Podría contarles por que no he escrito, pero prefiero contarles esta experiencia maravillosa:
Contesté el teléfono emocionado, tenia algunos días sin acción, y la verdad es que siempre ando caliente, por eso cuando vi el nombre del Ejecutivo en mi celular me prendí de inmediato:
- ¡Hola!, ¿Cómo está? (contesté)
-Bien Alex, ¿y tu? (me preguntó Javier)
-También Bien, preguntándome por que no me había hablado
-He estado fuera del país, de hecho voy a volver a salir, pero me pregunto si nos podemos ver antes
-¡Claro! (contesté emocionado), usted dígame cuando
-Hoy, si quieres paso por ti
-Ok, lo espero
-Solo que hay una cosa que quisiera preguntarte (me dijo en un tono serio)
-¿Qué pasó? (pregunté intrigado)
-Hay alguien… un amigo mío, que quisiera conocerte.
-… (yo me quedé callado, sin saber que contestar)
-¿Alex?
-¿Cómo? No entiendo, ¿me quiere presentar a alguien?
-Si… bueno, en realidad quisiera que este amigo mío nos acompañara hoy.
-…
Yo no sabia que decir, ya antes había estado con dos personas a la vez, pero con el ejecutivo todo era muy… “intimo”, así que no sabia que responder, pero por supuesto que mi cola quería gritar Si! Si!!!
-Este…
-Si te incomoda dímelo con confianza
-No… no me incomoda, esta bien. (contesté por fin)
-Bueno, entonces paso por ti por la tarde.
-Si, esta bien.
Esa tarde me fui a casa temprano para prepararme, me di un baño y una buena lavada en la cola, estaba súper nervioso, pero al mismo tiempo caliente como no se imaginan, en eso sonó el timbre, era mi amigo Roberto.
Salí con la toalla amarrada a la cintura para abrirle la puerta y que pasará
- ¿qué onda? ¿cómo has estado? (me preguntó)
-bien ¿y tu?, (le pregunté)
-También, con mucho trabajo.
-Si, me tienes abandonado
-Ya se… pero por eso vengo (me dijo), para que no me extrañes, y mira… ya sabias que iba a venir y estabas listo ¿verdad? (bromeó)
-Jajajaja, no… me acabo de salir de bañar
-¡Pues vamos a aprovechar! (Dijo Roberto jalándome la toalla)
Me encanta mi amigo Roberto, me coge delicioso, pero yo no sabia como iba a estar la tarde, así que no quería arriesgarme a tener el culo roto y enlechado para lo que fuera que pasara, así que le dije:
-No wey… hoy no vamos a poder (le conteste poniéndome de nuevo la toalla a la cintura)
-¿Por qué? Andas en tus días (bromeó Roberto)
-No, voy a salir en un rato
-¿Vas a la escuela?
-No…
-Pero si trabajaste en la mañana
-No voy a trabajar
-Aaaaaa, (me mijo en tono burlón), vas a parchar
-… (yo no conteste)
-¿Con quien?
-Wey… habíamos quedad en algo, ¿te acuerdas? (le contesté serio)
-Si!, ya se… solo tengo morbo…
-Con un wey…
-¿Y te la mete rico?
-Wey!!!
-Ya se, ya se… bueno… esta bien… (aceptó de mala gana mi amigo y se dispuso a irse)
Noté que mi amigo se decepciono un poco, y como se lo que se siente andar caliente y que dejen con las ganas, lo detuve y le dije
-Ya wey… no te encabrones, si quieres te quito las ganas…
-¿No que vas a salir?
-Wey!!! ¿Quieres que te la mame o no?
-Si (me contesto Roberto)
Ahí mismo en la sala, me puse de rodillas frente a Roberto, le bajé el pantalón y la ropa interior, y metí inmediatamente su verga a mi boca… estaba ligeramente flácida, como si hubiera tenido una erección pero mi negativa se la hubiera desanimado, pero pronto se puso bien dura dentro de mi, mientras la apretaba con los labios.
