Primera parte
Segunda parte
Tercera parte
En esa carpa pasó de todo. Yo estaba destruida, asi que le dejé el pijón del tripa para mi amiga. Los dos chicos se turnaron para cogerme mientras el tripa destrozaba a Vale. Después de los polvos que me había hechado, tenía su pija media flácida, pero le alcanzaba para hacer delirar a mi amiga.
La había puesto en 4, con las piernas bien abiertas y él de atrás la taladraba. Yo estaba boca abajo con un chabón arriba. El que estaba libre me daba la pija en la boca. Después se iba con Vale.
Los chicos se turnaban para cogerme a mi. El tripa no la soltaba a Vale. Cuando estaba por acabar, uno de los chicos le dice "a esta le gusta la leche, te la traga toda!". Vale, que estaba re en pedo, empieza a gritar que le gustaba la leche y quería que le den la leche todos. Yo me moría de risa. El tripa salió de atrás de Vale, y se puso en frente.
Ella sin moverse, como perrita, abrió la boca, sacó la lengua y esperó la acabada del tripa. No podía creer como todavía tenía tanta leche ese chabón!!! El primer chorro le explotó en la cara, y después le metió la pija en la boca. Vale no se soltó del pijón hasta que no dejó de salir semen y la dejó limpia. La verga del tripa ya acusaba todo el desgaste de la noche y estaba dormida (aunque así y todo, tenía un tamaño descomunal).
Vale se acostó y recibió al otro flaco, que se puso al lado y le llenó la cara de leche. Igual que con el tripa, luego de sentir el primer chorro se metió la pija entera en la boca tragando y limpiando todo. Cuando la sacó, la verga brillaba de la saliva mezclada con leche. El pibe que me cogía a mi había parado para ver lo que le hacían a Vale. A mi poco me importaba, la verdad ya no sentía nada.
Me siguió cogiendo un rato más, hasta que Vale le empezó a gritar que no sea malo y le de la leche. El chabón salió de adentro mío y se puso al lado de Valeria, que agarró la pija del chabón y se la metió en la boca. La empezó a chupar y pajear, hasta que pude ver por la expresión del pibe que estaba acabando entero en la boca de mi amiga. Siguió chupando la pija, algunos hilitos de semen goteaban de sus labios, hasta que el propio flaco la separó y le pidió que parara.
Nos cambiamos y nos fuimos a nuestra carpa. Cuando entramos, Agustina aun estaba siendo atendida por los otros dos pibes. Yo estaba re cansada, y Vale re borracha, así que les dijimos que siguieran tranquilos. Nos acostamos a dormir a un costado. Después de un rato, Valeria se levanta y empieza a gritar que quería la leche. Encaprichadísima estaba!
Salió de su bolsa de dormir y se fue para donde estaban los chicos. Uno la cogía por la concha y el otro por la boca. Valeria agarró al que estaba recibiendo la mamada y se la empezó a chupar, hasta que lo hizo acabar. El chabón apoyó la pija en el cachete de Vale hasta que empezó a brotar chorros de leche que chorreaban por la cara y el cuello de ella.
Sin que tuviera tiempo de limpiarse, el otro flaco se le puso en frente y le llenó la cara de leche. Vale se pasó la mano por la cara y se chupó los dedos antes de agarrar las dos pijas y limpiarlas. Agustina y yo mirábamos cagándonos de risa de lo puta que se volvía nuestra amiga estando borracha.
Los chicos se cambiaron y se fueron. Nosotras nos acostamos y dormimos un rato. Ya era el día del regreso. Nos levantamos como pudimos, y nos pusimos a desarmar la carpa y armar los bolsos. Era bastante temprano y todavía no había mucho movimiento en el camping.
El tripa y 2 de los chicos nos ayudaron con los bolsos y a cargar el auto. A los otros dos no los vimos. Ya nos estábamos por ir. Pero yo quería ir a saludar a uno de los dos que faltaban, que era con quien había pegado buena onda (más allá del garche). Así que salí a buscarlo por el camping.
