Me llamo Liza, soy una chica de 25 años ya, este es mi cuarto relato y estoy emocionada por contarles todo, sin duda he logrado vencer mis propios miedos al expresarme de forma semi-anónima por este medio y nunca me he sentido tan viva.
Tiene casi un mes que cumplí 25 años ya, y hasta ahora ha sido mi mejor fiesta, o al menos en la que me la he pasado mejor, y aunque desde que empecé a escribir estos relatos mi idea siempre fue el de contarles acerca de relación especial con Paola, mi hermana, esta vez tendré que mencionar otras cositas que pasaron ese día, que estoy segura les encantarán.
Nunca he sido una mujer muy extrovertida o "fácil" y sin duda alguna, jamás pensé que durante esa fiesta me convertiría, al menos por una noche, en una dualidad entre la festejada y el entretenimiento personal de varias chicas; ese día exploté, me desinhibí, me convertí en el objeto del deseo de muchas, y en el éxito de unas pocas, en otras palabras, me volví la puta de la fiesta, así como suena, sin ataduras, tuve sexo con quien quise, disfruté mi fiesta a mi manera y como yo quería, sin nadie que me pudiera decir nada, y me encantó.
Para no entrar mucho en detalles menores, mi fiesta fue en casa de mi prima Alexa, quien cumplía 27 años apenas el día siguiente del mío, es decir el 15 de Abril. Decidimos juntar nuestras fiestas para el viernes 17 porque nos llevamos muy bien, porque mis tíos (sus padres) no estarían durante una semana y porque yo quería un lugar donde pudiera pasármela bien sin gastar en rentas de salones y cosas así, pero más que nada, porque mi prima es una ingenua que se emborracha muy fácil, y en cuanto eso pasara, se iría a dormir, y yo sería la dueña de la fiesta.
Durante toda la semana estuve invitando a amigas y amigos a la fiesta, advirtiéndoles que no sería en mi casa y que lo que quisieran beber tendrían que comprarlos ellos mismos, ya que yo sólo había podido juntar para algunas botellas, pero la lista de invitados crecía rápidamente, y era claro que el alcohol que yo había comprado sería totalmente insuficiente. Afortunadamente mis amigos, junto con los amigos de Alexa, son todos muy solidarios y llevarían mas que suficiente para todos. Tenía la intención de que la fiesta fuera algo formal, aunque no en exceso, simplemente ropa presentable, vestidos de fiesta no muy formales y cosas así.
Por mi parte, el viernes por la tarde comencé a arreglarme, me había bañado y depilado, dejando solo una rayita en mi vagina, siempre me ha gustado mucho como se ve. Paola no estaba ya que había ido a visitar a unos amigos y llegaría más tarde a casa, sólo para arreglarse rápidamente y alcanzarme en casa de Alexa. Mis padres si estaban, me compraron un pequeño pastel de cumpleaños (tradición familiar sin importar la edad) y después de eso me dejaron para que me pudiera arreglar. Como la fiesta era un tanto formal, decidí estrenarme un vestido que me había comprado días antes con el dinero que me dieron mis padres como regalo de cumpleaños, un vestido color azul, muy sexy y ajustado de fiesta, justo lo apropiado para la ocasión. Acompañé mi vestido con unos tacones de 10 cm del mismo color. Abajo del vestido decidí ponerme una tanga blanca de hilo que me ajusta muy bien, me la subí de más para que los costados me quedaran como si fuera de corte brasileña y así no se marcaría en mi vestido, cabe resaltar que me sentía muy sexy esa noche.
Aproximadamente a las 8 pm mis amigos pasaron por mi, a mis padres les dije que iríamos a festejar a un antro para que no se sintieran tentados a ir a casa de mi prima. Acto seguido me subí al carro y nos fuimos de mi casa, mi prima vive relativamente cerca, como a 30 minutos, así que pasamos a una tienda a comprar cigarros y unas cervezas para amenizar el viaje.
Al llegar a casa de mi prima, casi a las 9 pm, no había mas que algunos amigos de ella, así que entré a felicitar a Alexa y a que me felicitaran y como no quisimos esperar a que llegara mas gente, abrimos una botella de whisky y empezamos nuestra fiesta, yo por mi parte ya andaba checando a las amigas de Alexa, y, ¿Por qué no? a Alexa también. Mi prima es una mujer atractiva, de tez no tan blanca como yo, sino un poco mas apiñonada. Mide más o menos 1.70 cm, no se cuanto pesa pero es delgada, de piernas bonitas y senos medianos, aunque sabe lucirlos muy bien y tiene nalgas firmes, todo debido a que practica natación. Sin duda era una de mis posibles objetivos para la noche, aunque sabía que ella no llegaría ni a la 1 am, así que seguí viendo a las otras chicas, esa noche quería sexo, sexo y sexo, y nada me lo impediría.
Durante una hora mas o menos estuvimos platicando, bailando y pasándola bien, hicimos bromas acerca de que mi prima ya era vieja, de que las chicas debían tener cuidado conmigo o me las llevaría ya ebrias, o de que incluso yo podría hacerme heterosexual esa noche, la estábamos pasando muy bien, y los invitados poco a poco comenzaron a llegar, así que se ponía cada vez mejor, debido a que tanto Alexa como yo, nos fijamos mucho en que solo fueran amigos muy cercanos y uno que otro agregado de ellos. A las 11 pm aproximadamente, todo estaba saliendo muy bien, todos estaban bailando y bebiendo, o platicando muy bien, yo me la pasaba bailando con todos mis amigos, bebiendo con ellos y con los amigos de mi prima y claro, ya me sentía un poco mareada, así que decidí ponerme a platicar con Alexa, quien ya se sentía más que mareada.
Me puse a hablar con ella acerca de su vida personal y ver si tenía novio y como le iba en su trabajo y cosas así y cuando menos vi estábamos hablando acerca de experiencias con chicas, lo cual me sorprendió mucho, ya que yo creía a mi prima totalmente hetero.
-Bueno ya dime, con cuantas chicas te has acostado Lai? Me preguntó Alexa, quien ya arrastraba un poco las "s" al final de cada palabra.
-Oye, pues ni que las contara o que? Le respondí de manera coqueta al tiempo que le daba una fumada al cigarro. Además, tu que sabes de chicas?
-Oh pues aunque no lo creas no soy un lindo angelito, ya he tenido mis aventuras niña -Contestó Alexa mientras cruzaba la pierna y el vestido se le corría un poco, permitiéndome verle brevemente las piernas.
-Ah en serio? Pues a ver cuéntame más, apoco te gustan las mujeres prima? Le dije mientras me mordía el labio suavemente.
-Pues he estado con una que otra, pero otro día te cuento haha, mejor ven conmigo, quiero bailar!
Acto seguido, se levantó de la mesa, y sin dejarme responder me jaló de la mano y me levantó, salimos al jardín de su casa, bastante grande por cierto, donde habíamos improvisado como pista de baile, el ambiente estaba perfecto, a media luz, clima templado, todos bailando. Alexa y yo nos fuimos metiendo entre la gente hasta llegar casi al límite del jardín, donde estaba mas oscuro, comenzamos a bailar y había olvidado por completo que Alexa baila muy bien, se me pegaba, me daba la espalda y se movía, yo me estaba excitando, pero no sabía si ella lo hacía por eso o sólo por pasar el rato, así que seguimos bailando, de vez en cuando yo la tomaba de la cintura y la atraía hacia mi, quedando muy pegadas, nariz con nariz, ella por su parte ponía sus manos alrededor de mi cuello, bailaba muy sexy, siempre mirándome a los ojos y sonriendo, yo me sentía excitada y confundida, así que en un momento donde se me acercó de más, yo no pude resistirlo y le di un leve beso en la boca, acto seguido ella se quedó callada, sorprendida, dejó de bailar y comenzó a mirar a todos lados para ver si alguien nos había descubierto.
