de su casa? Hazlo para que veas como tu madre se va conmigo por voluntad propia. –jaja estas pendejo si crees que mi mamá se va a ir contigo, ella no dejara esto por tu miseria, no tienes nada que ofrecerle. –¿nada? Solo te recuerdo como la hago gritar en las noches de placer, y es por eso que ella se iría conmigo. –mamá. No pude decir otra cosa más que eso, lo que dijo mi tío era verdad pero sabía que mi mamá no dejaría a su familia por él, por un desconocido, un familiar que no veíamos desde años. –hijo perdón, la primera vez que tu tío me toco, yo lloraba, cuando me penetro yo lloraba de dolor, el saber que estaba destruyendo nuestra familia solo por el hecho de que tu tío me estaba penetrando, pero la segunda vez que lo hiso, esa ves que llego a mi cuarto a las 3 de la mañana y me despertó a besos y caricias, supe en ese mismo momento que ya no era de tu padre, ahora era de su hermano, de tu tío. Lamento entrar en detalles pero lo tengo que hacer para que me entiendas, esa noche tu tío me mantuvo despierta desde las 3 que llego hasta las 7 en que me fui a bañar para hacer tu desayuno.
Fueron horas de placer, tenía años sin que alguien me besara como él lo hacía, sin que me tocaran, me penetro tantas veces como para tener tres orgasmos durante toda la noche, tu padre si acaso fue uno, un orgasmo con él en todo el matrimonio. Prefiero irme con Luis a quedarme aquí a ser infeliz.
-lo ves, el sexo es algo impresionante cuando se estimula adecuadamente, yo lo hice con tu madre y ahora es mía, ella misma lo dijo y después de ella sigue tu hermana, crees que me dio el culo para dos masajes solo porque le dolía ese pequeño moretón? Tú mismo la viste ahorita ella me chupaba el pito sin que yo la obligara.
-maldito estúpido. Saque el cuchillo, mi mamá y mi hermana me gritaban cosas pero no escuche que decían estaba tan enojado que no escuchaba lo que decían. Me avente contra Luis con el cuchillo por delante pero él se quitó, gire la cabeza para ver donde estaba, lo único que vi fue su puño venir directo a mí, me tiro de un solo golpe, tenía la vista nublada, mi madre estaba a mi lado levantándome mientras yo la aventaba sin fuerzas.
- ¡Paren esto! Grito mi madre, quizás fue el grito más fuerte de su vida. –Perdón, pero me tuve que defender no le quise hacer daño a tu hijo en cambio el si me quería hacer daño. –Hijo será mejor que vayamos a la sala a platicar tu y yo solos. –No quiero hablar contigo –está bien cariño, yo hablo con él. Mira puedes acabar con tu familia, decirle a tu padre todo esto, pero estoy seguro que no volverás a ver a tu madre y no porque ella no quiera si no porque tendrás un odio tan grande que no la querrás ver, tu mamá tenía meses sin sexo, años sin un orgasmo las mujeres necesitan atención pero si tu quieres yo te puedo enseñar cosas, cosas sobre cómo tratar a una mujer, como darles orgasmos todo esto de la mano de tu mamá, yo sé que alguna vez te has masturbado pensando en ella, he visto cómo te comes su culo con la mirada, como te comes sus tetas cuando se mueven, estoy seguro que tu mamá está dispuesta a ser nuestra modelo para que tu aprendas a dar un buen sexo –Amor si tu no le dices a tu padre podremos vivir aquí, estar todos juntos, felices, tu hermana seguirá en el cole y tu podrás poner el negocio que quieras, y yo estoy dispuesta a hacer lo que sea por ti para que seamos felices. Mi mamá me dijo todo eso cuando estábamos en el piso mientras me abrazaba. –Eduardo no dejes que tu ego se interponga en lo que quieres, lo que quieres es ver a tu familia unida y a tu mamá, el amor de una madre a un hijo no tiene barreras es por eso que le puede dar tanto amor como su hijo lo quiera. Me levante aun un poco aturdido, mi madre me ayudo a bajar las escaleras y me llevo a mi cuarto de la mano aunque no lo necesitaba, -te amo hijo. Me beso la frente y se fue.