Llegando donde estaban los baños, bastante lejos de donde estábamos con las chicas, los vi. Me acerqué y les dije que ya nos íbamos y los estaba buscando para saludarlos. Nos quedamos charlando un rato, hasta que empezaron a pedir una despedida "especial".
Yo les decía que no podía, porque ya nos estábamos yendo. Estaban Vale y Agus en el auto esperándome. Ellos insistieron y ya me tenían agarrada de los brazos, arrastrándome hasta los baños. "Que hacen??" les grité cuando me quisieron meter a los baños de varones. "Dale Juli, un ratito y listo". Me pegaron un empujón y terminé adentro.
Uno de ellos me hizo entrar a uno de los cubículos, mientras el otro se quedaba en la puerta. "Rápido", le dije, enojada, mientras yo me agachaba y él se bajaba la malla. Su pija ya estaba durísima. La agarré con una mano y me la metí en la boca.
Los movimientos de mi boca tragándose la pija eran acompañados por la mano que lo pajeaba. Me quedé quieta dejándolo que me coja la boca. Me agarró de los pelos y movía su pija para adentro y afuera. Me solté para decirle que no me acabara en la boca.
"Dale que ya no aguanto más", me dijo mientras yo aceleraba el ritmo de la paja. "Ahi... ahii... ahi vieneee" gritó mientras un chorro de leche me bañaba las tetas. Me limpié con las manos, desparramando por mi cuerpo la acabada.
"Te toca!", gritó mientras salía para relevar a su amigo. El otro entró ya en bolas. Me agarró la cabeza y me clavó la pija hasta la garganta. De a poco fui manejando el ritmo frenético con el que el flaco me violaba la boca. Estaba desesperado, como si fuese la última vez que le iban a chupar la pija.
Yo seguía compenetrada en hacer acabar al flaco, para poder irme, cuando escucho que el de la puerta empieza a hablar con alguien que quería entrar al baño.
- Esperá un ratito, no se puede ahora!
- Pero qué pasa, están limpiando?
- No.. no... no se puede.- seguramente alguna seña le hizo, porque entendió
- Ahhhh culeaado, pero avisame antes! como no invitaron! Quien es? La conozco?? No será alguna de esas rosarinas que andaban con ustedes no?
- Si, una de esas...
- Nooo... cual?? la culoncita linda?
- Si, esa - le dijo, entre risas
- Ahh pero que puta! Dejame pasar, no seas hijo de puta...
De adentro el que yo le chupaba la pija le gritó que entrara. Yo lo miré como diciendo "y a mi no me preguntás", lo que respondió agarrándome de los pelos y clavándome su pija en la boca. El loco entró al baño donde estábamos diciendo boludeces. Se bajó el pantalón y me puso la pija al lado de mi cara. La agarré con la mano libre y lo empecé a pajear.
No era muy larga, pero bastante ancha... Me extrañó la calentura que me estar encerrada en un baño de hombres con dos pijas, y me mojé toda. Solté la del otro pibe y abrí bien la boca para dejar entrar la poronga del nuevo visitante. Le comí despacito la puntita, pasándole la lengüita por la cabeza. El chabón estaba delirando de placer ante el roce de mi lengua.
Mientras se la chupaba a uno, pajeaba al otro, que se le empezó a dormir la pija. Solté la pija gruesa para tratar de levantársela. Pero no había caso. El otro pibe se le empezó a reír. "Boludo, estas 3 putas nos exprimieron la pija en estos días... no doy más!", se excusó el pibito y salió del baño.
Volví a la pija gruesa, pajeándola con fuerzas. "Como me calientan las pijas bien gruesas" le dije mientras lo pajeaba. Me metí la cabeza en la boca hasta que de pronto sentí como me acababa adentro. Solté la pija y escupí todo lo que pude.
El chabón me levantó y me preguntó que como iba a escupir así. Le dije que no me gustaba, mientras me secaba los labios chorreando de leche. Me dio vuelta y me puso contra la pared. Me bajó el shorcito que tenía hasta las rodillas y apuntando su pija aún dura me penetró con fuerza. Mi concha chorreaba flujos y su ancha verga resbaló en mi interior. Se movía rápido, sin piedad, empujando mi cuerpo contra la pared. Yo nada podía hacer, solo disfrutar las embestidas.