- Pero que fue eso Lai? Soy tu prima. Me dijo estresada, siempre mirando a todos lados.
-Yo... lo siento mucho! No se que me pasó, fueron las copas, estoy mareada y me dejé llevar, de verdad lo siento. Le dije muy avergonzada
-No te preocupes, yo se que soy irresistible hasta para ti. Me contestó y se echó a reír, restándole importancia al suceso, cosa que yo agradecí mucho.
-Bueno pues si estás guapa pero no te des tanta importancia, fue el alcohol. Le dije a modo de broma para suavizar el momento tenso que acabábamos de pasar.
Seguimos bailando, el DJ que habíamos contratado hacía muy bien su trabajo poniendo música de todo tipo, Alexa seguía bailando igual de sexy conmigo y cada tanto íbamos por un whisky, ya eran casi las 12, me sentía bastante mareada e intuía que ella se sentía aún más mareada que yo, y Alexa ya no se fijaba en quien nos podía ver, se me pegaba mucho, me tomaba de la cintura y bajaba sus manos por mis piernas apenas rozando mis nalgas, yo ya no resistía, la quería besar pero me daba miedo su reacción, cada vez que su cara se acercaba a la mía, yo abría ligeramente la boca, pero no me atrevía.
Al cabo de un rato, Alexa me dijo que no se sentía muy bien, que la acompañara adentro de la casa porque estaba muy mareada, yo estaba decepcionada, quería besarla y no solo eso, la quería toda para mi. La acompañé al baño pero había un par de personas esperando, por lo que me pidió que la acompañara a su habitación, donde tenía su propio baño. Subimos las escaleras y entramos a la habitación, cerré la puerta atrás de nosotras.
-Te sientes bien? Le pregunté algo preocupada
-No te preocupes Lai, solo necesito lavarme la cara, el whisky me mareó de más. Contestó al tiempo que señalaba la cama para que me sentara mientras ella entraba al baño.
-Ok, pero si necesitas algo me dices vale? No quiero que te pongas mal en nuestra fiesta y que te la pases mal toda la madrugada.
Alexa entró al baño después de quitarse los tacones, y yo me puse a mirar su habitación mientras la esperaba. Al cabo de unos minutos, yo estaba mirando unos cuadros que estaban en la pared contraria a la puerta del baño, cuando Alexa me llamó.
-Hey Lai, puedes venir un segundo? Me llamó Alexa desde el baño.
-Claro, que pasa? Dije al tiempo que abría la puerta del baño. Alexa estaba simplemente mirándose al espejo.
-Es que me quiero poner más cómoda, ya no aguanto el vestido y no alcanzo el cierre, me dijo al momento que intentaba alcanzarlo con la mano.
-Amm, si... claro, ahorita te ayudo... Me acerqué a ella y comencé a bajar el cierre de su vestido, pudiendo ver su espalda desnuda. Lo bajé lentamente, se me cortaba la respiración. Cuando al fin lo bajé todo, me quedé ahí, sin saber que hacer, me sentía muy nerviosa. Alexa se dió la vuelta lentamente, con el vestido colgando solamente de los tirantes, yo di un paso para atrás, solo para toparme con la pared del baño, y ella dio un paso hacia mi, me sentía acorralada.
-Bueno, ya me vas a decir? Agregó Alexa al cabo de unos minutos.
-Decir que? Le contesté confundida.
-Como que? Pues el beso tonta, me dijo mientras sostenía su vestido al borde de sus senos con su brazo.
-Bueno, yo... ya te dije... solo fue que pues.. el alcohol y todo eso, ya sabes. Contesté divagando.
-Oh en serio? Yo no te vi muy ebria, es más, yo no estaba en ese momento tan mareada y se que tu aguantas mucho más que yo... Mira, sólo contéstame honestamente, por qué lo hiciste? Agregó, mas seria que antes.
-Yo.. la verdad... pues estábamos bailando y tu bailas muy sexy, y pues yo creí que tu...
-Que yo que? Me interrumpió. Oh, tu creíste que yo me estaba insinuando?
-Bueno pues, sí... la verdad creí que te me estabas insinuando y pues eres muy sexy y me dejé llevar y..
No terminé la frase y Alexa me tomó de la cara con ambas manos y me besó directo en la boca por unos segundos que yo creí que fueron horas y en los que mis piernas me empezaron a temblar.
-Yo no me insinúo, si quiero algo lo consigo, me dijo después del beso. Al momento soltó su vestido, quedándose en ropa interior frente a mi.
-Bueno, pues ya me tienes aquí, te vas a volver a asustar? O es que yo tengo que hacer todo? Contestó, mientras se quedaba ahí parada frente a mi, en su linda tanga rosa.
En ese momento no se que me pasó, pero me quedé ahí, congelada, me sentía como una colegiala en su primera vez, no podía respirar, la verdad es que era la primera vez que estaba con alguien que me llevara mas de unos meses de edad y eso me intimidó.
-Esta bien, ven aquí, no tienes porque ponerte nerviosa, me dijo al momento que me jalaba hacia ella y me volvía a besar. Después de ese segundo beso, me sentí un poco menos nerviosa, me alejé medio paso de ella, y me quité el vestido, para quedar iguales. Alexa no pudo evitar mirarme de pies a cabeza un par de veces.
-Te ves hermosa Lai, no pensé que tuvieras tan buen cuerpo, dijo después de unos segundos de verme. Yo sentía como se me subían los colores al rostro, no sabía porque estaba así.
-Gracias, tu también te ves muy bien, me gusta tu lencería, le dije mientras veía su tanga.
-Que bueno que te guste, a mi me gusta esa tanguita blanca, y con razón no se te veía nada a través del vestido! Mira como la traes puesta! que sexy! Agregó mientras me jalaba de la cintura para besarme. Yo me sentía como me ponía roja de pena.
Acto seguido, Alexa me tomó de la mano y me llevo a la cama, hizo que me acostara boca arriba y lentamente se quitó la tanga, yo ya estaba tocando mis senos suavemente, y creo que eso la excitó porque se la terminó de quitar rápidamente y se puso encima de mi, totalmente desnuda, era muy excitante verla así, toda depilada y con las piernas abiertas encima de mi. Lentamente puse mis manos sobre sus piernas y comencé a acariciarlas, no tardé mucho tiempo en subir mis manos suavemente a su vagina, estaba totalmente mojada cuando la toqué y no pudo evitar un leve gemido de placer mientras se acariciaba los senos. Comencé a acariciar su vagina lentamente, primero por encima, desviándome ligeramente a su ingle de vez en cuando, pasaron unos segundos así y decidí continuar, metiendo primero un dedo, masajeándola por dentro, ella emitía ligeros gemidos cada vez que movía mi dedo dentro de ella. La vista era espectacular, Alexa estaba de rodillas con las piernas abiertas encima de mi a la altura de mi ombligo, yo metía y sacaba mi dedo de su vagina muy despacio y veía como ella seguía el ritmo con sus caderas, para ese momento yo ya estaba mas que mojada, ocupaba una mano para darle placer a ella mientras tocaba mi vagina por encima de mi tanga con la otra.