Mi papá es abogado y muchas veces sale a otras ciudades, lo veo pocas veces. Todo era muy normal yo despertaba tarde y el desayuno ya estaba listo, la mayoría de veces o todas desayunaba solo, porque mi tío y mi mamá desayunaban temprano juntos, mi papá y mi hermana desayunaban aún más temprano para ir al colegio y al trabajo.
En mi familia todos tenemos buen cuerpo, tenemos gimnasio en casa no es de lujo pero sirve para los ejercicios básicos, los únicos que no tienen buen cuerpo es mi papá por su trabajo y mi tío que jamás ha ido a un gimnasio.
Mi mamá con la presencia de mi tío era reservada, ya no usaba sus camisones pegados en las mañanas o si usaba eran unos camisones que no eran pegados y eran largos. Pero en una mañana cuando salí de mi cuarto para desayunar vi a mi mamá (yisela) con un camisón pequeño, demasiado pequeño.
-hijo, ¿has visto alguno de mis camisones?
-no mamá ¿porque?
-lo que pasa es que no encuentro uno.
-¿y los demás?
-sucios y rotos
-¿rotos?
-si supongo que por viejos
La verdad es que me encantaba ver a mi mama en ese camisón, ya tenía bastantes meses sin verla así por mi tío, siempre desayuno en el comedor pero ese día decidí desayunar en la sala mientras mi mamá limpiaba un poco la sala para ver sus piernas, debes en cuando le podía ver el inicio de sus nalgas.
Los próximos días cuando despertaba mi mamá estaba con camisones igual de pequeños, apenas y se agachaba y se le veía su calzón. Decidí despertarme más temprano solo para ver como actuaba mi tío me daba muchísima curiosidad. Y así fue puse mi alarma y salí mi mamá se sorprendió al verme temprano ya que nunca hacia eso, lo que vi fue muy normal un señor muy respetuoso con una dama que casi mostraba la cola. Fue hasta casi 4 días después que mi tío empezaba a ver a mi mamá un poco más, hasta llegar al punto en que a mi tío (Luis) se le caían los cubiertos y mi mamá muy amablemente los levantaba y mi tío no perdía detalle de nada.
En ese momento me di cuenta del tipo de hombre que era (eso creía yo) por lo que en lugar de pasarme la mayoría del tiempo con mis amigos o en mi cuarto decidí prestarle más atención a él durante el día.
Una semana observando lo que hacía mi tío me di cuenta que cuando mi mamá hace la comida (a las 12 casi siempre) mi tío llegaba y le pegaba su “paquete” a las nalgas de mi mamá, ella se quitaba pero mi tío insistía hasta que casi se daba por vencida y lo dejaba, o que cuando mi mamá iba al gimnasio y se subía a la caminadora mi tío usaba la bici que estaba justo atrás de la caminadora, se le quedaba viendo todo ese rato lo que era bastante normal debido al tamaño de nalgas que tiene mi madre pero cuando mi tío se baja de la bici se le podía notar muy claramente su paquete bien marcado.
Pero nada fue tan grave como el lunes cuando regrese a casa después de salir con mis amigos.
Después de desayunar me di un baño, tenía planeado salir a jugar futbol con unos amigos en unas canchas que estaban atrás de mi casa, salí de casa como a las 10 en ocasiones después de un partido vamos a comer a casa de alguien o al centro comercial que está cerca del fraccionamiento.
Ya teníamos un par de horas jugando, en realidad era menos porque siempre platicamos al inicio y tardamos en empezar. En eso estábamos cuando el balón se bolo a mi casa, me brinque por el patio trasero ya que es una barda no muy alta no fue difícil además no es la primera vez, regrese el balón mientras yo fui a tomar agua a la cocina, apenas entre unos metros a la casa cuando escuche unos gritos, de inmediato me quede parado sin saber qué hacer, para enseguida correr para ver qué pasaba corrí un poco pero me detuve en seco hasta casi caerme, lo que vi fue a mi mamá con mi tío.
Mi mamá estaba de rodillas en el sillón de la sala, apoyando sus manos en el respaldo y mi tío Luis de perfil por lo que no me veían, mi mamá estaba en ropa interior mientras mi tío le daba tremendas nalgadas supongo que le decía algo porque se le acercaba a su oído pero no escuchaba palabra alguna. Cada que mi tío le decía algo mi mamá gritaba “nooo” y después otra nalgada.
Tras cada que mi mamá se negaba venia una nalgada a un más fuerte, yo estando a unos 6 metros podía ver su nalga roja.