Me encanta su verga limpia y grande, me la comí completa y de pronto le pasaba la lengua por todo su largo, para acabar metiéndola de nuevo a mi boca apretando su glande con mi labios, me gusta mamársela así nomas, sin manos, que mi boca haga todo el trabajo, a veces Roberto me toma de la cabeza y mueve su cadera adelante y atrás para introducir su pija en mis labios, como si me estuviera cogiendo por la boca.
Se la estuve mamando un rato, hasta que me preguntó: ¿No quieres que te la meta?; yo sin sacarme su verga de la boca, solo lo miré y negué con la cabeza. Seguí mamando hasta que me dijo que ya se venia, yo sentí su verga hincharse en mis labios, la tome con mi mano para jalársela al tiempo que se la mamaba un poco mas rápido. Roberto eyaculo en mi boca, fue una descarga grande y tibia que me llenó la boca por completo, trague lo que no se salió de mis labios, y seguí chupando un poco mas hasta quitarle el ultimo gramo se leche.
Me puse de pie, y Roberto se subió de nuevo los pantalones, nos despedimos no sin que Roberto me deseara que me dieran “Una buena metida de verga” y volví a quedarme solo, para prepararme.
Un poco mas tarde Javier me llamó por teléfono para avisarme que estaba fuera de mi casa, le dije que bajaba enseguida, y así lo hice, me subí a su auto y me llevó a un hotel.
Yo estaba nervioso, y Javier lo notó
-¿Estas bien? (me preguntó Javier)
-Si
-Estas muy callado… (me dijo)
-No… solo estoy nervioso, me tomó por sorpresa su petición, y no se que esperar
-Gabriel es un buen amigo mío (me contó), es un colega, y comparte mi afición por… pues por chicos como tu.
-¿Y que es lo que tengo que hacer? (Le pregunté)
-Disfrutar… (me dijo) y dejar que te disfrutemos
-Pero ¿debo hacer algo yo?, ¿o el tiene algún gusto en particular?, no se que debo hacer
-Tranquilo… (me dijo Javier), Ya se lo que a ti te gusta, y no vamos a hacer nada que no quieras, tu solo hazme caso y verás que nos vamos a divertir
-Sonó usted a violador profesional
-¿Y no es eso lo que quieres?
-… Si (Contesté medio ruborizado)
Llegamos a un hotel del poniente de la ciudad, muy fino, subimos al cuarto y entramos; Gabriel ya estaba ahí, me saludo muy atento.
Gabriel resultó ser un tipo como de 40 años, muy… muy guapo, bajito de estatura, pero de complexión fornida, encajaba también en el estereotipo del hombre de negocios exitoso que tiene tiempo para hacer ejercicio y tener un buen cuerpo, sumado a la edad bastante pertinente para una buena figura, además, su trato era similar al de Javier, con voz muy calmada, y muy seguro de si mismo, peinado impecable y barba cerrada que lo hacia ver muy varonil.
Gabriel se fue a sentar a un sillón de la pequeña sala que había ahí, mientras Javier me decía;
-¿Por qué no te desnudas? (Me dijo Javier)
Me quité la ropa ahí, frente a los dos, Javier se sentó en la cama mirando como me desvestía, yo me sentía como una pequeña putita en un aparador, por un lado estaba muy cohibido, pero por otro estaba ardiendo por dentro. Estaba yo de pie en medio de la habitación mientras los dos me miraban, el tiempo se me hacia eterno, y yo no sabia que hacer, hasta que Javier me dijo “Ven”
Me acerqué a la cama, y ahí estaba yo, de rodillas por segunda vez en el día, quitándole el pantalón ahora a Javier, le quité por completo el pantalón y la ropa interior y comencé a chuparle la pija; de reojo miraba hacia Gabriel que miraba como me comía esa verga, que se iba poniendo dura dentro de mi, entonces Javier se puso de pie para quitarse la camisa, y yo lo tome de las caderas para mamar su verga como me gusta, sin usar las manos, dejando que mi boca succione hasta el fono su tronco.