Después de un rato ella se hizo hacia abajo para poder agacharse y besarme intensamente, yo acariciaba sus senos y ella me comía a besos entre jadeos. Alexa comenzó a bajar lentamente, yo respiraba muy agitada, me sentía como en mi primera vez, ¿Qué me estaba pasando?, ¿Por qué estaba tan nerviosa? Sentí como su lengua llegó a mis senos y empezó a jugar con mi pezón, yo no pude evitar gemir y lanzar un "ah" inusualmente alto. Se quedó ahí, lamiendo y dándole leves mordiscos a mis pezones, yo sentía que estallaba de placer, y justo cuando sentía que no aguantaba más, de repente se levantó y se quitó de encima de mí, me quitó la tanga de un jalón, me abrió las piernas e inmediatamente comenzó a hacerme sexo oral, yo exploté en gemidos, uno tras otro, cada vez mas intensos, me retorcía de placer y sentía que toda la fiesta iba a enterarse si seguía así. Intenté taparme la boca, morder mi mano, pero con cada vez que sentía su lengua pasar por mi clítoris sentía otro orgasmo más fuerte que el anterior, como pude le pedí que se volteara para que pudiera complacerla también, ella rápidamente se montó sobre mi, abriendo sus piernas frente a mi cara para que pudiera hacerle sexo oral también.
No la hice esperar, comencé a lamer entre gemidos, y ella hizo lo propio, ahora también entre gemidos, sentía como cada pocos minutos su cuerpo se estremecía en un orgasmo corto pero intenso, y con cada orgasmo masajeaba mi vagina con su lengua de manera mas intensa, yo intentaba seguirle el paso pero sentía que no podía ni respirar de tanto que me venía. Aun así me obligaba a mi misma a continuar, con mis manos la tomaba de la cadera y empujaba su vagina hacia mi, quería saborearla toda, lamer todo su interior, estaba extasiada con su sabor y no podía dejar de pedir más; de vez en cuando dejaba de lamer solo para jadear y decirle "dame más, dame más, no pares por favor", y cada vez que lo hacía ella lo hacía mas fuerte, mas rico.
Llegó el momento donde no pude más y explote en un intenso orgasmo, gemía tanto que parecía casi excesivo, Alexa no dejaba de complacerme, seguía lamiendo mi vagina, cada vez mas lento, yo me retorcía de placer, apretaba las sábanas lo mas duro que podía, hasta que poco a poco cesó.
Cuando por fin me recuperé, Alexa seguía en la misma posición, dándome suaves besos en la entrepierna, dejándome disfrutar cada segundo, sin decirme absolutamente nada. Era la primera vez que alguien me hacía tener un orgasmo así, en ningún momento tuve el control, pero ya había pasado por cosas así, lo mas raro es que no fue una situación planeada para nada, al menos no por mi. Cuando por fin se quitó de encima, me sentía mareada, agotada y hasta un poco desorientada, Alexa se acostó a un lado de mi.
-Bueno, veredicto? Dijo Alexa, riendo suavemente.
-Yo, no sabía que tu supieras hacer cosas así, contesté sorprendida.
-Te dije que no era un lindo angelito niña, contestó un tanto confiada.
-Bueno pues pensé que estabas bluffeando, contesté sonriendo.
-Es hora de volver a la fiesta, es casi la 1 de la mañana, dijo al tiempo que miraba su celular.
-Si, solo tengo que arreglarme un poco y tu también, y bajamos. Agregué.
Al cabo de unos 10 minutos, bajamos de nuevo a la fiesta, algunos amigos y amigas nos preguntaron por que nos habíamos desaparecido tanto tiempo, a lo que contesté rápidamente que Alexa no se había sentido muy bien, pero que ya no había problema y que estábamos listas para seguir la fiesta. Nuestros amigos no dudaron ni un segundo de mi contestación y rápidamente siguieron en lo suyo, invitándonos shots de tequila, que yo bebí tal vez demasiado rápido, pero intentaba recomponerme de la intensa sesión de hace apenas unos minutos. Noté como una de sus amigas me miraba fijamente, con una leve sonrisa, casi coqueta, a lo que yo solo contesté con otra sonrisa tímida, y me voltee a pedir otro shot en la barra de la sala.
Todos se fueron a seguir la fiesta, Alexa se me acercó muy normal, me dio un beso en la mejilla y me dijo "ahora vuelvo, tengo que estar con los demás también" a lo que yo solo asentí con la cabeza, al momento que me tomaba otro shot de tequila. Voltee a ver quien más había llegado, vi a lo lejos a mi hermana Paola bailando con sus amigos, muy divertida, estaba a punto de levantarme cuando llegó la amiga de mi prima y se puso frente a mi.
-Hola como estás? Preguntó sonriente
-Hola... amm, bien y tú? Contesté confundida
-Oh muy bien, disculpa soy Pamela, amiga de tu prima, contestó con una sonrisa muy pícara, intentando no reírse.
-Ah si claro, como te va? Contesté algo intrigada
- Hahaha, muy bien ahora que las veo, por un momento pensé que todos en la fiesta se darían cuenta por tanto gemido que escuché mientras estaba allá arriba, contestó riendo. Me quedé congelada, no sabía que contestarle o como negar lo que había implicado lo que dijo.
-De que estas hablando? Contesté después de unos segundos, intentando dar mi mejor actuación.
-Oh no te preocupes, no intentes engañarme, yo las vi entrar, escuché todo del otro lado de la puerta, y las vi salir. Pero tranquila! hasta te pusiste pálida, no pasa nada hermosa, contestó, mientras yo intentaba no desmayarme en medio de la sala.
-Mira, no se de que hables pero... no alcancé a terminar la frase cuando ella me interrumpió.
-De nada te sirve negar lo que escuché tan claramente, además, yo no dije que le vaya a decir a todos, de hecho, me has dejado bien mojada, contestó mientras ponía su mano suavemente en mi pierna. Al momento se acercó a mi, me dió un beso en la mejilla y me susurró:
-Me has dejado muy excitada, y yo aún sigo buscando pareja para hoy, tal vez mas tarde quieras hacerme compañía, hermosa. Y terminada la frase, me dio un suave beso en el oído, y se fue.
Me quedé ahí, congelada, repasando toda la conversación, ¿Cómo nos habían seguido si yo me había fijado que no hubiera nadie antes de cerrar la puerta? Pedí otros dos shots de tequila, me los tomé uno tras otro, después una mitad de limón con sal para aliviar el sabor, un trago a una cerveza, y me levanté de la barra para buscar a Paola.
Estaba caminando hacia el jardín, que era donde había visto a mi hermana, me sentía un poco ebria pero mas que nada confundida por la noche un tanto extraña que había tenida hasta el momento, tampoco es que me sintiera mal, al contrario, estaba muy feliz, e intenté no pensar en lo que me había dicho Pamela minutos atrás.
Salí al jardín trasero, me pedí un shot mas de tequila en la mesa de plástico que habíamos acoplado como barra en la parte de afuera, me lo tomé un poco mas despacio esta vez, mientras buscaba a mi hermana, pero no había ni recorrido la mitad del lugar con la mirada cuando unos amigos y amigas me vieron ahí sola y fueron por mi para ir a bailar, me terminé el shot de tequila y los seguí para estar con todos ellos.
Estuve bailando un muy buen rato, tal vez media hora? tal vez un poco más... creo que fue mas bien una hora por lo menos, ya no sentía muy bien el transcurso del tiempo, me divertía mucho con mis amigos cuando de repente sentí como alguien me agarró la nalga, yo me di la vuelta lo más rápido que pude para afrontar al atrevido que se iba a llevar un buen golpe en la cara, cuando vi a mi hermana justo detrás de mi muerta de risa. Inmediatamente me abrazó, me dijo algo así como "feliz fiesta de cumpleaños", no escuché del todo bien porque la música estaba muy alta y ella ya estaba un tanto ebria, después me dio un beso en la mejilla y me pidió que la acompañara por un trago a la barra.
