¡Hola a todos! Paso a contarles la segunda etapa de la exploración de mi lado bisexual. La primera parte la pueden encontrar en mi primer relato "Mi primera experiencia con un hombre" y lo más reciente en "Mi tarde gay con Juani". En esta ocasión decidí ilustrar el relato con más imágenes que el anterior porque como dicen; "Una imagen vale más que mil palabras.". Disculpen si no publico más relatos pero, al menos por ahora, solo voy a compartir lo que me pase de verdad ya que poner mis nuevas experiencias fue el puntapié inicial para crear esta cuenta en primer lugar.
Bueno, sin más preámbulos...
Cuestión que el Jueves pasado estaba hablando con un amigo gay (él no sabe de mis nuevas incursiones jaja) a raíz de que yo le había mandado un mensaje por su cumpleaños. Ahí me cuenta que iba a hacer esa misma tarde una pequeña reunión para festejar, a la cual me invitó y acepté. Una vez ahí constaté que la reunión no tenía nada de pequeña; había mucha más gente de la que yo esperaba. Le di el regalo a mi amigo, charlamos un rato y todo siguió como cualquier otro cumpleaños. Un rato después tocaron el timbre y el agasajado fue a abrir. Cuando volvió con el recién llegado, se me cayó el culo al piso... Era un bombón! Alto, rubio, ojos oscuros y no grandote pero armadito. Una vez que vi que se había quedado solo, me acerqué, nos presentamos (dijo llamarse Mauro) y empezamos a hablar... Charla va, charla viene, se dio cuenta de mis intenciones y sutilmente me dijo "Podríamos vernos un día de estos si queres..." a lo que entusiasmado contesté que si, intercambiamos teléfonos y seguimos charlando como si nada...
Al otro día a la tarde recibo un mensaje:
Mauro: "¿Tenes ganas de que nos veamos?"
Yo: "Sí, obvio, ¿Cómo querés que arreglemos?"
Mauro: "Si queres nos podemos juntar en mi casa..."
Yo: "Dale, después pásame tu dirección y a que hora te parece."
Mauro: "Buenísimo! Nos vemos :)"
Pasaron unos segundos y decidí arriesgarme
Yo: "Igual somos nosotros dos nomas?"
Mauro: "Sí. ¿Por qué? ¿Esperabas a alguien más? Jaja"
Yo: "No, pero si queres invitar a algún amigo tuyo... ;)"
Mauro: "Ah bueno. Eso se puede arreglar. Después te aviso."
Yo no podía creer lo fácil que había sido... Al otro día al mediodía me llega otro mensaje de Mauro con su dirección, la hora y "Al final viene un amigo que trabaja en el gimnasio de acá a la vuelta.", A lo que yo respondí que lógicamente no había ningún problema sino más bien todo lo contrario...
El día en cuestión, me preparé y fui al departamento de Mauro. Una vez en su casa nos sentamos en el sillón a ver tele mientras esperábamos a que llegara su amigo. Obviamente no pasaron ni 10 minutos que ya estábamos chapando y manoseándonos. Así estuvimos unos 20 minutos hasta que nos interrumpió el tan esperado timbrazo. Era un poco más bajo que Mauro y yo, morocho, ojos marrones y, como me había sido prometido, todo marcado. Mauro nos presentó; me dijo que se llamaba Nahuel. Ni bien entró el invitado al departamento, Mauro le tocó el culo y él se dio vuelta y empezaron a chapar.
Mientras yo seguia apretando con Mauro, Nahuel se puso detrás mío, me apoyó y empezó a manosearme. Empezamos a desnudarnos entre los tres. Una vez en bolas nos obviamente notamos que los tres estábamos al palo y que, sin ánimos de agrandarme, esta vez era yo el de la pija más grande. No por esto quiero decir que las pijas que me rodeaban eran chicas ni mucho menos; eran normales; de hecho, la de Nahuel era más gorda que la mía. Me di vuelta les puse una mano en el pecho a cada uno y les di un empujoncito para darles a entender que se sentaran en el sillón, mensaje que entendieron enseguida. Se sentaron y yo, ni lento ni perezoso, me arrodillé entre las piernas abiertas de Nahuel y empecé a chupársela y a pajearlo a la vez mientras que con la otra trataba de pajear a Mauro (Debo admitir que aunque en la porno que vi le salía fácil, en vivo no es nada simple coordinar todo eso jaja). Como sea en un momento Mauro se levantó del sillón, se puso de nuevo detrás mío y empezó a acariciarme la espalda mientras me apoyaba la pija contra el culo; y así fue bajando por la espalda hasta que llegó a los cachetes del culo, los separó y empezó a meter despacito un dedo adentro con lo que yo me empecé volver loco. A todo esto ya en lugar de chuparle la pija a Nahuel, se la besaba y acariciaba intercalando alguna chupada para que no se calentara mucho y acabara.