-por favor ya no.
-entonces acepta mi trato, yo sé que tú quieres deja atrás tus modales
-¿y mi esposo qué? Mis hijos!
-jaja tu esposo nunca esta y tus hijos entenderán que una mujer como tu necesita de...
-¡no!
-como quieras. Luis se quitó el cinturón lentamente mientras mi mamá lo veía con sus hermosos ojos bien abiertos, su cara cambio ahora era de espanto antes trataba de mantener la calma o eso parecía.
Cuando se quitó por completo el cinturón tomo los dos extremos con la mano derecha y le soltó un golpe, mi mamá en cambio soltó un ruido, era un grito ahogado.
-¡está bien! Pero para por favor. Mi tío no dijo nada solo se puso el cinturón y se fue. Apenas vi que se iba me fui al jardín, vi que ya no estaban mis amigos y salí de la casa, no volví enseguida a la casa primero fui a caminar por el fraccionamiento. Cuando regrese a casa estaba mi tío en la sala.
-¿y mi mamá?
-bañándose. Me lo dijo con una pequeña sonrisa, una sonrisa de tranquilidad y felicidad.
Mi mamá en las mañanas ya siempre usaba camisones cortos, mi tío siempre la veía aunque yo estaba presente, eso me ponía a pensar como era cuando yo no estaba. Durante el día mi mamá usaba shorts, leggings, faldas, etc. cosa que usaba pocas veces pero de un tiempo en adelante siempre usaba esas cosas y eran bastante provocativas, llegaba a sentirme mal porque yo veía a mi madre con otros ojos y me excitaba verla mientras andaba por la casa.
Era un martes cuando en la comida mi papá nos dio una noticia (muy común) nos dijo que tenía un caso importante y no estaría por dos semanas como mínimo, por lo general cuando sale por bastantes días son casos de asunto penal. Esa misma noche se fue, lo único malo es que yo tendría que llevar a mi hermana a la escuela y levantarme temprano porque según esto los taxis no son muy confiables pero bueno me tenía que levantar a las 7:30.
A la noche siguiente desperté porque tenía que ir al baño y hasta me dolía el vientre, rápidamente fui al baño, sentí un gran alivio que hasta me quede sentado mientras seguía sentado escuche unos ruidos lo que hizo que prestara atención, salí del baño sin jalar la palanca del retrete, el cuarto de mis papás está casi al lado del baño y de ahí venían los ruidos, pegue mi cara a la puerta. Escuchaba el movimiento de la cama era un ruido constante, en ocasiones se escuchaba un gemido me quede como menso 5 minutos sin moverme solo escuchando no pensaba nada, sentía mis manos frías con un poco de sudor, no lo podía creer mi mamá estaba con alguien en su cuarto rápidamente pensé en mi tío.
Con mis pies descalzos subí las escaleras y vi que la puerta del cuarto de mi tío estaba abierta entre, con la poca luz que llegaba de la ventana pude ver un poco la cama estaba vacía, mi tío Luis no estaba baje las escaleras y me metí a mi cuarto tarde un poco en dormir no podía creer lo que pasaba, por mi mente pasaban mil ideas de cómo y porque pasaba eso.
En la mañana después de llevar a Karen a la escuela me dispuse a buscar cámaras de vigilancia o espías, eran caras pero por suerte tenía dinero en mi cuenta de banco cada semana mi papá me depositaba un poquito pero casi no ocupaba el dinero, después de buscar y buscar me encontré con unas cámaras pequeñas, grababan video, audio tenían visión nocturna y el video lo mandaba directo a una computadora, eran perfectas.
Necesitaba una para el cuarto de mamá, para la sala, cocina y otra para el cuarto de mi tío, me puse en contacto y por comprar 4 cámaras me hicieron un pequeño descuento, hice una transferencia y mis regalitos llegarían en 24 o 48 horas.
Llegaron en un día y medio yo mismo fui por ellas no quería que llegaran a casa y las recibiera mi mamá o alguien más.
Para poner las cámaras le dije a mi mamá que deberíamos ir a comer a un restaurante y hasta le di un poco de dinero para que se animara y acepto al día siguiente íbamos a comer los cuatro yo había ido con un amigo y supuestamente iba a llegar al restaurante pero no llegue, a donde llegue fui a la casa le puse unas excusas a mi mamá del porque no podría llegar a comer.