Tomé a Paola de la mano mientras nos abríamos paso por el jardín, fue hasta que llegamos a la barra que me di cuenta lo hermosa que se veía: llevaba puesto un pantalón de vestir negro muy pegado, y una blusa blanca ajustada y escotada, un poco abierta por la espalda, con tacones obviamente, se veía hermosa y muy sexy. Cuando Paola se dio cuenta de que la estaba viendo muy descaradamente, se me acercó al oído y me susurró: "Aquí no mi amor, están todos los invitados y te van a empezar a ver raro", rápidamente me compuse, alcancé a lanzar un "lo siento" y nos pedimos un par de shots de tequila, los bebimos y le dije que quería bailar con ella, Paola sabía que yo estaba mas ebria, solo me dijo "está bien, pero te controlas eh", acto seguido nos pusimos a bailar, algunos conocidos se nos quedaron viendo en mas de una ocasión al vernos bailar juntas, no porque estuviéramos haciendo algo muy indecente sino porque tanto Paola como yo sabemos bailar bien y con ella además me entiendo mucho para bailar, lo cual nos da cierto aire sexy tengo que aceptarlo, y nos veían mas cuando nos poníamos mas juntas y le pegaba las nalgas mientras me agachaba o cosas así. Seguimos bailando un rato y cuando sentimos que ya habíamos llamado mucho la atención nos metimos a la sala a platicar un rato y seguir bebiendo.
Para ese momento, yo ya estaba bastante ebria y me sentía excitada de nuevo, quería estar a solas con Paola, no quería todo el juego previo de antes, así que simplemente me le acerqué mientras estaba sentada en el banco de la barra y le pegué mis senos lo más que pude mientras le susurraba al oído.
-Ya no estoy para jueguitos, quiero hacer el amor, le dije al oído, mientras fingía estar contándole algo diferente para que nadie sospechara.
-Me encanta cuando te pones así Lai, pero y si nos ve alguien? Me contestó mientras se prendía un cigarro.
-No me importa, te deseo ahora y es mi fiesta, tienes que complacerme en mi cumpleaños, y como lo estamos festejando hasta ahora, no es opcional, le contesté en broma, mientras ambas reíamos.
-Voy a subir, te veo en la habitación de Alexa, tómate unos 5 minutos antes de subir también y fíjate que nadie te vea subir, le dije a Paola.
Me fui de la barra, rumbo a las escaleras, revisando que no hubiera nadie vigilando, especialmente Pamela, que ya me había descubierto con Alexa antes. Cuando vi que no estaba cerca, subí tratando de no llamar la atención, miré hacia atrás rápidamente cuando subía y me di cuenta de que nadie me había notado. Entré de nuevo en la habitación, podía casi revivir minuto a minuto lo que había pasado ahí horas antes, revisé mi celular, eran ya las 2 am. No perdí tiempo, estaba muy excitada, me quité rápidamente el vestido, me quedé solo en tanga y tacones y me acosté en la cama así, para esperar a Paola. Pasaron 5 minutos a lo mucho, cuando escuché que abrían la puerta, entró Paola y antes de cerrar se asomó al pasillo para ver que no hubiera nadie, cerró la puerta tras de si.
-Vaya, tu si que tienes prisa hermosa, me dijo cuando me vio ahí desnuda en la cama, inmediatamente se quitó la blusa y el sostén, yo estaba muy excitada de nuevo. Se desabrochó el pantalón, se dio media vuelta y se lo quitó, agachándose para que pudiera ver sus nalgas, perfectas y redondas, se volvió a dar la vuelta para que pudiera apreciarla bien, llevaba una tanga de encaje negro, de tira ancha, corte alto, me excité mucho sólo de verla. Se acercó a la cama y se quedó parada a mi lado, con las piernas ligeramente abiertas, comencé a acariciarle la entrepierna y al momento dejó salir un leve suspiro.
-Te extrañé, hermosa, dijo mientras yo la acariciaba. Justo después se puso encima de mi, pero la tomé de la cintura y la tiré en la cama, le quité la tanga despacio, se la baje a la altura de las rodillas y me acosté a un lado para hacerle sexo oral, Paola comenzó a emitir ligeros gemidos de placer.
-Si, así mi amor, tu sabes bien que me gusta, no pares, me dijo mientras gemía un poco mas alto. Inmediatamente puso su mano en mi nuca y empezó a empujarme la cara a su vagina, yo seguía complaciéndola, haciéndolo como ella quería, como a ella le gusta. Estuvimos así varios minutos hasta que me separé un momento, me quité la tanga que llevaba, me di la vuelta y me puse encima de ella, ahora ambas podíamos complacernos como nos gustaba. Sentí su lengua tibia empezar a saborear mi interior, placer inmediato, comencé a gemir muy suave, ya no con el ímpetu de hace unas horas. Seguí haciendo lo mio, rozando su clítoris con mi lengua muy suavemente como a ella le gusta, sentía como se movía bajo de mi, después de unos minutos pare de hacerlo y me quite de encima.
-Abre las piernas, le dije justo cuando me quité, ella obedeció sin preguntar nada, me senté frente a ella, con las piernas abiertas también, me fui acercando poco a poco a ella, hasta que mi vagina rozó con la de ella, inmediatamente nos juntamos mas, empezamos a movernos al mismo tiempo, con un ritmo perfecto, ambas sabíamos como le gustaba a la otra. Paola comenzó a jadear y casi al mismo tiempo comencé yo igual, sentía su vagina rozar contra la mía, se sentía muy rico, de vez en cuando lamía mi mano y la pasaba por la vagina de Paola, ella gemía cada vez mas fuerte, yo no podía dejar de pensar en lo que me había dicho Pamela, me estaba excitando cada vez mas el hecho de que ella pudiera estar ahí afuera, escuchando los gemidos de mi hermana, y los míos, me provocaba mucho placer sentir mi vagina pegada a la de ella y el hecho de que alguien podría estar escuchándonos, nos movíamos cada vez mas fuerte, se sentía maravilloso hacer eso, ambas teníamos orgasmo tras orgasmo, gemíamos duro las dos, de repente escuchamos como abrieron la puerta, no nos dio tiempo de hacer nada, era Pamela que había estado del otro lado todo el tiempo.
-Wow... Yo... Perdón... pensé... dijo Pamela, que había estado escuchando detrás de la puerta, pero que no sabía que escena se iba a encontrar al entrar. Paola y yo estábamos atónitas, no sabíamos que decir, era la primera vez que alguien nos descubría así. Una cosa era tener la fantasía de que alguien te escuchara, y otra muy diferente era ver como alguien entraba mientras tenías relaciones con tu hermana.
-Que es lo que quieres? contesté enojada tras unos minutos. Me quité de encima de Paola y busqué mi vestido y me tapé con el. Paola no se tapó ni hizo nada, estaba desnuda en la cama con las piernas abiertas sin saber que hacer o decir.
-No lo tomes a mal Liza, de verdad simplemente me gustas muchísimo, yo quiero estar contigo y.. tener lo que ustedes tienen...
Paola se levantó de la cama y se paró frente a Pamela, en ese momento, yo esperaba lo peor.
-Bueno, pues es tu fiesta, y tengo que complacerte en tu cumpleaños, no? Dijo Paola. Acto seguido se dio la vuelta y comenzó a besar a Pamela.