Entonces vi que Gabriel se quitaba la ropa y se acerco, quedándose de pie junto a Javier, con su verga un poco mas pequeña que la de Javier (que era grande), pero un poco mas gruesa, yo, sin sacar la verga de mi boca, miré hacia arriba a Javier como pidiéndole permiso, Javier asintió con la cabeza, así que me saqué la verga de Javier de la boca y tomé con mi mano la de Gabriel, para llevarla a mi boca, mientras con la otra mano masturbaba a Javier, decidí que debía ser equitativo, y de vez en cuando cambiaba para meter a mi boca una verga mientras se la jalaba al otro. Yo me sentía como una nenita en una dulcería, Tenía esas dos pijas duras frente a mi, y no me daba abasto para mamarlas, en algún momento, recuero que trataron de meter su verga los dos a mi boca, pero no cupieron.
Javier me pidió que me levantara, y me acostó en la cama, me puso justo en el borde y me levanto las piernas, se puso lubricante y puso la punta de su verga en mi ano, yo lo sentía duro y caliente, y sentía como Javier hacia movimientos despacio antes de meterla, para abrirme la cola, mientras Gabriel se ponía al lado de la cama a la altura de mi cara para que le siguiera mamando, metió su verga en mi boca mientras Javier jugaba aun fuera de mi cola.
Mientras tenia la verga de Gabriel en los labios tuve que detener mis movimiento un momento por que sentí que Javier empezaba a metérmela, despacio, sin prisas, dejó que mi cola se abriera al paso de su pija larga, no retrocedió, empujo despacio hasta que me penetró por completo, luego empezó a moverse despacio, suavemente, yo me tuve que sacar la verga de Gabriel de la boca para gemir un poco, y para ver como Javier se colaba entre mis nalgas, cuando tomó un poco de ritmo, volví a la verga de Gabriel, que metía su verga gruesa en mi boca moviendo su cadera.
Mi cola ya estaba bien abierta, Javier me ladeo sin sacármela, dejándome completamente de costado, posición que me permitía tener mayo control sobre la mamada que le estaba dando a Gabriel.
-¿Quieres cambiar? (Le dijo Javier a Gabriel)
-Si, déjame metérsela (contestó Gabriel)
-¿Cómo lo quieres?
-En cuatro, como toda una perrita (dijo Gabriel)
Mientras ellos se ponían de acuerdo yo estaba con una verga en la cola y otra en la boca, me sentí extraño, como si hablaran de alguien mas, pero sabia que hablaban de mi, de cómo se iban a coger a esta putita.
Javier me la saco, y se subió a la cama recargándose en la cabecera, yo ya sabia lo que tenia que hacer, me puse en cuatro y tome su verga para chupársela ahora al Ejecutivo, mientras tanto, Gabriel se subía a la cama y se ponía lubricante, yo no podía ver lo que pasaba atrás de mi, hasta que sentí a Gabriel colocarse detrás de mi, y entonces supe que me penetraría.
Sentí su verga gruesa en la entrada de mi cola, y sentí el frío del lubricante, de nuevo tuve que detener mi boca con la verga de Javier adentro para sentir como Gabriel me penetraba, lo hizo un poco mas fuerte, y yo gemí, pero mi cola ya estaba dilatada, asi que no dolió tanto, pronto Gabriel tomo un buen ritmo y empezó a darme unas buenas embestidas, yo sentía como mi cola le apretaba su verga gruesa pero al mismo tiempo tenia que concentrarme en la verga que tenia en mi boca.
Estaba extasiado, me estaban cogiendo dos tipos deliciosos experimentados y bien dotados, ¿Qué mas podía pedir?, Gabriel me estaba dando durísimo, podía sentir sus testículos chocando contra mi, y eso me prendía muchísimo. No se en que momento eyacule, pero de inmediato volví a la verga de Javier.