Fue fácil esconder las cámaras las ponía en las esquinas de la ventana donde estaba la cortina y no se podían ver, las configure y en una hora y media ya las tenía puestas.
Esa noche cuando todos estaban dormidos encendí mi computador, tenía ganas de espiar por las cámaras, mi mamá estaba frente a su espejo quitándose el poco maquillaje que usa, salió al baño por lo que mejor puse el seguro de la puerta, cuando regreso a su cuarto se empezó a quitar su ropa, estaba en ropa interior usaba un bóxer cachetero muy juvenil, mi madre no usa tangas (he visto su cajón de ropa) se sentó en la cama y se quitó su bóxer y se puso una tanga, yo me quede con la boca abierta era obvio que mi información no estaba al día, tenía una erección tremenda, mi mamá se acostó bocabajo en ese momento me quite la ropa para masturbarme sus nalgas eran grandiosas, estaba súper atento viendo que pasaba cuando la puerta se abrió y entro mi tío Luis.
Los dos se empezaron besar apasionadamente, mientras se tocaban mi mama se sentó en las piernas de mi tío apenas se sentó en sus piernas ella se empezó a mover, movía sus caderas lentamente pero de una forma seguramente delicioso, mi tío claro que no perdía el tiempo le estaba tocando sus tetas, que digo tocando se las aplastaba, era delicioso ver las tetas grandes de mi mamá ser aplastadas por unas manos relativamente grandes, mi mamá se paró y se quitó el bra dejando sus tetas desnudas se volvió a sentar en sus piernas como toda una putita, mi tío le aplastaba sus pezones, rodeados de una aureola hermosa bastante grande.
Mi mamá le saco el pene para masturbarlo lentamente, mi tío por su parte quito a mi mamá y la puso de rodillas en el piso era obvio lo que buscaba y mi mamá lo entendió abrió su boca para que entrara el pene que tanto esperaba, lo lambia desde los huevos hasta el glande, se lo metía totalmente a la boca así duro un par de minutos, cuando mi mamá se paró vi sus rodillas rojas y callo a la cama, mi tío le había dado un empujón fuerte, la jalo de un brazo hasta que la cabeza de mi madre quedo a la orilla de la cama, mi tío metió su pene a la boca se lo metía hasta adentro y no tardo en sacarlo y meterlo rápidamente, mi mamá tocia solo para escupir saliva pero eso no le importaba a mi tío ya que seguía metiendo el pene en su boca a gran velocidad.
Ver a si a mi mamá me ponía loquísimo era una puta sumisa, la puta más sucia que entregaba el culo al hermano de su esposo y hacia lo que él quería, estaba llena de baba con un pito en su boca, la mujer que algún día fue decente ya no existía.
Mi tío la tomo del cabello y la puso en cuatro, la penetro bruscamente y jalaba su cabello mi mamá no gemía gritaba y pedía más no sé qué le pasaba, cuando tenía sexo con mi papá apenas y escuchaba el ruido de la cama, con mi tío escuchaba los gritos de mi mamá hasta mi cuarto y los golpes de las caderas de mi papá con las nalgas de mi madre.
Tuve un orgasmo impresionante y ya ni me interesaba saber que más pasaba, yo ya estaba satisfecho y sabía que mi mamá era una tremenda zorra.
En la mañana cuando lleve a mi hermana a la prepa me dijo.
-Vaya noche que se dio mi mamá en la noche. Yo me quede paralizado no creía que ella estaba enterada de la situación.
-¿Qué? – ¿no te diste cuenta de lo que paso en la noche? Mi mamá lo disfruto a lo grande que envidia, además hace unos días que mi mamá siempre le toca el paquete a mi tío, como no te das cuenta de nada.
-sí, si lo sé pero no creía que tú estabas enterada. –Tengo solo 18 años pero no soy mensa. Adiós bobo nos vemos en la tarde.
Creí haber escuchado salir de la boca de mi hermana un qué envidia, se refería a mi mamá, ¿escuche bien?
Pasaron dos días en los que mi mamá y mi tío no tenían sexo pero eso sí, en el día se tornaban muy íntimos, mi mamá se acostaba sobre mi tío, iban de compras en el carro de mi padre pero era mi tío quien siempre lo utilizaba, se albureaban, se hacían “cosquillas” e inclusive mi mamá se llegó a sentar en las piernas de mi tío.