Tiene casi un mes que cumplí 25 años ya, y hasta ahora ha sido mi mejor fiesta, o al menos en la que me la he pasado mejor, y aunque desde que empecé a escribir estos relatos mi idea siempre fue el de contarles acerca de relación especial con Paola, mi hermana, esta vez tendré que mencionar otras cositas que pasaron ese día, que estoy segura les encantarán.
Nunca he sido una mujer muy extrovertida o "fácil" y sin duda alguna, jamás pensé que durante esa fiesta me convertiría, al menos por una noche, en una dualidad entre la festejada y el entretenimiento personal de varias chicas; ese día exploté, me desinhibí, me convertí en el objeto del deseo de muchas, y en el éxito de unas pocas, en otras palabras, me volví la puta de la fiesta, así como suena, sin ataduras, tuve sexo con quien quise, disfruté mi fiesta a mi manera y como yo quería, sin nadie que me pudiera decir nada, y me encantó.
Para no entrar mucho en detalles menores, mi fiesta fue en casa de mi prima Alexa, quien cumplía 27 años apenas el día siguiente del mío, es decir el 15 de Abril. Decidimos juntar nuestras fiestas para el viernes 17 porque nos llevamos muy bien, porque mis tíos (sus padres) no estarían durante una semana y porque yo quería un lugar donde pudiera pasármela bien sin gastar en rentas de salones y cosas así, pero más que nada, porque mi prima es una ingenua que se emborracha muy fácil, y en cuanto eso pasara, se iría a dormir, y yo sería la dueña de la fiesta.
Durante toda la semana estuve invitando a amigas y amigos a la fiesta, advirtiéndoles que no sería en mi casa y que lo que quisieran beber tendrían que comprarlos ellos mismos, ya que yo sólo había podido juntar para algunas botellas, pero la lista de invitados crecía rápidamente, y era claro que el alcohol que yo había comprado sería totalmente insuficiente. Afortunadamente mis amigos, junto con los amigos de Alexa, son todos muy solidarios y llevarían mas que suficiente para todos. Tenía la intención de que la fiesta fuera algo formal, aunque no en exceso, simplemente ropa presentable, vestidos de fiesta no muy formales y cosas así.
Por mi parte, el viernes por la tarde comencé a arreglarme, me había bañado y depilado, dejando solo una rayita en mi vagina, siempre me ha gustado mucho como se ve. Paola no estaba ya que había ido a visitar a unos amigos y llegaría más tarde a casa, sólo para arreglarse rápidamente y alcanzarme en casa de Alexa. Mis padres si estaban, me compraron un pequeño pastel de cumpleaños (tradición familiar sin importar la edad) y después de eso me dejaron para que me pudiera arreglar. Como la fiesta era un tanto formal, decidí estrenarme un vestido que me había comprado días antes con el dinero que me dieron mis padres como regalo de cumpleaños, un vestido color azul, muy sexy y ajustado de fiesta, justo lo apropiado para la ocasión. Acompañé mi vestido con unos tacones de 10 cm del mismo color. Abajo del vestido decidí ponerme una tanga blanca de hilo que me ajusta muy bien, me la subí de más para que los costados me quedaran como si fuera de corte brasileña y así no se marcaría en mi vestido, cabe resaltar que me sentía muy sexy esa noche.
Aproximadamente a las 8 pm mis amigos pasaron por mi, a mis padres les dije que iríamos a festejar a un antro para que no se sintieran tentados a ir a casa de mi prima. Acto seguido me subí al carro y nos fuimos de mi casa, mi prima vive relativamente cerca, como a 30 minutos, así que pasamos a una tienda a comprar cigarros y unas cervezas para amenizar el viaje.
Al llegar a casa de mi prima, casi a las 9 pm, no había mas que algunos amigos de ella, así que entré a felicitar a Alexa y a que me felicitaran y como no quisimos esperar a que llegara mas gente, abrimos una botella de whisky y empezamos nuestra fiesta, yo por mi parte ya andaba checando a las amigas de Alexa, y, ¿Por qué no? a Alexa también. Mi prima es una mujer atractiva, de tez no tan blanca como yo, sino un poco mas apiñonada. Mide más o menos 1.70 cm, no se cuanto pesa pero es delgada, de piernas bonitas y senos medianos, aunque sabe lucirlos muy bien y tiene nalgas firmes, todo debido a que practica natación. Sin duda era una de mis posibles objetivos para la noche, aunque sabía que ella no llegaría ni a la 1 am, así que seguí viendo a las otras chicas, esa noche quería sexo, sexo y sexo, y nada me lo impediría.
Durante una hora mas o menos estuvimos platicando, bailando y pasándola bien, hicimos bromas acerca de que mi prima ya era vieja, de que las chicas debían tener cuidado conmigo o me las llevaría ya ebrias, o de que incluso yo podría hacerme heterosexual esa noche, la estábamos pasando muy bien, y los invitados poco a poco comenzaron a llegar, así que se ponía cada vez mejor, debido a que tanto Alexa como yo, nos fijamos mucho en que solo fueran amigos muy cercanos y uno que otro agregado de ellos. A las 11 pm aproximadamente, todo estaba saliendo muy bien, todos estaban bailando y bebiendo, o platicando muy bien, yo me la pasaba bailando con todos mis amigos, bebiendo con ellos y con los amigos de mi prima y claro, ya me sentía un poco mareada, así que decidí ponerme a platicar con Alexa, quien ya se sentía más que mareada.
Me puse a hablar con ella acerca de su vida personal y ver si tenía novio y como le iba en su trabajo y cosas así y cuando menos vi estábamos hablando acerca de experiencias con chicas, lo cual me sorprendió mucho, ya que yo creía a mi prima totalmente hetero.
-Bueno ya dime, con cuantas chicas te has acostado Lai? Me preguntó Alexa, quien ya arrastraba un poco las "s" al final de cada palabra.
-Oye, pues ni que las contara o que? Le respondí de manera coqueta al tiempo que le daba una fumada al cigarro. Además, tu que sabes de chicas?
-Oh pues aunque no lo creas no soy un lindo angelito, ya he tenido mis aventuras niña -Contestó Alexa mientras cruzaba la pierna y el vestido se le corría un poco, permitiéndome verle brevemente las piernas.
-Ah en serio? Pues a ver cuéntame más, apoco te gustan las mujeres prima? Le dije mientras me mordía el labio suavemente.
-Pues he estado con una que otra, pero otro día te cuento haha, mejor ven conmigo, quiero bailar!
Acto seguido, se levantó de la mesa, y sin dejarme responder me jaló de la mano y me levantó, salimos al jardín de su casa, bastante grande por cierto, donde habíamos improvisado como pista de baile, el ambiente estaba perfecto, a media luz, clima templado, todos bailando. Alexa y yo nos fuimos metiendo entre la gente hasta llegar casi al límite del jardín, donde estaba mas oscuro, comenzamos a bailar y había olvidado por completo que Alexa baila muy bien, se me pegaba, me daba la espalda y se movía, yo me estaba excitando, pero no sabía si ella lo hacía por eso o sólo por pasar el rato, así que seguimos bailando, de vez en cuando yo la tomaba de la cintura y la atraía hacia mi, quedando muy pegadas, nariz con nariz, ella por su parte ponía sus manos alrededor de mi cuello, bailaba muy sexy, siempre mirándome a los ojos y sonriendo, yo me sentía excitada y confundida, así que en un momento donde se me acercó de más, yo no pude resistirlo y le di un leve beso en la boca, acto seguido ella se quedó callada, sorprendida, dejó de bailar y comenzó a mirar a todos lados para ver si alguien nos había descubierto.