Gabriel me levanto, y con una facilidad sorprendente me cargó sin sacarme su verga de la cola, se dio la vuelta y se acostó, conmigo encima suyo, mientras yo me recargaba en su torso, abrí las piernas un poco para que pudiera seguir con las acometidas, mientras Javier se ponía al lado de nosotros de rodillas para que yo le siguiera chupando la pija.
Gabriel me estuvo cogiendo un buen rato, mientras yo se la mamaba a Javier, nunca me dejaron sin trabajo, no tuve tiempo de descansar la boca o la cola.
Javier se acostó en la cama y me pidió que me sentara en el, me saque del culo la verga de Gabriel, y me senté sobre Javier, Gabriel se puso de pie sobre la cama y de nuevo metió su pene en mi boca, es complicado tener que moverse de arriba abajo y al mismo tiempo mamar una verga. Cabalgué a Javier un buen rato y luego me pidió que me volviera a poner en cuatro, se puso detrás de mi y me penetró, ahora Gabriel se acostó frente a mi para que se la chupara, estaba en eso cuando sentí como Gabriel eyaculaba dentro de mi boca, seguí mamando mientras me llenaban la boca de semen por segunda vez en el día, también fue una buena descarga que me llenó por completo la boca. Javier mientras tanto seguía cogiéndome, yo no podía mas, y eyaculé de nueva cuenta, como seguía en cuatro, decidí mamársela un poco mas a Gabriel. Hasta que sentí como Javier empezaba a empujar mas fuerte contra mis nalgas, yo sentía que me atravesaba, gimió, y se vino adentro de mi, llenándome la cola de su leche.
Así, sin sacármela me empujó un poco hacia delante, para que nos acostáramos, y así quedé en medio de Gabriel y de Javier, con la verga de Javier dentro y con mi cola llena de la leche de Javier y la boca y la cara llena de la de Gabriel.
Y así fue ese día en el que tres personas distintas me llenaron de semen.
Espero que les haya gustado, y gracias por pasar.
Contesté el teléfono emocionado, tenia algunos días sin acción, y la verdad es que siempre ando caliente, por eso cuando vi el nombre del Ejecutivo en mi celular me prendí de inmediato:
- ¡Hola!, ¿Cómo está? (contesté)
-Bien Alex, ¿y tu? (me preguntó Javier)
-También Bien, preguntándome por que no me había hablado
-He estado fuera del país, de hecho voy a volver a salir, pero me pregunto si nos podemos ver antes
-¡Claro! (contesté emocionado), usted dígame cuando
-Hoy, si quieres paso por ti
-Ok, lo espero
-Solo que hay una cosa que quisiera preguntarte (me dijo en un tono serio)
-¿Qué pasó? (pregunté intrigado)
-Hay alguien… un amigo mío, que quisiera conocerte.
-… (yo me quedé callado, sin saber que contestar)
-¿Alex?
-¿Cómo? No entiendo, ¿me quiere presentar a alguien?
-Si… bueno, en realidad quisiera que este amigo mío nos acompañara hoy.
-…
Yo no sabia que decir, ya antes había estado con dos personas a la vez, pero con el ejecutivo todo era muy… “intimo”, así que no sabia que responder, pero por supuesto que mi cola quería gritar Si! Si!!!
-Este…
-Si te incomoda dímelo con confianza
-No… no me incomoda, esta bien. (contesté por fin)
-Bueno, entonces paso por ti por la tarde.
-Si, esta bien.
Esa tarde me fui a casa temprano para prepararme, me di un baño y una buena lavada en la cola, estaba súper nervioso, pero al mismo tiempo caliente como no se imaginan, en eso sonó el timbre, era mi amigo Roberto.
Salí con la toalla amarrada a la cintura para abrirle la puerta y que pasará
- ¿qué onda? ¿cómo has estado? (me preguntó)
-bien ¿y tu?, (le pregunté)
-También, con mucho trabajo.