Otra cosa que cambio fue la confianza entre mi tío y mi hermana. Un día ella llego a la sala donde él y yo veíamos tele. –tío Luis, en la escuela me caí me duele mucho mis pompis al sentarme creo que se me hizo un moretón gigante. –ay pobrecita mmm porque no vas con tu mamá? Será mejor que ella te revise, ya le comente pero me dijo que ya se me quitara el dolor, no me hizo caso. –ya veo pero no creo que sea buena idea que yo te ponga una pomada o te revise en esa parte te puede incomo… -no, no tío si vengo contigo es porque tengo confianza. Mi hermanita linda no había dejado ni terminar de hablar a mi tío, enseguida mi tío entro en confianza al igual que mi hermana, apenas mi tío dijo está bien ella se levantó su faldita escolar y le mostro las nalgas. –no, no hermosa será mejor que vayamos a mi cuarto. Lo digo viéndome a mi claro que querían privacidad, Luis tomo a Daniela de la mano y se fueron.
Lo que no sabían era que yo podía ver todo, me fui a mi cuarto para ver qué pasaba. Mi hermana se subió a la cama y se levantó su falda, quedando su calzoncito al aire libre, por lo que veía el moretón si era algo grande pero para exagerar tanto. Luis le palpaba las nalgas preguntándole a la ves donde le dolía. –aaay ahí me duele más. – ¿aquí? –uuuf no mucho mmm. – ¿entonces te duele más debajo de tu calzón? –mmm si tío, ¿ya me vas a poner la pomada? Para que me ayudes a quitarme mi ropa interior –no, ¿no cómo crees? No puedes estar aquí desnuda. – ¿entonces me pongo tanga? –¿tu usas? –Tengo algunas pero nadie sabe, puedes ir por una a mi cuarto –¿En dónde están? –en el cajón de mi ropa interior está en el closet, pero están hasta el fondo, quizás debas quitar lo demás primero. –ok ya regreso.
Luis fue al cuarto de Daniela y busco en varios cajones hasta que encontró el de la ropa interior, saco un par de prenda para poder llegar al fondo, no le importaba desacomodar todo cuando llego a las tangas saco todas las prendas y se puso a verlas y se fue con una en la mano, volvió a guardar los calzones y se fue.
-¿Esta está bien? –si la que sea. Dijo sin voltear a verla, solo se intentó quitar el calzón que tenía puesto pero sin pararse. Lo que me pareció algo tonto como pretendía quitarse la ropa interior y ponerse su dichosa tanga sin moverse y sin esfuerzo, rápidamente Luis le dio su ayuda la cual Daniela acepto.
Mi tío tomo con sus dos manos el calzón de mi hermana y se lo quito de una sola ves tirándolo al piso, después tomo la tanga y se la puso lentamente como disfrutando el momento, al igual que yo lo hacía de cierta forma. Fue entonces que pude ver que linda tanga le había puesto, una tanga blanca de hilo dental, con un lindo moñito atrás color negro como si adornara un valioso regalo el cual sería sus nalgas.
Se veía muy hermosa mi hermana, acostada en una cama con su uniforme escolar con tanga esperando a que le sobaran el culo. Luis fue por una crema y se la puso en donde estaba el moretón. –aay, está muy fría. Mi tío respondió a esto echándole vapor cliente de su boca por lo que se acercó bastante a su nalga con su boca, le volvió a poner crema ahora en ambas nalgas, sus nalgas estaban a completa disposición de mi tío, empezó con masajes suaves tocando solo lo necesario y con las yemas de los dedos y así fue por dos minutos o menos pero mejor fui al baño, no tarde ni 5 minutos y ahora veía a mi tío dándole un masaje con gran firmeza sobre ambas nalgas, con ambas manos empezaba el masaje en la pierna haciendo presión y subiendo hasta la nalgas cuando llegaba a las nalgas mi hermana se quejaba un poco por el dolor pero no se quitaba, el masaje se ponía más interesante y yo lo notaba con la erección que tenía.
Por la fuerza del “masaje” de mi tío las nalgas de Daniela se movían demasiado, en ocasiones sus dedos se perdían en medio de sus nalgas, no sé qué diablos le daba masaje entre ambas nalgas y aunque duraba poco me daba cierto coraje.