- Pero que fue eso Lai? Soy tu prima. Me dijo estresada, siempre mirando a todos lados.
-Yo... lo siento mucho! No se que me pasó, fueron las copas, estoy mareada y me dejé llevar, de verdad lo siento. Le dije muy avergonzada
-No te preocupes, yo se que soy irresistible hasta para ti. Me contestó y se echó a reír, restándole importancia al suceso, cosa que yo agradecí mucho.
-Bueno pues si estás guapa pero no te des tanta importancia, fue el alcohol. Le dije a modo de broma para suavizar el momento tenso que acabábamos de pasar.
Seguimos bailando, el DJ que habíamos contratado hacía muy bien su trabajo poniendo música de todo tipo, Alexa seguía bailando igual de sexy conmigo y cada tanto íbamos por un whisky, ya eran casi las 12, me sentía bastante mareada e intuía que ella se sentía aún más mareada que yo, y Alexa ya no se fijaba en quien nos podía ver, se me pegaba mucho, me tomaba de la cintura y bajaba sus manos por mis piernas apenas rozando mis nalgas, yo ya no resistía, la quería besar pero me daba miedo su reacción, cada vez que su cara se acercaba a la mía, yo abría ligeramente la boca, pero no me atrevía.
Al cabo de un rato, Alexa me dijo que no se sentía muy bien, que la acompañara adentro de la casa porque estaba muy mareada, yo estaba decepcionada, quería besarla y no solo eso, la quería toda para mi. La acompañé al baño pero había un par de personas esperando, por lo que me pidió que la acompañara a su habitación, donde tenía su propio baño. Subimos las escaleras y entramos a la habitación, cerré la puerta atrás de nosotras.
-Te sientes bien? Le pregunté algo preocupada
-No te preocupes Lai, solo necesito lavarme la cara, el whisky me mareó de más. Contestó al tiempo que señalaba la cama para que me sentara mientras ella entraba al baño.
-Ok, pero si necesitas algo me dices vale? No quiero que te pongas mal en nuestra fiesta y que te la pases mal toda la madrugada.
Alexa entró al baño después de quitarse los tacones, y yo me puse a mirar su habitación mientras la esperaba. Al cabo de unos minutos, yo estaba mirando unos cuadros que estaban en la pared contraria a la puerta del baño, cuando Alexa me llamó.
-Hey Lai, puedes venir un segundo? Me llamó Alexa desde el baño.
-Claro, que pasa? Dije al tiempo que abría la puerta del baño. Alexa estaba simplemente mirándose al espejo.
-Es que me quiero poner más cómoda, ya no aguanto el vestido y no alcanzo el cierre, me dijo al momento que intentaba alcanzarlo con la mano.
-Amm, si... claro, ahorita te ayudo... Me acerqué a ella y comencé a bajar el cierre de su vestido, pudiendo ver su espalda desnuda. Lo bajé lentamente, se me cortaba la respiración. Cuando al fin lo bajé todo, me quedé ahí, sin saber que hacer, me sentía muy nerviosa. Alexa se dió la vuelta lentamente, con el vestido colgando solamente de los tirantes, yo di un paso para atrás, solo para toparme con la pared del baño, y ella dio un paso hacia mi, me sentía acorralada.
-Bueno, ya me vas a decir? Agregó Alexa al cabo de unos minutos.
-Decir que? Le contesté confundida.
-Como que? Pues el beso tonta, me dijo mientras sostenía su vestido al borde de sus senos con su brazo.
-Bueno, yo... ya te dije... solo fue que pues.. el alcohol y todo eso, ya sabes. Contesté divagando.
-Oh en serio? Yo no te vi muy ebria, es más, yo no estaba en ese momento tan mareada y se que tu aguantas mucho más que yo... Mira, sólo contéstame honestamente, por qué lo hiciste? Agregó, mas seria que antes.
-Yo.. la verdad... pues estábamos bailando y tu bailas muy sexy, y pues yo creí que tu...
-Que yo que? Me interrumpió. Oh, tu creíste que yo me estaba insinuando?
-Bueno pues, sí... la verdad creí que te me estabas insinuando y pues eres muy sexy y me dejé llevar y..
No terminé la frase y Alexa me tomó de la cara con ambas manos y me besó directo en la boca por unos segundos que yo creí que fueron horas y en los que mis piernas me empezaron a temblar.
-Yo no me insinúo, si quiero algo lo consigo, me dijo después del beso. Al momento soltó su vestido, quedándose en ropa interior frente a mi.
-Bueno, pues ya me tienes aquí, te vas a volver a asustar? O es que yo tengo que hacer todo? Contestó, mientras se quedaba ahí parada frente a mi, en su linda tanga rosa.
En ese momento no se que me pasó, pero me quedé ahí, congelada, me sentía como una colegiala en su primera vez, no podía respirar, la verdad es que era la primera vez que estaba con alguien que me llevara mas de unos meses de edad y eso me intimidó.
-Esta bien, ven aquí, no tienes porque ponerte nerviosa, me dijo al momento que me jalaba hacia ella y me volvía a besar. Después de ese segundo beso, me sentí un poco menos nerviosa, me alejé medio paso de ella, y me quité el vestido, para quedar iguales. Alexa no pudo evitar mirarme de pies a cabeza un par de veces.
-Te ves hermosa Lai, no pensé que tuvieras tan buen cuerpo, dijo después de unos segundos de verme. Yo sentía como se me subían los colores al rostro, no sabía porque estaba así.
-Gracias, tu también te ves muy bien, me gusta tu lencería, le dije mientras veía su tanga.
-Que bueno que te guste, a mi me gusta esa tanguita blanca, y con razón no se te veía nada a través del vestido! Mira como la traes puesta! que sexy! Agregó mientras me jalaba de la cintura para besarme. Yo me sentía como me ponía roja de pena.
Acto seguido, Alexa me tomó de la mano y me llevo a la cama, hizo que me acostara boca arriba y lentamente se quitó la tanga, yo ya estaba tocando mis senos suavemente, y creo que eso la excitó porque se la terminó de quitar rápidamente y se puso encima de mi, totalmente desnuda, era muy excitante verla así, toda depilada y con las piernas abiertas encima de mi. Lentamente puse mis manos sobre sus piernas y comencé a acariciarlas, no tardé mucho tiempo en subir mis manos suavemente a su vagina, estaba totalmente mojada cuando la toqué y no pudo evitar un leve gemido de placer mientras se acariciaba los senos. Comencé a acariciar su vagina lentamente, primero por encima, desviándome ligeramente a su ingle de vez en cuando, pasaron unos segundos así y decidí continuar, metiendo primero un dedo, masajeándola por dentro, ella emitía ligeros gemidos cada vez que movía mi dedo dentro de ella. La vista era espectacular, Alexa estaba de rodillas con las piernas abiertas encima de mi a la altura de mi ombligo, yo metía y sacaba mi dedo de su vagina muy despacio y veía como ella seguía el ritmo con sus caderas, para ese momento yo ya estaba mas que mojada, ocupaba una mano para darle placer a ella mientras tocaba mi vagina por encima de mi tanga con la otra.
