You are now viewing Poringa in Spanish.
Switch to English

Mi cuñadita

Actualmente tengo 47 años, este relato es de cuando tenia 32 años y sucedió con mi ex-cuñada

Quiero contarles que cuando me case por segunda vez lo hice con una mujer con la que me sentía pleno en todos los niveles, al paso de los primeros dos años pude comprar una casa y llevarme a mi difunto suegro y a mi ex-cuñada ya que mi ex-esposa son su única familia directa. Los primeros meses fueron un infierno ya que las constantes intervenciones de mi suegro y mi ex-cuñada hacían que mejor saliera constantemente y regresara a casa ya de noche. Un día un compañero de trabajo me prestó una película porno de amateurs y en la noche cuando todos dormían la estuve viendo y claro con un ayuno sexual de casi un mes estaba ardiendo, sin darme cuenta mi ex-cuñada estaba observándome por detrás y al verla pensé que empezaría a molestarme, la sorpresa fue que solo salió hacia su cuarto sin decir nada. Al día siguiente ella no me molesto por el contrario empezamos a platicar sobre mi trabajo y poco a poco le pregunte sobre su novio, un tipo fortachón de casi 180cm de estatura, ella mide 157cm, me comento que había terminado por que era muy celoso. Ya en la noche mi esposa se fue a dormir ya que entra a las 7:00 am al trabajo y mi suegro por su edad no puede desvelarse mucho, nos quedamos mi cuñada y yo platicando y casi a media noche se fue a poner la pijama y fue al baño que se encuentra atravesando la sala, yo estaba con ganas de seguir viendo la película cuando al pasar ella pude ver sus exquisitas nalgas pensando en lo que se comía el estúpido de su ex novio.

Una vez que se había retirado a su habitación, comencé a ver la película pero me gano mas la inquietud de ver dormida a mi ex-cuñada, por lo que silencioso fui a su recamara, aclaro que yo tengo las llaves de todas las recamaras y gavetas de la casa, al verla dormida no pude resistir la tentación de tocarla, comencé por el pie masajeando suavemente para poco a poco subir hasta la rodilla, yo sentía la sangre agolpada en mis sienes y mi verga que aun que es pequeña en esos momentos la sentí enorme, como no podía subir más debido a que usa pijama de dos piezas, trate de acariciarle la espalda y el cuello pero se movió que pensé que despertaba y como antes siempre teníamos peleas pensé que me podría acusar con su hermana por lo que salí corriendo hacia la sala. Una vez en la sala y viendo que todo estaba tranquilo pase a ver a mi esposa pero dormía profundamente.

Pase otra vez a la sala y encontré a mi ex-cuñada despierta le pregunte que tenia y me dijo que no podía dormir y se había levantado por un vaso de leche, pero me pregunto que hacia yo despierto a lo que conteste, sabes hace tiempo que no puedo dormir por lo que me quedo viendo la tele o algún video que solo yo puedo ver, diciéndome pues de qué tipo de películas ves, porno. Si son porno le conteste, diciéndome yo nunca he visto una película de ese tipo. Viendo que quizás era una oportunidad de ver sus reacciones le pregunte ¿quieres verla? a lo que me dijo solo un poco no vaya a ser que se levanten. Una vez que comenzó la película le preguntaba sobre la relación con su ex y le comencé a decir que los tipos celosos ni siquiera saben tocar a una mujer, ella no contesto por lo que me acerque y le dije siente solamente esto, le comencé a acariciar la cabeza, y a bajar por el cuello deteniéndome en los lóbulos de sus orejas comenzó a temblar, poco a poco me deslicé por su espalda y comencé a besar su cuello, el olor de ese pequeño sudor me calentó mas, quiso retirarse y la sujete de las muñecas besando sus manos, acariciando sus enormes senos que comenzaron a aumentar de tamaño y a mostrar un pezón duro y erecto, desabroche su camisola y quedaron frente a mí dos grandes melones que parecían gritar muérdeme, comencé a besar sus aureolas y por debajo de las enormes tetas cosa que nos comenzó a calentar a los dos más aun. Cuando llegué a la cadera comencé a besarle el ombligo y a acariciar sus preciosas nalgas un claro olor a vagina húmeda llego a mi nariz por lo que termine por recostarla en el sillón, comencé a besarle los pies y los muslos, pasando suavemente la lengua sobre su vientre, para así llegar a esa vagina que me mostraba un pelambre negro y crespo su sabor me tenia hechizado, para ser franco nunca antes me había detenido más de 20 minutos en el cuerpo de una mujer, comencé a lamer lentamente sus labios y llegué al clítoris que se mostraba rojo y duro, cuando le dije te quiero penetrar, sin abrir los ojos me pregunto si traía condón, como siempre cargo un paquete saque uno rápidamente y me lo coloque, la levante tomándola de los brazos y me senté en una silla sentándola arriba de mi, cuando entro mi verga en su humedecida puchita creí que se había roto el condón pero estaba tan caliente que no dije nada ella se detuvo un poco y después comenzamos a tomar ritmo hasta que nos vaciamos los dos. Poco después ella entro al baño sin decir nada y yo me subí el pants que llevaba, salió a su recamara y regreso al baño diciéndome ve a ver si no se ha despertado mi hermana, fui y seguía profundamente dormida, cuando volvía a la sala ella se había retirado ya a dormir. Retire la película y acicale el sillón y me retire al baño para envolver en papel el condón viendo con sorpresa que no se había roto, y ver un poco de sangre en mis calzoncillos por lo que pensé que el estúpido de su ex novio había estado cogiendo con ella parados, yo la había desviginado. Al día siguiente solo nos saludamos salí a trabajar recordando esa cogida debido a que me dolía la base de la verga y tenia cortadas abajo la lengua ya que había lamido su cuerpo y su pucha mucho tiempo.
Después de ese encuentro tuvimos otros que les narrare ya que con ella experimente lo que con mi ex-esposa no podía.

2 comentarios - Mi cuñadita