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Como me garché a una compañera de trabajo

hola poringueros/as... Estoy de nuevo aquí para contarles algo que me sucedió a finales de febrero, yo trabajo en un edificio y por lo general durante el verano aumenta el número de mucamas que trabajan por la temporada y forma parte de la costumbre del personal masculino tratar de garcharnos a alguna.
Yo todo el verano estuve tirando letra por varios lados, pero la verdad que no recibía ninguna reacción positiva de ninguna, aunque existía cierto chichoneo con una en especial. Así fue que ya en la última semana de febrero, con poca gente en el edificio y bastantes apartamentos vacíos se dió la siguiente situación:

Esta mucama, tiene 25 añitos, de complexión delgada, pero con un culo bastante interesante. Tetas no muy grandes. A mí me encantaba adivinar a través del pantalón de su uniforme como ese culo iba tragándose la tanguita.
Ese día, muy tranquilo por cierto, me llama desde el apartamento que estaba haciendo para ver si la podía ayudar alguien a mover una mesa, dado que estaba tan tranquilo y era ella, aproveché para subir yo, dejando al cadete a cargo de la recepción.
Cuando llego al apto, la encuentro aspirando una alfombra, agachadita, dejando ver el tatoo tribal que tenía en la espalda, justo antes de su redondo culo... en marcado todo por las dos tiritas de la tanga que se podía ver que llevaba...
"tenés para mucho así?" le dije con una clara intención de que quería romperle el ojete... Ella, sin cambiar de posición mira hacia atrás y me dice: "el que vos precises, obvio." Eso fue una invitación a la guerra, que no iba a dejar pasar...
me aproximé a ella, que no había dejado de aspirar, ni cambiado su posición. "Cuando vamos a salir y hacer algo lindo". ahí ella se incorporó, dando un paso hacia atrás apoyandome el orto contra mi bragueta... se da vuelta y me dice : cuado quieras... yo encantada...
Como habíamos quedado frente a frente no dudé y le empecé a comer la boca, y mis manos como si estuvieran imantadas fueron derecho para su culo... Era firme pero no duro... de gran tamaño...
Con el poco criterio que me quedaba,y con la verga bien dura, fui y tranqué la puerta del apto y ella encaró para el cuarto. La guerra ya se había declarado y ella fijaba el campo de batalla.

Nuestras lenguas se buscaron dentro de nuestras bocas... mis manos le sacaron la blusa mientras las suyas me desprendían el pantalón... cuando le arranqué el soutien descubrí que sus tetas, aunque no de gran tamaño, tampoco eran tan pequeñas como parecían, y eran firmes y paraditas... En un minuto quedamos desnudos, recorriendo nuestros cuerpos con todo lo que teníamos... manos, lengua, boca.... Mi pija estaba durísima... y ella la acariciaba con su mano... la apretaba... la buscaba... yo baje por su cuello con mi boca hasta llegar a sus tetas... ahí me detuve un instante a sentir con mi lengua sus dos pezones duros que se ofrecian a mi boca lujuriosa.... los mordisquié, los recorrí en círculos con la punta de mi lengua, los succioné.... bajé por su vientre tembloroso, hasta que me hundí en su entrepierna que me llamaba con el olor a concha. Cuando llegué a ella me encontré una conchita bien depiladita, con los labios internos que apenas sobresalían y que se dejaban ver húmedos, como llamándome. Sin dudarlo me sumergí a beber todo juguito... saboreando cada gota que me entregaba. con la punta de mi lengua abrí sin dificultad esa hermosa conchita... me abrí paso hasta el clítoris duro... empecé a juguetear con él. de arriba a abajo, de un lado a otro, en círculos... apretándolo con mis dientes... hundiendo cada tanto mi lengua en su jugoso tajo para sentirle el gusto a sus fluídos... Ella se aferraba a mi cabeza como queriéndome meterme hacia adentro de ella. El mundo no existía... sólo eramos dos animales en celo buscando nuestro mayor placer... seguía chupando y dí cuenta que si seguía me iba a acabar en la boca, cosa que me encanta... ella gemía y me decía que no, pero con el movimiento de sus caderas me entregaba su clítoris excitado... mientras jugaba con sus pezones, embestía mi lengua sobre su concha empapada... hasta que sus quejidos me dijeron que había acabado y su concha me entregó todo sus sabrosos fluídos que no quise desperdiciar ni una gota... ella lejos de deternerse me hizo a un costado me tendió sobre el colchón... pasó su lengua sobre la cabeza de mi pija lubricada.... bajó por el tronco hasta encontrar mis bolas, a las que acarició con sus labios. De un breve salto se trepó sobre mi pija... su concha inundada facilmente fue penetrada por mi garcha endurecida... yo estaba re caliente y sabía que con sus movimientos me iba a sacar la leche al toque.... la giré hasta dejarla a ella boca arriba. Saqué toda mi pija de su concha y se la volví a meter de una hasta los huevos... ella gimió y me pidio que le diera duro por favor... "Te voy a llenar la concha de leche" le susurré al oído, a lo que respondió como una perra puta "Dejámela toda adentro, hijo de puta... Cojeme toda" sin dudar le empecé a dar bien duro. Con una de mis manos le agarraba fuerte una nalga, abriéndola y metiendo la punta de un dedo en su culo... su concha se sentía caliente, podía sentir como se contraía apretandome la pija...no demoré mucho en acabarme y llenarle la conchita de leche... Ella también acabó... fue divino el polvo ese.
Cuando fuimos al baño a limpiarnos... ella se sentó el inodoro, y me empezó a chupar la pija "Así te vas con la garcha limpia" mientras me guiñaba un ojo y la pija se me iba poniendo dura de nuevo...
Por ese día la tuvimos que dejar ahí... pero en los días que siguieron nos seguimos buscando y dando placer...

5 comentarios - Como me garché a una compañera de trabajo

exiliado39
muy bueno loco y viva uruguay carajo
Cesar_Pereira_98
buenisimo, me quedo la pija dura de imaginarme a esa pendeja