Después de un rato ella se hizo hacia abajo para poder agacharse y besarme intensamente, yo acariciaba sus senos y ella me comía a besos entre jadeos. Alexa comenzó a bajar lentamente, yo respiraba muy agitada, me sentía como en mi primera vez, ¿Qué me estaba pasando?, ¿Por qué estaba tan nerviosa? Sentí como su lengua llegó a mis senos y empezó a jugar con mi pezón, yo no pude evitar gemir y lanzar un "ah" inusualmente alto. Se quedó ahí, lamiendo y dándole leves mordiscos a mis pezones, yo sentía que estallaba de placer, y justo cuando sentía que no aguantaba más, de repente se levantó y se quitó de encima de mí, me quitó la tanga de un jalón, me abrió las piernas e inmediatamente comenzó a hacerme sexo oral, yo exploté en gemidos, uno tras otro, cada vez mas intensos, me retorcía de placer y sentía que toda la fiesta iba a enterarse si seguía así. Intenté taparme la boca, morder mi mano, pero con cada vez que sentía su lengua pasar por mi clítoris sentía otro orgasmo más fuerte que el anterior, como pude le pedí que se volteara para que pudiera complacerla también, ella rápidamente se montó sobre mi, abriendo sus piernas frente a mi cara para que pudiera hacerle sexo oral también.
No la hice esperar, comencé a lamer entre gemidos, y ella hizo lo propio, ahora también entre gemidos, sentía como cada pocos minutos su cuerpo se estremecía en un orgasmo corto pero intenso, y con cada orgasmo masajeaba mi vagina con su lengua de manera mas intensa, yo intentaba seguirle el paso pero sentía que no podía ni respirar de tanto que me venía. Aun así me obligaba a mi misma a continuar, con mis manos la tomaba de la cadera y empujaba su vagina hacia mi, quería saborearla toda, lamer todo su interior, estaba extasiada con su sabor y no podía dejar de pedir más; de vez en cuando dejaba de lamer solo para jadear y decirle "dame más, dame más, no pares por favor", y cada vez que lo hacía ella lo hacía mas fuerte, mas rico.
Llegó el momento donde no pude más y explote en un intenso orgasmo, gemía tanto que parecía casi excesivo, Alexa no dejaba de complacerme, seguía lamiendo mi vagina, cada vez mas lento, yo me retorcía de placer, apretaba las sábanas lo mas duro que podía, hasta que poco a poco cesó.
Cuando por fin me recuperé, Alexa seguía en la misma posición, dándome suaves besos en la entrepierna, dejándome disfrutar cada segundo, sin decirme absolutamente nada. Era la primera vez que alguien me hacía tener un orgasmo así, en ningún momento tuve el control, pero ya había pasado por cosas así, lo mas raro es que no fue una situación planeada para nada, al menos no por mi. Cuando por fin se quitó de encima, me sentía mareada, agotada y hasta un poco desorientada, Alexa se acostó a un lado de mi.
-Bueno, veredicto? Dijo Alexa, riendo suavemente.
-Yo, no sabía que tu supieras hacer cosas así, contesté sorprendida.
-Te dije que no era un lindo angelito niña, contestó un tanto confiada.
-Bueno pues pensé que estabas bluffeando, contesté sonriendo.
-Es hora de volver a la fiesta, es casi la 1 de la mañana, dijo al tiempo que miraba su celular.
-Si, solo tengo que arreglarme un poco y tu también, y bajamos. Agregué.
Al cabo de unos 10 minutos, bajamos de nuevo a la fiesta, algunos amigos y amigas nos preguntaron por que nos habíamos desaparecido tanto tiempo, a lo que contesté rápidamente que Alexa no se había sentido muy bien, pero que ya no había problema y que estábamos listas para seguir la fiesta. Nuestros amigos no dudaron ni un segundo de mi contestación y rápidamente siguieron en lo suyo, invitándonos shots de tequila, que yo bebí tal vez demasiado rápido, pero intentaba recomponerme de la intensa sesión de hace apenas unos minutos. Noté como una de sus amigas me miraba fijamente, con una leve sonrisa, casi coqueta, a lo que yo solo contesté con otra sonrisa tímida, y me voltee a pedir otro shot en la barra de la sala.
Todos se fueron a seguir la fiesta, Alexa se me acercó muy normal, me dio un beso en la mejilla y me dijo "ahora vuelvo, tengo que estar con los demás también" a lo que yo solo asentí con la cabeza, al momento que me tomaba otro shot de tequila. Voltee a ver quien más había llegado, vi a lo lejos a mi hermana Paola bailando con sus amigos, muy divertida, estaba a punto de levantarme cuando llegó la amiga de mi prima y se puso frente a mi.
-Hola como estás? Preguntó sonriente
-Hola... amm, bien y tú? Contesté confundida
-Oh muy bien, disculpa soy Pamela, amiga de tu prima, contestó con una sonrisa muy pícara, intentando no reírse.
-Ah si claro, como te va? Contesté algo intrigada
- Hahaha, muy bien ahora que las veo, por un momento pensé que todos en la fiesta se darían cuenta por tanto gemido que escuché mientras estaba allá arriba, contestó riendo. Me quedé congelada, no sabía que contestarle o como negar lo que había implicado lo que dijo.
-De que estas hablando? Contesté después de unos segundos, intentando dar mi mejor actuación.
-Oh no te preocupes, no intentes engañarme, yo las vi entrar, escuché todo del otro lado de la puerta, y las vi salir. Pero tranquila! hasta te pusiste pálida, no pasa nada hermosa, contestó, mientras yo intentaba no desmayarme en medio de la sala.
-Mira, no se de que hables pero... no alcancé a terminar la frase cuando ella me interrumpió.
-De nada te sirve negar lo que escuché tan claramente, además, yo no dije que le vaya a decir a todos, de hecho, me has dejado bien mojada, contestó mientras ponía su mano suavemente en mi pierna. Al momento se acercó a mi, me dió un beso en la mejilla y me susurró:
-Me has dejado muy excitada, y yo aún sigo buscando pareja para hoy, tal vez mas tarde quieras hacerme compañía, hermosa. Y terminada la frase, me dio un suave beso en el oído, y se fue.
Me quedé ahí, congelada, repasando toda la conversación, ¿Cómo nos habían seguido si yo me había fijado que no hubiera nadie antes de cerrar la puerta? Pedí otros dos shots de tequila, me los tomé uno tras otro, después una mitad de limón con sal para aliviar el sabor, un trago a una cerveza, y me levanté de la barra para buscar a Paola.
Estaba caminando hacia el jardín, que era donde había visto a mi hermana, me sentía un poco ebria pero mas que nada confundida por la noche un tanto extraña que había tenida hasta el momento, tampoco es que me sintiera mal, al contrario, estaba muy feliz, e intenté no pensar en lo que me había dicho Pamela minutos atrás.
Salí al jardín trasero, me pedí un shot mas de tequila en la mesa de plástico que habíamos acoplado como barra en la parte de afuera, me lo tomé un poco mas despacio esta vez, mientras buscaba a mi hermana, pero no había ni recorrido la mitad del lugar con la mirada cuando unos amigos y amigas me vieron ahí sola y fueron por mi para ir a bailar, me terminé el shot de tequila y los seguí para estar con todos ellos.
Estuve bailando un muy buen rato, tal vez media hora? tal vez un poco más... creo que fue mas bien una hora por lo menos, ya no sentía muy bien el transcurso del tiempo, me divertía mucho con mis amigos cuando de repente sentí como alguien me agarró la nalga, yo me di la vuelta lo más rápido que pude para afrontar al atrevido que se iba a llevar un buen golpe en la cara, cuando vi a mi hermana justo detrás de mi muerta de risa. Inmediatamente me abrazó, me dijo algo así como "feliz fiesta de cumpleaños", no escuché del todo bien porque la música estaba muy alta y ella ya estaba un tanto ebria, después me dio un beso en la mejilla y me pidió que la acompañara por un trago a la barra.