Mientras me estaba cogiendo, sentí los gritos de mis amigas buscándome. Yo estaba disfrutando más que nunca el momento, y no quería que parara. "Mirá putita, te están buscando.. querés que pare?!", me susurraba al oído mientras me agarraba del pelo tirándome la cabeza para atrás. "No hijo de puta no parés, seguí cogiendome que me encanta... me encanta" le respondía yo.
El que había pajeado primero entró de golpe cagandose de risa. "Dale boludo, que vienen para acá!". El cordobés le dijo que ya acababa. "Pará la colita, que la quiero ver llena de leche, nena dale", me dijo mientras acariciaba mis nalgas. Sacó su pija y tal como me había ordenado, levanté el culo mientras él apoyando su verga me llenó de lechita bien caliente. Se levantó los pantalones, me saludó y se fue. Yo me quedé quieta, sintiendo como me chorreaba la leche por las piernas mientras recuperaba el aliento. No solo me sentía sucia de leche, me sentía re puta por lo que había hecho.
"Mirá lo que es eso", gritó el platense, mientras me tocaba la parte de mi cola sin la leche del otro. Se sacó la remera y me limpió la acabada anterior. "Después la tiro... pero esto no me lo pierdo!", dijo bajándose los pantalones y poniéndose bien atrás mío para cogerme.
Lejos de negarme, me acomodé abriendo más las piernas para facilitarle la tarea. Me agarró fuerte de la cintura y me empezó a coger sin piedad. Yo ahogaba mis gritos, pero tenía unas ganas de gritar impresionantes.
"No la viste a Julieta?", escuché que preguntaba Valeria al chico que había quedado en la puerta. "No, ni idea" le respondió, haciéndose el desentendido. Mientras, dentro del baño su amigo me estaba pegando una cogida infernal. Me agarraba de la cola y de los pelos empujándome contra su pija.
Podía sentir su punta bien profundo golpeando dentro mío. Si bien se movía muy fuerte y rápido, tenía la destreza para sacarla casi por completo y enterrarla nuevamente sin que se saliera. Yo me volvía loca al sentir cada centímetro de pija penetrándome sin piedad.
"Chupamela que me encanta y haceme acabar que no aguanto más", me pidió. Me di vuelta, me agaché y otra vez agarré su pija y se la empecé a chupar. Me agarró de la cabeza avisándome que ya acababa, pero le saqué las manos. Una mancha más al tigre... Estaba re contra caliente.
Esperé su descarga con la pija enterrada en mi garganta. Cuando sentí el chorro de leche caliente en mi boca, empecé a dejar salir el semen haciendo que su acabada chorree por su tronco, mi boca y mis manos. Le quería dejar un lindo recuerdo, y espero que así haya sido.
Seguí chupándosela un rato, hasta que me separó pidiéndome por favor que pare. Agarré la remera que estaba tirada en el piso y le pregunté si le molestaba que me limpiara. Me dijo que no, que la iba a tirar. Me limpié un poco las piernas, la cola, las tetas y la panza. Me subí el shorcito y salí. Me despedí de los dos y me fui al auto con mis amigas.
Luego de que me putearan por haber desaparecido (tampoco había sido mucho tiempo), arrancamos el viaje de retorno a Rosario. No veía la hora de llegar y bañarme. Me sentí sucia y pegajosa durante las más de 3 horas de viaje. Pero en el fondo, me traía recuerdos que me calentaban mucho.
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Segunda parte
Tercera parte
En esa carpa pasó de todo. Yo estaba destruida, asi que le dejé el pijón del tripa para mi amiga. Los dos chicos se turnaron para cogerme mientras el tripa destrozaba a Vale. Después de los polvos que me había hechado, tenía su pija media flácida, pero le alcanzaba para hacer delirar a mi amiga.