-ya termine hermosa. –Aah, casi me quedo dormida muchas gracias tío, me gustó mucho. –De nada si te duele más me dices. –claro, oye ¿me puedes llevar a mi cuarto? Mi tío la tomo en sus brazos y se la llevo cargando hasta llegar al cuarto de ella. Se quedó dormida hasta que llego la cena salió a comer.
Al terminar la cena ella le dijo algo que mi mamá ni hiso caso más que yo –tío, me voy a bañar ¿cuando salga puedo ir a tu cuarto? –si claro.
Espere a que se saliera de bañar, cuando lo hiso se fue a su cuarto ahí se secó un poco y dejo la toalla mojada en el piso para tomar una seca, se la puso y fue al cuarto de Luis. Yo no entendía bien que iba hacer desnuda salvo por una toalla que la cubría al cuarto de mi tío a las 11 de la noche.
-Hola Daniela ¿qué pasa? –solo quiero saber si aún se ve muy mal el moretón. –Yo creo que si solo han pasado una hora, tardara un par de días en quitarse –mmm bueno –pero si quieres te pongo pomada quizás eso junto con un buen masaje ayude en algo. –sí, si ayuda. Se quitó la toalla y se acostó, estaba completamente desnuda sobre la cama de Luis, el no dijo nada enseguida le puso la crema y empezó el masaje esta ves empezó con fuerza, agarraba sus nalgas con ambas manos y las apretaba.
Estuve viendo por 10 minutos más, después de una buena paja y manchar el monitor con semen me fui a dormir. Desperté temprano eran como las 8:00 0 7:30 vi la cámara del cuarto de Luis y ahí estaba mi hermanita desnuda dormida junto a mi tío. Como era sábado mi mamá aún no se despertaba pero si se enteraba que Daniela se había dormido en el cuarto de mi tío en esas condiciones seguro la mataría. No supe que hacer a esa hora y me volví a dormir después de ir al baño.
Cuando desperté ya estaban los 3 en el comedor comiendo, me senté a comer y el resto del día paso con normalidad, si así se puede decir, mi madre seguía de cariñosa con mi tío frente a mí y Daniela pero ni uno de los dos decíamos una palabra ni cuando nos sentamos a ver una película en la noche y mi mamá se sentó durante toda la película en las piernas de mi tío, a mitad de la película mi mamá fue por una cobija para ellos, se sentó en él y se cobijaron, si bien ellos no estaban justo delante de mí los podía ver solo haciendo un pequeño esfuerzo, cuando giraba los ojos para verlos solo veía moverse la cobija porque aunque estuviera todo obscuro el brillo de la tele ayudaba para ver que se movía un poco la cobija.
Esa noche cuando todos nos fuimos a dormir no tenía ganas de ver a mi madre tener sexo con mi tío, el hermano de su esposo, no sé porque no tenía ganas pero estaba muy seguro que iban a tener un buen sexo, durante toda la película se estuvieron tocando, solo esperaban la hora para que la película terminara y mandarnos a dormir.
Cuando desperté me quede un momento acostado, pensando en lo difícil que había sido esa semana, ver a mi madre ser penetrada por tu tío, ver a tu hermana de 19 años enseñando el culo, durmiendo con tu tío el amante de tu madre. A pesar de ser testigo de cómo mi familia podría quedar destruida cuando mi padre se enterase de esto yo me excitaba en pensar e imaginar a mi madre ser penetrada y humillada por mi tío, me excitaban las nalgas de mi linda hermana, ser manoseadas por mi tío, me encantaban sus morenas nalgas, con esa sonrisa tan bella de ella y su cabello largo hasta las nalgas.
Cuando salí de mi cuarto, había pasado una media hora desde que me desperté, como de costumbre fui a la cocina para ver que había para desayunar, mi tío estaba en el comedor sentado de lado viendo hacia la cocina, estaba congelado que ni me saludo porque no me volteo a ver, cuando entre a la cocina vi a mi madre con un Baby Doll, si con uno de esos que no te tapan nada.