Tomé a Paola de la mano mientras nos abríamos paso por el jardín, fue hasta que llegamos a la barra que me di cuenta lo hermosa que se veía: llevaba puesto un pantalón de vestir negro muy pegado, y una blusa blanca ajustada y escotada, un poco abierta por la espalda, con tacones obviamente, se veía hermosa y muy sexy. Cuando Paola se dio cuenta de que la estaba viendo muy descaradamente, se me acercó al oído y me susurró: "Aquí no mi amor, están todos los invitados y te van a empezar a ver raro", rápidamente me compuse, alcancé a lanzar un "lo siento" y nos pedimos un par de shots de tequila, los bebimos y le dije que quería bailar con ella, Paola sabía que yo estaba mas ebria, solo me dijo "está bien, pero te controlas eh", acto seguido nos pusimos a bailar, algunos conocidos se nos quedaron viendo en mas de una ocasión al vernos bailar juntas, no porque estuviéramos haciendo algo muy indecente sino porque tanto Paola como yo sabemos bailar bien y con ella además me entiendo mucho para bailar, lo cual nos da cierto aire sexy tengo que aceptarlo, y nos veían mas cuando nos poníamos mas juntas y le pegaba las nalgas mientras me agachaba o cosas así. Seguimos bailando un rato y cuando sentimos que ya habíamos llamado mucho la atención nos metimos a la sala a platicar un rato y seguir bebiendo.
Para ese momento, yo ya estaba bastante ebria y me sentía excitada de nuevo, quería estar a solas con Paola, no quería todo el juego previo de antes, así que simplemente me le acerqué mientras estaba sentada en el banco de la barra y le pegué mis senos lo más que pude mientras le susurraba al oído.
-Ya no estoy para jueguitos, quiero hacer el amor, le dije al oído, mientras fingía estar contándole algo diferente para que nadie sospechara.
-Me encanta cuando te pones así Lai, pero y si nos ve alguien? Me contestó mientras se prendía un cigarro.
-No me importa, te deseo ahora y es mi fiesta, tienes que complacerme en mi cumpleaños, y como lo estamos festejando hasta ahora, no es opcional, le contesté en broma, mientras ambas reíamos.
-Voy a subir, te veo en la habitación de Alexa, tómate unos 5 minutos antes de subir también y fíjate que nadie te vea subir, le dije a Paola.
Me fui de la barra, rumbo a las escaleras, revisando que no hubiera nadie vigilando, especialmente Pamela, que ya me había descubierto con Alexa antes. Cuando vi que no estaba cerca, subí tratando de no llamar la atención, miré hacia atrás rápidamente cuando subía y me di cuenta de que nadie me había notado. Entré de nuevo en la habitación, podía casi revivir minuto a minuto lo que había pasado ahí horas antes, revisé mi celular, eran ya las 2 am. No perdí tiempo, estaba muy excitada, me quité rápidamente el vestido, me quedé solo en tanga y tacones y me acosté en la cama así, para esperar a Paola. Pasaron 5 minutos a lo mucho, cuando escuché que abrían la puerta, entró Paola y antes de cerrar se asomó al pasillo para ver que no hubiera nadie, cerró la puerta tras de si.
-Vaya, tu si que tienes prisa hermosa, me dijo cuando me vio ahí desnuda en la cama, inmediatamente se quitó la blusa y el sostén, yo estaba muy excitada de nuevo. Se desabrochó el pantalón, se dio media vuelta y se lo quitó, agachándose para que pudiera ver sus nalgas, perfectas y redondas, se volvió a dar la vuelta para que pudiera apreciarla bien, llevaba una tanga de encaje negro, de tira ancha, corte alto, me excité mucho sólo de verla. Se acercó a la cama y se quedó parada a mi lado, con las piernas ligeramente abiertas, comencé a acariciarle la entrepierna y al momento dejó salir un leve suspiro.
-Te extrañé, hermosa, dijo mientras yo la acariciaba. Justo después se puso encima de mi, pero la tomé de la cintura y la tiré en la cama, le quité la tanga despacio, se la baje a la altura de las rodillas y me acosté a un lado para hacerle sexo oral, Paola comenzó a emitir ligeros gemidos de placer.
-Si, así mi amor, tu sabes bien que me gusta, no pares, me dijo mientras gemía un poco mas alto. Inmediatamente puso su mano en mi nuca y empezó a empujarme la cara a su vagina, yo seguía complaciéndola, haciéndolo como ella quería, como a ella le gusta. Estuvimos así varios minutos hasta que me separé un momento, me quité la tanga que llevaba, me di la vuelta y me puse encima de ella, ahora ambas podíamos complacernos como nos gustaba. Sentí su lengua tibia empezar a saborear mi interior, placer inmediato, comencé a gemir muy suave, ya no con el ímpetu de hace unas horas. Seguí haciendo lo mio, rozando su clítoris con mi lengua muy suavemente como a ella le gusta, sentía como se movía bajo de mi, después de unos minutos pare de hacerlo y me quite de encima.
-Abre las piernas, le dije justo cuando me quité, ella obedeció sin preguntar nada, me senté frente a ella, con las piernas abiertas también, me fui acercando poco a poco a ella, hasta que mi vagina rozó con la de ella, inmediatamente nos juntamos mas, empezamos a movernos al mismo tiempo, con un ritmo perfecto, ambas sabíamos como le gustaba a la otra. Paola comenzó a jadear y casi al mismo tiempo comencé yo igual, sentía su vagina rozar contra la mía, se sentía muy rico, de vez en cuando lamía mi mano y la pasaba por la vagina de Paola, ella gemía cada vez mas fuerte, yo no podía dejar de pensar en lo que me había dicho Pamela, me estaba excitando cada vez mas el hecho de que ella pudiera estar ahí afuera, escuchando los gemidos de mi hermana, y los míos, me provocaba mucho placer sentir mi vagina pegada a la de ella y el hecho de que alguien podría estar escuchándonos, nos movíamos cada vez mas fuerte, se sentía maravilloso hacer eso, ambas teníamos orgasmo tras orgasmo, gemíamos duro las dos, de repente escuchamos como abrieron la puerta, no nos dio tiempo de hacer nada, era Pamela que había estado del otro lado todo el tiempo.
-Wow... Yo... Perdón... pensé... dijo Pamela, que había estado escuchando detrás de la puerta, pero que no sabía que escena se iba a encontrar al entrar. Paola y yo estábamos atónitas, no sabíamos que decir, era la primera vez que alguien nos descubría así. Una cosa era tener la fantasía de que alguien te escuchara, y otra muy diferente era ver como alguien entraba mientras tenías relaciones con tu hermana.
-Que es lo que quieres? contesté enojada tras unos minutos. Me quité de encima de Paola y busqué mi vestido y me tapé con el. Paola no se tapó ni hizo nada, estaba desnuda en la cama con las piernas abiertas sin saber que hacer o decir.
-No lo tomes a mal Liza, de verdad simplemente me gustas muchísimo, yo quiero estar contigo y.. tener lo que ustedes tienen...
Paola se levantó de la cama y se paró frente a Pamela, en ese momento, yo esperaba lo peor.
-Bueno, pues es tu fiesta, y tengo que complacerte en tu cumpleaños, no? Dijo Paola. Acto seguido se dio la vuelta y comenzó a besar a Pamela.
1 comentarios - Noches de fiesta - Parte 1
me encanta tu forma de escribir, me transportas
me excito bastante la historia, estoy ansioso por saber como termina la historia
te dejo +10 gracias por compartir, por cierto me encantaría ver una foto con ese vestido azul
saludos y besos 😘