-Si, me tienes abandonado
-Ya se… pero por eso vengo (me dijo), para que no me extrañes, y mira… ya sabias que iba a venir y estabas listo ¿verdad? (bromeó)
-Jajajaja, no… me acabo de salir de bañar
-¡Pues vamos a aprovechar! (Dijo Roberto jalándome la toalla)
Me encanta mi amigo Roberto, me coge delicioso, pero yo no sabia como iba a estar la tarde, así que no quería arriesgarme a tener el culo roto y enlechado para lo que fuera que pasara, así que le dije:
-No wey… hoy no vamos a poder (le conteste poniéndome de nuevo la toalla a la cintura)
-¿Por qué? Andas en tus días (bromeó Roberto)
-No, voy a salir en un rato
-¿Vas a la escuela?
-No…
-Pero si trabajaste en la mañana
-No voy a trabajar
-Aaaaaa, (me mijo en tono burlón), vas a parchar
-… (yo no conteste)
-¿Con quien?
-Wey… habíamos quedad en algo, ¿te acuerdas? (le contesté serio)
-Si!, ya se… solo tengo morbo…
-Con un wey…
-¿Y te la mete rico?
-Wey!!!
-Ya se, ya se… bueno… esta bien… (aceptó de mala gana mi amigo y se dispuso a irse)
Noté que mi amigo se decepciono un poco, y como se lo que se siente andar caliente y que dejen con las ganas, lo detuve y le dije
-Ya wey… no te encabrones, si quieres te quito las ganas…
-¿No que vas a salir?
-Wey!!! ¿Quieres que te la mame o no?
-Si (me contesto Roberto)
Ahí mismo en la sala, me puse de rodillas frente a Roberto, le bajé el pantalón y la ropa interior, y metí inmediatamente su verga a mi boca… estaba ligeramente flácida, como si hubiera tenido una erección pero mi negativa se la hubiera desanimado, pero pronto se puso bien dura dentro de mi, mientras la apretaba con los labios.
Me encanta su verga limpia y grande, me la comí completa y de pronto le pasaba la lengua por todo su largo, para acabar metiéndola de nuevo a mi boca apretando su glande con mi labios, me gusta mamársela así nomas, sin manos, que mi boca haga todo el trabajo, a veces Roberto me toma de la cabeza y mueve su cadera adelante y atrás para introducir su pija en mis labios, como si me estuviera cogiendo por la boca.
Se la estuve mamando un rato, hasta que me preguntó: ¿No quieres que te la meta?; yo sin sacarme su verga de la boca, solo lo miré y negué con la cabeza. Seguí mamando hasta que me dijo que ya se venia, yo sentí su verga hincharse en mis labios, la tome con mi mano para jalársela al tiempo que se la mamaba un poco mas rápido. Roberto eyaculo en mi boca, fue una descarga grande y tibia que me llenó la boca por completo, trague lo que no se salió de mis labios, y seguí chupando un poco mas hasta quitarle el ultimo gramo se leche.
Me puse de pie, y Roberto se subió de nuevo los pantalones, nos despedimos no sin que Roberto me deseara que me dieran “Una buena metida de verga” y volví a quedarme solo, para prepararme.
Un poco mas tarde Javier me llamó por teléfono para avisarme que estaba fuera de mi casa, le dije que bajaba enseguida, y así lo hice, me subí a su auto y me llevó a un hotel.
Yo estaba nervioso, y Javier lo notó
-¿Estas bien? (me preguntó Javier)
-Si
-Estas muy callado… (me dijo)
-No… solo estoy nervioso, me tomó por sorpresa su petición, y no se que esperar
-Gabriel es un buen amigo mío (me contó), es un colega, y comparte mi afición por… pues por chicos como tu.