-¿Qué diablos haces así vestida!? –¿no te gusta hijo? –no, ¡claro que no! Ponte algo decente que estas frente a Luis. –no me importa que no te guste, no me lo puse para enseñártelo a ti aparte que tiene de malo, él es parte de esta familia. – ¿y ya por eso te pones eso!? –qué te pasa, no tiene nada de malo, somos adultos, ¿crees que él no ha visto a otras mujeres? No me importa que no te guste como me visto no por eso voy a estar como las mujeres del oriente, todas tapadas! –¡Claro que ha visto a otras mujeres Te ha visto a ti! Eres una zo… Mi madre no me dejo terminar de hablar, me freno con una fuerte cachetada que hiso que mi cara se pusiera roja y me ardiera. Quizás lo hiso por miedo, sabía que si no me detenía yo seguiría hablando, hablando de cómo le es infiel a mi padre con su hermano y en su propia casa. Debo aceptar que se me salieron unas lágrimas, no por dolor si no porque mi madre jamás me había levantado una mano.
-Porque no agarras el carro y te vas a comer a otro lado, yo no hare comida para ti. Ni si quiera la volteé a ver solo fui por las llaves y me fui.
Regrese a casa hasta las 3, la mayor parte del tiempo me la pase conduciendo por la ciudad sin rumbo con una cerveza en mano, no pensaba muy claro y aun no lo hacía después de eso no sabía lo que pasaría. No quería entrar a la casa, cada vez mi familia tendía de un hilo más delgado para que todo se fuera al infierno yo no sabía si era capaz de contarle lo que pasaba a mi papá. No metí el carro a la cochera pensé que mi madre al verme me iba a correr de la casa de nuevo o íbamos a discutir así que deje el carro afuera para irme rápido en caso de que fuese necesario.
Estaba la casa sola, no escuchaba ni una tele, ni música, nada. Fui al cuarto de mi hermana para ver si mi mamá le había dicho algo de mí pero no la encontré, fui a mi cuarto a ver las cámaras, no estaba en la sala, cocina, comedor, gimnasio ni en el patio pero mi mamá si estaba en su cuarto, con una toalla en el cuerpo y con ropa en la cama, lo primero que pensé es que se iba de la casa, pero claro que no, no había ni una maleta y no era capaz de ir se así como así, siempre la había mantenido mi papá bueno nos mantiene a todos. No quería ver la cámara del cuarto de mi tío, me daba asco verlo y saber que él era el culpable de todo, y más asco el pensar que mi madre quedara embarazada de el, pero aun así vi la cámara.
Mi hermana estaba en 4 en la cama mientras mi tío le daba nalgadas, no muy fuertes como se las dio a mi madre pero lo suficientemente fuerte para que sus nalgas estuvieran rojas. Me enoje muchísimo, no era posible que ese animal le hiciera eso a mi hermanita, me pare apague el monitor y fui a la cocina por un cuchillo, me lo puse al lado de mi cintura dentro del pantalón por si las cosas se ponían muy feas, cuando estuve afuera del cuarto de Luis me quede un momento pensando si era lo correcto. Lo único que pensé era en ponerle un alto, sabía que mi mamá estaba fuera de control y me odiaría el resto de la vida por haber corrido a su amante, ella lo amaba tanto como para usar baby doll, como para sentarse en sus piernas. No me importo que me dejara de hablar, mi hermana seguro me daría las gracias o mi padre.
Abrí la puerta Luis estaba parado y mi hermana hincada frente a él chupándole el pene. –Maldito deja a mi hermana! –qué te pasa estúpido yo no hago nada, es ella la que me pidió esto. –Cállate no mientas. Mi hermana se paró y fue a taparse con una sábana. –sal de mi cuarto estúpido, ¿no te enseñaron a tocar antes de entrar? –hijo de puta. Me acerque a él, estaba por sacar el cuchillo cuando mi madre grito desde afuera del cuarto – ¡cállense los dos! –mamá, estaba dándole nalgadas a Daniela lo escuche, y ahora están desnudos mientras Daniela le chupaba el pene. –Cállate, ella es suficientemente grande para defenderse en caso de que no quiera algo. –tienes toda la razón, aparte ella se ofreció, al igual que me pidió que le diera un masaje en sus nalgas, ella fue la que se desnudó y se durmió aquí.
