Segundo relato... Quien iba a pensar...

Hola como les va? Esto que les cuento paso hace bastante...
Uno de mis amigos Daniel, nos conocemos desde que tenemos 15 años. Grandes amigos.
Tanto tiempo de amistad que conozco a su familia de hace años. Lo cual tambien me hice muy amigo de su hermana mas chica, Antonela. La conozco desde chica, y ahora con 24 años, nos hemos hecho muy amigos. Juntarnos a tomar mate, ver una peli en la casa, la he ayudado con materias de la facultad. Me desenvuelvo muy bien con matematicas, asi que siempre me pedia ayuda. Ella venia a mi cumpleaños y yo iba al de ella. Hasta me hice amigos de sus amigas. Era una hermana para mi.
Una vez dijimos de salir, los dos a tomar algo, pero de lo mas inocente. Yo tengo un amigo dueño de un bar aca en Bs. As. aprovechabamos eso.
-Anto estaria salir a tomar algo. Queres?
-Dale si Marcos! Buenisimo.
-Vamos al bar de mi amigo, que entramos gratis y tomamos lo que queramos je. Le dije mi plan.
-Dale vayamos el sabado.
Asi quedamos organizado todo.
Bueno yo el sabado, preparandome, me cambie, re bonito yo je. Agarre el auto y fui a buscarla a la casa.
Toco timbre, y como toda mujer ni preparada estaba... Me atiende en jogging y remera.
-Hola Marquitos! pasa que ya me cambio y salimos.
-Si Anto, no hay apuro, tomate tu tiempo.
A los 20 min, aparece ella, no podia creer lo que estaba mirando. Una mujer hermosa! Esa chica que siempre vi como una hermana, estaba preciosa. Un jean ajustado, que le marcaba una cola divina, que no sabia que tenia guardada. Y una remerita al cuerpo escotado que dejaba ver algo de sus pechos.
Por dentro pense -GUAU! Crecio Antonella.
-Estas muy linda Anto!
-Anda mentiroso. Me dice.
Yo tratando de imaginar que conjunto de lenceria llevara?.
-Bueno vamos?. Me dice
-Dale tenes todo? dale.

Subimos al auto, en el viaje mientras hablabamos y yo la miraba toda. Disimulaba. Era muy sexy. No podia creer como se habia desarrollado. Le miraba el escote, y tratando de mirar adelante asi no chocabamos je.

Llegamos al boliche, en la entrada ya me conocen. Y me saluda el dueño y los de seguridad.
-Marquitos! como estas?! Me saluda el dueño.
-Hola Leo! Todo bien y vos? como esta la noche?.
-Bien genial.
-Antonela una amiga, Leo el dueño. La presento a mi amiga.
-Hola! Como estas?
-Hola Bien.
-Leo como esta adentro! Explota?
-Si Marquitos, esta genial. Pasa tranquilo. Pedite lo que quieras, ya te conocen guacho! jeje
-Dale Leo Gracias, permiso
Quede como un genio delante de Antonela. Re agrandado. Y vi que se quedo asombrada.

Bueno entramos. Y el lugar lleno de gente. Y encaramos para la barra.
Saludos tambien a los de la barra.
-Marcos! como va?
-Todo bien Fer!
-Que quieren tomar?

-Que queres tomar Anto? Pedi lo que quieras
-Bueno, tomamos una cerveza.

Yo mas agrandado aun. Tomamos la cerveza. Luego unos tragos. Y fuimos a la pista a bailar.

Bailando reggaeton, ella se me acerca y se me pega. No podia creer que estaba agarrando ese cuerpito. La agarraba de la cintura. Apretaba. Al limite con la cola.
Seguimos bailando. Ya cara a cara. Muy sensuales. Me apoyaba la cola en mi. Yo estaba que explotaba. Ya tenia mi bulto marcado. Y siento que ella se daba cuenta porque me dejaba apoyarla y apretar.
Luego de un rato volvimos a la barra.
-Que queres tomar Anto?
-No se algun trago
-Ah tenes que probar este trago, yo siempre me lo pido. Es genial, dulce y no te das cuenta lo que pega.
-Dale a ver.
Se los pido a los chicos de la barra. Ella lo prueba. Y le encanta.
-Esta genial Marcos, es riquisimo!
-Viste? Es para tomar miles!

Despues de un par de tragos. Que hicieron efecto. Estabamos los dos en la barra, charlando y cada vez mas cerca. Nos pusimos melosos. Agarrarla de la cintura, y hacerle mimos en la pancita. Pero sin hacer nada. Pensaba, mira que hermosa es! preciosa! pero es la hermana de mi amigo. No puedo.
Bueno seguimos charlando, siempre caricia va, caricia viene. Se paso la noche. Ya madrugada.
-Vamos?. Le digo
-Dale vamos.

Ella me agarra de la mano y salimos como una pareja. Llegamos al auto.
-Espera no entremos que fumo un cigarrillo.
-Ok dale.

Se sienta, apoyada contra la puerta, enciende el cigarrillo, y me mira, yo me acerco, y seguimos charlando. La agarro de la cintura de nuevo, y ya nos pegamos mas. Me miraba a los ojos. Como que los dos estabamos entregados. Y ahi pense, que sea lo que sea. Y le encaje un beso. Muy sensual. Esa chica que conocia toda la vida.

Subimos al auto. Y no paro ahi. Seguimos besandonos. Ya mis manos la tocaban toda. Ella hacia lo mismo. Me agarraba mi bulto que estaba que queria escapar del pantalon.
No tuve que decirle nada, que ella solita me desabrocho el pantalon y me la empezo a chupar. Esa chica que la conocia desde chica, me la chupaba como una experta. Sabia lo que hacia.
No paraba, jugaba con su lengua. Me encantaba.
Yo gemia descontrolado, miraba al techo, al mismo tiempo miraba para la calle a ver si nos veia alguien.
Me pajeaba fuerte, y volvia a meter mi pija en su boca. Sabia tener un ritmo para durar y que no acabara.
Estaba en el cielo. Tenia una boca que me hacia suspirar.
-Te gusta lo que te hago? Me dice.
-Si me encanta, no pares.
Yo veia su cabeza subir y bajar. Sentia como jugaba con mi pija. Lamia entera. La base, el tronco, la cabeza. No dejaba un centimetro sin lamer.

-Quiero tu lechita. Me dice agitada.
-Si ya acabo.

Empieza a metersela entera en la boca, la dejaba un rato, y volvia a sacarla para respirar.
Empezo a aumentar el ritmo. Ya no aguantaba mas.
Me mordia los labios.Y se la metí en la boca y me la mamo con una velocidad mucho más intensa en busca de su premio.
- Mmmm siiiiii aaaaah. llegue a decir antes de estallar con una acabada dentro de su boca. Ella no se detenia y le saco hasta el último chorro de mi pija. Ni una gota dejo caer en el auto.

-Que rica, calentita. Me encanto. Me dice.
-Si la pase genial.
-Vamos que tengo que volver a casa?
-Dale te llevo.

Nos acomodamos la ropa. Arrancamos y volvimos para casa. Llegamos a la puerta. Antes de bajarse me da un beso de lengua, que me deja sin aliento.

-La pase genial Marquitos. A ver cuando salimos de nuevo. Dice guiñandome el ojo, asumiendo su complicidad.
-Dale Anto, besotes.
La veo entrar a su casa. Arranco el auto. Y me voy a casa, pensando en la mujer que se convirtio la hermanita de mi amigo.