-¿Y que es lo que tengo que hacer? (Le pregunté)
-Disfrutar… (me dijo) y dejar que te disfrutemos
-Pero ¿debo hacer algo yo?, ¿o el tiene algún gusto en particular?, no se que debo hacer
-Tranquilo… (me dijo Javier), Ya se lo que a ti te gusta, y no vamos a hacer nada que no quieras, tu solo hazme caso y verás que nos vamos a divertir
-Sonó usted a violador profesional
-¿Y no es eso lo que quieres?
-… Si (Contesté medio ruborizado)
Llegamos a un hotel del poniente de la ciudad, muy fino, subimos al cuarto y entramos; Gabriel ya estaba ahí, me saludo muy atento.
Gabriel resultó ser un tipo como de 40 años, muy… muy guapo, bajito de estatura, pero de complexión fornida, encajaba también en el estereotipo del hombre de negocios exitoso que tiene tiempo para hacer ejercicio y tener un buen cuerpo, sumado a la edad bastante pertinente para una buena figura, además, su trato era similar al de Javier, con voz muy calmada, y muy seguro de si mismo, peinado impecable y barba cerrada que lo hacia ver muy varonil.
Gabriel se fue a sentar a un sillón de la pequeña sala que había ahí, mientras Javier me decía;
-¿Por qué no te desnudas? (Me dijo Javier)
Me quité la ropa ahí, frente a los dos, Javier se sentó en la cama mirando como me desvestía, yo me sentía como una pequeña putita en un aparador, por un lado estaba muy cohibido, pero por otro estaba ardiendo por dentro. Estaba yo de pie en medio de la habitación mientras los dos me miraban, el tiempo se me hacia eterno, y yo no sabia que hacer, hasta que Javier me dijo “Ven”
Me acerqué a la cama, y ahí estaba yo, de rodillas por segunda vez en el día, quitándole el pantalón ahora a Javier, le quité por completo el pantalón y la ropa interior y comencé a chuparle la pija; de reojo miraba hacia Gabriel que miraba como me comía esa verga, que se iba poniendo dura dentro de mi, entonces Javier se puso de pie para quitarse la camisa, y yo lo tome de las caderas para mamar su verga como me gusta, sin usar las manos, dejando que mi boca succione hasta el fono su tronco.
Entonces vi que Gabriel se quitaba la ropa y se acerco, quedándose de pie junto a Javier, con su verga un poco mas pequeña que la de Javier (que era grande), pero un poco mas gruesa, yo, sin sacar la verga de mi boca, miré hacia arriba a Javier como pidiéndole permiso, Javier asintió con la cabeza, así que me saqué la verga de Javier de la boca y tomé con mi mano la de Gabriel, para llevarla a mi boca, mientras con la otra mano masturbaba a Javier, decidí que debía ser equitativo, y de vez en cuando cambiaba para meter a mi boca una verga mientras se la jalaba al otro. Yo me sentía como una nenita en una dulcería, Tenía esas dos pijas duras frente a mi, y no me daba abasto para mamarlas, en algún momento, recuero que trataron de meter su verga los dos a mi boca, pero no cupieron.
Javier me pidió que me levantara, y me acostó en la cama, me puso justo en el borde y me levanto las piernas, se puso lubricante y puso la punta de su verga en mi ano, yo lo sentía duro y caliente, y sentía como Javier hacia movimientos despacio antes de meterla, para abrirme la cola, mientras Gabriel se ponía al lado de la cama a la altura de mi cara para que le siguiera mamando, metió su verga en mi boca mientras Javier jugaba aun fuera de mi cola.
Mientras tenia la verga de Gabriel en los labios tuve que detener mis movimiento un momento por que sentí que Javier empezaba a metérmela, despacio, sin prisas, dejó que mi cola se abriera al paso de su pija larga, no retrocedió, empujo despacio hasta que me penetró por completo, luego empezó a moverse despacio, suavemente, yo me tuve que sacar la verga de Gabriel de la boca para gemir un poco, y para ver como Javier se colaba entre mis nalgas, cuando tomó un poco de ritmo, volví a la verga de Gabriel, que metía su verga gruesa en mi boca moviendo su cadera.