Una vez que Mauro tuvo tres dedos adentro mío (Sí, ¡Tres! Empezó de a poquito pero como lo dejé, siguió jaja), los sacó y así nomás me metió toda la pija adentro casi de un saque (lo que me dolió un poquito debo admitir) y empezó a cogerme muy muy despacito mientras me masajeaba y abría los cachetes del culo y yo gemía sin parar... Nahuel se empezó a tocar mirándonos. Mauro paró de darme, se levantó, me miró y me dijo "Ahora me toca a mi..." y me sonrió. Yo le devolví la sonrisa y le dije "Y pero entonces, ¿A mi quién me atiende?" y escuché como Nahuel largaba una risita...
Fuimos a la pieza, nos acostamos en la cama y nos pusimos en trencito; mientras a mi me cogía la pija gorda y hermosa de Nahuel, yo empezaba a penetrar el culito firme y suave de Mauro...
Mauro: "¡Es muy grande Dami..."
Yo: "Y es toda para vos putito..."
Nahuel: "Toma lindo! ¿Te gusta mi pija?"
Yo: "¡Me encanta esa pija gorda y dura! ¡Dame mås! ¡Más!"
Mauro: "Mmm... Ahora calavera toda."
Nahuel: "Tomá entonces... ¡Tomá!"
Yo: "Ahh... ¡Ay! ¡Si!"
Así siguió hasta que decidimos cambiar de posición (los tres ya estábamos a punto de acabar). entonces Mauro se sentó y gateó en la cama hasta atrás de Nauhel, se sentó y Nahuel se acomodó arriba y empezó a cabalgarlo... Yo me acerqué y empecé a chuparle la pija a Nahuel otra vez mientras les acariciaba y manoseaba las bolas a los dos. Me di cuenta de que Mauro estaba acabando adentro del culo de Nahuel cuando lo escuché gemir mas fuerte y sentí que las bolas se le ponían druidas en mi mano. Y parece que Nahuel estaba tan caliente que empezó a suspirar y después a acabar en mi boca mientras seguía con la pija de Mauro toda metida adentro.
Mientras yo me secaba la boca con las sábanas, ellos se desabotonaron, se acurrucaron alrededor de mi poronga y desde abajo Nahuel dijo "Con esto alcanza para los dos..." y Mauro sin dejar de sonreír, empezó a chupármela y a convidarle a Nahuel... Entre los dos me comieron sin parar mientras Nahuel me colaba dos dedos hasta que acabé y le llené la boca de leche a Mauro mientras Nahuel seguía cogiendome con el dedo y pasándome la lengua desde las bolas para arriba....
Nos quedamos ahí un instante para disfrutar del orgasmo y después nos levantamos, cambiamos y despedimos con un beso. Una vez en la calle, agendé el número de Nahuel también jaja.
Me quedé con las ganas de que me rompan el culo los dos a la vez pero bueno, será para la próxima... Así:
Comenten que les pareció y si tienen ganas dense una vuelta por mis otros posts!
Bueno, sin más preámbulos...
Cuestión que el Jueves pasado estaba hablando con un amigo gay (él no sabe de mis nuevas incursiones jaja) a raíz de que yo le había mandado un mensaje por su cumpleaños. Ahí me cuenta que iba a hacer esa misma tarde una pequeña reunión para festejar, a la cual me invitó y acepté. Una vez ahí constaté que la reunión no tenía nada de pequeña; había mucha más gente de la que yo esperaba. Le di el regalo a mi amigo, charlamos un rato y todo siguió como cualquier otro cumpleaños. Un rato después tocaron el timbre y el agasajado fue a abrir. Cuando volvió con el recién llegado, se me cayó el culo al piso... Era un bombón! Alto, rubio, ojos oscuros y no grandote pero armadito. Una vez que vi que se había quedado solo, me acerqué, nos presentamos (dijo llamarse Mauro) y empezamos a hablar... Charla va, charla viene, se dio cuenta de mis intenciones y sutilmente me dijo "Podríamos vernos un día de estos si queres..." a lo que entusiasmado contesté que si, intercambiamos teléfonos y seguimos charlando como si nada...
Al otro día a la tarde recibo un mensaje:
Mauro: "¿Tenes ganas de que nos veamos?"
Yo: "Sí, obvio, ¿Cómo querés que arreglemos?"
Mauro: "Si queres nos podemos juntar en mi casa..."
Yo: "Dale, después pásame tu dirección y a que hora te parece."
Mauro: "Buenísimo! Nos vemos :)"
Pasaron unos segundos y decidí arriesgarme
Yo: "Igual somos nosotros dos nomas?"
Mauro: "Sí. ¿Por qué? ¿Esperabas a alguien más? Jaja"
Yo: "No, pero si queres invitar a algún amigo tuyo... ;)"
Mauro: "Ah bueno. Eso se puede arreglar. Después te aviso."
Yo no podía creer lo fácil que había sido... Al otro día al mediodía me llega otro mensaje de Mauro con su dirección, la hora y "Al final viene un amigo que trabaja en el gimnasio de acá a la vuelta.", A lo que yo respondí que lógicamente no había ningún problema sino más bien todo lo contrario...