La había puesto en 4, con las piernas bien abiertas y él de atrás la taladraba. Yo estaba boca abajo con un chabón arriba. El que estaba libre me daba la pija en la boca. Después se iba con Vale.
Los chicos se turnaban para cogerme a mi. El tripa no la soltaba a Vale. Cuando estaba por acabar, uno de los chicos le dice "a esta le gusta la leche, te la traga toda!". Vale, que estaba re en pedo, empieza a gritar que le gustaba la leche y quería que le den la leche todos. Yo me moría de risa. El tripa salió de atrás de Vale, y se puso en frente.
Ella sin moverse, como perrita, abrió la boca, sacó la lengua y esperó la acabada del tripa. No podía creer como todavía tenía tanta leche ese chabón!!! El primer chorro le explotó en la cara, y después le metió la pija en la boca. Vale no se soltó del pijón hasta que no dejó de salir semen y la dejó limpia. La verga del tripa ya acusaba todo el desgaste de la noche y estaba dormida (aunque así y todo, tenía un tamaño descomunal).
Vale se acostó y recibió al otro flaco, que se puso al lado y le llenó la cara de leche. Igual que con el tripa, luego de sentir el primer chorro se metió la pija entera en la boca tragando y limpiando todo. Cuando la sacó, la verga brillaba de la saliva mezclada con leche. El pibe que me cogía a mi había parado para ver lo que le hacían a Vale. A mi poco me importaba, la verdad ya no sentía nada.
Me siguió cogiendo un rato más, hasta que Vale le empezó a gritar que no sea malo y le de la leche. El chabón salió de adentro mío y se puso al lado de Valeria, que agarró la pija del chabón y se la metió en la boca. La empezó a chupar y pajear, hasta que pude ver por la expresión del pibe que estaba acabando entero en la boca de mi amiga. Siguió chupando la pija, algunos hilitos de semen goteaban de sus labios, hasta que el propio flaco la separó y le pidió que parara.
Nos cambiamos y nos fuimos a nuestra carpa. Cuando entramos, Agustina aun estaba siendo atendida por los otros dos pibes. Yo estaba re cansada, y Vale re borracha, así que les dijimos que siguieran tranquilos. Nos acostamos a dormir a un costado. Después de un rato, Valeria se levanta y empieza a gritar que quería la leche. Encaprichadísima estaba!
Salió de su bolsa de dormir y se fue para donde estaban los chicos. Uno la cogía por la concha y el otro por la boca. Valeria agarró al que estaba recibiendo la mamada y se la empezó a chupar, hasta que lo hizo acabar. El chabón apoyó la pija en el cachete de Vale hasta que empezó a brotar chorros de leche que chorreaban por la cara y el cuello de ella.
Sin que tuviera tiempo de limpiarse, el otro flaco se le puso en frente y le llenó la cara de leche. Vale se pasó la mano por la cara y se chupó los dedos antes de agarrar las dos pijas y limpiarlas. Agustina y yo mirábamos cagándonos de risa de lo puta que se volvía nuestra amiga estando borracha.
Los chicos se cambiaron y se fueron. Nosotras nos acostamos y dormimos un rato. Ya era el día del regreso. Nos levantamos como pudimos, y nos pusimos a desarmar la carpa y armar los bolsos. Era bastante temprano y todavía no había mucho movimiento en el camping.
El tripa y 2 de los chicos nos ayudaron con los bolsos y a cargar el auto. A los otros dos no los vimos. Ya nos estábamos por ir. Pero yo quería ir a saludar a uno de los dos que faltaban, que era con quien había pegado buena onda (más allá del garche). Así que salí a buscarlo por el camping.
Llegando donde estaban los baños, bastante lejos de donde estábamos con las chicas, los vi. Me acerqué y les dije que ya nos íbamos y los estaba buscando para saludarlos. Nos quedamos charlando un rato, hasta que empezaron a pedir una despedida "especial".