Mi cola ya estaba bien abierta, Javier me ladeo sin sacármela, dejándome completamente de costado, posición que me permitía tener mayo control sobre la mamada que le estaba dando a Gabriel.
-¿Quieres cambiar? (Le dijo Javier a Gabriel)
-Si, déjame metérsela (contestó Gabriel)
-¿Cómo lo quieres?
-En cuatro, como toda una perrita (dijo Gabriel)
Mientras ellos se ponían de acuerdo yo estaba con una verga en la cola y otra en la boca, me sentí extraño, como si hablaran de alguien mas, pero sabia que hablaban de mi, de cómo se iban a coger a esta putita.
Javier me la saco, y se subió a la cama recargándose en la cabecera, yo ya sabia lo que tenia que hacer, me puse en cuatro y tome su verga para chupársela ahora al Ejecutivo, mientras tanto, Gabriel se subía a la cama y se ponía lubricante, yo no podía ver lo que pasaba atrás de mi, hasta que sentí a Gabriel colocarse detrás de mi, y entonces supe que me penetraría.
Sentí su verga gruesa en la entrada de mi cola, y sentí el frío del lubricante, de nuevo tuve que detener mi boca con la verga de Javier adentro para sentir como Gabriel me penetraba, lo hizo un poco mas fuerte, y yo gemí, pero mi cola ya estaba dilatada, asi que no dolió tanto, pronto Gabriel tomo un buen ritmo y empezó a darme unas buenas embestidas, yo sentía como mi cola le apretaba su verga gruesa pero al mismo tiempo tenia que concentrarme en la verga que tenia en mi boca.
Estaba extasiado, me estaban cogiendo dos tipos deliciosos experimentados y bien dotados, ¿Qué mas podía pedir?, Gabriel me estaba dando durísimo, podía sentir sus testículos chocando contra mi, y eso me prendía muchísimo. No se en que momento eyacule, pero de inmediato volví a la verga de Javier.
Gabriel me levanto, y con una facilidad sorprendente me cargó sin sacarme su verga de la cola, se dio la vuelta y se acostó, conmigo encima suyo, mientras yo me recargaba en su torso, abrí las piernas un poco para que pudiera seguir con las acometidas, mientras Javier se ponía al lado de nosotros de rodillas para que yo le siguiera chupando la pija.
Gabriel me estuvo cogiendo un buen rato, mientras yo se la mamaba a Javier, nunca me dejaron sin trabajo, no tuve tiempo de descansar la boca o la cola.
Javier se acostó en la cama y me pidió que me sentara en el, me saque del culo la verga de Gabriel, y me senté sobre Javier, Gabriel se puso de pie sobre la cama y de nuevo metió su pene en mi boca, es complicado tener que moverse de arriba abajo y al mismo tiempo mamar una verga. Cabalgué a Javier un buen rato y luego me pidió que me volviera a poner en cuatro, se puso detrás de mi y me penetró, ahora Gabriel se acostó frente a mi para que se la chupara, estaba en eso cuando sentí como Gabriel eyaculaba dentro de mi boca, seguí mamando mientras me llenaban la boca de semen por segunda vez en el día, también fue una buena descarga que me llenó por completo la boca. Javier mientras tanto seguía cogiéndome, yo no podía mas, y eyaculé de nueva cuenta, como seguía en cuatro, decidí mamársela un poco mas a Gabriel. Hasta que sentí como Javier empezaba a empujar mas fuerte contra mis nalgas, yo sentía que me atravesaba, gimió, y se vino adentro de mi, llenándome la cola de su leche.
Así, sin sacármela me empujó un poco hacia delante, para que nos acostáramos, y así quedé en medio de Gabriel y de Javier, con la verga de Javier dentro y con mi cola llena de la leche de Javier y la boca y la cara llena de la de Gabriel.
Y así fue ese día en el que tres personas distintas me llenaron de semen.
Espero que les haya gustado, y gracias por pasar.
1 comentarios - Tres en un día (Gay)