El día en cuestión, me preparé y fui al departamento de Mauro. Una vez en su casa nos sentamos en el sillón a ver tele mientras esperábamos a que llegara su amigo. Obviamente no pasaron ni 10 minutos que ya estábamos chapando y manoseándonos. Así estuvimos unos 20 minutos hasta que nos interrumpió el tan esperado timbrazo. Era un poco más bajo que Mauro y yo, morocho, ojos marrones y, como me había sido prometido, todo marcado. Mauro nos presentó; me dijo que se llamaba Nahuel. Ni bien entró el invitado al departamento, Mauro le tocó el culo y él se dio vuelta y empezaron a chapar.
Mientras yo seguia apretando con Mauro, Nahuel se puso detrás mío, me apoyó y empezó a manosearme. Empezamos a desnudarnos entre los tres. Una vez en bolas nos obviamente notamos que los tres estábamos al palo y que, sin ánimos de agrandarme, esta vez era yo el de la pija más grande. No por esto quiero decir que las pijas que me rodeaban eran chicas ni mucho menos; eran normales; de hecho, la de Nahuel era más gorda que la mía. Me di vuelta les puse una mano en el pecho a cada uno y les di un empujoncito para darles a entender que se sentaran en el sillón, mensaje que entendieron enseguida. Se sentaron y yo, ni lento ni perezoso, me arrodillé entre las piernas abiertas de Nahuel y empecé a chupársela y a pajearlo a la vez mientras que con la otra trataba de pajear a Mauro (Debo admitir que aunque en la porno que vi le salía fácil, en vivo no es nada simple coordinar todo eso jaja). Como sea en un momento Mauro se levantó del sillón, se puso de nuevo detrás mío y empezó a acariciarme la espalda mientras me apoyaba la pija contra el culo; y así fue bajando por la espalda hasta que llegó a los cachetes del culo, los separó y empezó a meter despacito un dedo adentro con lo que yo me empecé volver loco. A todo esto ya en lugar de chuparle la pija a Nahuel, se la besaba y acariciaba intercalando alguna chupada para que no se calentara mucho y acabara.
Una vez que Mauro tuvo tres dedos adentro mío (Sí, ¡Tres! Empezó de a poquito pero como lo dejé, siguió jaja), los sacó y así nomás me metió toda la pija adentro casi de un saque (lo que me dolió un poquito debo admitir) y empezó a cogerme muy muy despacito mientras me masajeaba y abría los cachetes del culo y yo gemía sin parar... Nahuel se empezó a tocar mirándonos. Mauro paró de darme, se levantó, me miró y me dijo "Ahora me toca a mi..." y me sonrió. Yo le devolví la sonrisa y le dije "Y pero entonces, ¿A mi quién me atiende?" y escuché como Nahuel largaba una risita...
Fuimos a la pieza, nos acostamos en la cama y nos pusimos en trencito; mientras a mi me cogía la pija gorda y hermosa de Nahuel, yo empezaba a penetrar el culito firme y suave de Mauro...
Mauro: "¡Es muy grande Dami..."
Yo: "Y es toda para vos putito..."
Nahuel: "Toma lindo! ¿Te gusta mi pija?"
Yo: "¡Me encanta esa pija gorda y dura! ¡Dame mås! ¡Más!"
Mauro: "Mmm... Ahora calavera toda."
Nahuel: "Tomá entonces... ¡Tomá!"
Yo: "Ahh... ¡Ay! ¡Si!"
Así siguió hasta que decidimos cambiar de posición (los tres ya estábamos a punto de acabar). entonces Mauro se sentó y gateó en la cama hasta atrás de Nauhel, se sentó y Nahuel se acomodó arriba y empezó a cabalgarlo... Yo me acerqué y empecé a chuparle la pija a Nahuel otra vez mientras les acariciaba y manoseaba las bolas a los dos. Me di cuenta de que Mauro estaba acabando adentro del culo de Nahuel cuando lo escuché gemir mas fuerte y sentí que las bolas se le ponían druidas en mi mano. Y parece que Nahuel estaba tan caliente que empezó a suspirar y después a acabar en mi boca mientras seguía con la pija de Mauro toda metida adentro.
Mientras yo me secaba la boca con las sábanas, ellos se desabotonaron, se acurrucaron alrededor de mi poronga y desde abajo Nahuel dijo "Con esto alcanza para los dos..." y Mauro sin dejar de sonreír, empezó a chupármela y a convidarle a Nahuel... Entre los dos me comieron sin parar mientras Nahuel me colaba dos dedos hasta que acabé y le llené la boca de leche a Mauro mientras Nahuel seguía cogiendome con el dedo y pasándome la lengua desde las bolas para arriba....
Nos quedamos ahí un instante para disfrutar del orgasmo y después nos levantamos, cambiamos y despedimos con un beso. Una vez en la calle, agendé el número de Nahuel también jaja.
Me quedé con las ganas de que me rompan el culo los dos a la vez pero bueno, será para la próxima... Así:
Comenten que les pareció y si tienen ganas dense una vuelta por mis otros posts!
8 comentarios - Mi primer trío gay
van p