- ¡Ahora mismo llamare a mi padre para que le ponga fin a esto! –ándale llámalo, que esperas ¿crees que me da miedo que me corra de su casa? Hazlo para que veas como tu madre se va conmigo por voluntad propia. –jaja estas pendejo si crees que mi mamá se va a ir contigo, ella no dejara esto por tu miseria, no tienes nada que ofrecerle. –¿nada? Solo te recuerdo como la hago gritar en las noches de placer, y es por eso que ella se iría conmigo. –mamá. No pude decir otra cosa más que eso, lo que dijo mi tío era verdad pero sabía que mi mamá no dejaría a su familia por él, por un desconocido, un familiar que no veíamos desde años. –hijo perdón, la primera vez que tu tío me toco, yo lloraba, cuando me penetro yo lloraba de dolor, el saber que estaba destruyendo nuestra familia solo por el hecho de que tu tío me estaba penetrando, pero la segunda vez que lo hiso, esa ves que llego a mi cuarto a las 3 de la mañana y me despertó a besos y caricias, supe en ese mismo momento que ya no era de tu padre, ahora era de su hermano, de tu tío. Lamento entrar en detalles pero lo tengo que hacer para que me entiendas, esa noche tu tío me mantuvo despierta desde las 3 que llego hasta las 7 en que me fui a bañar para hacer tu desayuno.
Fueron horas de placer, tenía años sin que alguien me besara como él lo hacía, sin que me tocaran, me penetro tantas veces como para tener tres orgasmos durante toda la noche, tu padre si acaso fue uno, un orgasmo con él en todo el matrimonio. Prefiero irme con Luis a quedarme aquí a ser infeliz.
-lo ves, el sexo es algo impresionante cuando se estimula adecuadamente, yo lo hice con tu madre y ahora es mía, ella misma lo dijo y después de ella sigue tu hermana, crees que me dio el culo para dos masajes solo porque le dolía ese pequeño moretón? Tú mismo la viste ahorita ella me chupaba el pito sin que yo la obligara.
-maldito estúpido. Saque el cuchillo, mi mamá y mi hermana me gritaban cosas pero no escuche que decían estaba tan enojado que no escuchaba lo que decían. Me avente contra Luis con el cuchillo por delante pero él se quitó, gire la cabeza para ver donde estaba, lo único que vi fue su puño venir directo a mí, me tiro de un solo golpe, tenía la vista nublada, mi madre estaba a mi lado levantándome mientras yo la aventaba sin fuerzas.
- ¡Paren esto! Grito mi madre, quizás fue el grito más fuerte de su vida. –Perdón, pero me tuve que defender no le quise hacer daño a tu hijo en cambio el si me quería hacer daño. –Hijo será mejor que vayamos a la sala a platicar tu y yo solos. –No quiero hablar contigo –está bien cariño, yo hablo con él. Mira puedes acabar con tu familia, decirle a tu padre todo esto, pero estoy seguro que no volverás a ver a tu madre y no porque ella no quiera si no porque tendrás un odio tan grande que no la querrás ver, tu mamá tenía meses sin sexo, años sin un orgasmo las mujeres necesitan atención pero si tu quieres yo te puedo enseñar cosas, cosas sobre cómo tratar a una mujer, como darles orgasmos todo esto de la mano de tu mamá, yo sé que alguna vez te has masturbado pensando en ella, he visto cómo te comes su culo con la mirada, como te comes sus tetas cuando se mueven, estoy seguro que tu mamá está dispuesta a ser nuestra modelo para que tu aprendas a dar un buen sexo –Amor si tu no le dices a tu padre podremos vivir aquí, estar todos juntos, felices, tu hermana seguirá en el cole y tu podrás poner el negocio que quieras, y yo estoy dispuesta a hacer lo que sea por ti para que seamos felices. Mi mamá me dijo todo eso cuando estábamos en el piso mientras me abrazaba. –Eduardo no dejes que tu ego se interponga en lo que quieres, lo que quieres es ver a tu familia unida y a tu mamá, el amor de una madre a un hijo no tiene barreras es por eso que le puede dar tanto amor como su hijo lo quiera. Me levante aun un poco aturdido, mi madre me ayudo a bajar las escaleras y me llevo a mi cuarto de la mano aunque no lo necesitaba, -te amo hijo. Me beso la frente y se fue.
9 comentarios - El hermano de mi papá llega a vivir a nuestra casa
Muy buena historia, muy bien relatada, felicito al autor Angel Lugo y a ti te doy las gracias por compartirla 👍
Yo comenté tu post, la mejor manera de agradecer es comentando alguno de los míos...