Yo les decía que no podía, porque ya nos estábamos yendo. Estaban Vale y Agus en el auto esperándome. Ellos insistieron y ya me tenían agarrada de los brazos, arrastrándome hasta los baños. "Que hacen??" les grité cuando me quisieron meter a los baños de varones. "Dale Juli, un ratito y listo". Me pegaron un empujón y terminé adentro.
Uno de ellos me hizo entrar a uno de los cubículos, mientras el otro se quedaba en la puerta. "Rápido", le dije, enojada, mientras yo me agachaba y él se bajaba la malla. Su pija ya estaba durísima. La agarré con una mano y me la metí en la boca.
Los movimientos de mi boca tragándose la pija eran acompañados por la mano que lo pajeaba. Me quedé quieta dejándolo que me coja la boca. Me agarró de los pelos y movía su pija para adentro y afuera. Me solté para decirle que no me acabara en la boca.
"Dale que ya no aguanto más", me dijo mientras yo aceleraba el ritmo de la paja. "Ahi... ahii... ahi vieneee" gritó mientras un chorro de leche me bañaba las tetas. Me limpié con las manos, desparramando por mi cuerpo la acabada.
"Te toca!", gritó mientras salía para relevar a su amigo. El otro entró ya en bolas. Me agarró la cabeza y me clavó la pija hasta la garganta. De a poco fui manejando el ritmo frenético con el que el flaco me violaba la boca. Estaba desesperado, como si fuese la última vez que le iban a chupar la pija.
Yo seguía compenetrada en hacer acabar al flaco, para poder irme, cuando escucho que el de la puerta empieza a hablar con alguien que quería entrar al baño.
- Esperá un ratito, no se puede ahora!
- Pero qué pasa, están limpiando?
- No.. no... no se puede.- seguramente alguna seña le hizo, porque entendió
- Ahhhh culeaado, pero avisame antes! como no invitaron! Quien es? La conozco?? No será alguna de esas rosarinas que andaban con ustedes no?
- Si, una de esas...
- Nooo... cual?? la culoncita linda?
- Si, esa - le dijo, entre risas
- Ahh pero que puta! Dejame pasar, no seas hijo de puta...
De adentro el que yo le chupaba la pija le gritó que entrara. Yo lo miré como diciendo "y a mi no me preguntás", lo que respondió agarrándome de los pelos y clavándome su pija en la boca. El loco entró al baño donde estábamos diciendo boludeces. Se bajó el pantalón y me puso la pija al lado de mi cara. La agarré con la mano libre y lo empecé a pajear.
No era muy larga, pero bastante ancha... Me extrañó la calentura que me estar encerrada en un baño de hombres con dos pijas, y me mojé toda. Solté la del otro pibe y abrí bien la boca para dejar entrar la poronga del nuevo visitante. Le comí despacito la puntita, pasándole la lengüita por la cabeza. El chabón estaba delirando de placer ante el roce de mi lengua.
Mientras se la chupaba a uno, pajeaba al otro, que se le empezó a dormir la pija. Solté la pija gruesa para tratar de levantársela. Pero no había caso. El otro pibe se le empezó a reír. "Boludo, estas 3 putas nos exprimieron la pija en estos días... no doy más!", se excusó el pibito y salió del baño.
Volví a la pija gruesa, pajeándola con fuerzas. "Como me calientan las pijas bien gruesas" le dije mientras lo pajeaba. Me metí la cabeza en la boca hasta que de pronto sentí como me acababa adentro. Solté la pija y escupí todo lo que pude.
El chabón me levantó y me preguntó que como iba a escupir así. Le dije que no me gustaba, mientras me secaba los labios chorreando de leche. Me dio vuelta y me puso contra la pared. Me bajó el shorcito que tenía hasta las rodillas y apuntando su pija aún dura me penetró con fuerza. Mi concha chorreaba flujos y su ancha verga resbaló en mi interior. Se movía rápido, sin piedad, empujando mi cuerpo contra la pared. Yo nada podía hacer, solo disfrutar las embestidas.
Mientras me estaba cogiendo, sentí los gritos de mis amigas buscándome. Yo estaba disfrutando más que nunca el momento, y no quería que parara. "Mirá putita, te están buscando.. querés que pare?!", me susurraba al oído mientras me agarraba del pelo tirándome la cabeza para atrás. "No hijo de puta no parés, seguí cogiendome que me encanta... me encanta" le respondía yo.
El que había pajeado primero entró de golpe cagandose de risa. "Dale boludo, que vienen para acá!". El cordobés le dijo que ya acababa. "Pará la colita, que la quiero ver llena de leche, nena dale", me dijo mientras acariciaba mis nalgas. Sacó su pija y tal como me había ordenado, levanté el culo mientras él apoyando su verga me llenó de lechita bien caliente. Se levantó los pantalones, me saludó y se fue. Yo me quedé quieta, sintiendo como me chorreaba la leche por las piernas mientras recuperaba el aliento. No solo me sentía sucia de leche, me sentía re puta por lo que había hecho.
"Mirá lo que es eso", gritó el platense, mientras me tocaba la parte de mi cola sin la leche del otro. Se sacó la remera y me limpió la acabada anterior. "Después la tiro... pero esto no me lo pierdo!", dijo bajándose los pantalones y poniéndose bien atrás mío para cogerme.
Lejos de negarme, me acomodé abriendo más las piernas para facilitarle la tarea. Me agarró fuerte de la cintura y me empezó a coger sin piedad. Yo ahogaba mis gritos, pero tenía unas ganas de gritar impresionantes.
"No la viste a Julieta?", escuché que preguntaba Valeria al chico que había quedado en la puerta. "No, ni idea" le respondió, haciéndose el desentendido. Mientras, dentro del baño su amigo me estaba pegando una cogida infernal. Me agarraba de la cola y de los pelos empujándome contra su pija.
Podía sentir su punta bien profundo golpeando dentro mío. Si bien se movía muy fuerte y rápido, tenía la destreza para sacarla casi por completo y enterrarla nuevamente sin que se saliera. Yo me volvía loca al sentir cada centímetro de pija penetrándome sin piedad.
"Chupamela que me encanta y haceme acabar que no aguanto más", me pidió. Me di vuelta, me agaché y otra vez agarré su pija y se la empecé a chupar. Me agarró de la cabeza avisándome que ya acababa, pero le saqué las manos. Una mancha más al tigre... Estaba re contra caliente.
Esperé su descarga con la pija enterrada en mi garganta. Cuando sentí el chorro de leche caliente en mi boca, empecé a dejar salir el semen haciendo que su acabada chorree por su tronco, mi boca y mis manos. Le quería dejar un lindo recuerdo, y espero que así haya sido.
Seguí chupándosela un rato, hasta que me separó pidiéndome por favor que pare. Agarré la remera que estaba tirada en el piso y le pregunté si le molestaba que me limpiara. Me dijo que no, que la iba a tirar. Me limpié un poco las piernas, la cola, las tetas y la panza. Me subí el shorcito y salí. Me despedí de los dos y me fui al auto con mis amigas.
Luego de que me putearan por haber desaparecido (tampoco había sido mucho tiempo), arrancamos el viaje de retorno a Rosario. No veía la hora de llegar y bañarme. Me sentí sucia y pegajosa durante las más de 3 horas de viaje. Pero en el fondo, me traía recuerdos que me calentaban mucho.
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49 comentarios - Carnaval de Gualeguaychú 4
hermosa!!
En fin, caliente relato Juli
gracias por pasar!
gracias por pasar!
gracias por pasar! 🙂
Genial, como siempre. Te dejo 10.
gracias por pasar!
saludos y besos donde mas te guste 😉
(hacia rato q no te comentaba) pero exelentes como siempre!! calentura mucha
dsp te quiero hacer una pregunta por privado(sobre relatos).
saludos
gracias por pasar
Encanto, besos BB
Besos.
la suerte del cordobes por ir al baño en el momento justo
espero que sigas difrutando los proximos! 😉
gracias por pasar! espero que sigas disfrutando los proximos!
espero la disfrutes. gracias por pasar!
gracias por pasar